Mayo 4.

El repiqueteo de un ave en un árbol no dejaba seguir durmiendo en paz a Harry, quien se levantó exasperado de tanto ruido. Se levantó adormilado y miró a su alrededor, Jackie no estaba ahí, tal vez estaba afuera, tal vez era quien hacía tanto ruido.

Salió de la choza y al no ver a Jackie por ningún lado frunció el rostro. El ave que hacía ruido estaba justo encima de la choza y la estaba agujerando.

-Hey pequeño insecto, fuera de ahí-Le gritó Harry ahuyentándolo.

Entró de nuevo a su casa para recoger su camisa y ponérsela, definitivamente se sentía más cómodo vestido. Cuando salió siguió mirando a todas partes, pero Jackie no estaba por ningún lado.

-¡Jackie! -Gritó esperando que ella estuviese cerca y lo escuchara.

Pero ella no apareció por ninguna parte y comenzó a preocuparse. Fue a rellenar las dos botellas de agua que hacía poco tiempo le había arrebatado a Jackie, antes de ser amigos, y partió a buscarla.

***

Un jabalí era asechado por Jackie, quien lo miraba fijamente esperando tener el valor de acercarse y después tener el valor de asesinarlo.

El jabalí caminaba campante alejándose cada vez más de la orilla de la isla, en ese momento debían de estar a dos kilómetros de la choza. Jackie se sentía insegura, desprotegida y perdida.

Suspiró profundamente armándose de valor y salió corriendo hacia el animal. El jabalí se giró a mirarla y bufó tranquilamente, pero asustándola. Ella regresó a esconderse y se enojó por ser tan cobarde.

-Ya hubiera muerto de mala alimentación aquí, comiendo puras frutas-Se dijo.

Escuchó cómo se movían unos arbustos y se agachó aún más, luego vio a un jabalí bebé saliendo de ahí. Se sintió culpable por haber querido matar a su mamá. Vio que el pequeño rozó su nariz con su mamá y ella sintió nostalgia.

Jackie era muy unida a su mamá y estar tan lejos de ella, perdida, era indescriptiblemente triste y malo para ella. Tenía un corazón tan sensible que sería incapaz de matar a un jabalí que tenía un pequeño hijo.

Inhaló profundamente y sonrió hacia los animales frente a ella, cómo desearía tener a su mamá al lado ahora mismo. Sacudió su cabeza y miró hacia el cielo.

-Te extraño, mamá-Dijo, su mamá estaba viva, en su casa a miles de kilómetros de ahí, pero miraba hacia el cielo porque Jackie sentía que ella misma era la muerta, pues para su mamá era así.

Se dio la vuelta derrotada y salió de ahí, aun estando lejos de la orilla de la isla, podía oír las olas chocando unas con otras, sonaba como cuando ella y sus amigos hacían algo bien y chocaban sus manos. Todo la hacía sentirse nostálgica.

Tal vez tenía a Harry con ella, pero respecto a las personas que conocía, no creía que los volviera a ver. Menos a sus amigos, estaban muertos, y nunca habría creído que los extrañaría tanto.

Siguió caminando, y se dio cuenta que no reconocía el camino, no sabía si estaba yendo en dirección correcta. Siguió caminando y empezó a asustarse. No sabía hacia donde estaba la choza, estaba perdida.

***

Harry ya había caminado unos dos kilómetros sin tener éxito de encontrar a Jackie. Estaba comenzando a preguntarse si algún animal se la había llevado, o si se había adentrado al mar. No se le ocurría dónde podría estar.

Continuó caminando hasta que se detuvo bruscamente cuando escuchó un ruido de entre los arbustos, se puso alerta ante cualquier animal que pudiera atacarlo. Pero cuando dio un paso hacia atrás, lo que fuera que estaba escondido entre los árboles, había salido corriendo.

Frunció el rostro. Eso había sido muy raro.

Dos kilómetros después, desesperado comenzó a gritar el nombre de su amiga, pero ella no respondía. Ya se había cansado de tanto buscar, pero no se rendiría.

-¡Jackie! -Gritó una y otra vez.

Las copas de los árboles lucían más altas, el ambiente comenzaba a lucir más oscuro y a sentirse frío.

-¡Evangeline! ¿Dónde estás? -Gritaba un Harry de doce años en medio de un bosque en el año 1995-¡Ya me cansé de buscarte, sal de donde quiera que estés!

Miró a su alrededor, comenzaba a anochecer y aunque su casa estaba al lado del bosque, era muy tarde para que estuvieran ahí.

-¡Evangeline! -Gritó una vez más-Ya no estoy jugando, estoy cansado, por favor sal, mi mamá dijo que prepararía sopa en la cena y que podías venir.

Pero Evangeline, su mejor amiga, no estaba por ningún lado. Harry comenzaba a preocuparse, ella era pésima jugando a las escondidas y a él no le gustaba jugar a eso, pero lo hacía para ver feliz a su mejor amiga, que era como la hermana que nunca tuvo.

-¡Por favor, Eva! -Gritó-No te gusta que te llame así ¿o sí? ¡ven a golpearme por llamarte así, Eva!

-¡Harry! -Se escuchó a lo lejos, era la voz de su mejor amiga, no se oía como si estuviera jugando-¡Auxilio, Harry!

-¿Evangeline? -La llamó asustado-¿Qué ocurre? ¿Dónde estás?

-¡Ayúdame por favor, Harry!

-¡Tranquila Eva, ya voy!

Para la sorpresa de Harry, cuando llegó a donde estaba su mejor amiga, vio cómo dos hombres la subían a una camioneta mientras ella forcejeaba. Evangeline lo vio y le transmitió todo el miedo que sentía a través de su mirada.

Harry se quedó atónito sin hacer nada. Viendo cómo se llevaban a su mejor amiga. Reaccionó muy tarde, cuando salió corriendo hacia ella, la camioneta había arrancado.

-¡Evangeline!

Tres semanas después encontraron a los hombres, confesaron haber asesinado a la pequeña Evangeline, y los condenaron a cadena perpetua.

Pero Harry sabía que había sido su culpa, no había hecho nada para ayudarla. Había sido cobarde y ahora pagaba con dolor emocional la pérdida de su amiga. Se había quedado parado mirando cómo se la llevaban mientras ella lo miraba con temor.

Había sido un cobarde aquella vez, pero esta vez, aunque supiera que nadie que fuera una persona se había llevado a Jackie, la buscaría hasta encontrarla.

-¡Jackie!

***

Los ojos de Jackie estaban mirando fijamente a la pantera frente a ella. Viendo cómo devoraba a un pequeño jabalí, el cual esperaba no fuera el que había visto antes. No quería moverse por miedo a que la pantera la escuchara.

Había sido una mala idea salir a tratar de cazar algo, ella sabía que no tenía experiencia y que era peligroso, pero con su terca mentalidad no podía razonar.

Dio un profundo respiro y dio un paso hacia atrás, una rama crujió e hizo una mueca esperando que la pantera no lo hubiese oído. Pero para su mala suerte, la pantera se giró poniéndose en alerta, cuando vio a Jackie gruño y comenzó a acercarse de la manera más lenta y eterna que a Jackie se le hubiese ocurrido.

-¡Jackie! -Escuchó a lo lejos.

Sus pulmones se llenaron de aire otra vez, Harry estaba cerca, pero si no se apresuraba, ella moriría devorada por una pantera. No gritó, no quería moverse.

-Jackie-Susurró Harry una vez que la vio delante de la pantera.

Sus cinco sentidos se elevaron al máximo. No veía a una pantera, veía a dos hombres en una camioneta tratando de llevarse a su mejor amiga. Pero no se los permitiría esta vez. Le hizo una seña de que estuviera tranquila y fue a rodear a la pantera.

La atacó por detrás mientras Jackie cerraba los ojos y comenzaba a llorar. La pantera rasguño la pierna de Harry y el dejó salir un grito de dolor. Jackie temblaba sin saber que hacer, la pierna de Harry comenzaba a sangrar. Eran rasguños profundos.

-¡No te la llevarás esta vez, maldito! -Gritó Harry para después encajarle su lanza en el estómago-¡Vas a pagar por lo que le hiciste a Evangeline!

La pantera comenzó a gemir de dolor y pronto se cayó rendida. Harry se levantó, pero volvió a caerse, había caminado mucho buscando a su amiga y después había sido atacado por una pantera, estaba muy débil.

-Harry, santo cielo-Exclamó ella acercándose a levantarlo-Lo siento tanto, fue mi culpa.

-No, eso no es verdad, no pasa nada, estoy bien-Dijo él abrazándola-Tú me tenías muy preocupado, dios mío, demasiado preocupado.

-Lo siento, Harry-Dijo ella tratando de calmar el llanto, seguía asustada- Quise salir a cazar algo por mí misma y no pude, lo siento.

-Está bien, Jackie, ya pasó...

***

De regreso a la choza todo era silencio. Jackie se sentía culpable al ver cómo Harry cojeaba, su pierna estaba lastimada y lo curaría al llegar.

-Harry... ¿quién es Evangeline? -Preguntó Jackie.

Ella pensaba que tal vez había estado perdida con Harry ahí, al haberle gritado algo a la pantera sobre ella.

Él la miró de soslayo, pero no dijo nada. No tenía ánimos de hablar sobre ese tema. Jackie entendió que era asunto privado y decidió no decir nada más.

Cuando llevaban unos dos kilómetros recorridos, Harry se dio cuenta que iban en la dirección incorrecta y frunció el rostro. Era imposible que se hubiese equivocado de camino.

-¡Harry, mira! -Dijo Jackie corriendo hacia un arbusto.

Movió las hojas y sacó una maleta de ahí que se encontraba abierta. Inmediatamente reconoció una bota que se encontraba ahí, era de Thomas, su amigo, que también venía en el avión, lucía como si no la hubieran tocado desde que cayó ahí.

Un ruido se escuchó detrás de ellos en los arbustos, Harry frunció el rostro al no ver nada. Jackie caminó hacia ahí con él llamándole a sus espaldas.

Ella se quedó inmóvil al ver otra de las orillas de la isla, en donde se encontraba otra parte del avión, específicamente la delantera. Podía ver al piloto ahí dentro, sin vida.

Harry se quedó sin respiración.

* * * * *

Nota:

Capítulo largo por no haber subido la semana pasada! jajaja.

¿Qué les parece la nueva portada? ¿Les gusta? Hice otra pero tal vez la ponga después.

¿Qué piensan sobre todo lo que pasó en este capítulo? Lo escribí con música de piano de fondo así que lo siento muy sentimental jajajaja.

Subo lo más pronto que pueda, ¡las adoro!

-K.