Me sentía horrible, culpable y muy susceptible. Las verdades aveces suelen ser algo duras y es mejor decirlas en el momento. Pero realmente no pensé que a mi compañera de clases le doliese tanto; si hubiese sabido de aquello, habría sido menos duro y me hubiese concentrado en tener más cuidado.

Plagg me decía despreocupadamente que lo que estaba pasando no era mi culpa, pero yo no podría verlo así, había sido muy idiota en no darme cuenta de lo que sentía Marinette por mí y solo le había hecho sufrir en cuanto yo suspiraba por alguien más.

Había sido ciego, o más bien lo soy; pero, ¿Quién diría que la tímida chica que se sienta detrás mío iba a desaparecer tras aquel baile de San valentín, y más aún, por mi causa?

—¡No sabes cuanto te odio, Agreste!, realmente pensaba mejor de tí —gritó Alya en mi cara.Estaba furiosa y hacía ademán de querer pegarme en la cara, pero por suerte, Nino la retenía con una expresión cansada, su semblante me decía algo como: "metiste la pata, hermano". Todos en el salón miraron curiosos a nuestra dirección.

Ella y casi media escuela me culpaban por la desaparición de Marinette. Esto debido a que yo había sido el ultimo en verle y la razón por la que se había "ido su casa" más temprano. Aunque realmente nunca llegó. Por lo que apenas pasada aquella noche los padres de ella se preocuparon inmensamente, y a los dos días la reportaron desaparecida. Realmente daría lo que fuese por tener unos padres como aquellos.

Yo no podía hacer nada más que quedarme callado y solo responder con la verdad cuando me preguntasen sobre la última vez en la vi en la noche anterior a esos días. Quizá si daba cualquier paso en falso terminarían culpándome definitivamente de su desaparición, y no quería arriesgarme a que pasase.

Ese día la había pasado fatal, a pesar de que trataba de calmarme podía sentir la mirada de todos en mi cuello, y los susurros de la gente curiosa secreteando sobre lo que pudo haber pasado en realidad. De hecho, no sé si era buena o mala suerte, pero debido a esto y a que Nino tuvo que quedarse con Alya todo el día para calmarla, Chloé había sido la única que me había hablado en el transcurso de las clases y que no me culpaba por aquel hecho. Aunque más bien se alegraba de no tener a "la Cheng estorbandola" según sus palabras. Eso era algo cruel de su parte, pero podía notar que no iba del todo enserio, y que tenía aunque sea la más mínima pizca de preocupación en su mente.

Estaba concentrado en quitar amablemente a la rubia de mi brazo, hasta que un estruendo sonó a un lado de la escuela, lo que provocó que los estudiantes se agruparan apresuradamente a la pantalla de televisión más cercana.

—Al parecer, ha atacado un nuevo Akuma en la ciudad—citó la reportera—, pero hasta ahora no tenemos rastro de donde podría estar, solo se han visto caer edificios y algunas estructuras al azar. recomendamos que mantengan la calma en lo que nuestros héroes Ladybug y Chat noir entran en acción -advirtió.Aquella reportera era realmente rápida.

Al salir y escurrirme entre la multitud de personas que corrían hacia fuera de la escuela, llegué a un callejón cercano en donde a costa de las protestas de Plagg quien glotonamente deseaba queso, me transformé en mi alter-ego gatuno.

Me extrañaba que My lady no hubiese aparecido ya, pero descarté aquella preocupación al acordarme que ella aveces se tardaba en aparecer. Cuando llegué de nuevo a la escuela y fui al lugar donde había oído anteriormente aquel fastidioso sonido, en busca del Akuma miré a todos lados, pero no había nada ni nadie, ni siquiera algo fuera de lo normal de lo cual guiarme.

Hasta que mis orejas captaron un sonido tenue y casi inaudible, algo así como un cántico total y excesivamente Melifluo*.

« I'm gonna be... in you control.»

Miré a todos lados nuevamente, y pasé por varios pasillos sin dejar de estar atento a mi oído.

«So... unmerciful,

You can twist me and turn me, just don't let me go.»

El canto se hacía cada vez más cercano, confié en mis instintos dejando que mis pies caminaran solos.

«I wanna be your puppet on a string.

Baby, I'm not holding back,

We can do anything.

And even if I'm crazy is 'cause you make me this way.

We're as close to love as we'll ever get... »

Al patear la puerta del salón en que normalmente tomábamos clases, me dí cuenta de porque aquella delicada voz se me hacía tan familiar.

—¿Marinette?

« I wanna be your Marionette, Marionette, Marionette »

—Hola, gatito.

En ese momento, me pregunté que había pasado con tan dulce persona.

N/A:

Melifluo*: Un sonido extremadamente dulce, suave o delicado.

Lo que canta Marinette es parte de una canción llamada Marionette-Nigthcore(en multimedia). Este fic está en parte inspirado en esa canción~

Espero no causaros daño cerebral o algún tipo de infección ocular:')