Capítulo 23


Umbreon: Bueno ... Ya estamos yendo, no?

Julio: así es Umbreon, es un largo viaje así que acomodate y si quieres date una siesta jeje.

Umbreon: - se pone en las piernas de la diosa, la cual miraba el camino atentamente.

El viaje fue completamente silencioso, pese a los intentos de hablar de Julio que rápidamente eran callados por la frialdad de la diosa. Un muy largo viaje de dos días en los cuales apenas se hablaban los pasajeros.

Tras llegar al pequeño pueblo, la diosa bajo con Umbreon en sus brazos y espero a que Julio le indicara a donde ir.

Diosa: estoy ansiosa de conocer a tu madre Umbreon, muy ansiosa.

Umbreon: se nota diosa. Yo también quiero verla, y más que usted jeje.

Diosa: - abraza con fuerza a Umbreon - seguramente pequeño. Bien Julio, llevanos hasta ella

Julio: eh... Bien, síganme jeje - se mostraba muy nervioso.

El humano se introdujo en el bosque junto a la diosa y Umbreon, la diosa miraba atentamente en todas direcciones, pues el lugar parecía muy inseguro. Ella tampoco sabía bien donde vivía Tera pero no pensó que era en el bosque. "Quizás por eso manda a sus hijos conmigo..." Pensaba la deidad mientras caminaba con su pequeño Umbreon en brazos.

Tras pasar por un muy oscuro sector del bosque, Julio señaló a una gran casa que en realidad era una cueva. El humano se acercó temeroso a la casa de Tera temiendo a la reacción de la diosa al ver la madre abandona niños.

Julio: Diosa... Prometame que no hará nada ¿si?

Diosa: calma... No lo haré, por ahora.

Julio: ngh, esta bien. - toca la puerta de la casa.

La puerta se abre y tras ella sale la gran Eevee, madre de Umbreon y 5 hijos más. Tera quedó estupefacta al ver a la diosa, pensó que era una persona normal pero al ver lo unida que estaba a Umbreon, el miedo irracional que tenía Julio sobre ella y el aura de luz que rodeaba a esa muchacha le dieron a entender a la Pokémon que la diosa se presentó ante ella. Con dificultad apenas pudo articular unas pocas palabras:

Tera: Hola Diosa... - su voz estaba temblorosa, le temía a la deidad.

Diosa: así que tú eres Tera, eh? Un gusto, soy la diosa. Aunque bueno, al parecer ya lo Sabías jeje.

Tera: si Jeje... Julio siempre me habla cosas de usted.

Diosa: oh, espero que no sean cosas malas - mira con mala cara a Julio -  entonces podemos pasar?

Umbreon: hola mamá! - saluda eufórico desde los brazos de la diosa-

Tera: Jejeje, hijo mío! Cómo estás? - cede el paso para que la diosa y Julio entrasen a la casa.

La Diosa miraba el hogar tan bello en el cual vivía Tera, se preguntaba porque mandaba a los niños a su mansión si en el hogar que vivían no les faltaba nada. "Será que de verdad no los quiere?" Seguía con sus intrigas hasta que una vocecita fina la saco de sus pensamientos, al voltear a ver de dónde surgió esa voz vió a una pequeña Eevee de color gris parada frente a ella, observándola con extrema curiosidad.

Eevee S: Quien eres? - tenía una oreja abajo, inclinando la cabeza.

Diosa: Uh? - observo a la pequeña Pokémon - Tera, quien es ella?

Tera: Jejeje, - abraza a la niña - ella es mi hija menor jeje.  - reía nerviosamente - porque no te presentas, hija?

Eevee S: Bien! - se soltó del abrazo de su madre y empezó a saltar eufórica - yo soy Eevee!

Umbreon: y que hay de la otra Eevee, mamá?

Tera: supongo que habrá evolucionado, no?

Diosa: ella no quiere evolucionar

Tera: uhg, espero que ella si o sino tendremos un problema con sus nombres jejeje

Eevee S: mmm? Yo me llamo Eevee, mami.  - le lame la pata a su madre.

Tera: lo se hijita mía. Porque no vas a jugar con tu hermano?

Eevee S: Hermano? - se empieza a frotar sus ojitos con una pata, viéndose así muy tierna.

Umbreon: ella es mi hermana?

Tera: no, tu tía Umbreon. Claro que sí!

Umbreon: - carga a la Eevee en su lomo y la lleva a su cuarto.

Tera: Bueno, al fin solas jeje...

Diosa: aún está Julio - lo vuelve a observar como siempre.

Julio: Ya entendí! - exclamó enfadado y se fue al cuarto con Umbreon y Eevee. Los cuales estaban jugando, bueno en realidad Eevee S estaba haciéndolo.

Diosa: Je, ahora sí. Tera, madre de 7 hijos por lo que veo, o me equivoco?

Tera: no, exactamente son 7... A qué se debe su visita? - preguntó con ansiedad, pues quería que la charla acabase lo más pronto posible.

Diosa: Mmm bueno, pues para verificar en las condiciones que vives, las cuales son perfectas. Esto me hace preguntarme, ¿Porque abandonas a tus hijos en mansión?

Tera: Abandonar suena muy feo, Diosa. Yo diría darles un buen futuro ¿No crees?

Diosa: Que tiene mi mansión que no tenga tu hogar, ¿eh?  Aquí está hermoso, es un lindo hogar, una bonita zona, que más puedes pedir?

Tera: Jeje, si si lo que digas diosa. Que tal si vamos con los niños? - preguntó intentando cambiar de tema.

Diosa: Ugh, esta bien... - acompaño a la gran Eevee a ver a sus hijos.

En el cuarto estaban los hermanos, jugando a las escondidas con Julio, el cual no los veía. La diosa se sentó en el sofá y los observaba jugar a todos.

La tarde transcurría con completa tranquilidad en esa casa, todos jugaban y se divertían mientras que la diosa se limitaba a jugar con ellos. Tera, luego de terminar de jugar, se fue a la cocina a preparar la merienda, siendo acompañada por la diosa en todo instante.

Tera: Gracias por seguir mis pasos diosa, pero puedo cuidarme solita jejeje - se reía nerviosamente la madre Eevee mientras preparaba una merienda con las bayas

Diosa: de nada ... Tera. Quisiera ayudarte en algo. Puedo?

Tera: oh, claro que sí... Que tal si ... Me Alcanza esas bayas de allí? - señaló unas bayas que estaban en la otra punta de la cocina

Se notaba mucha incomodidad en el ambiente entre Tera y la Diosa, ambas actuaban raro como queriendo agradar la una a la otra. Pero ese momento incómodo fue interrumpido al momento de que una voz suave y muy dulce se oyó.

Eevee S: Mami... Que es Umbreon? - hizo esa pregunta la niña tan inocente que daba ganas de abrazarla y comerla a besos.

Tera: Oh Eevee, Umbreon es un Umbreon jejeje. No es mucho misterio

Eevee S: Mmm? Y yo soy Eevee?.... No entiendo - se hecho al suelo con la pancita arriba, esperando recibir caricias de parte de quien fuera, las cuales fueron otorgadas por la diosa que se había encantado con la niña.

Diosa: - acariciaba la barriga de la Pokémon -  Ay que cosita más tierna y hermosa que eres! Te llevaría a la mansión sin dudarlo a ti.

Tera: jejejejej, entonces hazlo - dijo en tono de broma pero la diosa no lo tomo así.

Diosa: Ejem - les dió la merienda a todos y cada uno de los inquilinos de la casa.

Tera: hasta qué día se quedarán?

Diosa: no se, quizás unos dos o tres días como mucho.

Tera: emmm bien Jeje

La merienda fue bastante incómoda entre ambas mujeres, y ni hablar de la cena, no se dirigieron ni una sola palabra la una a la otra. Solo quedaba esperar a que este largo día acabase para que ambas descansen y sigan sus cosas entre ellas mañana.

Luego de la cena, Julio llevó a la diosa al pueblo que habitaba él, dejándola descansar en su habitación y viéndose obligado a dormir en el sillón el pobre campesino. Mientras que Umbreon decidió pasar la noche con su madre y hermana, la cual quería dormir con su hermanito mayor que tanto quería pese a conocerlo solo un día.

. Continuará....

Espero que les haya gustado, no pregunten pq desaparecí tanto tiempo xd, sin más que decir les deseo un buen mes y hasta la próxima. adiós!


Antes que nada quería agradecer a eeveeglich por el dibujo que hizo del primer episodio de este cuento. Muy bonito, y también le agradecería a Kerly pero como que no la tengo agregada en Wattpad XD pero gracias a ella también, muy bonito dibujo. Ahora sí me despido de ustedes. Adiós OwO

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