Tu me Enseñaste lo que era vivir
Sin límites razonables y sentir
Con tus palabras tan adecuadas a la ocasión
Hacías que latiera fuerte mi corazón

Tu me enseñaste a madurar
Adecuandome a lo que pasará en cada lugar
Me enseñaste lo que era amar se verdad
Y me dejaste llevar por tu anor natural

Tu solamente me enseñaste a aguantar con ganas
El carácter insoportable de mi mismo
Con todo aprendí a soportar tus mañas
A cambio de tu vida y tu cariño conmigo

Tu me enseñaste a no gritar cuando algo sale mal
Y comer un buen plato de comida, disfrutar de su sabor
Tu me sacaste del lugar llamado soledad
Y a compartir las cosas más importantes contigo

Tu me enseñaste a no odiar
Que todo en mi vida se puede controlar
Y de vez en cuando se puede pasar mejor

Tu me enseñaste que para amar todo debes dar
Me Enseñaste a decir la verdad para salir adelante
Tu me enseñaste que algún día tendrás que irte
Y que sin remedio no podrás volver
Tu me enseñaste a amar
Pero nunca a olvidar...