- ¡No quiero, no quiero! - Gritaba Ran corriendo lejos de su madre

- Vamos, Ran... debes ir al jardín - Decía Hanae caminando detrás de Ran

- ¡No quiero, no quiero! - Ran corría mientras gritaba

- Vamos, te gustara, conocerás otros niños, tendrás muchos amigos y amigas - Decía Hanae

- ¡No quiero conocer a nadie, estoy bien así! - Ran se escondió debajo de su cama, Hanae se arrodillo y miro por debajo

- Ran, iremos juntos ¿Bien? Si no te gusta el lugar nos vamos ¿Bien? 

- ¿Promesa de meñique? - Dijo Ran levantando su meñique 

- Promesa de meñique - Hanae y Ran juntaron los dedos, Ran sonrío

Ambos salieron de la habitación y fueron a la sala donde estaba Rindou sentado tranquilamente esperando moviendo sus piernas. Hanae vio el reloj de la sala que ya marcaba las 12:30 y las inscripciones cerraban a las 13:00 y la familia Haitani no tenia auto

El taxi llego y los llevo al jardin donde asistiria Ran, si todo salía bien, el año proximo asistiria Rindou

La familia Haitani entro al establecimiento, los pequeños hermanos tomados de la mano de su madre para no perderse. Hanae camino hasta la recepción donde fue atendida por una asistente.

- Buenas tardes, vengo a inscribir a uno de mis hijos - Dijo Hanae

- Buenas tardes, claro, tome asiento - Dijo la señora apuntando una silla, Hanae se sento y los pequeños empujaron juntos una silla y compartieron asiento. - Bien... ¿Quien inscribió?

- A mi hijo mayor, Ran Haitani - Dijo la fémina - El de las trencitas

- ¿Trenzas? Pense que era una niña - La señora rio, eso había molestado mucho a Hanae

- Con su permiso, vamonos niños - Dijo Hanae levantándose de su asiento y bajando a sus pequeños de la silla, ellos no entendían.

- ¿Es una broma? ¿Se enoja por eso? - Dijo la señora - Se nota que no sabe educarlos, con solo verlos se ve.

- No es culpa mia que usted se vea tan acabada a sus 40 años, y quiera hacer sentir inseguro a un pequeño de 4 años para que usted se sienta bien  - Hanae se dio la vuelta para verla a la cara - No permitiré que mi hijo este en un lugar donde se burlen de su apariencia, si a el le gusta tener su cabello largo, esta bien por el, no es motivo de reírse, con permiso - Hanae se retiro

Los pequeños estaban totalmente confundidos, el tono en el que su madre hablo era muy distinto, nunca lo habían escuchado. Una vez lejos del lugar, llegaron a un parque de juegos

- ¿Quieren un helado? - Pregunto Hanae sonriendo

- ¡Si! - Dijo Rindou

- No... - Dijo Ran

- ¿Mm? ¿Te pasa algo, Ran? - Hanae se agacho preocupada y toco sus mejillas - ¿Te duele algo? ¿Te sientes mal?

- ¿Acaso soy feo, mamí? - Los ojos de Ran se llenaron de lágrimas

- ¿Que? ¿Por que preguntas eso cariño? - Hanae estaba preocupada

- ¡Por como se rio esa señora de mi! - Ran rompio en llanto llevando sus manos a sus ojos

- Ran... - Dijo Rindou mirando a su hermano mayor llorar, jamas lo habia visto de esa forma

Hanae solamente lo abrazo, este continuo llorando en su pecho, la femina acariciaba dulcemente su cabellera y su espalda para calmarlo, pasaron unos minutos y Ran habia parado de llorar

- Ya, ya... ¿Te sientes mejor? - Ran asintió limpiando sus lagrimas, Hanae le limpio con un pequeño paño - Bueno, Ran... no, no eres feo mi amor - Hanae acaricio una mejilla del pequeño - Tu eres hermoso tal y como eres, con cabello largo o corto, no debes dejarte llevar por los comentarios negativos de las personas, debes sentirte orgulloso de quien eres y como eres, Soy Ran Haitani, hijo de Hanae Haitani, hermano mayor de Rindou Haitani, me siento feliz y cómodo de como soy y luzco, nadie me puede decir lo contrario - Motivo Hanae a su hijo

- Y-yo... R-Ran H-Haitani, hijo de H-Hanae Haitani... H-Hermano mayor... de R-Rindou Haitani... ¡Me siento feliz y cómodo de como soy y luzco, y nadie puede decir lo contrario! - Grito Ran a ojos cerrado orgulloso de las palabras que le dijo su madre

- ¡Ese es mi hijo! - Hanae le aplaudió seguido de Rindou

- ¡Y quiero un helado de vainilla! - Grito Ran sonrojado

- Y lo tendras - Dijo Hanae sonriendo - Vamos por esos helados - Hanae extendió sus manos y sus hijos las tomaron

Se sentaron en una banca en medio de la plaza tomando su helado feliz, en eso algo le llama la atención a Rindou

- Mami ¿Por que esa familia tiene auto y nosotros no? - Pregunto el pequeño

- ¿Mm? Por que hasta ahora no nos a preocupado tener uno - Respondio la femina

- ¡¿Podemos tener uno?! - Gritaron los 2 

- ¡Ya no nos tendríamos que subir a esos autos negros con feo olor! - Dijo Ran

- Yo siempre quiero vomitar - Dijo Rindou con ojos tristes

- Pensandolo bien... nos serviría mucho tener un auto, podríamos ir a acampar, ir a la playa... entre otras cosas ¿Vamos a ver uno? - Pregunto Hanae sonriendo

- ¡Si! - Respondieron los 2 felices

En una automotora... 

- ¿Un auto familiar? - Pregunto un vendedor - Mmm... creo que tengo uno, acompáñeme - Dijo el chico, este camino guiando a la fémina con sus dos pequeños hijos

- Uno cómodo para mis hijos y que sea economico de mantener, por favor - Dijo Hanae caminando con sus hijos

- ¿Le gusta este? - Dijo el hombre enseñando un bello auto 0 kilómetros

- Es muy bonito... ¿Mis hijos pueden subirse? - Pregunto Hanae

- Solo si no lo ensucian - Dijo el vendedor abriendo las puertas

- Ran, Rindou retirense los zapatos - Dijo Hanae

- ¡Si, mamí! - ambos sacaron sus zapatos y subieron a la parte de atrás, ambos miraban asombrados - ¡Nos gusta!

- ¿Si? - Hanae subió de chofer - Si... es muy cómodo... Lo llevamos - Dijo Hanae

- ¡Excelente, por aqui por favor! - Dijo el vendedor

Hanae hizo todo el papeleo para la compra del vehiculo, 3 años ahorrando dieron sus frutos para poder pagar de una sola vez un vehículo para su familia que fuera cómodo y seguro

- Abróchense los cinturones - Dijo Hanae mirando por el espejo a sus hijos

- ¡Listo! - Respondieron los dos niños emocionados

- ¡Nos fuimos! - Dijo Hanae ya manejando

- ¡Wiii! - Alzaron las manos los pequeños