JiMin caminaba por los pasillos de su edificio. Sujetaba sus libros fuertemente contra su pecho. Llegó hasta su salón y se sentó en su puesto, bajando la cabeza. Las clases eran divididas, los sumisos tenían aulas y secciones separadas de los dominantes. Los dominantes recibían la mejor educación y tenían los puestos más importantes en una empresa. Eran los único que trabajaban, realmente...

Escuchaba las conversaciones de un grupo de sus compañeras de clase.

- ¿Qué hiciste?- le preguntó la pelirrubia a otra chica que llevaba cubierto el rostro, ocultando los cortes y hematomas en él.

Actualmente, la generación joven usaba maquillaje para cubrir las muestras de "amor" que recibían de sus parejas y familia. Muchas vivían en unión libre, algunos padres les entregan a su pareja dominante antes de casarse, y a veces los sumisos ni siquiera llegaban a ese día...

- Nada... solo me violó...- expresó la otra joven- Sigo sangrando...- menciona con voz dolida y conformista.

JiMin se estremece.

- ¿Te duele?- le preguntó la tercer chica del grupo en un susurro bajo que él alcanzó a escuchar.

- Mi cuerpo duele...- siguen hablando con ese tono bajito- Mi madre me advirtió de esto, que tenía que prepararme, pero ni siquiera cuando mi padre lo hizo me dolió tanto...

- Al menos tu padre fue el primero, mi esposo dominante, me dejó llena de hematomas por las piernas, y la mañana siguiente me sacó a rastras para hacerle el desayuno- la pelirrubia dijo. JiMin se estremeció.

Estaba tan asustado de lo que estaba escuchando. Aunque conforme a la ley, estaba prohibido revelar la actividad sexual de cada pareja. Las imágenes de su padre violando a su madre, no salen de su cabeza... sabe que eso es algo de lo más normal...

Pero YoonGi no lo había forzado a tener relaciones sexuales con él, esa misma noche solo durmieron, cuando su padre llegó días después exigió la muestra de su virginidad, ya que su padre tenía la firme creencia que la virginidad era lo que daba el valor de la clase sumisa, el mayor usó tinta roja para manchar una sabana e incluso se hizo un corte para darle el olor a sangre.

Un corte para protegerlo... nunca había visto ni sabía de alguien de clase dominante que hubiera hecho eso. Ningun dominante se lastimaría por su sumiso. Era contra la ley.

YoonGi no lo había golpeado en ningun momento y eso le hacía sentirse nervioso. No sabía que esperar realmente, día a día temía de que YoonGi solo estuviera buscando alguna razón por la cual golpearlo y empezar los abusos.

Tres meses de casados y el mayor nunca lo ha orillado a humillaciones, y está asustado. Porque su padre en una ocasión le preguntó por sus golpes, que incluso casi lo fuerza a desnudarse en medio de la sala con los padres de ambos presentes. YoonGi le detuvo...

"Es el cuerpo de mi sumiso, yo decido a quien se lo puede mostrar"

Acción que le fue aplaudida por el señor Min e incluso su padre, le felicitó. El señor Min porque estaba seguro que YoonGi nunca había golpeado a su pareja y el señor Park porque eso demostraba que defendía su posición de dominante ante cualquiera.

JiMin se lo agradecía de alguna forma. Pero le empezaba a preocupar...

Salió de sus clases y esperó a YoonGi dónde siempre, era la zona más "tranquila" dentro de la universidad. Siempre ibas a encontrarte a alguien golpeando a alguien, un dominante abusando de un sumiso. Se sentó escondiendose detrás de un árbol, sabía que si alguien dominante lo encontraba lo obligaría a hacer algo que ni siquiera su esposo había hecho. Esperaba que alguien escuchara sus ruegos y que YoonGi llegara rápido a recogerlo.

Cuando lo vio, el mayor solo le dedicó una mirada seria.

- ¿Qué haces en el suelo?- le preguntó en tono serio.

- Solo esperaba...- murmuró bajando su cabeza. Agradecía que fuera YoonGi quien lo encontrara.

- Es hora de irnos- dijo sin más. Y JiMin le siguió, YoonGi era intimidante aún si solo lo miraba y no sabía que tanto podría llegar a golpearlo.

Cuando llegaron a su edificio. YoonGi no se veía tan feliz, y JiMin pensó que esa sería su noche.

- ¿Tú quieres...?- preguntó temeroso, dispuesto a lo que pasara esa tarde noche, sabía que el mayor podía hacer con él lo que deseara, era el orden mundial.

- ¿Qué quiero?- preguntó YoonGi, confundido, no sabía a que se refería el menor.

- Yo creí que...- JiMin intenta explicar y por primera vez se atreve a ver directamente a YoonGi. Temiendo que en cualquier momento el mayor lo abofetee y abuse de él por mirarlo a los ojos.

- ¿Que tendríamos sexo?- pregunta YoonGi. JiMin asiente avergonzado y sintiendose un poco humillado.- Te he dicho que no apresuraré nada... tengo demasiado tarea de la universidad y en el trabajo, ¿sabes lo que pasa sí no tengo el dinero para sostenernos?- le pregunta. JiMin niega.- Van a llevarte lejos, a un reclusorio, serás golpeado y violado por las autoridades de ese centro...

Su rostro pierde el color.

YoonGi no sabe si JiMin va a desmayarse en ese momento. De alguna manera decir eso, le ha delatado. Sus padres le preguntaron cómo iba su relación con JiMin y no sabe realmente cómo definirla. Su padre le dijo que tenga paciencia, JiMin proviene de un entorno según el orden mundial, no puede esperar que el menor acepte todo o no esté nervioso. Su madre le pidió que sea cuidadoso al momento de hablar con él... JiMin estaría asustado y quizás nervioso, todo el tiempo.

No sabe ni siquiera sí JiMin puede entregarse a él, o al menos ambos están preparados para ese paso.

Mira a su esposo y se acerca a él, quizás ha sido muy brusco al momento de hablar en ese instante.
Y toma su mano...

- Mírame, JiMin...- dice con un tono más suave y el mencionado levanta su vista y enfoca su mirada en el mayor. - ¿Tú estás seguro que quieres hacerlo?- pregunta y el menor no sabe que decir realmente.

Su padre nunca le preguntaba a su madre nada. Solo la tomaba del cabello y la llevaba hasta la habitación o bien, podía tomarla en cualquier lugar de la casa. Sin siquiera quitarle la ropa, a veces solo la rompía.

- Es que...- JiMin sabía que era normal que muchos padres dominante violaran a sus hijos sumisos, era natural que los preparan para lo que sería complacer a su pareja dominante. Aunque habían algunos, cómo su padre, que vivía diciendo que la virginidad de un sumiso era importante, por eso accedió a casarse con su madre, porque su madre era virgen cuándo se la presentaron.

- He visto miedo los últimos días en tu rostro...- YoonGi le dice.- Vamos lento, pero yo no he puesto de mi parte en ningun momento...- suspira y acaricia el rostro de JiMin, de verdad que es un chico hermoso. Muy hermoso... de alguna manera le recuerda a su madre, una única vez lo ha visto sonreír, fue cuándo terminó un proyecto de la universidad.

Le conduce hasta la habitación y JiMin solo camina. No dice nada... porque ese es el día en que todo comenzará, en que esa vida llena de maltratos inhumanos empiezan. Y lo acepta...

YoonGi siempre a notado que JiMin está esperando alguna agresión de su parte. Y eso también lo estresa un poco a él, porque no sabe cómo acercarse, no sabe cómo decirle que no quiere lastimarlo... que así no deben ser las cosas...

- Acuestate...- le pide, JiMin accede, y se queda inmóvil en la cama, cierra sus ojos esperando lo que sea que va a llegar.- Espera aquí...

YoonGi sale y se asegura de que la puerta principal tenga seguro, cierra todas las ventanas, y apaga las luces de la sala y la cocina. Se asegura de que nadie llegue a interrumpir lo que va a hacer con su pareja.

JiMin siente a sus piel erizarse cuando escucha la puerta cerrarse. YoonGi va a violarlo de la misma forma en que su padre lo hacía con su madre.

Suspira y trata de relajarse. Su padre le dijo que no debe llorar cuándo suceda. Que es algo normal y natural, y que su deber es complacer a su esposo. No importa sí llega a doler, quien debe sentirse bien es el dominante.

YoonGi se quita la chaqueta, y mira a JiMin en la cama... ¿por qué la sociedad le gusta humillar a otros? ¿por qué está mal proteger lo que supuestamente más se ama?

- Quedate de lado...- pide mientras se sienta en la cama y JiMin obedece. Ya está temblando...

Pero sus ojos se abren en sorpresa cuándo, YoonGi se acuesta en la misma posición que él y solo lo rodea con sus brazos.

- Esto se llama, abrazo...- le dijo en un susurro cálido. JiMin se sonroja...

El mayor lo invita a que utilice su otro brazo cómo almohada, y YoonGi entrelazan sus manos, su mano derecha descansa en el abdomen del menor, con sus manos unidas.

- Esto me gusta hacer... es nuestro primer paso...- le dice sonriendo el mayor, cuándo siente los músculos de JiMin destensarse.

- Nunca había escuchado de esto...- dice con voz bajita. YoonGi suspira y deja un pequeño beso detrás de la oreja del menor.

- Solo quedemónos así hasta dormir...- JiMin asiente a sus palabras y ambos cierran sus ojos.

Afuera, hay golpes, violaciones, insultos, abusos, agresiones... ningun sumiso escapa de la clase dominante y nadie escapa de la autoridad, cayendo en la humillación pública.

JiMin siente que hay algo diferente y no sabe cómo definirlo...

Solo espera que las cosas que hacen no les traigan consecuencias dónde la muerte es la única respuesta...