≫Hogwarts;

—Reto.—Respondí con una sonrisa retadora imitando la posición que el adquiría.

Ambos quedamos frente a frente.

—Besa fogosamente al chico que más moje tus bragas de nosotros.—Exclamó directo sin perder el contacto visual mientras dice mi reto. Al final sonrie de la misma forma que yo.

Este chico me agradaba demasiado.

—Apuesten.&Exclama Draco entusiasta.— Me va a besar a mi, claramente.

Pone dos galeones en la mesa frente a él. Arqueo una ceja y todos rien.

Todos comienzan a realizar la apuesta.

—Con la apuesta realizada, ahora te toca a ti.—Blaise me guiña un ojo y vuelve a sentarse.

Miro a mi al rededor y todos tienen sus ojos en mi. Algo que ya se me hacía costumbre.
Sin embargo ahora debía besar a uno de ellos.

Mierda. ¿Como elegir si todos estaban maldita mente buenos?

—Joder.—Gruñi y todos soltaron una carcajada.

—Creo que no puede elegir.—Menciona Kya divertida.—¡Besa a los que quieras!-Carcajea.

—No. No puedo elegir.—Exclamé mordiendo mi labio. Me encojo de hombros y simplemente me acerco al chico del callejón diagon.

Sin pudor me siento sobre sus piernas. Siento sus músculos tensarse bajo esa camisa que le ajusta a la perfección. Me mira burlón y con una ceja enarcada sin embargo segundo antes de besarlo recordé a la chica que estaba con él en el callejón y doy marcha atrás. Jamás estaría con un chico que tuviera novia.

Me levanto y lo noto completamente confundido.

—Uhhh.—Exclaman todos los presentes e imitó mi acción solo que esta vez en las piernas de Matheo.

Este también me lanza una mirada egocéntrica mientras una de sus manos acaricia mi pierna. Antes de que llegue a tocar mi muslo me levanto y paso al siguiente.

Esta vez me pongo en las piernas de su hermano.

Su mirada es casi igual a la de Matheo sin embargo el no toca mi piel.

—¿Y vas a besar a alguien o no?—La voz irritante de Pansy me hace voltear mirarla de una manera que solo una serpiente podría lanzar. Sumamente frívola y silenciandola de inmediato.

El ambiente estaba caliente entre los chicos y yo. Lo sentía y todos también lo sentían a esa tensión.

Y eso que solo eran las primeras 4 horas.

—Ninguno es digno de un beso mio.&Exclame finalmente levantándome de las piernas de Tom y lancé mi cabello fuera de mis hombros.—Pero reto es un reto.

Tomé la camisa del Moreno quedandome atrapada entre su cuerpo y la mesa. Nuestros cuerpos quedaron pegados y mis labios finalmente se unen con los de Blaise.

El reto era un beso apasionado por lo que coloque mis manos en su cuello para profundizar aun más el beso.
Abrí levemente mis labios para darle el ingreso a su lengua mientras sus manos recorrían mis piernas y las enrollaba en su cintura estando sentada sobre la mesa.

Cuando el oxígeno nos hizo falta ambos nos separamos y yo acomode mi ropa.

—Mierda, eso fue mejor de lo que creí que sería y casi tan intenso como que ver porno en vivo—Exclama Divertida Kya y yo la miro con una sonrisa arrogante.

Al voltear puedo notar como Theo, Tom y Matheo casi perdían el color de sus ojos por sus pupilas ligeramente dilatadas.

—Nos quedó muy claro que es tu prima, Draco. —Es Pansy quien habla y al mirarla noto una sonrisa falsa en ella.

Joder, sabía que esta chica me daría problemas.

—Fue intenso. Y joder, besa increíble.—Exclama Blaise entre risas y yo le guiño un ojo.

—Casi ni me importó perder dos galeones.—Exclama Draco entre risas y los ganadores de los galeones apostados fueron Blaise y Kya.

Un rato más de juegos en donde casi todo preguntas de verdad nos entretuvo lo suficiente para apaciguar el aburrimiento.

La hora de bajar del tren llegó.

Las miradas sobre mi eran muy evidentes, muchas de envidia por parte de chicas y mucho babeo por los chicos.

—Es una zorra.—Escuché a alguien a mis espaldas y frenfrené en seco.

El grupo también se frena y me miran con el ceño fruncido.

—¿Que mierda dijiste?—Pregunte siseando como una serpiente mientras tomaba a la chica por su túnica.

—N-Nada.—Exclama palida la chica mientras sus amigas también se congelaron en su lugar.

El resto de los que pasaban se quedaron observando la escena.

—Esto va para todos.—Exclamé sin perder contacto visual con la chica.—Si me hacen molestar les juro que desearan morir.

Arrojo a la chica al suelo con brusquedad y comienzo mi camino nuevamente.

El grupo se divide en dos para permitirme paso chiflando y con una sonrisa arrogante ellos caminan detrás de mi.

—Eso chica.—Trayce aplaude.

Las chicas llegan a mi lado, excepto Pansy que se queda con los chicos detrás.

Kya me toma del brazo izquierdo y Astoria del lado derecho mientras que Trayce toma el brazo izquierdo de Kya. Así caminamos hasta los carruajes.

—Joder que caballos tan feos.—Mencioné entre risas viendo a los animales mientras deshago el agarre de las cuicas h me acerco a ellos. Elevé levemente una de mis manos y lo acaricie por unos segundos.—¿Los ven?

—Si, pero no todos pueden hacerlo.—La sensual voz de Matheo a mis espaldas me eriza la piel.—Solo los que han visto la muerte pueden verlos a ellos.

De inmediato tenso mi cuerpo. La palabra muerte no me provocaba miedo, si no ira.

Me alejo rápidamente de esos animales y al pasar por su lado Matheo me guiña un ojo.

Su olor invade mis cosas nasales y finalmente vuelvo con las chicas. Subí al carruaje y estuve en silencio todo el camino con una expresión fria como mi expresión normal.

Recordé que debía ponerme la túnica que cubriría mi uniforme atrevido y rápidamente me lo coloco ignorando la conversación de las chicas.

—Te esperamos en nuestra mesa.—Kya me guiña un ojo mientras las chicas y los chicos se despiden.

Me sentía ridicula. Estaba en la fila con los que iniciarían su primer año.

Todos me miraban por su puesto. Estaba demasiado incómoda pero es lo que debía hacer. Uan profesora se presentó como Minerva McGonagall, quien nos guiaria al comedor para la selección de casas.

—Oye, —Siento que jalan levemente mi túnica y miro hacia abajo.— Eres muy linda.—Exclama una niña dulcemente.

&Lo se.—Respondí con frialdad.—Jamás podrás tener una belleza como esta.—Aparté la mi mirada de ella llevándola hacia el frente y comenzamos a caminar.

Las enormes puertas se abren para así los niños y yo caminar por todo el pasillo.

Levanté mi mentón de forma orgullosa. No mostraría lo incómoda que me sentía caminando con estos mocosos.

Dieron una pequeña bienvenida mientras yo simplemente rodaba los ojos ahogando mis ganas de lanzarle un crucio al aparente Director.

—Ahora comenzaremos con la selección de casas.—La profesora abre un pergamino y comienza a leer.—______ Malfoy.-Fui la primera en ser llamada.

Los niños me abren paso y yo comienzo a combinar hasta subir los pequeños escalones con la mirada siempre al frente.
Mis tacones resonaron por todo el comedor que casi estaba en silencio.

Casi, porque susurros de inmediato se escucharon con chiflidos incluidos lo que me hizo rodar los ojos.

—Silencio por favor.—Ordena el director y me hace un ademan para sentarme en una silla.

La señora McGonagall toma un sombrero y me lo coloca en la cabeza.

Que forma más anticuada de elección de casas.-Pensé

—¿Anticuado dices? Mmm..—El sombrero comienza a hablar.— Eres valiente, leal, pero también ambiciosa y astuta. Mmm sii...—Quise reír. Parecía que estuviera gimiendo sobre mi cabeza.—Posees una gran inteligencia y eres una líder innata. Me queda claro donde te pondré. ¡Slytherin!

La mesa de Slytherin de inmediato se levantó y los aplausos fueron estruendosos junto con chiflidos.

—Tenemos a la chica más sexy en nuestra casa. Jodanse los demás.—Exclama Blaise y todos en la mesa comienzan a reír.

—¡Pido calma!—Grita una vez más el director levantando sus manos.

Me siento junto a Theo ya que era el único espacio libre y todo vuelve a estar en silencio en el comedor.

—Bienvenida oficialmente.—Me susurra en el oido Theo erizando mi piel.

El resto de la velada fue normal. El director explicó las reglas para los nuevos y el sistema de puntos que se llevaría hasta el final de la cursada en donde la casa vencedora se llevaría la copa para la misma.

Terminamos de comer y un pequeño bostezo se escapa de mis labios.

—¿La bebé tiene sueño?—Pregunta burlón Matheo y yo le lanzo mi peor mirada.

—Mira lo que provocaste Riddle. Ahora la princesa cortará tu cabeza.—Exclama Draco.

—Que le Corte la cabeza. Que le Corte la cabeza.—Los simios de mis nuevos amigos comienzan a golpear la mesa como si se tratase de una ejecución.

Con una sonrisa divertida camuflada en una arrogante. Me puse seria mirando a todos como si fuera una reina, detrás de mi saqué un pedazo largo de pan fingiendo una espada y luego simule un gesto como si le hubiera cortado la cabeza.

Matheo finge caer muerto sobre la mesa y todos comienzan a golpear la mesa entre carcajadas.

Las demás casas nos miraban de una forma rara lo cual no me importó en lo absoluto.

—Slytherin por favor, controlense.—Pidió el director y yo rodé los ojos. Viejo aburrido.—Es hora de que vayan a sus respectivas salas comunes. ¡Sean todos bienvenido a un nuevo año Escolar! Pueden retirarse.

Todos nos levantamos de las mesas y comenzamos a caminar hacia nuestra respectiva Sala común. La nuestra estaba debajo del lago negro en las mazmorras del Castillo.

—Bien la contraseña jamás deberían decirsela a alguien de otra cssa, no está permitido el ingreso de los mismos y quien lo haga recibirá un severo castigo.

Era el prefecto quien hablaba. Se voltea y dice la contraseña.

—Pura Sangre.

Rodé los ojos por lo poco original de la misma.

—Estoy tan cansada.—Exclame de mal humor. Realmente me arrepentí de no dormir bien la noche anterior.

—Las chicas por este lado y los chicos por el otro. He de recordar que no pueden ingresar al cuarto el sexo opuesto. Mujeres por un lado, hombres por el otro.

Todas chicas de inmediato corrieron a buscar buscar cuartos los cuales se compartían hasta máximo 5 chicas.

—¿Por qué van a correr?—Pregunté al ver a las chicas a punto de subir como las demás.

—_____...debemos encontrar el mejor cuarto.—Exclama con obviedad Kya mientras me miran confundidas.

Subí tranquilamente por las escaleras mientras las chicas me seguían por detrás.
Muchas de las muchachas peleaban por los cuartos mientras mis pasos eran precisos y resonaban por todo el pasillo.

Todas hicieron silencio en mi presencia.

Mi mirada, la cual no tenía expresión alguna, iba de un lado a otro, observando el interior de los cuartos.

Algunas eran más grandes y otras eran más chicas. Pero la ideal estuvo frente a mi.
Al final del pasillo por quienes muchas chicas estaban peleando.

Me dirigí a pasos firmes hasta el final con las chicas detrás de mi.

—Salgan.—Gruñi y algunas salieron que mientras otras no lo hicieron. Estúpidas.

—¿Quien te crees? ¿Una reina o algo así?—Exclama entre carcajadas una chica y sus amigas rien con ellas. Yo las miro de reojos Seguramente eran un año menor a mi.—Nosotras llegamos primero,zorrita.

Enarqué una ceja y no dude en tomarle su túnica como había hecho anteriormente con la chica al bajar del tren. Solo que esta vez coloco mi varita en su cuello.

—¿Te atreves a enfrentarme? ¿En serio? —Mi mirada se vuelve casi como veneno. Realmente odiaba que intentaran humillarme.—Solo porque eres una estúpida te repetire lo que dije. Saldrás de aquí y te llevarás a tus perras porque te juro que no tendré piedad contigo y desearas irte de Hogwarts por lo miserable que te haré la vida aquí. ¿entiendes ahora? —Mi voz fue dura y sentí como tembló bajo mi agarre.—No me querrás de enemiga.

—Bie-en. Quédate con el estúpido cuarto.—Intentó no temblar ni demostrar miedo pero su voz la delató.-Vamos chicas.

Con rapidez salieron de la habitación una vez que la solté bruscamente y yo sonreí victoriosa.

—Entren a nuestra nueva habitación.—Exclamé volteando a ver a las chicas con una gran sonrisa triunfante.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top