Créditos a: FannyFras

* Pasaron las horas y Mar comenzó a despertar, se sentía confundida, algo mareada por el sedante, al comienzo no reconoció la sala, miro hacia el techo y desvió su mirada a la ventana, la misma ventana que veía todos los días, no había sol pero tampoco el día estaba tan gris, estaba equilibrado, miro hacia su costado y vio a Logan. *

• Narra Mar •

Aún estaba sedada, después de unos segundos me di cuenta en donde estaba, Logan estaba junto a mi, claro que no se había dado cuenta de que yo ya estaba despierta, tenía en sus manos una carpeta y comparaba lo escrito con una máquina a la que estaba conectada, de repente alzó la mirada y notó que ya había despertado.

— El primer rostro que veo al despertar — sonreí —. Cumpliste tu promesa.

Él se acercó.

— Una promesa, es una promesa Mar — sonrió —. ¿Cómo te sientes?

— Algo mareada.

— Es normal, aún estás sedada — me tocó la frente —, no hay fiebre, muy bien... ahora saca tu lengua — lo hice y la observó —, muy bien — acercó una linterna a mis ojos —, ahora mira hacia la izquierda — lo hice —, ahora a la derecha — lo hice nuevamente y sonrió satisfecho —, pues todo esta muy bien.

— Como lo prometiste — sonreí.

— Tuviste suerte.

— ¿Cuándo podre volver a casa? — pregunté sentándome en la camilla.

— Yo creo que en un par de días más, lo más seguro es que te hagan algunos exámenes, pero pronto volverás a casa.

— Gracias — tome su mano mientras él me miraba —. No sé que hubiese hecho sin ti.

— De nada — colocó una mano sobre la mía y me sonrió —. Ahora deberás seguir una dieta que te daremos.

Él comenzó a hablarme de lo que se venía, pero casi no ponía atención ya que había algo que me traía pensando.

Recuerdo que antes de dormirme, él me besó, no sé si lo imaginé o de verdad pasó, solo recuerdo que se acercó a mi, nada más.

Él me hablaba y me mostraba unos apuntes de la carpeta, pero yo seguía sin prestarle atención, la duda me comía por dentro, respire profundo un par de veces y me animé a preguntarle.

— Oye Logan — lo interrumpí y me miró —, antes de que me durmiera — me puse nerviosa —, no tengo las imágenes muy claras, ¿Me podrías decir lo que pasó?

Tenía miedo de su respuesta, quizás lo imaginé, pero me pareció muy real, de repente se puso nervioso y su cara se torno roja, comenzó a tartamudear y hacer una graciosa mueca que dejaba a la vista unos hoyuelos en sus mejillas.

— Bueno... te inyecté y tú me agradeciste.

— ¿Y que pasó?

— Pues verás, me dijiste que me querías y yo te dije — hizo una pausa —, yo te dije que... que también te quería.

— ¿Y nada más eso pasó? ¿Digo, a parte de eso?

— Yo — se sacudió el cabello —, yo te besé — dijo bajando la cabeza.

¡Si pasó! Él me había besado, sentía que corría pero que chocaba contra una pared, él estaba nervioso y yo también.

— ¿Y yo que hice? — pregunté tímida.

— Me respondiste casi por 4 segundos, después te dormiste.

Me sonrojé.

— ¡Que torpe! En verdad lo siento.

— No te preocupes — dijo riendo.

— ¿Y que haremos ahora? — pregunté.

— Seguir con tu tratamiento y...

— No — volví a interrumpirlo —, no Logan, me refiero a tú y yo, digo... nosotros — eso se oía tan bien.

— No lo sé Mar, yo aún amo a Erin y no se me haría justo que este contigo, amando a otra mujer.

«amando a otra mujer»

Esas palabras me dolieron, pero debía entender, él no me amaba, es más... ni siquiera me quería y si hizo lo que hizo por mi, fue únicamente por que no quería ser derrotado por mi enfermedad, nada más.

— Entiendo, no te preocupes por mi, yo estaré bien — dije conteniendo las ganas de llorar.

— Mar...

— Descuida, olvida lo que te dije, tienes razón, lo nuestro jamás habría funcionado, no sé por que me imaginé que tú y yo...

— Escucha Mar, yo no...

— ¿Podrías dejarme sola? Quiero dormir un poco.

— Esta bien.

Se levantó de su silla y se fue, en cuanto salió de mi habitación, rompí a llorar, este era el dolor más fuerte que había experimentado jamás, aún más fuerte que mi enfermedad.

• Narra Logan •

En cuanto salí de la habitación, me quede escuchando y sentí como se me rompía el corazón al oírla llorar, realmente me dolía verla así, ¿Pero que debía hacer?

«Intentarlo con ella» me dijo mi subconsciente.

— No puedo.

«No, si puedes, pero no quieres» me contestó.

Me sorprendió su respuesta, ya que eran las mismas palabras que Erin me dijo cuando la soñé. Una pequeña sonrisa apareció en mis labios, asentí, di media vuelta y entre a la habitación, Mar seguía llorando.

Me acerqué y la abracé, ella dio un pequeño salto y giro su cabeza un poco, cuando nuestras miradas se encontraron le sonreí.

— Logan, ¿Que haces aquí?

— No me gusta verte mal y menos si es por mi culpa.

— No, descuida... no es por tu culpa.

— No mientas, sé que fue por eso.

— No miento, en verdad.

— Lo lamento.

— ¿Por que?

— Por decirte que aún amaba a Erin, por no poder amarte a ti como tú quieres.

— Descuida, alguien me amará, todavía soy joven, puedo buscarme a alguien más.

Sinceramente eso me dieron celos, imaginarme a Mar con otra persona, se me revuelve el estómago de solo pensarlo.

— ¿Pero sabes que te quiero no? — pregunté un poco serio.

• Narra Mar •

Cuando Logan dijo aquello, noté la seriedad de como lo dijo, con un toque de furia.

— No lo sé... ¿Me quieres?

— Mar, te quiero muchísimo, pero mi amor por Erin me lo impide, siento que la estoy reemplazando, además no quiero lastimarte.

— Entiendo, pero yo no la quiero reemplazar, jamás podría igualarme a ella, pero lo que sí quiero es ganarme un lugar en tu corazón — ¡No puedo creer que por fin lo dijera!

— Eres tan comprensiva Mar — dijo sorprendido —, pero no hace falta que te lo ganes.

— ¿Tú no lo quieres intentar conmigo? — lo miré confundida.

— A eso me refiero, no es necesario que te ganes un lugar en mi corazón — agache la mirada —, tú ya tienes un lugar ahí... y créeme un lugar muy importante.

Las dulces palabras de Logan hicieron eco en mi cabeza, se levantó y se comenzó a acercar a mí, tomo mis mejillas y yo su cuello acercándolo más, estábamos a punto de besarnos, sentía el rose de sus labios sobre los míos... pero nos interrumpieron.

* Logan estaba a punto de volver a probar los labios de Mar, pero la puerta se abrió y entraron James y Ana muy animados tomados de la mano, con un globo de helio grande que decía: "te queremos". *

— Hola — dijo James nervioso.

— James, Ana — dije sonrojada.

— Perdón por interrumpir, pero pensamos que aún no despertabas, te quisimos dar una sorpresa y bueno...

— ¡Sorpresa! — dijo James poniendo una cara tan divertida que jamás olvidare.

— Lo siento — dijo Logan —, iré a avisarles a los médicos que despertaste — se oía nervioso —, yo amm... — trago saliva —, yo te veo al rato — salió de la habitación.

James y Ana me miraron con una cara de "cuéntame todo", la pelirroja saltó a la cama y me dio un enorme abrazo.

— Sentimos mucho interrumpir tu momento con el sexy doctor.

—¿Sexy? — dijo James serio.

— Bueno — se levantó —, no tan sexy como mi novio — le tomo la mano —, por cierto novio oficial.

— ¿Oficial? Cielos de cuantas cosas me perdí.

— Solo un par — dijo James.

— Bien, cuéntenme ¿Que pasó? — dije emocionada.

— Los padres de Ana nos vieron anoche saliendo del hospital — dijo James.

— Y lo que fue peor para ellos, James me besó ya sabes cómo son mis padres.

— ¿Y que les dijeron?

— Resumiendo, su padre nos separó, amenazó con enviar a Ana con sus abuelos y su mis monto un teatro.

— Entonces mi defensor se enfrentó a mis padres y... terminaron por aceptarlo — besó su mejilla.

— Los felicito chicos, ya era hora de que tus padres se resignaran a que estuvieras con este galán — dije feliz.

— Si, ahora me aman — tomo a su novia por la cintura —, que puedo decir, soy adorable — sonrió.

— Claro que si — le dio un corto beso —, ¿Y tú? — alzó una ceja —, que pasa entre tú y Logan, o solo fue la "bienvenida".

— Creo que me uniré al grupo de las "parejitas del año" — todos reímos.

* Pasaron los días, Logan no visitaba mucho a Mar, los doctores le estaban haciendo exámenes y él era el encargado de revisarlos junto a Demi, pero al fin llegó el día que tanto esperaban, el día en que le darían el alta. *

• Narra Logan •

Hoy daban de alta a Mar, no me puedo creer lo rápido que pasan los días, es como si ayer ella hubiese llegado grave, no la había visto del todo, solo entraba y la saludaba pero después salía. Hoy dejaba el hospital, tal y como se lo prometí, era medio día, estaba en la sala de médicos esperando a que Kendall, quien traería algo para comer, no me podría despedir de Mar, tenía mucho trabajo, pero lo seguro es que después vería la manera para visitarla a su casa o a invitarla a comer, como se lo había dicho antes.

Escuché que la puerta de abrió, seguramente era Kendall, pero me tapó los ojos, reí... seguramente era Demi, siempre hace lo mismo, quité sus manos y di la vuelta, pero no era mi mejor amiga, era Mar, se veía reluciente con su cabello suelto y algo rizado, unos jeans que marcaban su figura y una camiseta que se ajustaba a su delgada cintura.

— Me asustaste — tome su mano.

— Tranquilo doctor, solo vine a despedirme.

— Ya estás mejor — dije mirándola de los pies a la cabeza.

— Gracias a ti — dijo ella jugando con nuestras manos.

Le di un abrazo.

— Sigue la dieta y cuídate mucho.

— Lo prometo, deberías visitarme.

— Si, pensare en hacerlo — golpeo mi estómago —. ¡Oye! Eso dolió.

— Lo siento, ¿Irás a verme?

— Supongo.

— ¿Eso fue un no?

— Esta semana estaré algo ocupado — ella bajó su mirada —. Oye, pero no me malinterpretes — levanté su cabeza —, siempre tendré tiempo para ti o al menos eso intentare.

— ¿Sabes algo? — negué —. Me encantas, no te lo dije antes porque no encontré el momento.

— O por que tus amigos interrumpían — dije acercándola a mi.

— Mis padres están esperándome, saldré del brazo de mi padre — sonrió.

— Me alegra de verte repuesta.

Ella miro su reloj.

— Debo irme, mis abuelos llegaran a mi casa en 20 minutos.

— No te demoro más — la solté —, adiós — besé su frente.

Ella me sonrió y caminó a la puerta, me apoyé en la mesa viéndola salir pero se devolvió. Me dio un abrazo fuerte, hasta que quedo con sus manos sobre mi cuello.

— Te quiero mucho Logan.

— Y yo a ti.

Puse una mano en su cintura y la otra a la altura de su espalda, la mire y ella a mi. Sin decir nada, me besó me sorprendió eso, me fascino, ella me fascina, correspondí a su beso, amaba la manera en como sentía sus manos sobre mi cuello, sus labios y los míos juntos eran como las piezas perfectas de un rompecabezas que al estar juntas quedan de maravilla, no puse evitar sonreír mientras ella me besaba, eso le causo gracia por que también se le dibujo una sonrisa en su cara, se separo un par de centímetros pero era imposible dejar de besarla tome su cara y le di un último beso.

— Cuídate ¿Si? — le dije.

* Mar le guiñó un ojo a Logan y salió de la sala, llegó al primer piso juntos a sus padres, tomo el brazo de Greg y salió con una enorme sonrisa a la calle, sentir los pequeños rayos de sol en su piel, el viento en su cara y los aromas de la ciudad realmente la emocionaron, cruzaron y se subieron al auto de su padre, miro la ventana de la sala de médicos donde estaba Logan lanzándole un beso, ella se lo respondió con una sonrisa y un movimiento de mano diciéndole adiós. *