Capítulo 5

- ¡Neji-nissan! -Hinata salió alarmada entre los árboles del bosque y corrió hasta su primo e inmediatamente empezó quitar las agujas enterradas y con cada una de estas iba acompañada de una expresión de dolor departe de Neji que estaba inconsciente.

Shino apareció segundos después con Kiba montado en Akamaru y se detuvieron ante la cámara de tortura con una expresión incrédula, una chica llorando desconsolada al lado de esta.

-¿Qué diablos es esto? - Kiba preguntó en un susurro mientras se le helaba la sangre con sólo ver lo que pasaba a su alrededor sin comprender nada.

-¡Lee-san! -los tres ninjas recién llegados centraron su atención a una sola persona- ¡Él está encerrado aquí! ¡Por favor ayúdenlo! -un grito de desesperación por parte de la chica de vestidos finos.

-¿Qué... es lo que dices? - Kiba fue el primero en acercarse y toco el artefacto de tortura con una palma- Lee, ¿me escuchas? soy yo Kiba.

No recibió respuesta alguna y eso lo preocupo era una mala señal, apretó los dientes ligeramente.

-¡Tienen que sacarlo! ¡Debe de estar herido!- las lágrimas de la princesa salían mientras esta miraba hacia el suelo.

-Parece que sólo que puede abrir por dentro- Shino se acercó a la cerradura pero todo estaba sellado completamente- está diseñada para que no se escuche nada del interior- extendió su mano en dirección a esta y salieron insectos de su manga que se adentraron por las orillas del aparato de tortura.

Mientras Shino hacia su trabajo Kiba observo a su alrededor y vio a Neji con heridas graves y Hinata ya trabajaba sanándolo, se acerco a ella.

-Hinata, ¿Qué tan grave es?-preguntó seriamente, Akamaru se posó a su lado.

-T-tiene heridas p-profundas, p-perdió mucha sangre, a-apenas llegamos a-a tiempo- miro preocupada a su primo aumentando el flujo de chacra curativo en sus manos, las heridas superficiales empezaban a sanar, sin embargo Hinata sabía que necesitaba un tratamiento más fuerte.

-¿Quién diablos les hizo esto? -Kiba contenía su enojo al encontrar aquel escenario del que él se tenía que hacer cargo como líder de su equipo, Lee y Neji son de los ninjas más fuertes de la aldea, alguien con suficiente fuerza como para dejarlos heridos de gravedad ni siquiera su equipo seria rival para ese enemigo, observo de nuevo el perímetro sin encontrar rastros de una tercera persona que faltaba.

-Termine-Shino llamó su completa atención, al voltearse hacia su compañero se escucho el abrir de una cerradura la puerta- ayúdame

La cámara de tortura era pesada, la puerta se abría de manera lenta, poco a poco cedió con la fuerza de los dos chicos y fue a la mitad cuando el cuerpo de Lee cayó al suelo inerte.

-¡Lee! - Kiba grito y observo tenía heridas en todo su cuerpo de agujas pero no parecían tan graves como las de Neji.

-¡Dios mío!- la chica de cabellos blancos corrió en su auxilio.

Lee se movió tratándose de levantarse sin éxito alguno, Kiba suspiro de alivio al descubrir que estaba consciente, la princesa lo cogió de la mano derramando más lágrimas.

-Lee-san...-la chica se llevo la mano del ninja oprimiéndola contra su pecho.

-Prin..cesa Sakuri...-el chico demostró una sonrisa débil mostrando alivio por un momento con la intención de calmar a la chica- es bueno saber que está a salvo, no debe preocuparse por mi.

-Lee, ¿qué sucedió? -Pregunto Kiba interrumpiendo el momento- ¿y dónde está Tenten?

Lee abrió los ojos como si acabara de recordar algo, no respondió solo bajo la mirada apretó los dientes con la poca fuerza que le quedaba y entrecerró los ojos.

-a Tenten-san...se la llevaron- dijo la chica de cabellos blancos con los ojos llorosos- todo es mi culpa...

La chica sollozo de nuevo mientras Kiba miraba atónito lo que estaba pasando, definitivamente eso lo alteraba, un prodigio del clan Hyuga herido a gravedad y el secuestro de una compañera no era nada normal, ni siquiera un poco.

-Maldición... esto no me huele nada bien, Hinata, Shino tenemos que llevarlos a Konoha, Tsunade-sama sabrá qué hacer-ordeno el Inuzuka y fue así como cargaron el cuerpo de Neji a la espalda de Akamaru y a Lee lo llevo Shino en su espalda, Hinata cuidaba de la princesa, LA Hyuga volteo hacia atrás, le preocupaba su mejor amiga, pero no podían hacer otra cosa que ir a Konoha en estos momentos.

-Hanako...

Una voz de un niño sonaba con la suave brisa del campo, todo se sentía real miro a sus pies los cuales estaban descalzos sintiendo la hierba mojada bajo sus pies.

-Hanako...

Esta vez era la voz de una niña, busco al rededor y los diviso lo que eran sombras un niño con una sonrisa tomado de la mano de una chica más pequeña que él, ella no sonreía.

-¡Hanako date prisa!-grito el niño con una mano para que formara eco su voz.

-¿Hanako...?-susurro y luego miro sus manos, todo se sentía tan real, de repente sintió un calor a sus pies, poco a poco vio como el pasto en sus pies se incendiaba pero lo curioso era que no la quemaba, y cuando se dio cuenta volvió la mirada hacia el niño que seguía extendiendo la mano, sin embargo el paisaje había cambiado para convertirse en un pastizal el llamas y quiso correr para proteger a los niños por instinto y por más que corrió seguían a la misma distancia, la última imagen fue ella estirando su mano y todo se consumió en las llamas.

Despertó de un salto con la respiración agitada y los ojos bien abiertos, observo que la rodeaban una sabanas de color café como si la hubieran arropado por un segundo pensó estar en su habitación, sin embargo en segundos desconoció por completo donde se encontraba, un dolor de cabeza la invadió y recordó poco a poco todo, el ataque sorpresa, Lee y Neji peleando, la princesa y el arma, pero si eso había sucedido, ¿Que había pasado después?, lo recordó en cuestión de segundos, un movimiento de manos y todo se volvió oscuro con un simple susurro.

"Hanako"

La habían secuestrado, traía sus ropas puestas todavía, echó un vistazo a su pantalón para encontrar que todos sus pergaminos ya no estaban, palpo cada una de las bolsas y nada. Observo detenidamente la habitación, no había otra salida más que la puerta la cual estaba cubierta por una cortina. Se levanto y busco cualquier indicio de su pergaminos o del arma que tenia que cuidar con su vida, la imagen de Neji herido invadió su cabeza, estaba preocupada a sabiendas que Neji y su orgullo no dejaría jamás que se llevaran a un miembro de su equipo sin dar pelea primero, podría estar herido de gravedad y no solo el también Lee y la princesa, entendió rápidamente que la misión dependía de recuperar el arma y regresar a Konoha lo más rápido posible de donde quiera que se encontrara.

Busco y nada ni una sola arma y entonces lo recordó en sus ropas escondía un Kunai de emergencia, reviso en su tobillo y ahí estaba, era más pequeño que los demás pero en manos de una maestra de armas seria lo suficiente para protegerse.

-Oh cielos...

Un suspiro de incredibilidad la tomo por sorpresa a sus espaldas, rápidamente escondió la única arma que tenia, debía tener cuidado, cuando se volteo observo en la entrada de la habitación a una chica de cabellos negros que la observaba con sorpresa y algo de nostalgia, ella llevaba una bandeja en sus manos donde se veía algo de pan y un vaso con un liquido blanco como la leche, Tenten analizó la situación y lo recordó que la chica era la que los había engañado aquella noche su atuendo lucia diferente era un poco menos elaborado simplemente era una kimono de un color gris neutral.

En segundos Tenten decidió no esperar más y apartó a la chica para poder salir por la puerta se encontró con la luz del sol, dedujo que era de mañana aunque no reconocía aquel lugar pero parecía ser una aldea pequeña solo que se veía desierta, las casas estaban descuidadas y destruidas, decidió correr lo más pronto posible, estuviese donde estuviese debía buscar la manera de recuperar el pergamino y salir de ahí.

-¿Vas a alguna parte?-una sombra se postró en frente de ella enseguida la reconoció y se detuvo en seco, tenía la misma sonrisa retorcida que cuando peleaba con Neji, supo sus intenciones en ese instante, saco el kunai y lo mostro, no sería suficiente y ella lo sabía, si pudo herir a Neji gravemente en cuestión de segundos de seguro a ella le iría peor.

-¿Porque me trajeron aquí? -alzo la voz segura de sí misma aunque se estaba muriendo de miedo por dentro.

El chico la miro con curiosidad dejando a tras la sonrisa, la examinó de pies a cabeza, con una expresión enojada y desinteresada.

-¿Qué...? creí que te habíamos quitado todas las armas, que lista eres- enseguida el chico no se encontraba enfrente si no atrás de ella-pero no tanto diría yo...

Abrió los ojos al darse cuenta del movimiento del enemigo pero antes de que pudiera reaccionar el chico la pateo suavemente haciendo que perdiera el equilibrio y tirándola al suelo, Tenten lo observo aún la miraba con algo de enojo.

-Chez... no eres más que una impostora-dicho esto todos los tatuajes que él tenia se iluminaron de lo que Tenten dedujo que era chackra era la primera vez en su vida que veía tal cosa, el chacra era invisible e incluso los flujos sólo que podían ver con alguna habilidad ocular o que fuera muy fuerte y notable como Naruto, de su mano salió una daga del mismo color del chrakra, la castaña lo miro con temor mientras él le seguía mirando con odio, aterrada se veía a ella misma sin ninguna oportunidad de escapar.

-¡Natsune basta, es suficiente!-un grito enojado se oyó detrás del chico, él cual ni volteo sólo pareció más enojado aun apretando los puños y ocultando la daga en su mano de nuevo-¿Qué demonios estás haciendo? ¡La estas asustando!

-Estoy haciendo lo que debimos a ver hecho desde un principio como lo prometimos, matarla a ella y a todos esos ninjas de Konoha- Tenten se dio cuenta del odio en sus palabras, un resentimiento inexplicable, miro a los recién llegados la chica de cabellos negros se encontraba con una mirada preocupada y al ninja que ella había enfrentado, quién la había dejado inconsciente para secuestrarla.

-¡Eres un idiota!, matar a tu propia sangre no es parte de todo esto.

Natsune se acercó enojado a Ryu y lo tomó por el cuello de su ropa.

-¡Despierta de una vez Ryu! ¡Ella no es Hanako! -levantó un poco más la voz y apretando más el agarre-Está muerta, ¿cuántas veces vas a pasar por esto?, ¡Esta chica es el enemigo!

- Cállate-se soltó del agarre de un manotazo Natsune permanecía enojado, pero Tenten noto algo más cuando desvió la mirada durante unos pocos segundos.

-¡Ya dejen de pelear por favor!-la chica de cabellos negros hablo al borde de las lágrimas interponiéndose entre ellos queriendo separarlos.

En ese momento Tenten estaba realmente confundida por lo que pasaba, por un momento pudo reconocer un dolor de cabeza que la invadió y la llevo a caer en cuenta de que si Neji estuviera ahí ya estuviera regañándola por ser tan débil para dejarse secuestrar. "Concéntrate en la misión" recordó la voz de cierto Hyuga en su mente, se levantó en ese momento con dificultad, aunque había sido una patada suave eso no le quitaba que era lo suficiente fuerte como para derribarla fácilmente, una vez de pie llamo la atención de los tres ninjas delante de ella, tomo el kunai de nuevo y lo puso en frente de ella sabía que no podía vencerlos a los tres juntos por lo menos daría pelea antes de caer.

-¿Qué es este lugar? -preguntó con una posición de ataque, los tres chicos la observaron atentamente, interrumpiendo el silencio Natsune sonrió de manera burlona.

-¿En realidad piensas que ella es Hanako cuando ni siquiera reconoce donde esta?-interrogó mirando a Ryu, quién lo ignoró dando un paso al frente y observando con atención a la castaña, la sonrisa de Natsune desapareció para mostrar una expresión de molestia- bien hagan lo que quieran.

Se retiró dejándolos solos con Tenten asustada de que en cualquier momento pudieran atacarla.

Ryu suspiró liberando su frustración por la pelea con el pelirrojo, se acercó poco a poco de ella y se detuvo a una distancia considerable, la castaña permanecía a la defensiva alterándose recordando ya haber vivido esa situación.

-¡No te acerques más!, ¿A dónde me trajeron?, ¿Por qué me secuestraron? ¿Qué es lo que buscan? - eran demasiadas preguntas y ella lo sabia pero no le importaba, una pequeña desesperación por saber que estaba ocurriendo despertó en ella.

-Disculpa a Natsune por favor, no es nuestra intención hacerte daño-el chico dio dos pasos más pero al ver que la chica retrocedió tensando todos su cuerpo él se detuvo.

-Lo siento pero él tiene razón, no soy la persona que están buscando, mi nombre no es Hanako si eso es lo que piensas, mi nombre es Tenten y jamás te había visto en mi vida.

-... tienes un tatuaje en tu brazo derecho-respondió evadiendo lo que Tenten acababa de decir, la miraba directamente a los ojos la chica mientras continuaba hablando después de un suspiro cuando ella toco con su palma cubriéndose el hombro derecho-ya lo vi no me puedes mentir, es que no quieres saber ¿de qué es? y ¿de dónde vienes?

-Vengo de Konoha que es mi hogar y necesito regresar pero recuperaré el arma que robaron a como dé lugar-la pequeña desesperación de Tenten había desaparecido, su decisión de regresar a su aldea se impuso sobre ella, miro al chico de manera desafiante.

-¡Esa arma no le pertenece a Konoha onee-chan, trata de recordar!- la chica de cabellos negros detrás de él hablo con una voz preocupada, esa actitud era completamente diferente a cuando ella los engaño en el bosque, esa chica era menor que ellos y aun así tenia las habilidades para pelear con Lee, era peligrosa.

"¿Onee-chan?" repitió mentalmente Tenten mientras se preguntaba, ¿qué rayos estaba ocurriendo?

-Tsuki, yo me encargo... -volteo a ver a la menor y le dedico una ligera sonrisa extendiendo su mano apaciguándola, después volvió con la castaña haciendo de nuevo contacto directo de miradas- ¿Puedes decirme contestar algo?, los recuerdos de tu infancia están borrosos, ¿no es así?

Tenten le miro incrédula al descubrir que el chico le había hecho sentir vulnerable con aquella pregunta, ¿cómo es que él sabia esas cosas?, jamás se lo había contado a nadie pero ya ni siquiera recordaba nada desde que había despertado en la habitación del hospital de Konoha.

-Mira, no te detendremos si quieres irte pero no te dejare ir a menos que me escuches lo que te tengo que decir, se quién eres y tú no lo recuerdas-el chico desvió un poco la mirada mostrándose herido-no nos recuerdas...

-Sé quién soy- ella bajo el Kunai y su mirada se volvió indecisa, su dolor de cabeza se prendió molestándola.

-No lo sabes... al parecer...no lo recuerdas-el pelinegro apretó un puño y siguió esta vez con la voz un poco frustrada-te lo puedo demostrar... ¿tienes padres? o ¿algún recuerdo de ellos?

Esa pregunta la quebró totalmente, ella nunca había conocido a sus padres, Reira le dijo que habían muerto en una misión, pero sin embargo no tenía ningún recuerdo antes de que llegara a Konoha y despertara en un hospital con el cuerpo vendado, tal vez había estado con sus padres cuando murieron y lo había suprimido de sus recuerdos por el trauma, eso era lo que le había dicho el tercer Hokage en persona, hasta ahora nunca le impidió seguir con su vida normal, siempre tomo en cuenta el no tener una familia pero no había pensado nunca en que no tenia recuerdos de ella y fue entonces cuando se dio cuenta algo estaba mal y no de mala manera, el chico que estaba parado enfrente parecía saber más de ella que ella de sí misma.

Estaba mal dejar la misión a un lado pero podría conseguir algo de información sobre que era esa extraña marca y qué relación tenían sus pesadillas con ella.

-No... -Se mordió el labio inferior, era duro confesar esa clase de cosas a un extraño, pero por alguna razón Tenten no se sentía entre personas desconocidas- mis padres murieron en una misión, no los conocí.

-Entonces...-el rostro del chico parecía más animado- ¿escucharas lo que tengo que decirte?

-No me dejaras ir hasta que lo haga, no tengo opción- respondió Tenten sin suavizar la mirada dándole a entender al chico que no confiaría en su palabra pero la castaña, sin tener ninguna razón más que la simple curiosidad había aceptado y eso era suficiente para Ryu quién sonrió a medias mientras la miro con alivio de haberla convencido que se quedara sin usar la fuerza.

-Bien regresemos a la casa, debes tener hambre, comeremos mientras platicamos-se dio la vuelta diciéndole con un gesto de mano que la siguiera mientras ella seguía con una expresión dura en su rostro, debía estar alerta de todos sus movimientos, no podía tomarse aquello tan a la ligera, después de todo ellos la habían secuestrado.

-No me trates como si fuera una visita-dijo entre dientes y su voz se elevo un poco tensando su cuerpo enojada- me atacaste a mí y a mi equipo, ni siquiera tengo idea si ellos están a salvo.

El chico se detuvo en seco su camino, Tenten no sabía si lo había hecho enojar, no pudo ver sus expresión en ese momento, no quería verla no le importaba en lo más mínimo.

-No tienes de que preocuparte...-su voz era seria y distinta, la castaña se imagino estar escuchando a una persona diferente, era pausada y ronca- después de dejarte inconsciente... trataron de salvarte y nos defendimos del ataque, pero descuida no lo hicimos con la intención de matarlos sólo los dejamos con unas cuantas heridas para que no nos siguieran, están a salvo.

Siguió su camino Tenten no tenía otra opción que confiar en lo que decía, no sonaba como una mentira pero aún así se preocupaba, sabía que Lee no se rendía tan fácilmente como para dejar que la secuestraran tan a la ligera por otro lado Neji se encontraba con heridas graves cuando lo trato de curar, un par de heridas más hacían una gran diferencia, le rogaba a dios que estuviera bien.

Sin decir nada se encamino hacia para seguir al chico quién entraba a la casa de donde había escapado, la chica de cabellos negros seguía observándola a ella mientras caminaba y después de rebasarla se encamino ella también, Tenten supuso que era para asegurarse de que no escapara de nuevo, cuando entró detrás del chico pasando por un pasillo de la gran casa con piso de madera parecía a una mansión de algún clan, sólo que parecía deteriorada al igual de lo que Tenten supuso era una aldea, pasando la habitación donde había despertado se encontró en una estancia grande parecida a un dojo de entrenamiento que tenía acceso a un jardín, a ella le pareció haber estado ahí en otro momento, entonces recordó que se parecía al dojo de la mansión Hyuga donde Neji entrenaba con Hinata y una vez había entrado buscando a Neji cuando la Hokage los mandaba a llamar y que por cierto Neji la había regañado por no esperar a fuera, en el centro del dojo había una mesa baja, el chico le señalo con un gesto de mano que podría sentarse, mientras él pretendía hacerlo frente a ella.

-¿Tsuki servirías un poco de té? -se dirigió con una sonrisa hacia la chica que se encontraba desde hace rato mirando a Tenten y todos sus movimientos.

-Si-ella se retiro saliendo del trance de mirar detenidamente a la castaña, mientras Tenten se había quedado sola con el chico que ya se encontraba de un lado de la mesa con una posición informal sonriéndole y ella frente a él con la mirada seria y el cuerpo tenso.

-Tendrás que confiar en mí en algún momento-dijo con voz divertida al ver la expresión de Tenten-puedes dejar de estar tensa, nadie te hará daño.

-¿Qué es este lugar? -preguntó Tenten con tono serio, tenía que averiguar dónde se encontraba lo más rápido posible para buscar la manera más efectiva salir de ahí.

-La aldea oculta entre el Loto Blanco... por si te lo preguntas sigues en el país del fuego.

-¿Loto Blanco?-Tenten trató de recordar ese nombre entre las aldeas en el país del fuego pero no pudo encontrar ninguna con ese nombre, no que recordara.

-¿Tenten?, ¿verdad? -Ryu preguntó con curiosidad resaltando el nombre, ella asintió al oírlo-escucha, al parecer no me recuerdas a mi o a ellos dos pero tu pertenecías a esta aldea que fue destruida en un conflicto con Konoha.

-Te equivocas-dijo la chica defendiéndose de nuevo de la confusión en la que él se encontraba desde que la vio-¿En qué te basas para saber eso?, realmente me estas confundiendo con alguien más ya te lo dije.

-No, no lo hago-dijo y con seriedad se levantó la manga hasta mostrar su hombro, Tenten miro sorprendida y incrédula en el había un tatuaje como los muchos alrededor de su cuerpo pero este era diferente destacaba por ser igual al que ella tenía, la dejo desconcertada por completo pero aun así recupero la seriedad.

-¿Qué significa? -Cuestionó la chica con temor de saber la respuesta.

-Significa que eres la persona que yo creo que eres-sonrió a medias con ternura y desvió la mirada por unos segundos como si estuviera tratando de contener sus emociones para después seguir con una mirada neutra mientras hablaba de nuevo- tu nombre real es Hanako Nishimura perteneces al Clan Nishimura al igual que nosotros, este tatuaje significa la mayoría de edad y pertenencia al Clan, no portamos banda ninja porque esto es más que suficiente para saber que provienes del Clan.

-¿Clan... Nishimura?, nunca había oído hablar de él-seguía sin creerle, no podía creerle.

-Es porque ya no existe, tan solo quedamos nosotros-Ryu apretó los puños y el enojo en su voz se notó ligeramente recordando cosas desagradables.

-¿Qué quieres decir con que ya no existe? -la voz de la castaña tembló por completo, por alguna razón no quería oír la respuesta a su pregunta, algo dentro de ella le decía que se detuviera...

- Tras un ataque sorpresivo desapareció...esta aldea en la que te encuentras es lo que queda de él...

¿Un clan de una aldea completa?, era casi sorprendente para Tenten, la dejo en estado de shock por un momento era tanto por asimilar y tanto por creer que ignoró cualquier pregunta ilógica que se formara por su cabeza y decidió en enfocarse a salir de ahí, por otro lado estaba su lado curioso con el cual un dolor de cabeza se hizo presente al clavar la vista al tatuaje del chico, tomo su cabeza con una mano en el lugar del dolor, debía ser una mentira, recordó justo como ayer no era nadie y hoy ni siquiera se reconocía a ella misma y todo se resumía a una pregunta que ella no podía responder... si todo esto era real ¿quién era ella en realidad?

- ¿Estás bien? - volteo de nuevo a ver a Ryu saliendo de sus pensamientos profundos y en ese momento se concentro en una sola cosa.

"Tengo que salir de aquí" Pensó al recuperar la compostura.

-Si... - contesto quitándose la mano de la cabeza y miro seriamente al Ryu que la miraba con curiosidad y algo de preocupación, como si quisiera acercarse más a ella, a Tenten le dio la sensación de que él quería abrazarla y la expresión de ella se volvió aun más confusa, lo que el chico noto de inmediato.

-No me crees... -Dijo finalmente con algo de dolor en su voz y expresión.

-No, no lo hago-Tenten se puso firme aunque sus manos temblaban, más bien no quería creerle, aceptar que parte de tu vida era una mentira era prácticamente imposible...

"Pero es la verdad" pensó por un instante, una parte de ella quería salir corriendo de ahí y otra parte quería averiguar todo acerca de ese chico y los tatuajes.

En ese momento entro la chica llamada Tsuki trayendo en su mano una bandeja con una tetera, tres tazas y sirvió el té.

Tenten sólo la observo delicadamente mientras lo servía y algo le pareció un dejavu al ver la técnica que usaba, parecía de las casas nobles, la delicada postura al prepararlo sin derramar una sola gota pareciera un ritual antiguo de casamiento, una tradición y la castaña la observo paso por paso extrañamente conociendo cada uno de ellos, la pequeña cometía errores y Tenten se sorprendió a si misma de que lo pudiera notar, al final la primera taza servida era la de Ryu y después puso en frente de ella y por consiguiente se sirvió a ella misma y se sentó con ellos y observó a Tenten con una pequeña sonrisa.

-Esto...-susurro la castaña se quedándose atónita mientras miraba la taza humeante frente a ella, el respirar se le hizo complicado- esta... técnica...

-¿La recuerdas? - Tenten salió de su fijación a la taza para mirar a Tsuki, quién le sonreía con pequeñas lágrimas en los ojos- ¿Te acuerdas de mí no es así?, Onee-chan- la chica la miraba con cierto brillo de esperanza que sorprendió a Tenten tanto que no sabía que responder.

-Yo... es que yo...-bajo la mirada, sus manos temblaban y su mente estaba en blanco totalmente.

-No lo hace Tsuki-una cuarta voz burlona en aquel dojo llamó la atención de Tenten fijo su mirada al chico que había atacado a Neji recargado en la entrada hacia el jardín, la observó fijamente y se rio aun más de la expresión en sorpresa de la chica- ¿ya terminaste con el juego Ryu?

-Parece que realmente te interesa un papel para jugar en el, Natsune-respondió Ryu mirándolo con seriedad dando un sorbo a su taza de té.

-No estaría aquí si no fuera divertido tu juego de "adivina quién eres en realidad", aunque esta chica no ha creído ninguna palabra de lo que has dicho, pero todo apunta a que es verdad todo lo que "Ryu-sama" tiene que decir-una sonrisa santurrona apareció en un expresión mirando hacia ningún punto en partículas, luego rodo los ojos hasta Tenten, la expresión de la chica ya era más calmada y seria, había recuperado su postura- cada palabra que él quiere desesperadamente que sepas para convencerte de que es la "verdad"... aunque no le creas ni la más mínima de ellas.

-No les creo nada-finalmente declaró Tenten harta de todo aquel juego de identidades- y ya lo dije no soy aquella chica a la que llaman Hanako, no sé por qué tengo este tatuaje solo apareció un día mientras entrenaba, ya te escuche ahora te pido que me dejes ir como prometiste.

Estaba enojada y cansada, quería regresar a casa y más que nada no quería estar rodeada de personas que decían conocerla o decían que ella era otra persona totalmente diferente quería regresar a casa a Konoha ver si la princesa y Lee estaban a salvo y ver si Neji lo estaba.

-Lo siento pero no puedo dejarte ir todavía, no has terminado de escucharme aún-dijo Ryu seriamente-Hay algo que quiero comprobar, ¿serias tan amable de contarme lo último que recuerdas de tu infancia?

- ¿Por qué te contaría algo tan personal? -cuestionó Tenten con curiosidad.

-Porque te puedo mostrar por qué no recuerdas nada antes de eso...

-Onee-chan, por favor dinos-Tsuki la miraba suplicando, Ryu esperaba una respuesta y el otro chico llamado Natsune se encontraba en el mismo lugar con la mirada sombría.

Algo dentro de ella le dijo que ellos no le harían ningún daño, una voz nostálgica dentro de ella le dijo que confiara en ellos pero por otro lado recordaba el ataque y a Neji mal herido, no podía confiar en ellos de definitiva, sin ningún motivo hablo mientras su mirada se volvía sombría.

-Lo último que recuerdo es... haber despertado en un hospital de Konoha-se detuvo un momento para recordar aquella confusión que sintió cuando despertó-estaba herida con quemaduras y cortadas por mis brazos, mis pies que estaban vendados, eso es lo que recuerdo antes de eso nada... sólo justificaciones de lo que pasó pero nada que yo recuerde por mí misma.

Ryu se levantó y se acercó a Tenten, ella dio un salto y se puso nerviosa, pero no se movió de su lugar mientras el chico de ojos negros se puso en frente de ella y la miro fijamente.

-Puede tener un sello, algo así como un bloqueo-entrecerró un poco los ojos-un Jutsu avanzado para alguien de Konoha... alguien que no sea el Hokage...

-¿Sello?...¿Jutsu? -preguntó ella cuestionándose muchas dudas al mismo tiempo, apenas le dio tiempo de reaccionar cuando Ryu toco ligeramente su frente, acercándose más a ella apartando sus flequillos, la chica apenas y podía mantenerse en esa posición. Como el momento en que la secuestraron se quedó hipnotizada por el negro profundo de los ojos del chico, como si pudiera ver algo más...alguien más...

-Bingo Hermanito-Natsune se separó de la pared para sentarse en el mismo lugar mirando el jardín de aquel dojo-fue un método excesivo de su parte...pero nunca subestimes a Konoha-sonrió y esta vez lo hizo con una expresión dolida- si es así puedes deshacerlo fácilmente hermanito, así como padre te enseñó...-miro hacia Tenten con la misma expresión en su rostro, esta vez combinada con lo que la chica noto era algo de alegría, ella sólo le devolvió una mirada confundida-es bueno tenerte en casa al fin, Hanako onee-chan...

Segundos después todo paso muy rápido, la castaña noto las manos de Ryu por la altura del medio de sus ojos en forma de seña ninja, en ese momento Tenten se alarmó y nerviosa quería ser rápida y no dejar que la atrapara el Jutsu que realizaba pero antes de que pudiera reaccionar un fuerte dolor de cabeza despertó, la vista se le nubló y solo sintió como su cuerpo caía en los brazos cálidos de alguien.

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