Si, Taehyung me había golpeado. Nunca lo había hecho, en realidad, era la primera vez que me colocaba un dedo encima de esa manera. Me repitió una y otra vez que debía respetarlo, era cierto, debía hacerlo. Le prometí que me perdonara, fue así como él se tranquilizó un poco. Después de aquello, me llevó al departamento y creo que dar detalles no era muy bueno, porque lo hizo de una manera horrible... una la cual le había pedido que parara por el dolor. Algo raro en mí, nunca me había dolido más que mi primera vez.

Ahora mismo, trataba de cubrir con maquillaje algunos golpes que estaban en mi rostro, sería difícil pero no imposible. Traté de conseguir la base que más tuviera cobertura y fuera contra el agua y ese tipo de cosas. Me miré al espejo con una pequeña mueca en mis labios, estaba lista. Había logrado ocultar los hematomas. Aunque mi labio lastimado no podía cubrirse del todo, Taehyung había mordido muy fuerte en el inferior. Cepillé un poco mi cabello y me levanté de la silla de mi tocador para dirigirme hacía la cama donde se encontraba mi mochila y teléfono móvil. Tomé el bolso y me coloqué solo un asa en mi hombro derecho, después, el artefacto verificando si tenía algunos mensajes o llamadas.

Si, efectivamente, de Taehyung.

Solté un suspiro y salí de mi habitación, bajé las escaleras rápidamente antes de que mi novio se hiciera presente frente a mi casa, quería irme sola. Salí con mucho cuidado y cerré la puerta, empecé mi caminar apresurado sin mirar atrás, de verdad que no quería verlo por el momento. Caminé por dos cuadras y supe que ya lo había perdido por completo y que ahora era muy probable que me estuviera esperando. Solo faltan cinco minutos para llegar al instituto, en ese trayecto vi a la hermana de Namjoon, siempre tan indefensa. Ella notó mi mirada y pareció asustarse, caminé tranquilamente y en cuanto pase por su lado, la empuje con fuerza causando que el teléfono móvil que tenía en manos cayera al suelo. Le sonreí cínicamente y seguí mi caminar.

De repente, sin poder esperarlo, un auto se atravesó frente a mí con brusquedad causándome un susto horrible. Brinqué en mi lugar y sentí mi corazón acelerarse al instante, de el bajo Taehyung con una mirada seria y un cigarillo entre sus labios delgados y algo rosados. Tragué saliva enseguida del temor, se veía tan... intimidante, ahora llevaba un conjunto ajustado a su cuerpo con unos botines en color negro perfectamente brillosos.

— Súbete al auto, Sunhee. Ahora.

Señaló el auto con su cabeza, solo obedecí sin protestar. Por dentro, todo olía a tabaco con una mezcla de alcohol. Segundos después, Taehyung también se adentró ahora con el entrecejo fruncido.

— Te envié un mensaje de texto, ¿acaso no te llego? — No me miró, condujo hasta el estacionamiento del instituto. Su voz sonó tan ronca y gruesa que me dieron escalofríos por todo el cuerpo.

— No lo he visto, lo siento.

Él soltó una carcajada sarcástica y negó con la cabeza con frenesí. Detuvo el auto de golpe y lanzó el cigarillo por la ventana, después, me miró.

— ¿ No lo has visto? No me creas un idiota Sunhee, se perfectamente que si lo has visto. Solo querías huir de mí, te vi — Se bajó del auto y le imité. Empecé a jugar con mis manos por los nervios que tenia pero Taehyung no me hizo nada más ni dijo, solo pasó su brazo por mis hombros y nos dirigimos al instituto.

En la entrada se encontraban nuestros amigos, Park me miró preocupado por que sabía todo lo que me había hecho Taehyung. Él notó como salía del instituto a su lado con golpes. Le sonreí para que estuviera más tranquilo y me imitó.

—Hey, hombre. ¿Por que armaste todo ese escándalo el día de ayer? — Preguntó Yoongi con una sonrisa traviesa, no podía ver mucho sus ojos y parte de su nariz debido al bucket hat en color negro que llevaba.

— Lo que vimos ayer, querido Min Yoongi, son celos. Y de los fuertes — Mencionó Jungkook, hice una mueca por ello y desvíe mi mirada hacía el rostro de Taehyung. Este bajo su mirada a la mía y besó mis labios.

— Oh vamos Taehyung, que ridículo. Cuando ya sabes todo lo que ha pasado entre Sunhee y nosotros. Más entre Jimin — Hoseok alzó ambas cejas, chasquee la lengua y me deshice del agarre de Taehyung.

— Paren de hablar como si no estuviera presente. Ya, es pasado.

— Realmente pensé que acabarías con Jimin, pero no, tan solo ve. Siendo novia de Kim Taehyung.

— Ya calla, supéralo. Han pasado dos años, me quedaré con Tae — Coloqué los ojos en blanco, veía la intención de Jungkook de hacerme enojar. Así que, lo consiguió.

— ¿Aunque te golpee por no obedecer? — Se burló, todos los demás soltaron una pequeña risa, empujé a Taehyung y empecé mi caminar hacía el baño. Detrás de mí, Kim me gritaba que parara pero no le obedecí, solo entre al baño.

Apoyé mis manos en el lavabo dejando caer mi cabeza hacía el frente, sintiendo mis ojos picar. La primera lágrima cayó. Odiaba que revivieran el pasado, no me agradaba hablarlo, aunque cuando me lo dijeran otras personas o en ciertos lugares, solía bromear. Pero por dentro me molestaba mucho, fue un gran error que cometí. Ellos me traían como una muñeca de trapo, aún recuerdo las veces que solía maquillarme y vestirme solo para ellos. No recibía nada a cambio. Y no lo quería. Me sentía mal conmigo misma. Hasta que llegó mi relación con Taehyung, todo empezó a cambiar, solo me enfocaba en él y nadie más, aunque a Kim le costó tenerme confianza por que sabía todo lo que hacía con los chicos. Era mi mejor amigo en ese entonces.

Los golpes en la puerta se hicieron más constantes, solté un sollozo y enseguida llevé mi mano derecha para tapar mi boca y que no saliera ningún ruido de ella. Pero aunque fuera un baño de mujeres, a Taehyung le dio igual y entró como si nada pasara. La cerró detrás de él colocándole el pestillo y se acercó a mí.

— ¿Que sucede, Sunhee?—Preguntó muy pacificó. Limpié mis lágrimas y negué con la cabeza, no lo mire. Abrí el grifo y lavé mis manos sin razón alguna — Vamos, se que algo sucede.

— Nada.

Taehyung me tomo de la cintura por detrás y la apretó, alce mi mirada y lo miré desde el espejo. Su rostro se veía preocupado, que irónico.

— Preciosa, perdóname por todo lo de ayer. Se que estuvo mal pero... los celos me ganaron demasiado. ¿Te lastime mucho, cierto?

— Si, Taehyung — Balbuceé, él me dio la vuelta para quedar frente a frente, podía ver un poco sus ojos pero al cien por ciento debido a que sus rulos tapaban parte de ellos. Era muy precioso, no tenía facciones coreanas al cien por ciento y eso le hacía derretir a cualquiera del instituto... y del mundo.

— Amor, te amo. Perdóname. No volverá a pasar, de verdad que me siento demasiado mal por ayer. Te hice llorar mucho en mi departamento y ahora de nuevo — Con sus dedos pulgares limpió mis lágrimas. Aún seguía dándome un poco de temor. El día de ayer sentí un miedo que nunca había sentido en toda mi vida, verlo tan furioso, como ejercía fuerza contra mí. Gritándome con su voz ronca y tirándome al suelo.

Taehyung lo había disfrutado tanto. Pero yo no.