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¡Capítulo dedicado a -RheaJackson!

Gracias por tus críticas constructivas y tu hermosa opinión ;)

Éste capítulo va para que vean que no los he olvidado :3

♠️♠️♠️

La mañana siguiente para cuando Ángel volvió a la enfermería, solo deseaba no encontrarse con Jace.

Desde el encuentro que habían tenido el día anterior con el rubio, había notado como el Wayland no parecía querer separarse de ella. En la cena la estuvo observando por minutos que parecieron eternos, y ambos Lightwood (quienes estuvieron atentos ante su extraño comportamiento), no despegaron la mirada de ambos.

-¿Te sientes bien, Jace? -Había preguntado Izzy con los ojos entrecerrados, como si supiera que ocultaban algo.

Alec no dejaba de matarla con la mirada, como si fuera una especie de cucaracha que se escapó de la cañería.

Detestaba esas miradas de odio, sus celos olían a kilómetros.

-Estupendo -dijo Jace sin despegar la mirada de mí. Una sonrisa divertida fue enviada a ambos Lightwood.

Ángel alzó la ceja. No era nada discreto.

No se dijo nada más en cuanto Hodge entró a la cocina, Jace siguió lanzando sus miradas moja bragas y la pelirroja se limitó a seguir comiendo lo que parecía ser comida china y una bolsa de frituras. Era obvio que nadie quería que Isabelle cocinara; había averiguado que era bastante pésima para el trabajo.

Pero esa mañana, mientras cambiaba las mantas de su hermana, algo diferente pasó.

-¿Crees que despierte pronto? -preguntó una aburrida Isabelle.

Esa mañana había llegado casi una hora después que ella, creía que se había aburrido de residir en su habitación y decidió hacerle un poco de compañía. Tenía la esperanza de que empezaba a tomarle cariño.

-No lo sé -dijo Ángel con los ojos cansados. La noche anterior no había dormido nada pensando en cuando despertaría Clary-. Supongo que pronto, Jace dijo que no debía de tardar mucho.

Izzy le lanzó una mirada llena de picardía.

-Ya los ví anoche -Empezó como quien no quiere la cosa, miraba sus uñas tratando de no mostrar interés-. No dejaba de enviarte miradas hormonales y tú no dejabas de sonrojarte. Ambos me dan asco -Pero en vez de mostrar el asco que decía sentir, no dejaba de sonreír como el payaso de Eso.

-No sé de que me hablas -dijo Ángel, haciéndose la desentendida.

Izzy rodó los ojos.

-Que mentira tan básica...

Pero Ángel se distrajo de la conversación en cuanto empezó a notar como su hermana empezaba a mover los dedos. Le dio un golpe a Isabelle para que lo notara y esta la miró con el ceño fruncido.

-No me golpees -le gruñó-. No soy tu saco de boxeo. Ni siquiera nos conocemos bien como para...

-¡Se está moviendo! -exclamó emocionada, empezó a brincar de emoción mientras sus ojos se empañaban de lágrimas que no pensaba soltar- ¡Está reaccionando! ¡Mira Isabelle! ¡Ya despertó!

Clary empezaba a parpadear tratando de adaptarse a la luz, el tránsito neoyorquino fue lo primero en recibirla y Ángel solo podía chillar de felicidad. ¡Clary estaba bien! A pesar de estar apunto de desmayarse por el cansancio, estaba feliz de que su hermana estuviera de vuelta.

Isabelle se movió deprisa.

-Iré a decirle a los chicos -y salió trotando de la enfermería.

No es como que le importara mucho a Ángel, ahora que Clary estaba despierta, ambas volverían a casa y no volverían a ver a aquellos chicos. O eso trataba de decirse para no entrar en pánico.

-¿Qué... qué pasó? ¿Dónde estamos? -gimió Clary con cansancio. Las ojeras debajo de sus ojos solo dejaban ver cuán cansada estaba, aún estaba débil por el veneno demoníaco que había entrado en ella- ¿Ángel?

-No te muevas mucho -insistió mientras tomaba el vaso con la tisana que Hodge había hecho para su hermana-. Estabas muy grave.

Clary la miró con sus ojitos de cachorrito que siempre ponía cuando estaba confundida o asustada.

-¿Qué fue lo que me atacó? Era un monstruo... -preguntó asustada.

Trató de consolarla mientras le daba el vaso con el remedio sabroso. Clary miró el vaso con rareza por su contenido, pero igual lo bebió todo.

-Te ayudará a sentirte mejor -le aseguró-. Hodge dijo que es porque no has comido nada en días. Debes estar casi seca por dentro.

-¿Cómo? ¿Días? ¿Quién es Hodge? ¿Quién me trajo hasta aquí? Pensé que estabas con Simon, ¿cómo has llegado hasta aquí? ¿Mamá también te llamó?

Todas sus preguntas la hicieron sentir mareada, ¿así fue cuándo hice un montón de preguntas? Solo esperaba no haberse visto tan desesperada.

-Ya veo de donde sacó la curiosidad -dijo una voz ácida. En donde sea reconocería esa voz-. Las dos son igual de entrometidas.

-Déjalas en paz, Alec -Lo regañó Izzy con el ceño fruncido, sus largas trenzas se movían mediante sus caderas se contoneaban. Desde que la conoció, Ángel pensó que Isabelle era muy hermosa, pero no estaba pensando en meterse en un trío amoroso entre dos hermanos. Ya tenía suficiente con el lío que se había formado con Jace-. No encontré a Jace, así que traje a Alec, aunque hubiera sido mejor no haberle dicho nada.

Alec le lanzó una mirada envenenada.

Ambos eran demasiado parecidos para su gusto, solo que cuando Izzy sabía cuando y como divertirse, Alec no.

-Le diré a Hodge -Avisó Alec sin lanzarles una segunda mirada. Se dio la vuelta y se marchó sin decir nada más.

Izzy suspiró, Ángel pudo ver la decepción en sus ojos.

-Dramático -susurró, pero igual pudo escucharla. Le lanzó una mirada a ambas hermanas, sus ojos se relajaron en cuanto se enfocaron en Ángel-. Finalmente estás despierta -dijo con voz seca dirigiéndose a Clary, la conocía lo suficiente para saber que estaba tomando su faceta de cazadora de sombras-. Hodge estará contento. Todos pensábamos que probablemente morirías mientras dormías.

-Vaya apoyo -dijo Ángel con sarcasmo.

Izzy hizo una mueca.

-Lo siento.

Ángel se encogió de hombros. No quería hablar del posible hecho de que su hermana por poco moría.

Clary volvió la cabeza hacia ambas con confusión brillando en sus ojos; se veía demasiado indefensa para su pequeño corazón, así que la tomó de la mano tratando de infundir un valor que realmente no sentía. La pelirroja menor le regresó el apretón y ambas supieron que estaban allí para la otra.

Izzy les mandó una mirada extraña, como si aquella muestra de afecto le fuera desconocida. Se preguntó si los cazadores de sombras tenían permitido mostrar afecto en público o algo por el estilo. Tal vez no eran criados de la misma manera y les resultaba un insulto. O tal vez solo no estaban acostumbrados a los vínculos afectivos.

Isabelle caminó con majestuosidad y se encaramó en la cama contigua, ese día llevaba vaqueros y una ajustada camiseta sin mangas, aunque el colgante rojo todavía le parpadeaba en la garganta.

-Lamento haberlos decepcionado -La voz de Clary sonó extraña por los días de desuso- ¿Qué es este lugar?

Isabelle puso los ojos en blanco.

-Es el Instituto -Le explicó Ángel compartiendo una mirada rápida con Isabelle para tener su aprobación. Izzy se encogió de hombros-. Debes estar muy confundida.

Clary tosió.

-Estás en la enfermería, aunque ya te lo habrás imaginado -aclaró Izzy.

Clary aún parecía confundida, pero se las arregló para explicarle en qué lugar estaban y de qué se trataba todo lo que la había mortíficada dos días atrás. Notó como el pálido natural de su piel se volvía enfermizo, lo cual la puso un tanto alerta por si se volvía a desmayar. Hubo un silencio prolongado y Clary trató de ver la lógica detrás de sus palabras, pero al notar que no había nada que no fuera mentira o inventado, entró en lo que se llamaría, etapa de negación.

Dos horas después, Ángel logró convencerla de que no era ningún disparate o reality show detrás de cámaras.

Izzy se deslizó fuera de la cama y aterrizó en el suelo arqueando la espalda como un felino en cuanto ayó la oportunidad de irse.

-A propósito, soy Isabelle Lightwood. Vivo aquí.

-Sé tu nombre. Yo soy Clary Fray. ¿Me trajo Jace aquí?

Ángel no dejó pasar el interés que trató de ocultar detrás de sus palabras. Si Isabelle lo notó, solo lo ignoró.

-No. Te trajo mi hermano Alec, fue a avisarle a Hodge que ya despertaste. Jace no tengo idea, debe estar maltratando algún gato o matando cachorritos.

Quiso reírse, pero le pareció un horrible momento para hacerlo, por lo que se contuvo lo más que pudo.

Clary la miró con miedo.

-¿Matan cachorritos?

-No -se apresuró a decir, mandándole una mirada dura a Isabelle, quien contenía una sonrisa socarrona-. Solo matan demonios o subterráneos, en su defecto.

Isabelle la miró orgullosa.

-Aprendes rápido -Ángel sonrió con los labios apretados-. Hodge estaba furioso. Dejaste icor y sangre por toda la alfombra de la entrada. Si te hubieran traído estando mis padres aquí, ellos lo habrían castigado -Miró a Clary más de cerca-. Alec dijo que mataste a aquel demonio rapiñador tú sola y en cuanto Ángel despertó, se puso histérica. No se separó de ti ni para ir a comer, hasta ayer. Debiste verla, no dejaba de preguntar por ti.

Ángel rodó los ojos. No se puso tan histérica.

-Hiciste algo muy arriesgado -le regañó Ángel-, por poco mueres. Se supone que yo debía cuidarte.

-Tiene razón. Eres una mundi, por lo que eres mucho más débil que un cazador de sombras. Por poco y no la cuentas.

-Aún no lo sabemos -Le corrigió Ángel, saboreando la expresión de asombro y extrañeza de la morena. La preocupación se disipó y se sintió orgullosa del logro de su hermana, había dejado a un cazador de sombras con la boca abierta. Ahora podía morir en paz.

-Debería ir a decir a todo el mundo que te has despertado. Alec ya debió avisar a Hodge de que estás despierta, querrá hablar contigo.

-¿Quién es ese Hodge?

-Hodge es el tutor de todos ellos -respondí a su pregunta.

-El baño está por ahí y he colgado algunas de mis viejas ropas en el toallero por si quieres cambiarte -dijo Izzy.

Cuando Clary salió, notó el como la ropa vieja de Isabelle le quedaba muy grande para su pequeño y escuálido cuerpo. Izzy era de curvas aún más pronunciadas, tanto como las de Ángel.

-¿Tú hermano siempre es así de grosero?

Izzy miró a Ángel con la ceja alzada, como si no se creyera que su hermana era aún más entrometida que ella.

-La mayoría del tiempo. Es lo que nos da el estilo a los cazadores de sombras, supongo.

-¿Y qué hay de Jace?

Ángel se removió incómoda. No le gustaba hacia donde iba la conversación.

-¿Qué hay con Jace? -preguntó Isabelle con extrañeza.

-¿Siempre es así de ostigante? Estuvo acosando a Ángel desde que los conocimos, la siguió hasta el Java Jones y estuvo observándola todo el tiempo que estuvo allí.

Ángel no había notado eso que mencionaba, pero solo esperaba no haber tenido algo que ver con un tipo obsesionado, era un límite que no pensaba romper. Había visto suficientes películas como para saber que involucrarse con un tipo obsesionado, no era buena idea, para nada.

Izzy alzó ambas cejas mientras Clary intentaba caminar con los enormes tacones de quince centímetros que le quedaban enormes. Al ver que no funcionaba, simplemente los dejó de lado y decidió ir descalza.

-Jace es muchas cosas, pero no un acosador.

-Yo lo ví -aseguró Clary-. No despegaba los ojos de mi hermana. Tú misma lo viste.

-Está interesado por Ángel, eso lo sé -afirmó-. Incluso ella lo notó, ¿verdad?

Ángel se encogió de hombros sin querer mirarlas. Aún le avergonzaba lo que había pasado el día anterior.

Había estado vulnerable y susceptible a casi cualquier cosa, y ahora que se ponía a pensar con mayor claridad, se sentía mal cada vez que pensaba en ese momento. Lo había utilizado para disipar su dolor, un dolor que solo se disipó por unos cuantos minutos y solo la hizo postergar el dolor para más tarde.

¿Se arrepentía? No.

¿Se sentía culpable? Sí.

«Solo fue una paja», pensaba con agitación «un simple polvo».

Solo esperaba que él pensara lo mismo, sino, las cosas se pondrían muy tensas.

♠️♠️♠️

Perdonen la tardanza :(

Lo siento :'v

¿Pero qué creen? Ya va empezar bien la historia :3

Atte.

Nix Snow.

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