Seguimos por el camino, y como es costumbre algunos monstruos buscaron pelea, pero fue muy fácil perdonarlos, también en una esquina encontre unos zapatos de Ballet.
Pero no los tome, pues no eran míos, y realmente no los necesitaba, también me termine aquella paleta que compre.

Hubo algunas flores eco que mostraban una conversación.

"¿Y bien?  ¿no tienes ningún deseo que pedir? "

"Ummh... Solo es uno. Pero te vas a reír, es algo tonto. "

Me quedé con la intriga, talvez alguna flor eco de adelante siga la conversación.
Mientras caminaba recibí una llamada y la atendí.

—¿Hola? —

—Hola mi niña, estaba preocupada, llamaba para saber de tu estado. —

—Oh, estoy en Waterfall, y si, estoy bien. —

—Me alegra, y dime ¿No te has encontrado con algún peligro alli? —

Su pregunta sonaba más a afirmación que a  pregunta.
—Ummh... Si, a la líder de la Guardia Real. Intento "capturarme". —

—Lo esperaba... Ella siempre fue muy intensa desde adolescente. —Eso me dejó con una gran intriga.

—¿Cómo la conoces? —Pregunte directamente.

—Es una larga historia, pero mi niña, quiero que sepas que ella pelea de una manera algo "justa", siempre querrá luchar con alguien "digno" Te recomiendo que no te quedes a enfrentarla si ella busca pelea. —

—Esta bien Mamá... —Dije y colgué.

Flowey solo me miraba a que acabará la llamada y después de eso seguí, aunque no muchos pasos después un monstruo buscó pelea, específicamente el de hace rato, lo perdone flexionando, y más arriba encontré una flor eco que seguía la conversación.

"¡No digas eso! Vamos, te prometo que no me voy a reir. "

Después de eso seguí aún más encontrandome con un cartel.

"El poder de tomar sus Almas.
Este es el poder que los humanos temían. "

Al seguir después de leer eso atravesamos un lago, pero tentáculos salían siguiendonos, hasta que un monstruo blanco salió de allí.

—Hola... Te veo... allí... Soy Onionsan. ¿Me oyes? —Todo esto me lo decía mientras caminaba.

—Hola Onionsan. —

—¿Visitas Waterfall? Es muy lindo ¿Verdad? —

—Si. Es muy lindo. —

—¡Si! Es mi gran favorita! —Dijo el gran monstruo blanco mientras se le iluminaban los ojos.

—Aunque aquí... El agua es muy poco profunda... Tengo que... Estar sentado todo el tiempo... ¡Pe-Pero no pasa nada! ¡Es mejor que mudarse a un acuario abarrotado! Como hicieron todos mis amigos... Y el acuario esta lleno e incluso si quisiera yo...—Me puse triste al oir su historia.

—No te preocupes Onionsan. —Dije intentando animarlo.

—Si es cierto... ¡Undyne lo va a arreglar! ¿Me oyes? —

—¿Undyne? —

—Si! Voy a vivir en el océano! —

—Claro Onionsan. Ustedes lo harán... —

Y con toda esa conversación llegue al final de aquella sala.

—Oye... Ese es el final de esta sala... Bueno ya te veré... Pasatelo bien aquí. Es Wateerfaaall! —Mientras decía eso se hundía en el agua.

Y con una pequeña sonrisa seguí.

Aunque poco tiempo después una monstruo se encontró conmigo dando una pelea incómoda.

—. . . —La monstruo no decía nada.

—Hola ¿Como te llamas? —

—Shyren... —Dijo con una pequeña y dulce voz.

—¿Que te gusta hacer? —

—C-Cantar... —

—¿Cantamos juntas? —

—La flor... Me da miedo. —Dijo casi en un susurro que logre escuchar y entonces deje a Flowey en el suelo.
—Alejate tantito Flowey. —

—Agghh... Como sea. —Y se metió debajo de la tierra.

Empecé la canción yo, con un ritmo que alguna vez oí, Shyren al oírme cantar sin pena me acompaño y su hermosa voz acompaño mi melodía.
Parecía cómoda cantando con alguien más, seguimos cantando y unos monstruos vinieron por la curiosidad de la música y sin darnos cuenta parecía un concierto.

Cuando terminamos esa música voltee y de entre los monstruos distingui a Sans, quien estaba vendiendo entradas hechas de papel.
A lo cual me reí, y seguimos con otra canción, me sentía famosa, y querida, así que disfrutaba de ese momento.

Con una hermosa melodía hecha de mi voz y la Shyren, escuchábamos a la multitud, aunque tenía que terminar pronto o Flowey se pondría impaciente.

Le día perdonar y la batalla acabó. Aunque escuche los suspiros de decepción del público, por lo cual me reí, y ví como casi todos los monstruos se iban.
Ví como Shyren se iba hablando con algunos monstruos alegremente charlando de música por lo cual me acerque a Sans que estaba por irse.

—Oye Sans ¿Que hacías vendiendo entradas? —Pregunte con una sonrisa.

—Tengo muchos trabajos niña, si veo uno disponible es mi oportunidad. —Me palmeo la cabeza y se fue, ví a unos monstruos hablarme emocionados a lo cual les hable.

Realmente el subsuelo era una maravilla y sus habitantes eran espléndidos.
La charla había hecho que me olvidará de Flowey, hasta que sentí como me jalaban de los pies llevándome lejos de ellos.

—Adiós! —Dije con algo de dificultad mientras estos también se despedían y se iban.

Cuando estaba en otra sala mire a Flowey quien estaba algo enojado.
—¿Encerio? ¡¿Un CONCIERTO?! —

—Jeje... Mira el lado bueno, ahora Shyren tiene amigos! —

—¿El lado bueno?! ¡Yo no puedo ver el lado bueno a eso!! —

Frunci el seño y me cruce de brazos.
—¡¿Porque no?! ¡¿Porqué nunca sonríes o te alegras?! —

—¡¡Por que no puedo!! ¡No tengo alma! —Dijo para finalizar con un silencio incómodo.

—¿No tienes... Alma? —Dije confundida.

Ahora las preguntas de antes tenían sentido, un rival que no sintiera nada, estaba hablando de él.
—¿Flowey recuerdas lo que te dije? —Este me miro serio.

—Si.—Dijo desviando la mirada.

—Eso aplica para ti, incluso si no tienes alma debe haber algo que te haga sentir. —

—He probado todo, nada funcionará, ¿Qué podrias hacer tú idiota? —

—Soy un humana Ángel Flowey, mi deber es salvar al subsuelo, y tú estas incluido. —Me agache a su estatura mientras le decía aquello.
—No importa que Flowey, te haré sentir algo que no sea negativo. Ahora sube a mi brazo porque vamos a seguir y esta vez sin conciertos. —Este suspiro enojado pero aún así subió.

—Bien, sigamos. —

CONTINUARÁ.