El metal no muere

Paso un tiempo y el bar volvió a abrir, todos estaban muy contentos y celebraban. Las bandas tocaban con mucho animo y por supuesto estaba Mettaton con sus siempre distintivo atuendo, en esta ocasión llevaba algo muy diferente. Un pantalón negro acompañado de tirantes con unas largas botas rosadas un poco por sobre las rodillas y una camisa blanca. Llamaba mucho la atención sin dudas pero no era su día de actuar, aun así decidió ir como un monstruo mas.

Pago sus tragos y disfruto de una noche tranquila de música, Papyrus a lo lejos lo miraba, no se atrevía a acercarse después de lo sucedido en el cuarto del robot. Así paso la noche a lo lejos mirándolo hasta que este se retiro escoltado por sus guardaespaldas, llegaron a la casa y todos se fueron a descansar.

Mettaton se quito la ropa, le había encantado como le quedaba,al colgar la ropa sintió un sonido. Se acerco a la ventana no viendo a nadie, por su espalda apareció un humano y lo golpeo fuerte con la silla que estaba delante del espejo mesa donde tenía sus accesorios. La silla apenas lo aturdió, este miro al humano de forma peligrosa al intentar atraparlo otro humano con un tubo entro por la ventana y lo atrapo por el cuello intentando dejarlo sin aire.

Algo tonto ya que el robot no tenia pulmones y no respiraba, pero el forcejeo fue suficiente para que pudieran quitarle las baterías y que se apagara. Dejaron todo ordenado y se marcharon con el cuerpo del robot, un rato después llegaron a un galpón abandonado donde lo ataron con cadenas a un pilar de hierro. Con una palanca y de una forma bruta abrieron todos los compartimientos posibles en su cuerpo buscando armas que no encontraron, su cuerpo había sido profanado ya que tocaron hasta su tablero personal de funcionamiento. Nice cream fue a ver al robot ya que había mucho silencio de repente, toco a la puerta y como no contesto paso. Apenas al entrar vio la ropa doblada sobre la cama, eso lo alarmó de inmediato y corrió a llamar al señor Dremmurr. Porque con algo tan simple podía saber que algo estaba pasando? Bueno el robot odiaba doblar su ropa, siempre se quejaba de las arrugas y se lo había dejado mas que claro en varias ocasiones. Nadie debía enterarse de lo sucedido o todos querían ir a buscar a la estrella sin medir riesgos, así el señor dremmurr puso a Gaster a trabajar rápidamente.

Era mas que claro que estaban usando al robot para atraerlos hacia una trampa mortal, pero los monstruos no eran tan ilusos como los humanos creían. Gaster se esforzó en poder encontrar al robot con ayuda de sus habilidades y contactos.
 
Mientras en aquel galpón el robot apenas podía sostenerse en pie, habían agotado su batería a propósito, estaba sobre un gran charco de su propia aceite y su ojo apenas tenia energía para encenderse levemente. Los humanos lo habían golpeado fuerte con tubos de hierro y algunas placas se habían caído de su cuerpo. Este se reía levemente, aunque no tenia casi fuerza no seria tan débil. Los humanos querían información de la mafia de monstruos cosa que no les diría, sobre todo porque su memoria comenzó a fallar por tantos golpes dados en su cabeza.

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