(Recomendación : leer con auriculares e If You de BigBang )

"En días como hoy donde la fina lluvia cae recuerdo tu sombra. Nuestros recuerdos, los que secretamente guarde en mi cajón. Los saco y recuerdo de nuevo por mi mismo"

Capítulo 4 (hoy empieza el lemon)

Hoseok miraba a Jin con una imborrable sonrisa en su rostro, los ojos le brillaban de una manera poco común, estaba feliz y enamorado, compartiendo una mañana lluviosa con el chico que le había robado el corazón. Seokjin pestañeo rápidamente , sus frentes se rozaban sin llegar a posarse del todo la una sobre la otra. El viento que marcaba el inicio del otoño revoloteaba entre ellos en una dulce danza que hacía que la piel de sus cuerpos aún desnudos se erizara. Se besaron sin prisa, sumidos en un ritmo lento que detonaba amor y sensualidad, suspiraban cuando la respiración se volvía necesaria... Cuatro años juntos , algunas peleas absurdas u opiniones diferentes pero todavía parecían dos recién enamorados.

-Me gusta la lluvia - susurro Hoseok posando las manos en la cintura de Jin con el objetivo de envolverlo en un abrazo.

Seokjin cerro los ojos centrando toda su atención en el roce de los dedos de su novio sobre la piel de su cintura. El frío no le importaba cuando él lo abrazaba con fuerza comiendoselo a besos cargados de cariño. La piel de Hoseok era tibia y suave, más morena que la suya. Con frecuencia se encontraba evaluando con mirada enamorada la diferencia de tonos cuando se enrrollaban el uno en el otro haciendo el amor. Había muchas cosas que amaba de aquel chico, en su interior sabía que nunca podría cansarse de despertar a su lado o quedarse dormido entre sus cálidos brazos.

-Mmm lo sé, me hiciste salir a bailar bajo la lluvia cuando llevábamos saliendo un par de meses , lo único que logré hacer fue abrazarte y besarte para que no percibieras lo torpe que soy bailando. - Hoseok sonrió sobre la piel de la clavícula de Jin logrando que su caliente aliento en la zona provocará un escalofrío en este. - Te quiero , sé que no lo digo demasiado pero necesito que lo sepas. Jamás lograré amar a alguien si te vas... Si me dejas yo..

-Jamas me iré bebé, tendrían que matarme para alejarme de ti. Hemos pasado por muchas cosas, no hay nada que no podamos arreglar juntos. Somos un equipo, nunca lo olvides.

-Jura que no me dejarás solo, promete que nunca me harás enfrentarme a la vida sin tí. -Hoseok frunció el ceño y beso los labios de su chico una vez más. Le preocupaban esos repentinos ataques de miedo que Jin tenía a veces, llevaban cuatro intensos años juntos. Estaba seguro de que podrían atravesar cualquier obstáculo después de todos los handicap que el mundo había colocado en su trayecto desde que empezaron esa relación. El camino no había sido fácil para ellos, de alguna manera se vieron obligados a construirlo por sí mismos. Aplastando la hierba con pies descalzos, cortándose la piel por el esfuerzo y los pinchos afilados de las plantas salvajes en cada tramo.

-Nunca te dejaré solo mi amor, jamás te abandonaré. Juro que permaneceré a tu lado hasta que mis pulmones griten por oxígeno y mi corazón deje de bombear sangre. Nunca, Jin, nunca saldré de tu vida....

Nunca saldré de tu vida. Seokjin se despertó de forma brusca, al borde de un ataque de pánico y con el sudor recorriendo su frente. Namjoon poso un paño que anteriormente había sumergido en agua fría sobre la frente del líder de los lobos. Lo miró un segundo preocupado por el echo de que la fiebre siguiese subiendo, sujeto sus manos con el mayor cuidado posible cuando percibió el dolor en su cara. Temblaba. Se removía inquieto, tratando de salir del vehículo a pesar de que este estuviera en marcha.

-Tranquilo, llegaremos pronto a Daegu. Jin, mírame. Te harás daño si sigues pataleando.

Seokjin poso ahora sus ojos directamente en el médico. Le quemaba el cuerpo por la calor mientras que los recuerdos del pasado atacaban su mente con una intensidad casi física. Le costaba respirar. En su memoria el solo nombre de Hoseok lo hacía encogerse de dolor. Recordar los buenos momentos era incluso peor que las imágenes repetidas en forma de pesadillas de la muerte de quién fue su gran amor.

-Oye, tienes que intentar relajarte. Respira. Estás desconcentrando al conductor . Seokjin porfavor para - Namjoon apretó el agarre sobre las muñecas del chico en un primer instante sin embargo algo detuvo la fuerza con la que lo había sujetado. Jin estaba llorando, las lágrimas se deslizaban por su cara y enrrojecian sus ojos dándole la imagen de alguien agotado por la pena. Era extraño que incluso en ese estado su belleza permaneciese inalterable, Namjoon no lograba comprender como alguien podía verse precioso en medio de tal desastre. El cabello del líder estaba completamente despeinado, sus mejillas rojas por la fiebre y sus ojos sumidos en un profundo dolor.  Su hermosura aún así permanecía igual de deslumbrante que en cualquier otro momento.

-Nunca se irá - lloriqueo buscando cobijo en el pecho de Namjoon sin comprender todavía el porque de sus acciones , el médico se encontraba sentado a su derecha estático ante ese movimiento - Me está matando. Quiero olvidarlo. Aún veo su cara, sus ojos, percibo su olor... Pero cuando me despierto ya no está a mi lado. Es su castigo. Su venganza. No pude cuidarlo , por eso me atormenta...

Namjoon envolvió al líder en un abrazo sin saber que era lo que estaba sucediendo, actuó por instinto, sin pensar dos veces el porque de sus acciones. Noto como sus tembleques disminuían a medida que lo apretaba contra sí. Su mente era un lío , mientras Jin dormía lo escucho susurrar con culpa sin embargo en ningún momento imagino que fuese a despertarse de una manera tan preocupante. Con los sentidos confundidos, el cuerpo convulsionando y la necesidad de golpear todo aquello que se encontrará a su alrededor. Es más, atribuyo tales lamentos durante el sueño a la alta fiebre que su cuerpo experimentaba.

-Me odia - miró a Jin limitándose a escucharlo mientras observaba sus ojos brillantes por las cristalinas lágrimas - jamás me perdonará, debí haber muerto en su lugar... Yo.. lo amaba pero no supe que hacer. Juro que lo quería, yo lo quería,. Te digo que lo queria. Yo lo quería Kim Namjoon. Créeme porfavor , lo amaba. Lo amaba. Y ahora me castiga porque cree que no. Pero la verdad es que lo hubiera dado todo por él. Lo amaba. Te lo prometo, lo amaba. Lo amaba ... Lo amaba... Lo amaba...  Nunca he amado a nadie de la misma forma. Nunca. Nunca. Juro que nunca.

Namjoon quería preguntar algo acerca de sus palabras pero su personalidad no le permitía tal cosa. Él era un doctor, no un psicólogo. Aunque la curiosidad empezase a cubrir su mente paulatinamente no abriría la boca para interrogar al chico.

-¿Podría parar unos minutos el coche? - fue lo único que se le ocurrió en ese momento, sabía que el cuerpo de Seokjin estaba débil y cansado pero supuso que el aire fresco le ayudaría a despejar su mente de aquello que lo atormentaba.

-Jefe. ¿Quiere que paremos? - el conductor miró a Jin preocupado. - No haré nada que usted no quiera pero creo que podría ayudarle respirar aire fresco durante unos minutos.

Seokjin se limitó a asentir. Se apartó de Namjoon , su cabeza parecía dar vueltas. Sentía el vómito a punto de subir hasta su boca sin embargo logro abrir la puerta del coche y salir prácticamente a trompicones cuando el chófer aparco en el párking de una pequeña área de servicio. El médico se movió rápidamente, en momentos como esos la cabeza de Kim Namjoon observaba trabajo, deber más que a una persona . Por eso obvio el echo de que Jin era el líder de una banda callejera y paso su brazo alrededor del cuerpo de este para ayudarlo a caminar hacia un banco de piedra cercano a la gasolinera.

-Los perros - susurro Seokjin una vez logró fijar su mirada en el médico sin que todo le diese vueltas - Sácalos del coche. Ellos también necesitan un descanso.

-Pero... - Namjoon dudo unos segundos , dejar solo a Jin en ese estado era un riesgo que no quería correr tras la amenaza de Jeon Jungkook. Estaba avisado , si algo malo de ocurría al líder mientras él lo cuidaba ... - Está bien.

Sus pasos fueron rápidos, el coche no estaba demasiado lejos pero aún así sus movimientos denotaban prisa. No tenía confianza alguna con los animales de Jin sin embargo los tres perros parecían lo suficientemente ansiosos por salir del vehículo como para permitirle a Namjoon colocarles la correa sin realizar ningún tipo de protesta en forma de gruñido.

Una vez que logro  cerrar el coche con tres correas de tres perros ansiosos en sus manos volvió a caminar hacía Jin, el cual cerraba los ojos con fuerza apoyando el cuello en el respaldo del banco.

-¿Mejor? - hablar no era lo suyo. Namjoon prefería hacer su trabajo en silencio pero con frecuencia los médicos estaban obligados a preguntarles a sus pacientes acerca de su estado físico.

-Por eso no me gusta dormir - la voz de Jin sonaba como un suspiro ahogado. Ronca a la vez que baja. Era fácil saber que había llorado - Hay recuerdos que se escapan de mis manos - siguió hablando con los ojos cerrados. Namjoon lo observaba en silencio todavía sujetando las correas de los perros. El viento removía el cabello de Seokjin y por algún motivo el médico sonrió ante la imagen. Le hubiese gustado capturarlo en una cámara - Cuando duermo , cuando como, cuando hago ciertas cosas o voy a ciertos lugares termino por recordar cosas que me hacen daño.

-No sé que decir. Puedo ayudarte con el malestar físico pero si este es provocado por algo mental no tengo nada que hacer.

-No tienes que hacer nada - la afirmación de Seokjin fue dura a oídos de Namjoon, el tono utilizado ahora no se comparaba en nada al que había usado anteriormente - Soy mi propio problema, no necesito que nadie me cuide a pesar de lo que Jungkook y Taehyung crean. Acepte que me acompañases porque no soy un líder dictatorial  , comprendo que quieran asegurar el gobierno de los escorpiones y lobos sin embargo tendrás que verme al borde de la muerte para lograr que permita que me ayudes. Los médicos no son algo a lo que yo haya recurrido con frecuencia a lo largo de mi vida. Sé como coser y limpiar mis propias heridas, el echo de que me sienta débil no debería implicar que lo sea.

Un pequeño suspiro de exasperación abandono los labios de Namjoon captando la atención del líder.

-Sé que a ninguno de los dos nos gusta esto - siguió hablando Jin, cerro los ojos con fuerza. El mundo a su alrededor seguía dándole vueltas - pero encontraremos una forma de entendernos.

Kim Namjoon asintió con la cabeza antes de tomar asiente a un lado de Seokjin y rebusco en los bolsillos con manos temblorosas la cajetilla de tabaco. Hacía meses que no fumaba pero estar tan cerca de alguien como Jin lo ponía lo suficientemente nervioso como para sentir el ardor de necesidad de nicotina quemándole el cuerpo.

Con las manos aún temblantes se las ingenio para obtener uno de sus cigarrillos mentolados y tras intentar encenderlo al menos cuatro veces se llevó el pitillo a la boca. Absorbió el humo con ansia notando como todo su cuerpo reaccionaba ante la nicotina relajándose .

-¿No se supone que los médicos deben dar ejemplo? Eres el primer doctor que conozco que fuma de esa forma. Tragas el humo sin filtro alguno. - Namjoon no contesto, se limitó a mirar hacía el frente observando algunos de los edificios que se extendían en las áreas cercanas a la gasolinera - Joder , no lo disfrutas. Te limitas a tragar el humo. ¿Nadie te ha enseñado a fumar cierto?

El médico alzó una ceja curioso y miró de lado a Jin. Este extendió su mano pidiéndole que le pasará el cigarro que descansaba entre los dedos de su mano derecha. A Namjoon le tomo unos segundos reaccionar pero finalmente le cedió el cigarrillo a Seokjin.

-No deberías desperdiciarlo , esto y el alcohol son las únicas drogas que uno debe tener el placer de saborear. La cocaína te pudre, la eroina te quema... Te hacen adicto pero son jodida mierda. El tabaco y el alcohol sin embargo tienen infinidad de sabores. Estoy seguro de que eres de ese tipo de personas que compra una marca barata y se pregunta el porque de que existan cigarrillos de tan altos precios. La exclusividad cuesta más que lo normal. - Seokjin llevo el pitillo a su boca con elegancia, sus labios lo envolvieron casi con adoración. Namjoon trago con fuerza cuando lo vio cerrar los ojos , echar la cabeza hacía atrás y expulsar el humo lentamente tras retenerlo durante unos segundos. Algo se removió en el inferior de su vientre cuando Jin se permitió dejar escapar un gemido con cada calada profunda. La imagen del chico se le quedaría grabada en la memoria, su forma de de hacer del echo de fumar un acto casi erótico lo fascinaba.

El tiempo que transcurrió mientras lo observaba fumar en silencio le era del todo desconocido sin embargo podría jurar que solo pasaron unos segundos antes de que Jin le sonriera con lo que a él le pareció provocación y soplase el humo contra su cara. Parpadeo molesto por la repentina acción del líder.

-Eres mudo pero definitivamente no ciego. - eso fue lo único que dijo antes de levantarse entre todavía notables tembleques. Le hizo una seña para que le cediese las correas y Namjoon simplemente abrió la mano, dejándolas caer al suelo. Aún confundido por lo que acababa de suceder. Por como su cuerpo aún sentía la calor emanar por su masculinidad sin llegar a causarle una erección pero si notable excitación. Por un segundo se permitió preguntarse como sería verlo chupar su polla después de observar la forma en que sus labios envolvían un sencillo e inerte cigarro.

Lo miró mientras paseaba tambaleante con sus perros . Incluso si estaba mirándolo como un médico su mitad de hombre revelaba los instintos de un ser humano que acaba de ser tentado a cometer el pecado de la lujuria. Su pecado favorito. Probablemente el único que se permitía cometer con frecuencia.

(***)

La fiebre de Seokjin disminuyo unas horas después de que llegarán a Daegu, Namjoon aún fascinado por el lujoso apartamento en el que se hospedaba el líder se encargó de examinar al menos cada hora la temperatura del chico.

-Recibiré a alguien esta noche - hablo Jin llamando su atención mientras comprobaba una vez más que la fiebre había abandonado casi por completo el cuerpo de Seokjin - No te diré que debes mantenerte alejado, de echo no me molesta tu presencia pero algo me dice que no vas a querer escuchar nuestra charla. Si quieres mantener tu culo fuera de peleas de bandas simplemente quedate en la habitación que te cedi esta tarde.

Namjoon asintió, ni una sola palabra. A pesar de sus constantes intentos Jin no lograba obtener del médico nada más que simples negaciones o afirmaciones de cabeza. Eso comenzaba a exasperarlo.

Percibió como el chico observaba uno de sus muchos tatuajes con una muy mala disimulada mirada, sonrió , sin embargo no le pregunto el porque de su repentina curiosidad. No era la primera vez que el médico observaba su torso , probablemente no sería la última. Las cicatrices en su cuerpo eran testigos presenciales de ello. Por unos segundos se preguntó si en realidad lo que observaba era su delgadez tras perder casi diez quilos en los últimos meses... Pero había algo en la forma en que Namjoon inspeccionaba cierta zona de su pecho que le hizo comprenderlo , en realidad era un tatuaje concreto el que estaba captando su atención. El nombre de Hoseok, a la altura de su corazón , en claras letras negras y acompañado de la fecha en la que se conocieron con números romanos .

Se dio la vuelta tras comprenderlo, era probablemente el tatuaje más significativo de todo su cuerpo y no le gustaba que él lo observará. Incluso si no sabía lo que le había ocurrido a Hobi, ese tatuaje era algo íntimo para Jin.

Namjoon una vez más se limitó a escabullirse en silencio preguntándose el porque del gesto repentinamente tímido de Seokjin. Hizo lo que esté le había pedido. Se encerró en la habitación, leyó durante horas hasta que escucho el timbre resonar en la casa, un par de risas de las cuales solo pudo reconocer la del líder se colaron entre las paredes. Sus carcajadas eran escandalosas. Grotescas y por algún motivo cómicas.

-¿Qué hago yo aquí? - se preguntó pensando en voz alta tumbado sobre la gran cama de su nueva habitación durante esa semana - En Busan tengo un buen trabajo , ni siquiera necesitaba ayudar a las bandas callejeras para vivir bien, con lo que gano en el hospital... El maldito padre de Jimin me convenció y ahora no lograré dejar ese barrio nunca. Joder, Jungkook me amenazó y acepte como un idiota cagado de miedo.

Fueron quizás horas las que Namjoon dedico a sus pensamientos, la mayor parte de estos basados en culparse a si mismo por haber aceptado hace siete años la oferta del señor Park. Era joven, acababa de conseguir su titulación y estaba ansioso por ejercer su carrera. Fue un grave error que aún le costaba entender.

Con un bostezo abriéndose paso en su boca se giró en la cama para mirar la hora en el reloj que descansaba sobre la mesilla. Casi las doce. Sus tripas crujieron. Tres horas, había dedicado a sus pensamientos casi tres horas enteras.

Con los músculos tensos por haber permanecido en la misma postura durante un largo periodo de tiempo se levantó de la cama, imagino que la visita de Jin ya se habría marchado pues los pasillos del apartamento estaban sumidos en completa oscuridad. Camino con pereza hacía la que recordaba como la habitación del líder, final del pasillo , la puerta a la derecha.

Lo que parecían gemidos comenzaron a oírse con cada vez más claridad a medida que se acercaba a la puerta. Esta estaba entreabierta dejando que una línea de luz anaranjada se esparciese difuminada por el pasillo. Por un momento el sentido común lo obligó a frenar sus pasos , en cambio solo un minuto después se hayaba caminando apresuradamente hacía la habitación. Ahora los gemidos se escuchaban con tanta claridad que su cuerpo temblaba por los nervios.

-Tan apretado como siempre Jinie - tratando de no hacer ruido se colocó a un lado de la puerta e intento observar lo que sucedía en la habitación.

Un chico de estatura musculada y alto se cernía sobre Seokjin. Sujetaba sus caderas mientras lo penetraba con movimientos rápidos. La calor volvió a hacer presencia en el vientre de Namjoon, ahora el sentimiento de excitación era mucho más fuerte que en la gasolinera. Estaba escondido viendo como un chico se follaba al líder de los lobos y escorpiones. Le excitaba de sobremanera observar la expresión de placer que mantenía en su cara, ver la manera en que sus nalgas se enrrojecian con cada estocada. Incluso desde su posición podía notar lo muy enrojecidas que estaban.

-Ahhh... Necesito más - la voz de Jin sonaba sucia, llena de deseo.

Namjoon recorrió su torso con su mano bajo la camiseta de pijama que llevaba. Dudo unos segundos antes de seguir con su toque hasta la zona de sus boxers y finalmente cedió ante su propio deseo. Introducio la mano en su calzoncillos rápidamente , su respiración estaba acelerada. Más de lo normal, incluso cuando mantenía relaciones tendía a buscar el control. No era una persona a la que el sexo le hubiese regalado grandes experiencias por lo que observar al líder desde su escondite lo atraía casi tanto como la miel a las abejas.

Rodeo su ya notable erección permitiéndose gemir en bajo con cada palabra o grito de placer que Jin producía mientras era penetrado. Durante unos segundos se perdió en la forma en que el cuerpo del muchacho se retorcía buscando más placer, golpeando su culo contra los huevos del chico a la vez que esté seguía manteniendo el ritmo de sus estocadas.

Entonces se congelo durante unos segundos. Cuando apartó la mirada de la espalda y culo de Jin percibió que este lo observaba. Gemía obscenamente mirándolo directamente a los ojos.

-No tengas vergüenza, haz que me corra - hablo en alto mirándolo.

-Me conoces Jinie, no tengo vergüenza alguna. - el chico contesto creyendo que las palabras del líder estaban dirigidas a él.

-Vamos, hazlo. Sé que te gusta.

-Joder, me encantas - contesto el muchacho aún ajeno a la realidad de la situación.

La mente de Namjoon era un lío. No quería ceder pero su entrepierna quemaba ante el deseo , el reto de Seokjin, su mirada pervertida, los gestos que hacía mientras era penetrado con fuerza, la forma en que mordía su labio y retorcía su cuerpo. Todo él lo estaba tentando.

Si Namjoon creyese en Dios ahora mismo juraría que se había ganado el infierno por aceptar tal obscenidad. Su mano volvió a moverse sobre su pene, notando como con cada movimiento las cosquillas en sus piernas aumentaban. Ocultar sus gemidos o mantenerse alejado del cuerpo de Jin eran las dos tareas que más le costaba cumplir.

-Jodeme fuerte - de nuevo la voz de Jin y esas profundas ganas de entrar en la habitación para follarlo tan rápido como el hombre lo hacía en esos instantes.

De repente su sola mano le resultaba poco. El orgasmo estaba llegando , su clímax estaba realmente cerca pero su mente quería más. Ansiaba poder tocar, morder y chupar cada parte del cuerpo que se mostraba ante su mirada.

Había sido precipitado, hasta él lo sabía. Ese deseo. La forma en la que no pudo evitar seguir los gemidos a lo largo del pasillo o como en lugar de evitar mirar clavo sus ojos en Jin deleitándose de cada una de sus reacciones.

No evito gemir cuando el orgasmo cubrió su cuerpo de esa sensación indescriptible sin embargo se apartó de la puerta avergonzado. Su mente todavía confusa. El miedo a haber cometido un error golpeando sus pensamientos.

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Hiii!!!!

Ok sé que el lemon fue bastante pobre por no decir muy malo pero he echo un capítulo más largo de lo normal y la verdad cuando llegue a la parte del lemon estaba un poquillo cansada ya 😥 no cansada de escribir si no más bien de estar mirando fijamente la pantalla.

De todas formas el siguiente capítulo también tendrá lemon.

A

sí que espero que ese sea mejor que este.

Un beso, Mel xoxo