---Narra Mell---

Casi al terminar mi jornada recibí una llamada de Junior, me sorprendí; pero atendí rápidamente. La noticia era sobre JB, sentí arder mi sangre. Junior se escuchaba intranquilo, eso me inquietaba.

-Debo hablarte algo importante de JB, creo que debes saberlo y tomarlo en cuenta-

-Junior... Sabes que no estoy para hablar sobre él...-

-No Mell, déjame terminar- Tragué grueso. –Jae no es quien tú crees, él siempre ha tenido un secreto, ha intentado zafarse de eso pero no lo ha logrado-

Junior me confundía, no entendía lo que trataba de decirme.

-Me preocupa el camino que está tomando ahora, Mell.... JB es un policía encubierto y la misión que está cubriendo, poco a poco acaba con su cordura-

-Espera Junior... ¡¿Qué diablos estás diciendo? No entiendo nada!- Me estaba comenzando a molestar.

-Lo que escuchas Mell, Jae siempre te oculto su verdadera profesión a muchas personas de su círculo engañó por mucho tiempo, incluyéndote, lo hizo para proteger a sus amigos-

-Mi boca estaba semiabierta, no lograba procesar lo que escuchaba.

-Solo sentía la necesidad de decírtelo porque ya él no parece el mismo de antes... Debes cuidarte ¿ok?-

-¿Cuidarme?-

-Me siento culpable de engañarte todo este tiempo... Después de todo, te considero mi amiga- No podía tener nada claro, Junior hablaba y hablaba, yo no pensaba en nada. –Yo también estoy en la misma misión que cubre Jae, por qué crees los tantos viajes, las innumerables veces que no atendía tus llamadas por la noche...-

No sabía cómo sentirme, mis ojos se humedecían.

-Es difícil de entender y más si te lo digo por celular, te prometo que pronto estaré allá y lo hablaremos con más calma, te lo contaré todo-

-¡¿Aún hay más?!- Pregunté con dificultad sin ocultar el nudo formado en mi garganta.

-Hay mucho más... Solo te pido que te cuides y que tengas paciencia, ¿está bien?-

No musité palabra alguna, no sabía ni como aún seguía sosteniendo el teléfono.

-Bueno Mell... Debo dejarte, estamos en contacto, no me llames tú ¿ok?, yo lo haré, bye-

Colgó sin más, dejándome acompañada de un manojo de nervios.

--- Narra Jackson ---

Llegué a mi casa y tenía seis llamadas perdidas de la agencia, me produjo pereza devolverlas, me bañé, cené un plato de Bibim guksu, fideos fríos con algunos vegetales que quedaban en mi refrigerador y una salsa picante, mezclándolo todo.

 Fue lo más rápido que pude preparar, no soy de cocinar, bebí una cerveza, fregué e intenté comunicarme con Mell.

Repicaba, repicaba y repicaba, no atendía, la llamé tres veces más y no seguí insistiendo, ella no tardaba tanto en contestar ¿estaría molesta?, no había razón para eso. Antes de acostarme volví a intentar, nada, sin razones de ella.

-"Descansa Mell, espero que todo esté bien. Mañana antes de ir a la agencia paso por tu casa Te amo"-

Visto a las 11:10pm

No respondió, no quise darle fuerzas a mis inseguridades, debía dormir un poco antes de madrugar e ir a ese callejón sin salida en el que trabajo, suspiré resignada y cerré mis ojos. El despertador sonó a las 1:40am me levanté para alistarme como siempre, la misma rutina que me lleva a la oscuridad.

Llegué a casa a las 6:33am agotado, impregnado de perfume femenino, olor repugnante a drogas y alcohol, me bañé durante media hora para borrar todo rastro que me delatara ante Mell, empezaba a odiar mi trabajo, ella había hecho un gran vuelco en mí vida. La llamé aún con el paño cubriendo mi intimidad, no contestó, lo intenté cuatro veces más y nada.

Me vestí y salí a buscarla, ¡maldición donde estaba metida! Legué a su trabajo, anuncié mi presencia, pero ella... no salió a recibirme.

-Déjame pasar es urgente- Insistí amablemente a la recepcionista por tercera vez.

-No puede señor Jack, no puedo hacerlo pasar por muy guapo que sea-

Me reí ante su improvisada respuesta, Hye siempre tenía alguna ocurrencia. Habíamos formado una especie de relación cordial desde que visitaba a Mell seguido en su trabajo.

-La señorita Mell está ocupada en una sesión fotográfica con el artista Rain-

-Otras veces me has dejado pasar Hye- Le supliqué utilizando mis encantos, me sonrió y me hizo señas para acercarme más a ella.

-Le seré sincera, la señorita Mell no quiere que usted pase- Me susurró al oído, arrugué mi entrecejo confundido y Hye se alejó de mi rostro. –Yo solo soy la recepcionista, discúlpeme-

-Bien... Descuida, gracias Hye-

Le sonreí dulcemente, me despedí con una reverencia y salí confundido, molesto... ¿Por qué Mell no quería verme? No habíamos peleado, la última vez que nos vimos hicimos el amor como nunca, ¡que complicada es!

La noche llegó despacio, ¡qué día tan tedioso había pasado! Seguía sin rastro de Mell, ¡jodido problema el que tenía! Debía trabajar toda la madrugada y no podía insistir en quedarme con ella, la llamé una vez más, no tuve éxito. Me cambié molesto y fui a cumplir mi misión.

--- Narra Mell ---

Mi cabeza estaba hecha un lío, apenas y pude culminar la sesión fotográfica estable, sentía un bárbaro dolor en mi estómago, no sabía si era viral o autoimpuesto por la noticia que me había dado Junior sobre JB. Me preocupaba demasiado, de cierto modo me sentía culpable... ¿era normal? -¡detesto sentir incertidumbre me lo tomo muy a pecho!-

Miré el celular, tenía tantas llamadas perdidas de Jackson que me tensaba. No quería hablarle, no quería que me encontrara tan inquieta, no quería nada cerca de mí que me vinculara con JB. Lo sentía tan marcado en mi cabeza que me producía un ferviente malestar.

Había amanecido en Seúl, apenas salía de la ducha sonó el timbre, sabia quien era, me cubrí con la bata de baño sin preocuparme en recoger mi cabello mojado y salí a abrir.

-¿Dónde se supone que debo dejar una nota para recibir a atención de esta mujer?-

Bromeó Jack parado frente a mí, sentí un vuelco en mi pecho al mirar sus ojos. No estaba para bromas, lo dejé pasar y el ambiente se tensó.

-Que ocurre Mell?- Preguntó mientras tomaba asiento. -¿Por qué no contestas mis llamadas? Te busqué en el estudio y tu recepcionista no me dejó pasar-

-Sabes que cuando trabajo no me gustan las interrupciones- Espeté seca intentando zafarme de sus preguntas acusantes.

-Cierto... Pero sabes que esa orden fue por otro motivo- 

Su mirada era una liga de todo, nostalgia, incertidumbre, él se encargaba de escanear cada gesto de mi rostro buscando las respuestas de sus dudas y eso me sobrepasaba.

-¡¿Qué quieres saber Jack?! Hay veces en que quiero estar sola, ¿es tan difícil darse cuenta?- Frunció su seño, se notaba el cumulo de molestia que sentía, eso no era bueno para mí.

-¿Entonces es mi presencia la que te molesta?-

Se levantó del sofá incomodándome mucho más, se acercó a mí, lo evadí dirigiéndome a la cocina sirviéndome un vaso de jugo, entró a la cocina y su mirada estaba llena de acusaciones que no quería sentir. ¡La presión es demasiada! Bebí todo el líquido, nos miramos en silencio, mis piernas temblaban, JB aún causaba caos en mi interior.

-¿No me darás alguna explicación?- Gruñó sin apartar su mirada delante de la mía, nunca antes lo había visto con tanta molestia dentro de sí.

-Estoy pasando por algo que no quiero compartir, ¿bien?, solo eso- Mi respuesta fue dura, la postura que él tomó me lo demostró.

-No entiendo... ¡No puedo entenderte Mell y eso me jode!- Sus ojos se tornaron cristalinos supongo que de impotencia. -¡Aquí estoy como un idiota, cada que intento dar un paso hacia ti das dos más hacia atrás, tiras de mí cuando estoy cansado me torturas con esperanzas y luego rechazo, me tienes impaciente Mell!-

No sabía que decir, no quería explicarle nada así quedara como la cruela de la historia.

-¡No importa la mucho que salte para tocarte, no importa lo que haga siempre estoy en la palma de tu mano, me tomas me sueltas a tu antojo aprisionándome, no puedo liberarme de esto, no puedo liberarme de ti!-

Sus gestos eran golpes secos a mi esencia.

-¡Te aferras, algunas veces te sueltas, das y tomas, me volverás loco Mell, ¿Qué carajos es lo que quieres?!-

Me estaba molestado ¡no quería escuchar sus reclamos erróneos! Toqué mi sien intentando calmar mi molestia, no sabía que estaba sintiendo mi cuerpo que rechazaba con demasía a Jack, lo quería fuera de mi casa, que desapareciera por semanas ¡que se callara de una buena vez! Estaba sucumbida en la locura.

-¡Me torturas Mell!, ¿no te das cuenta que prácticamente te estoy suplicando de rodillas una explicación?-

-¡Basta Jackson!- Imploré con todas mis ganas retándolo con mi mirada. –Quiero que te vayas...-

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1/2

Aquí de vuelta con este capitulo. Ya esta el siguiente publicado! no podía volver sin darles un regalito doble! <3

Muchísimas gracias por la paciencia! loveU guys! <3