---Narra Mell---

Estaba profundamente dormida, soñaba con muchas casas y luces, sobre todo una muy destellante; desperté y todo el sol de la mañana alumbraba mi rostro, me giré y allí estaba él –dormido y hermoso- sonreí para mí y lo abracé, se movió un poco más no despertó. Mordí mis labios observando su rostro detenidamente y noté que estaba comenzando a crecer su barba, rosé su mentón con mi dedo anular suspirando -¡me había acostado con Jack al fin!- Miré debajo de las sabanas y contemplé de nuevo su desnudes.

Mi intimidad se calentaba con solo recordar su penetración, al incorporarme me asusté, Jack me veía con su rostro adormecido.

-¡Me asustaste idiota!-

Lo golpeé levemente por el abdomen, soltó un quejido y me apretó a su cuerpo desnudo.

-No sabes las ganas que tenía de tenerte así- Sonrió y me abrazó más fuerte, podía sentir cada cm de su intimidad.

-Jack... Esta haciendo mucha luz ¿no crees?-

Jackson volteó a la ventana aún adormecido y bostezó.

-Tienes razón, se me olvidó cerrar la ventana anoche-

-¿Y por qué no la cerraste?-

Le pregunté juguetona.

-Porque alguien me entretuvo y abuso de mí-

Solté una carcajada, me sentía "caliente" y solo estábamos hablando, mi intimidad reclamaba sus dedos con un curioso bombeo, quería aguantar, quería disimular; pero mis instintos dominaban mi voluntad.

-Y... ¿No quisieras que te entretenga de nuevo?-

Su rostro se tornó sorpresivo, no esperaba mi atrevimiento -¡Ni siquiera yo!- lo necesitaba demasiado. Jackson sin decir nada besó mis labios con suavidad acompañado de una caricia tenue en mi vagina que me hizo vibrar, subió su otra mano a mis pechos jugando con ellos a su antojo, dejé de besarlo, el juego que tenía con mi clítoris me estaba enloqueciendo necesitaba gemir sin ocultar nada.

Sentí su masa endurecerse y bombear mi vientre, su mandíbula dibujaba un excitante arte en mi cuello mientras me indicaba abrir las piernas para facilitare la masturbación. Mi piel reaccionaba sus incesantes caricias al igual que mi respiración ¡me estaba mojando tan rápido! Y... por él.

-¡¿Por qué me haces sufrir Jack?!-

No decía nada, solo me tocaba sin parar aumentando el ritmo de sus dedos haciéndome sufrir por quererlo dentro de mí ¡ya! Mis ojos se desorbitaron al sentir su lengua en mi cavidad ¡¿en qué momento llegó ahí?!

Él estaba concentrado en lo que hacía, ver sus blancas manos abriendo mi cavidad para hacer mejor su "magia" me ponía a mil.

Subió su vista para observarme y me petrifiqué, no supe qué hacer, quedé en blanco, con mis manos oculté su visión, aún no me acostumbro que me vea mientras me hace ese tipo de cosas.

Mientras se comía con desespero mis flujos yo gemía de placer desordenando su cabello y acariciando como podía su espalda.

Mis caderas se movían a un ritmo inventado por mí y su lengua simulaba su miembro, su mano desocupada se posó en mi vientre hasta que sentí el primer momento de mi orgasmo.

Dejé salir quejidos y gritos cortos, sin esperar, Jack recogió con su boca la mayor cantidad de mis jugos y me lo llevó a los labios, a mis tetas, me besó mientras me metía las manos en el cabello para jalarlo.

En medio de un profundo beso sentí una fuerte presión en mi intimidad, ¡al fin me había penetrado con uno de sus dedos, eso fue la perdición!

Mis gritos eran incontrolables, amaba el hecho de que fuera él quien me amara, cada bombeo era más fuerte que la anterior, siguió así hasta hacerme terminar, no pude alargarlo mucho más, simplemente... no pude.

Abro los ojos y lo encuentro encima de mí transpirado se había esforzado, pasó muchos minutos allí abajo para lograr que yo alcanzara el clímax, ¡eso lo hace más bello!

-Eres hermosa cuando gimes-

-Osea... ¿Qué no todo el tiempo soy hermosa?- Su mirada cambio causándome risa. –Idiota-

Golpeé su brazo jugando; pero seguía serio observando cada detalle en mí.

-¿Por qué me miras así? Me harás sonrojar-

-Solo que... Es irreal tenerte así... Aquí- Miro con paciencia todo mi cuerpo. -¿Qué me hiciste Mell?-

-N-no te...-

Se acercó a mi tan lento que me ericé, sus labios probaron los míos con cautela, con dulzura, lo tomé por la nuca adentrando mi lengua para probar más de él. Mi corazón latía frenético y mis sentidos estaban sumisos ante su presencia, había bajado la guardia... es definitivo, lo amo.

---Narra Jackson---

Sus labios eran vida, mientras la besaba podía sentirla por completo apreté sus glúteos, no tenía prisa en saborear su sabor, me dejé llevar por lo que sentía mi anatomía –no estaba equivocado, la amo- mi miembro despertó sin mi autorización lo posicioné en su entrada sorprendiéndola, sonreía avergonzado y sin decir nada, abrió sus piernas para mí, era completamente mía.

Tuvimos otra ronda de placer desenfrenado, ya eran la 1:12pm y bajamos a "desayunar" no teníamos mucha hambre así que nos preparamos unos pan de molde, a Mell se le ocurrió hacerlo muy americano, el resultado fue delicioso. 

Comimos con complicidad, divirtiéndonos, yo la hacia reír con cualquier tontería, no quería que el retrato de JB manchara sus pensamientos. Ese día nos bañamos juntos consumiéndonos en el deseo de nuevo, me peinó el cabello de distintas formas con resultados vergonzantes.

La vestí lentamente como quise, le puse las bragas, el brasier –eso si antes chupar sus senos a placer- me ayudó un poco con el pantalón y la blusa, le dí un pequeño beso en los labios y dejé que ella me vistiera.

Observaba mi cuerpo detalladamente, como si no se aburriera de verlo, su mirada era curiosa, lujuriosa, me tenía idiotizado.

Una vez vestido la apretujé en mis brazos sintiendo de nuevo su calor, la llevé a su casa, estuvimos juntos todo el día, para cenar compramos arroz chino a domicilio y comimos una vez más, sentirse enamorado es un sentimiento que está empezando a gustarme, me podría acostumbrar sin problema.

Había pasado un mes desde aquella noche que Mell había sido mía por primera vez, ya éramos oficialmente pareja, nos habíamos compenetrado de maravilla. Para ser mi segunda relación seria todo era distinto –No puedo compararla con nadie- es jodidamente perfecta.

Logramos llegar a un nivel nuevo para los dos, ¿era posible eso en tan corto tiempo?, no había rastros de angustias, ni siquiera de JB, de cierto modo me sentía tranquilo pero dentro de mí existía un grado de incertidumbre en cuanto a él.

Era un nuevo día en Seúl, me encontraba practicando esgrima como de costumbre, estaba agotado, me senté, revisé el celular, tenía dos llamadas perdidas de Mell.

Mordí mis labios culpable por no responderle le iba a devolver la llamada y la vi llegar, tenía el cabello suelto un short casual dando paso a sus tonificadas piernas y una franelilla cubierta por una chaqueta de jean.

Mi pecho y mi miembro se emocionaban de solo tenerla al frente, me llevó el almuerzo estaba deliciosamente cocido, amaba sus detalles, comimos juntos, mis compañeros de práctica sabían de nuestra relación y bromeaban con nosotros. Me observó entrenar por una hora más y fuimos al parque de diversiones.

Toda la tarde fue diversión, nuestras miradas lo decían todo ¡mi cuerpo no resistía su presencia! Compartíamos un algodón de azúcar con nuestras bocas y me asustó una insistente llamada, para mi sorpresa era Junior.

-Dime bro, ¿ocurre algo?- Pregunté curioso, después de todo... estaba pendiente de la misión.

-Hola Jack, necesito un favor-

-¿Algo salió mal?-

-No es nada de eso, tranquilo-

-¿Entonces?- Odio cuando alargan la situación innecesariamente.

-Necesito que me des el número de Mell, lo perdí-

¿El número de Mell?, eso era extraño, un leve susto me atrapó; pero... vamos es junior, ¿por qué desconfiar de él?, estaba paranoico.

-¿JB no lo tiene?- Pregunté casi por instinto.

-Eh... bueno, no pensé en pedírselo a él- Hubo un silencio. –Es verdad... se lo pediré-

-No bro descuida, estoy con Mell, te la voy a pasar- Le dí el celular a Mell dejándola confundida.

-Hola Mell te habla Junior, ¿Cómo has estado?-

-¡Hola Junior cuanto tiempo!- Mell sonrió. -¡Aquí se te extraña!-

-Si... No hay nada como compartir con amigos-

-¡¿Cuándo vuelves?!-

-Quizá en unos meses, con JB o solo-

La vi tragar grueso, supe de inmediato que Junior había pronunciado el nombre de JB.

-Oh bueno... Me gustaría verte pronto-

-Bella Mell dame tu número telefónico, lo perdí y me gustaría mantenerme en contacto contigo-

-¡Por supuesto! Anota-

Escuche como le dictaba el número dulcemente a Junior, estaba lelo observando cada movimiento de su boca recordándola haciendo magia en mi cuerpo.

-Gracias Mell, te estaré llamando pronto para hablar de algo contigo-

-Ehh...-

-No digas nada, hasta pronto bella Mell-

Se despidió una vez más, colgó y seguimos en lo nuestro, no comentamos nada relevante sobre Junior –no había porque hacerlo- era nuestro amigo en común; a las 10:00pm la dejé en su pieza.

-¿No te quedaras?- Preguntó con pesar.

-No puedo mi dulce Mell debo madrugar-

-Estando aquí puedes hacerlo- Tocó mi rostro juguetona.

-Sabes que no jajaja-

Moría por dormir a su lado; pero debía alistarme, sería una noche larga, la tomé de la nuca y la besé de manera fogosa, demostrarle sin miedo mis sentimientos era importante para mí.

Me monté en el coche y seguí mi camino, llegué a mi hogar, me duché con paciencia, me alisté y me observé en el espejo. Cargaba la vestimenta sombría que me exigían, Pinté profundamente con lápiz negro la marca de agua de mis ojos, peiné mi cabello hacia atrás, me puse unos lentes oscuros como plomo y un tapa bocas del mismo color.

Abrí la cerradura de la gaveta principal de mí cómoda, saqué el arma junto con las balas de respaldo. Estaba preparado para otra noche más que solicitaban mi servicio.

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Merezco un castigo por tardar tanto!!! pero los premiaré con dos capitulos seguidos de LEMON LEMON y más LEMON!! así que no duden en leer el proximo! GRACIAS por su paciencia y su apoyo! ya esta historia comienza a llegar al verdadero climax, espero que la sigan hasta el final conmigo. 

Agradezco sus votos y comentarios!! IN LOVEEEE