Para siempre



Era un cielo oscuro, las nubes ocultaban el brillo de las estrellas y eso era algo que ella detestaba. Se apartó de la ventana y suspiró para luego irse a su sofá y sentarse, levantando las piernas para luego abrazarlas junto a su pecho. Con una duda en mente tomó su celular, no tenía ningún mensaje, y mucho menos del que esperaba recibir. Infló las mejillas y buscó algo entretenido para hacer en su teléfono, cuando de repente siente dos manos tapando sus ojos y se sobresalta.

-Adivina adivinador, ¿Quién soy? – Pregunta una voz macabra y horrible. Mabel sonríe divertida y sujeta las manos intentando sacárselas pero no se movían.

-Un idiota – Contesta ella al notar que no pensaba soltarla.

-Ay... eso me dolió – Responde él con su voz ya normal. Ella sabía que de todas formas sonreía de par en par. Luego sintió cómo acercaba su rostro a su cabeza y ella aguantó las ganas de darle un cabezazo como muchas veces hizo ya.

-Entonces... ¿qué tal... un idiota que amo? – Rindiéndose al intentar quitar sus manos de sus ojos.

-Aww eso me gustó un poco más – Responde él liberándola, a lo que ella rápidamente voltea a ver a su novio. – Aunque te equivocas, no soy idiota, soy mucho más inteligente que cualquiera en este mundo aburrido – Dice Bill con orgullo notable, más cuando finge verse las uñas. Mabel negó con la cabeza mientras rodaba los ojos con exasperación. -¡Hey! ¡Mira! – Con emoción toma del cabello de la castaña quien se sorprendió por aquel acto.

-¿Qué?-

-¡Tu primera cana! – Levantando el pelo sin color con una gran sonrisa en su rostro. Mabel abrió grande los ojos y sostuvo la mano de Bill, la que sostenía su pelo blanco, por miedo a que la moviese lejos de su cabeza.

-¡No me la vallas a arrancar! – Ordenó ella a lo que él observó con una ceja arqueada. – Si me la arrancas me saldrá otros más – Explicó ella con un poco de pánico.

-Te saldrán de todas formas – Responde él liberando la cana que ella intentó ocultar entre sus otras hebras castañas. Ella le dedicó una mirada molesta. – No te enojes, eso no significa nada, me gustas de todas formas – Dice él saltando el sofá para sentarse junto a ella y acurrucársele. Mabel le miró con reproche pero luego sonrió para abrazarle.

...

Una bola de nieve fue lo que le hizo perder un poco el equilibrio. Ella frunció el ceño y volteo a ver aquel triangulo de un ojo reírse burlonamente a la castaña.

-¿A si? ¡Ya verás! – Sonrió ella agachándose y juntando la suficiente nieve para formar la bola perfecta, la indicada para devolvérselo al desubicado de su novio.

-¡Vamos Estrella Fugaz! ¡Dame tu mejor golpe! – incita el demonio moviendo sus manos hacia él, provocando que la mujer gruñera.

-¡Fanfarrón! – Dijo tirando la bola de nieve con fuerza hacia el de amarillo.

-¡Woops! – Se había teletransportado al lado suyo, antes que la bola siquiera le tocase. – Creo que vas a tener que volver a intentarlo – Dijo divertido como si lo estuviese cantando.

-¡Ohhh ya vas a ver, hombre de oro! – Volvió a agacharse juntando la nieve para levantarse, ignorando las risas de su novio, y lanzo todas las bolas de nieve que tenía. A todas y a cada una Bill esquivó con una palabra o frase burlona como "¿Eso es todo?" "¡Fallaste!" "Me aburro", claro que todo aquello ofendía al orgullo de Mabel, no podía darle ni un poco más porque él se teletransportaba a tiempo, o hacia espejismos de el mismo, se escondía detrás de los árboles, y muchas otras cosas.

-¿No que eras la ÚNICA que podía contra mí? – Se siguió burlando medio cantarín recordándole lo que ella le había dicho con mucho orgullo una vez.

-¡Si lo soy! Pero nadie puede con un tramposo como tú – Dice ella comenzando a molestarse.

-Creo que estoy escuchando una contradiccióoon – responde otra vez cantarín. Mabel al escucharle bufo y tiro las bolas de nieve que le sobraban para cruzarse de brazos. – Aww, mi bebé se enojó – Ella miraba a su alrededor, no podía encontrarlo en ninguna parte.

-Ya me canse, eres insoportable – Responde ella con el ceño fruncido. – Me voy a casa... - Voltea y se encuentra cara a cara con él.

-Wowowowow, tranquila Estrella Fugaz, creí que estábamos jugando ¿Te enojaste de verdad? – Pregunto con ternura mientras le levantaba el mentón recibiendo su mirada. Ella llevaba una cara que reflejaba exactamente enojo, pero Bill solo se rio ante esa expresión. - ¿Sabes que te ves hermosa cuando estas enojada? – dijo con un toque de emoción en su voz.

-Ya basta – Dice ella sosteniendo la mano de Bill.

-Aunque me guste mucho deberías dejar de poner esa cara o te vas a arrugar como una pasita de uva – Responde el con diversión mientras le estira de las mejillas hasta que ella se queja.

-Está bien, ¡Pero deja de molestar! – Intentando sacarle las manos de su rostro. Bill la suelta sin parar de reír. Ella mantuvo esa expresión por unos segundos antes de borrarla. Pero noto que Bill abrió su ojo con sorpresa para luego soltar una carcajada. -¡¿Y AHORA QUÉ?! – Pregunta ella extendiendo sus brazos.

-¡Vaya! Demasiado tarde, ya tienes tu primera arruguita en la cara – Responde el dándole un toque a su entrecejo. Ella rápidamente llevo su mano a la frente.

-Noooo... no puede ser... ¿de verdad? ¡Dame un espejo! ¡Y deja de burlarte de mí! – Exige ella con preocupación. Bill hace aparecer un espejo de la nada.

-Voilá – Dice el mostrándole su rostro en el espejo, pero ella apenas logro verse antes que el lanzara el espejo detrás de el con un "¡Ups! Se me resbaló". Mabel se asombró e intento ir por el espejo pero Bill la detuvo. –Eso no importa, Estrella Fugaz ¿Por qué a los humanos les preocupa tanto esas cosas? – Tomando sus manos como si estuviesen por bailar un tango.

-¡A mi si me importa, Bill! Significa que cada vez estoy más vieja y arrugada y fea... - Dice deprimiéndose cada vez más. Bill sabía que uno de los miedos de Mabel era verse fea, como la vez que se conocieron, a ella nunca dejo de disgustarle la idea de que se le fuese su lindura.

-Pff, no digas tonterías, para mí siempre serás hermosa mientras sonríes – dice dándole una vuelta como si de verdad estuviesen bailando y la inclina como si estuviese por caer pero él sosteniéndole en el aire. Ella le mira con un brillo especial en sus ojos, y en su boca se formó una tierna sonrisa. – Y bueno, cuando te enojas también, como ya dije – Se encoje de hombros para luego mirarle divertido. Ella se ríe y sin previo aviso le toma de los lados y le da un profundo beso en sus parpados. Claro que le tomó por sorpresa, incluso reaccionó tarde para cuando ella se separó de él. –... Wow... Menos mal cerré el ojo a tiempo – Responde el para luego escuchar la risita de la castaña.

-¡Adivina qué! – Dice ella con las manos detrás de ella. Antes de que el siquiera pudiese mirarle y preguntarle, una bola de nieve se le estampó en el ojo. Mabel se tapó la boca intentando no reírse.

-¡ESTRELLA FUGAZ! – Grita Bill derritiendo el hielo de su ojo. Ella comenzó a correr lejos de él y sin poder evitar reírse. - ¡¿SABES LO DOLOROSO QUE ES ESO?! -

...

-¡Ta-dah! – Levanta un suéter en frente de ella después de dejar las agujas de tejer a un lado suyo, el lado donde no estaba Bill, quien apoyaba su cabeza sobre su regazo.

-Ese suéter es demasiado pequeño para ti, amor – Dice el rubio con una sonrisa en sus labios. Mabel bajó la mirada para verlo como si acabase de decir una estupidez.

-Es porque es para ti, tontis – dejando el suéter encima de su pecho y atrapándole la nariz por un breve momento. Bill suspira y toma su suéter nuevo encima de él.

-Pero tampoco me entra a mí... - Dice fingiendo inocencia. Mabel se ríe y levanta levemente su pierna en donde el tenia apoyado la cabeza. –Au... que cruel eres... -

-Para tu verdadera forma – Responde ella tomando las agujas y buscando en su bolsa de ovillos algún color que le inspire.

-¿Ya te sabes mi talle? Wow, ya lo sabes todo de mí, eres mi fan número uno – Bromea él levantándose y mirando el suéter con más detenimiento para luego transformarse y ponérselo.

-Me encanta que nunca cambies de talle, así no lo olvido nunca – Sonríe ella. –Y no te tengo que medir todo el tiempo que quiero hacerte un suéter... - Dice con una pizca de orgullo.

-Aunque es absurdo que me hagas suéteres ya que no necesito una vestimenta que me abrigue porque soy un ser de pura energía- mientras se acomoda el cuello del suéter recién creado para él.

-¿Entonces por qué lo usas? – Le pregunta con un tono de voz burlón mientras mueve la cabeza.

-¡Porque lo hiciste para mí! – Dice con alegría abrazándose a sí mismo. Ella sonríe divertida pero desvía su mirada hacia sus ovillos.

...

El sol entraba amistosamente por la ventana de su habitación, sin embargo ella no se levantaba aún. Hasta que él se hizo presente y se puso a un lado de su cama.

-¡Arriba Estrellita! ¡Es un nuevo día y tenemos mucho por hacer hoy! – Dice sacudiéndola con suavidad, ya había aprendido de muchas veces que le despertó bruscamente. Pero ella apenas emitía algún quejido. – Me extraña que no te hayas levantado aún, es miércoles y es un gran día – Insistiendo con las sacudidas.

-Bill... - Llega a pronunciar en un leve susurro. El nombrado le miró esperando que hablara, ella tenía los ojos cerrados.

-¿Qué? ¿Qué pasa? – Pregunta después de esperar un momento en silencio. Ella levanto las cejas de manera triste, como si estuviese sufriendo. -... ¿Estrella Fugaz? – Sabía que estaba despierta, que no estaba teniendo ninguna pesadilla, él siempre se ocupaba de no darle pesadillas.

-B-Bill...- Volvió a decir ella abriendo levemente los ojos.

-¿Si? Aquí estoy -. Pero ella volvía a hacer esa expresión de dolor y un pequeño gemido ahogado en su garganta era lo único que escuchaba de ella en el silencio de la habitación. -¿Qué pasa? Estrella Fugaz... ¿Mabel? –

-No me siento bien... - Logro susurrar, lo suficientemente alto como para que él la escuchara.

-No es otro de tus trucos... ¿verdad? – Pregunta el dándole toda la atención a ella. Ella negó débilmente con la cabeza. – No te preocupes, llamaré al doctor y estarás mejor... - Avisa mientras le da una suave caricia a su rostro para tranquilizarla.

...

Se mantenía observando los colores de los ovillos de lana en la bolsa de plástico a un costado de ella, encima de las azules frazadas del hospital. Volteo a ver las flores que le había dejado su hermano mellizo, y luego a los globos con forma de corazones que les habían traído sus viejas amigas. Aquellos colores eran los que le mantenían alegre a pesar de su condición.

Recordaba las palabras del doctor, como si fuese una grabación en repetición. Sentía que cada vez estaba más cerca, pero ella se esforzaba por mantenerse con los ojos abiertos. La enfermera por fin se había retirado y él se hizo presente.

-¡Estrella Fugaz! ¿Me extrañaste mucho? ¡Admítelo! ¡Me extrañaste mucho! – Dice divertido el triángulo flotante mientras se acercaba a la peliblanca. Ella sonrió al verle otra vez.

-Sí, es cierto, te extrañé mucho, estaba esperando verte... - Responde ella débilmente, algo que él detestaba, hizo cambiar su mirada llena de energía. Ella incluso le estaba dando la razón, cuando siempre le hacia la contra. Bill acarició su rostro con ternura y ella apoyo su cabeza en su mano, ahora tenía más arrugas que antes.

-Te ves hermosa... como siempre – Dice el intentando animarle. Ella agrando su sonrisa efectivamente. -¿Cómo te sientes?...- Ella no respondió. - ¿Crees que esta vez te dejen volver a casa? – Pregunta el con un poco de entusiasmo. – Podríamos hacer los cupcakes multicolores que solíamos hacer... - Junto sus manos con las suyas.

-Me encantaría, Bill... pero no puedo... tengo que irme a otro lado... - Responde ella con tristeza.

-¿Cómo? ¿A dónde vas? –. Ella sonríe con aquella pregunta, era muy irónico que él lo preguntase, siendo que él lo sabía todo, él sabía qué sucedía. No era tan inocente como sus sobrinos nietos, directamente, él no era inocente.

-Bill... - Habla ella con tristeza, sus ojos comenzaban a aguarse por última vez. - Sabes que no me iba a quedar aquí para siempre...- Él hizo silencio. Un silencio lleno de memorias, recuerdos de los buenos momentos que tuvieron juntos, y esos eran casi todos los momentos de sus vidas; ni siquiera le molestaría discutir con ella con tal de que se quede con él, a su lado.

-... De acuerdo... - Habla él sin soltar sus manos. Ella le sonrió, pero una sonrisa llena de tristeza, con el deseo de no decir esa palabra de despedida, el deseo de quedarse con él por más tiempo.

-Supongo que... esto... es el adiós... ¿verdad? – Dijo con tristeza. Bill frunció el ceño y ella no pudo evitar dejar caer sus lágrimas, sabía que a él tampoco le gustaba esa palabra, pero tenía que decirlo, porque no volverían a verse nunca más. Nunca.

Sintió la mano de Bill limpiándole las lágrimas con el pulgar, ni siquiera se molestó en hacer aparecer un pañuelo o hacer alguna de sus bromas en las que jugaba con sus poderes. Ella odiaba ese momento, odiaba las despedidas, odiaba sentirse débil y sin siquiera poder levantarse para abrazarlo, odiaba los momentos tristes, y sabía que él también lo odiaba.

-No, Estrella Fugaz... no me digas eso... - Pidió él. Más lágrimas amargas cayeron de sus ojos. – Te acompañare... - Hablo el con un toque de felicidad, ella le miro confundida. Bill siempre hacia bromas pesadas, pero también conocía cuando fingía y cuando no.

-¿Lo dices enserio?... ¿Puedes hacerlo? – Pregunta ella con aquel brillo de alegría y esperanza en sus ojos.

-¡Claro! ¿Por quién me tomas? – Mabel se limpió sus lágrimas y volvió a mirarle con una expresión molesta. – No me mires así, hablo enserio – Ella no sabía cómo reaccionar a lo que le decía. - Ya te dije que no te abandonaría jamás, estaré contigo para siempre oh criatura inocente... – Dice él acariciando su cabeza. – Confía en mí...- y con esto ella por fin había sonreído con alegría y cerro sus ojos con paz.

-Gracias Bill... Te amo... - Susurra ella. Bill le admiro en silencio por un momento y también cerro su ojo.

-También te amo...-.

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N/A: .... no están llorando... O SI? -lepegan- Este es uno de los one-shots que tanto estaba esperando escribir, por que no lo hice antes? porque soy una floja, asi de simple asi de sincera (?)

Alguien me habia comentado algo asi que si habia pensando en que Bill era inmortal y Mabel mortal, y yo le dije algo asi como HMMMMHMHMHMH espera y veras (? o algo malvado como eso, no me acuerdo. Pos aqui esta el one-shot con ese tema <3 

Espero que les haya gustado y gracias por leer y todo el apoyo que me dan! <3 <3

Hasta lueguitooo~


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