El desayuno estaba listo, sólo faltaba llevarlo.

Tomó una suave bandeja, una de ésas grandes que sólo se sentían pesadas cuando le ponías cosas encima. Había sido un regalo de parte de sus tíos cuando logró conseguir una casa en Gravity Falls, donde actualmente se encontraba viviendo.

¿Qué hay de California?; era un caos. Había ido un año, no sólo un verano, sino un año entero a vivir con sus tíos y dos años después salió con la loca idea de irse a vivir a Gravity Falls junto a ellos. Dipper era el únuco que no estaba muy seguro de ello pero, casi a lo úlitmo, admitió que el descuido en las calles de California era lo que más le molestaba y se planteó irse, hasta que se fue junto a su hermana.

La castaña tomó la bandeja y la llevó hasta la cocina.

Ahí puso dos tazas de café, platos para éstos y unas cucharas pequeñas, una tacita con azúcar, dos pequeñas jarras con jugo 一uno, jugo de naranja y, en el otro, jugo de frutilla一 y dos vasos. Pan tostado, manteca, unos cuchillos para huntar lo anterior y dos croassaints, puso papel a un pado por si llegaban a ensuciarse y un pequelo plato con pedacitos de manteca pequeños, y tres tipos de jaleas.

Se dispuso a subir con el diario debajo de la bandeja, casi se tropieza muchas veces, e inclusive casi se le cae todo lo que es de vidrio.

Suspiró por quinta vez y siguió caminando con la vista en su bandeja, mirando a veces y de reojo al suelo, abrió con su pie la puerta de la habitación que compartía con su pareja y dejó la badeja sobre la mesita de luz.

Alejó el diario de ésta y se sentó en la cama, con una de sus manos se dispuso a destapar un poco al muchacho que estaba debajo de las sábanas, una sonrisa se formó en sus labios cuando le vio sin camisa, con sus brazos hacia arriba y sus labios entre abiertos.

Se acercó y dejó un beso sobre éstos, el muchacho se removió y finalmente abrió sus perezosos ojos: 一Buen día, domilón... Traje el desayuno.

一Buen día, cariño. 一le sonrió, bostezó y se sentó sobre la cama, mirándole.一 Oh, qué rico huele~

一¿De verdad?, ¿si te gusta? 一preguntó un poco impresionada.

一Ahá. 一el olor del café, le hizo sonreír aún más.一 ¿También preparaste café?

一¡Sí!; espero que te guste, intenté hacerlo cómo te gusta.

Ordenó un poco las sábanas y atrajo la bandeja hacia ellos, se levantó y abrió las cortinas de las ventanas que daban a los árboles del bosque más cercano a ellos, volvió a la cama y le sonrió al muchacho que acercaba la taza de café a sus labios y tomaba un poco.

一¡Está delicioso!

一¿De verdad? 一su sonrisa se agrandó y sus ojitos brillaron.

一¡Claro que sí! 一se sonrojó un poco, no era de confesar éstas cosas en voz alta.

Con una sonrisa tomó el diario y comenzó a sacar conversaciones de ahí, hasta que se aburrió y vio a su pareja, quién leía "Yo antes de Ti" y sonreía con cada diálogo de Louisa.

Sin dudas la amaba, y más por todo lo que ella hacía por él.

((junio, 2O19))