Sueña, joven que inspira. Sueña y sigue luchando por la confirmación de un sentimiento mutuo que ya está creciendo con un poco de poderío. Con ese beso remarcado y reforzado por un labial, Natasha Alianovna Romanoff, nos deja saber que ya está dejándose llevar por el encanto irresistible de Spider-Man y no luchará como lo hacía antes.

...

Mientras tanto, cerca a el apartamento de Broadway que hemos visto tantas veces, Natasha, va acercándose a la puerta principal del departamento que guiaba a este espacio personal. Tenía una sonrisa algo comprimida en el rostro y también unas gafas negras que le había robado a una abuela despistada que cuidaba a su nieto de cabello negro y de siete o nueve años de edad. Ahora, desbloquea, con una de sus llaves, el cerrojo del departamento. Luego, cierra la puerta y decide subir al elevador. Había algo nuevo en el ambiente. Unos cuantos abogados auxiliando a una señora con unos papeles y notas en el teléfono, aroma a frutas y a canela, el sonar de una pelota cayendo de las escaleras que guiaban al piso dos y un reconocible sonido de golpes característico de un programa mexicano que fue y será el número uno de la televisión humorística. La pelota de hace un momento, va cayendo hacia el piso del piso en el que estaba Nat, mientras que ella ya estaba cerca al ascensor, viendo su teléfono, y unos niños bajaban corriendo para seguir jugando con esta pelota de color blanco y negro.

Natasha Romanoff: ... *mueca*

Don Ramón, recibe la cachetada de la antipática Doña Florinda y el numerito de su hijo Quico. Los niños del piso dos, siguen jugando a ser futbolistas profesionales y la puerta del ascensor que nos llevaría a nuestro destino natural ya está abierta por completo. Unos tres hombres y dos mujeres, serían la compañía de esta parte del día de hoy. Bueno, peor es nada. Romanoff, prefería tener para ella sola el ascensor, ya que así se sentía más relajada y podía verse, sin interrupciones ni molestias, a uno de los espejos que tenía este.

Ya dentro, la puerta, se cierra. Hay un sonido ligero y blanco. El Chavo del 8, recibe un golpe en la cabeza por parte del señor Ramón y los niños baloneros ríen por algo que se desconoce con totalidad. También, el público. Para colmo, una de las mujeres que estaba en el interior del ascensor, masticaba un chicle acerezado de marca Boobaloo. La mirada al frente, pasaría a ser dirigida a esta muchacha escandalosa de cabellos rubios y maquillaje algo barato. Solo por unos tres o cuatro segundos. Nuevamente en posición de desinterés total, Natasha, suspira y se soba los ojos, por debajo de los lentes, con una de sus manos. Comienza a pensar en lo que debe de hacer al llegar a casa: Asear, regar las plantas, alimentar a un pez recién llegado, (cortesía de una amiga) doblar la ropa, ducharse y ver Bonanza a las 6:30 pm. Suena muy tranquilo, para tratarse de una mujer como ella. Sabemos que, vivir en paz, puede cambiar mucho a cualquier persona que necesite o no de esta. Repentinamente, uno de los hombres, parece hablar por teléfono con su esposa. Llevaba un traje elegante y se parecía un poco a Morgan Freeman. Algo curioso, sucede con él. Una gota de sudor, cae del hemisferio izquierdo de su morena cabeza. La luz cián de la ambientación del ascensor, la resalta más de lo debido y la hace parecer como si bajara a cámara lenta.

Natasha Romanoff: ... *achinar muy poco los ojos*

Se supone que esto es algo que pasa todos los días. Con el calor que puede ocasionar tener que traer puesto un traje tan voluptuoso y lanudo para ir al trabajo o a un especial evento, pues si. Al notar la gota de sudor, el señor, pasa unos dos cuadritos de papel higiénico por la frente y continúa con su llamada. Natasha, ahora, vuelve a suspirar y nota que falta poco para llegar al piso en el que debía arribar. Iba en el tercero de la lista.

Inmediatamente, ella cruza sus brazos y saca tronaciones de su cuello. Fue un día pesado. Mejor dicho, ha sido una caminata y una noche pesada. También, siente que sus piernas tiemblan un poco y que su temperatura ha bajado en un 12%. Desde luego que también está padeciendo falta de energía y vitaminas importantes. Sin más ni menos, la bella mujer,  opta por no prestarle atención a esto y vuelve a observar el contador de pisos disponibles.

Marca al cuarto, ahora al quinto.. ¡Ya está consumada, la espera! la flojera de lavar los trastes, barrer y etcétera, comienza a manifestarse; a parte de un gran bostezo. No hay remedio, si el deber llama, hay que trabajar; aunque suene totalmente pesado y muy de nerds, de niñas de casa bien criadas o de unas monjas monocromáticas. (repetir, si es necesario)

¡Chnk!

Sin previo aviso, una de las mujeres que estaba en el ascensor, hace algo que no estaría en el currículum de una ama de casa o de una trabajadora social.. Esta damisela sin apuros, le clava un cuchillo mediano a Natasha en un lado de la zona de su espalda; exactamente, cerca a un riñón. ¿Por qué? porque no era una mujer común y corriente.. Y no estaba acompañada de personas de este tipo, sino de agentes encubiertos de HYDRA que querían enviarle un mensaje, o un saludo, a quien, en su tiempo, fue su mayor ventaja contra la justicia y la paz.. Black Widow.

Natasha Romanoff: ¡AGH-

Antes de que la soviética pudiera hacer algo o quejarse por el dolor, el señor que lucía como Morgan Freeman, le tapa la boca y la regresa rápidamente al interior del ascensor para no alarmar a nadie y hacer del incidente algo más íntimo y personal. Muy personal.

Señor parecido a M. F.: Saludos de nuestro líder, señorita Romanoff. No debió rechazar la oferta. ¿Creyó que se había librado?

Natasha Romanoff: ¡MMMM! ¡¡SLTMMM!!

Mujer del chicle: Corta una cabeza.. *risas* Y dos más la van a reemplazar, preciosura.

Regresando con la mujer del chicle y del cuchillo, esta, recita una de las frases que causa más miedo en la historia: "Corta una cabeza y dos más la reemplazarán". Al oír estas palabras asquerosas y al notar una jeringa que contenía un líquido amarillo que se dirigía a su cuello, nuestra dama favorita, se da cuenta de que HYDRA ha regresado por ella y la reclama como uno de sus esclavos.

Esto es muy similar a las drogas. Una vez que entras, te resultará dificilísimo salir ileso. Ni siquiera una vengadora podría librarse de una cosa como esta. Una situación grave de categoría mundial. ¡La asociación macabra e infernal que ha aterrorizado al mundo por muchísimos años.. Ha regresado para cobrar venganza; una batalla épica, está a punto de comenzar!

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