En la mañana de ese Sábado Sam estaba sentada en su cama acariciando la tapa del diario. Respiró profundo y se armó de valor para salir y hablar con su padre.

Daniel estaba sentado en la isla de la cocina bebiendo un té viendo a la pared, pensativo.
- Papá- le llamó Sam desde atrás de él con el diario en sus manos- ¿Puedo hablar contigo?
Su padre se volteó para verla y después lo que traía en sus manos, su rostro cambió a una expresión monótona, cambiando alternativamente su vista de su hija al diario que traía, su diario.
- ¿De dónde sacaste eso?- fue lo único que dijo señalando el diario

Sam se sentó enfrente de su padre, dejando el diario en la mesa.
- Yo... lo encontré en una caja cuando estaba ayudando a mamá a sacar sus cosas
Daniel abrió la boca para hablar, pero la verdad, no podía pensar en algo que decirle a su hija en ese momento.
- Lo leí- dijo Sam desviando un segundo la vista
- ¿Todo?
- Todo, papá

Ambos se quedaron viéndose en silencio.
- Quiero pensar que esto tiene que ver con que hubieses ido a Cobra Kai, ¿Cierto?
Sam solo asintió.
- Papá... ¿Qué pasó entre tú y Johnny?- preguntó de una vez por todas- escribiste que eran rivales, que te molestaba, como le ganaste en el torneo y en la última hoja...
- Sam yo...- la interrumpió, sin saber que decir- es algo complicado
- Por favor, papá, quiero saber- le dijo tratando de darle confianza para que le contara

Daniel se terminó su té y jugó con la taza mientras pensaba como contarle a Sam.
- Es momento...- pensó
- Lo que puse en el diario sí pasó- empezó- Johnny y sus amigos me molestaron porque había hablado con Ali, estuve con ella durante ese tiempo, pero cuando fue el torneo supe que lo nuestro no iba a funcionar. Fue después cuando empecé a hablar con Johnny, él me había felicitado por ganar el torneo y me pidió disculpas por lo idiota que había sido, yo lo perdoné. En ese momento las vacaciones de verano habían empezado y un día Johnny llamó a mi casa preguntándome si quería ir a jugar mini-golf con él

Daniel sonrió recordando como Johnny sonaba nervioso del otro lado de la línea.
- Desde ese momento nos empezamos a conocer más, nos volvimos amigos, y entonces un día que habíamos salido...
Recordó esa tarde en la playa, cuando Johnny le robó un beso.
- Me dijo que yo le gustaba y yo... le dije que también me gustaba

Sam se quedó sorprendida, ahora tenía sentido porque habían actuado así cuando se vieron ayer.
- No fue mucho después que empezamos una relación, casi todos los días salíamos, por lo que no tenía tiempo de escribir en mi diario
Ahora Sam entendía porque las últimas páginas estaban en blanco.
- Fue un día como cualquier otro, después de pasar la tarde con Johnny, que el Señor Miyagi me preguntó si quería ir a Okinawa esas últimas semanas que tenía de vacaciones con él, antes de que entrara a la universidad, yo le dije que sí al instante sin pensar en Johnny en ese momento. Al día siguiente le dije a Johnny que me iría al final de esa semana, él estaba feliz por mí, pero fue entonces que me preguntó si lo que teníamos seguiría...
Daniel se pasó su mano por su rostro, Sam le tomó su otra mano un momento, tratando de confortarlo.
- En ese momento ambos pensamos que lo mejor sería terminar... ambos iríamos a diferentes universidades y lo más probable es que lo nuestro no funcionará, por eso fue que terminamos antes de mi viaje a Okinawa

Se quedó en silencio un momento, recordando como había sentido que todo su mundo se había destruido ese día, desde entonces siempre se preguntaba, ¿Qué tal que sí hubiese funcionado?
Pero ya era demasiado tarde para pensar en cosas como esas.
- Fue un día antes de mi viaje que escribí al final del diario que creía que lo amaba, pero no lo creía, lo sabía- sacó una pequeña risa- uno pensaría que sería imposible pasar de odiar a alguien que te hizo el último año de preparatoria imposible a que con solo un verano lo terminarás amando- vió un segundo a su hija con una sonrisa melancólica- Johnny nos llevó al Señor Miyagi y a mí al aeropuerto al día siguiente. En las escaleras eléctricas, donde Johnny ya no podía pasar, me dijo que me amaba

Recordó ese momento, como Johnny le tomó sus mejillas dándole un casto y delicado beso, sin importarle quién los estuviera mirando, diciéndole "Te amo".
- Yo le dije que lo amaba también y nos despedimos

Recordó como antes de subir las escaleras lo abrazó fuertemente y le dio un último beso, subiendo a la escalera sin querer ver atrás, pues sabía que si lo hacía no tendría el coraje para irse.
- Cuando regrese él nunca me buscó, yo tampoco hice nada para contactarlo de nuevo, fui a la universidad, conocí a tu madre, te tuvimos y bueno ya no pensé en Johnny

Eso era una total mentira, pensaba en él todos los días, creía que esa había sido una de las principales causas de por qué su matrimonio con Amanda no había funcionado, todo el tiempo pensaba que si hubiese visto atrás una última vez, todo habría resultado diferente.

Sam se quedó en silencio viendo a su padre tan triste, jamás creyó que eso hubiese pasado entre él y Johnny. Ahora todo tenía sentido.
- Lo siento mucho, papá, por todo- dijo viendo el diario un segundo y luego a Daniel- jamás debí haber leído tu diario o haber buscado a Johnny, nunca creí que eso hubiese pasado entre ustedes dos- quería llorar por lo idiota que se sentía al haber hecho todo eso

Daniel le dedicó una sonrisa pequeña.
- No te preocupes- le dijo, con un tono calmado, para que Sam entendiera que no estaba enojado con ella- debí habertelo contado antes, me alegra que lo sepas ahora- dijo de cierta manera feliz de que su hija supiera esa parte de su vida que no había compartido con nadie más- aún puedes ir al dojo si quieres
- ¿Pero qué hay de Johnny?- le preguntó- ¿No te molesta?

Daniel solo levantó sus hombros, tratando de quitarle importancia, viendo a otro lado.
- Estoy seguro que se olvidó de lo que vivimos juntos, no creo que haya problema con que sigas yendo
Sam notó que su padre lo había dicho con tristeza, como deseando que lo que dijo no fuese cierto, deseando que Johnny aún recordará sobre lo que tuvieron.
Al final, Sam le agradeció a su padre por ser tan comprensivo con que siguiera yendo al dojo.
Volvió a su cuarto e iba a guardar de nuevo el diario, pero antes volvió a leer la última oración de éste.

"Creo que amo a Johnny Lawrence..."

Suspiró guardando el diario y tratando de procesar todo lo que le había contado su padre.

°°°

Al día siguiente, por la tarde, Miguel le había mandado un mensaje, diciéndole que debían de verse de inmediato porque Robby y él tenían algo importante que decirle, Sam le dijo que ella también tenía que decirles algo importante y le dijo a Miguel que se viesen en la pizzería a la que siempre iban después del entrenamiento.

Al llegar al lugar Sam buscó a sus amigos, los vio sentados en una mesa en una esquina del lugar. Sam los saludó y se sentó frente a ellos.
- ¡Sam! No creerás lo que me dijo mi papá...- dijo Robby apenas Sam se sentó
- No, ustedes no creerán lo que me dijo mi papá...
- Ellos salieron en la preparatoria- dijeron al unísono Robby y Sam

Los tres chicos se quedaron sorprendidos.
- ¿También te contó?- preguntó Sam después de unos segundos de silencio
- Sí, ayer en la mañana le pregunté que había pasado y me contó todo, se veía tan triste cuando lo hizo
- También mi papá se veía triste cuando me contó la historia- dijo sorprendida de que Johnny también le hubiese contado todo a Robby
- Después salí y le conté todo a Miguel- dijo viendo a su amigo un segundo
- Creímos que lo mejor era contarte y fue hoy que te mande mensaje para poder hablar- dijo Miguel

Los tres chicos suspiraron, viendo diferentes puntos del lugar mientras asimilaban todo lo que acababa de pasar.
- Esto es...- empezó Sam
- Demasiado- dijeron los tres al mismo tiempo

Después de unos minutos una mesera se acercó a su mesa preguntando que pedirían, los tres solo pidieron unas sodas, pues no tenían hambre.
- No creerán que aún tengan sentimientos por el otro, ¿O sí?- preguntó Miguel después de un rato de silencio
Sam y Robby se vieron y luego a Miguel para que les explicara lo que estaba pensando.
- Piénsenlo, ambos al verse,  definitivamente los dejo sorprendidos, después de tantos años sin hablar y de repente verse así... y como ayer les contaron sobre su relación y que vieron que ambos estaban tristes, como si se arrepintieran de algo...
- De separarse- dijo Robby entendiendo el punto de Miguel
- Y después ya no buscarse de nuevo- completó Sam

Sam sabía que no era algo en lo que se debía meter, que ya había causado suficientes problemas.
Pero ver a su padre con esa tristeza aún en su corazón, de no haber buscado al chico que alguna vez amó, tal vez que aún amaba, de verdad la había destrozado.

Pensó que la mejor solución sería hacer que ambos hablarán, así tal vez pudieran resolver sus asuntos pendientes.
Su mente empezó a formular un plan, era un poco arriesgado, pero bueno, ¿Qué no había sido arriesgado de todo ese asunto?
- Chicos, tengo un nuevo plan- dijo Sam decidida