30 | triste

.:. CHAPTER THIRTY .:.
( SAD )

LYRA PODÍA ESCUCHAR A HERMIONE PARLOTEAR SOBRE QUE HARRY HABÍA PODIDO CONSEGUIR EL RECUERDO, sobre los horrocruxes, y lo que le habia dicho Dumbledore.

Pero ella realmente no le estaba prestando atención porque no podia dejar de mirar a Harry, que estaba en unos de los sillones frente a ella, muy cómodamente con Romilda Vane y la chica no parecia querer perder la oportunidad, asi que estaba prácticamente tirada arriba de él.

-¿Nix me estas escuchando? -preguntó Hermione mirando en la misma dirección que la rubia- Oh, no le prestes atención esta siendo un estúpido, todos sabemos que el esta enamorado de ti.

-No parece -susurro sin despegar la vista de Harry que sonreía muy complacido por las caricias que estaba recibiendo de Romilda Vane.

-¿Estas bien? -preguntó de nuevo Hermione- ¿Quieres que salgamos a tomar aire?

-Estoy perfecta -mintió.

Merlín, ella hubiese preferido estar en el mismísimo infierno antes que ver a Harry asi, pero ella tenia su caracter y no iba salir corriendo de la sala común porqué Harry Potter habia decidido seguir su camino.

Ella era fuerte y ahora mismo era en lo unico que podia pensar.

Soy fuerte, se recordo cuando sintió que le dolia el pecho. Soy fuerte y estoy ayudando a mi familia, se recordo cuando sintió que las lágrimas amenazaban con salir.

Pero repetirlo una y otra vez no sirvió de nada cuando vio que Romilda y Harry habían comenzado a compartir saliva.

-Creo que si voy a tomar aire -informo tratando de que su voz saliera normal.

Lyra no se queria quedar ahi.

Ella era buena ¿verdad? no queria ver como la persona que amaba estaba con otra. ¡Por Merlín! Le dolia la garganta de retener el llanto. Ella era buena y no habia hecho nada malo para recibir eso ¿verdad?

La rubia se sentía enferma y tenia ganas de tirarse en su cama, abrazando a Apolo y no salir nunca más de allí. Lejos de Harry y su nueva acompañante.

¿Asi se sentía tener el corazón roto? Era una verdadera mierda ¿Acaso Harry desconocía que ella también tenia sentimientos?

La oijigris no camino mucho y se dejo caer junto a una columna.

Se sentia horrible y ella odiaba sentirse asi, fragil, Lyra odiaba depender asi de Harry, queria volver el tiempo atrás y rependerse ella misma por dejar que esto pasara.

Esta no era ella.

Lyra se recordaba a ella misma como una persona contenta a la que siempre ibas a encontrar sonriendo o usando su peculiar humor y su tacto.

La muerte de Sirus le habia dolido más de lo que admitía y ese sentimiento de odio hacia Bellatrix se habia extendido por todo su ser.

Quizas ella era el problema y Harry tenia razón, quizas ella se estaba aliando con los malos y Harry tenia que alejarla porque ya no era luz sino que oscuridad, y el chico ya no necesitaba más de eso.

Lyra solto un sollozo mientras abrazaba sus piernas.

No podia recordar la ultima vez que se habia sentido en un estado pleno de felicidad, o si podia pero no queria recordarlo porque el recuerdo implicaba a Sirius y eso la ponia aún más triste.

Eres muy valiente y fiel, le habian dicho. Pero nada de eso servía, no para ella, tampoco le habia funcionado a su padre. ¿De que servía ser fiel y valiente cuando el mundo a tu alrededor se desmorona? ¿De que servía seguir con vida pero no poder estar con las personas que más amaba?

Su madre había muerto, su padre también ¿Por que habia tenido que crecer sin saber lo que era recibir un abrazo de su madre?

La vida era tan injusta con ella.

Asi que se desmoronó, dejo caer sus barreras. Ella no era fuerte, solo intentaba aparentarlo, tampoco era valiente, ella no era nada.

Deseó con todo su ser poder estar en su casa, acompañada de su abuelo quien en ese momento le diria cosas lindas y la abrazaría, ella fingiria creerle y todo volveria a la normalidad.

Pero ya nada era normal, una guerra se estaba desantando afuera, personas morian, otras huían o se escondían; pero Lyra no sabia que hacer ¿que se suponía que debia hacer? ¿que haria un Gryffindor en un momento asi?

Ahi estaba el verdadero problema, ella siempre pensa en lo que debia hacer y no en lo que queria.

En ese instante, Lyra solamente queria que alguien la abrazara fuerte sin hacer preguntas. Solo un abrazo.

Y Merlín escucho sus súplicas, porque McGonagall la encontro al borde de una crisis existencial y la ayudo a levantarse del suelo.

-¿Lyra que te pasa? -preguntó la mujer preocupada.

-¿La puedo abrazar, Minnie? -preguntó la rubia ahogando un sollozo.

McGonagall no contestó pero la abrazo fuertemente mientras le hacía caricias en el cabello. Minerva tenia que admitir que Lyra Black muchas veces le ponia los nervios de punta, pero prefería mil veces verla jugando bromas que verla llorando.

La mujer no dijo nada y solo la abrazo. Tuvo una vaga idea sobre porque Lyra estaba llorando. Ella la habia visto en compañía de Draco Malfoy y tenías que ser idota para no notar el aislamiento que se había formado en el grupo de amigos.

Lyra no recordaba con exactitud cuando tiempo estuvo entre los brazos de la profesora, pero su garganta le dolia y sentia que ya no podia llorar más porque se iba a quedar sin lágrimas.

Tampoco podia recordar cuando McGonagall la llevo hasta su despacho.

-Escuchame, Lyra -comenzó la mujer mientras le acomodaba el cabello- Perdi a mi marido y dejame decirte que se muy bien lo que estas sufriendo, pero el tiempo pasa y los recuerdos dolorosos solo se convierten en recuerdos. No puedes dejarte caer por alguien, siempre hay que salir adelante.

-¿Y si no quiero? -preguntó la rubia sorbiendo su nariz.

-Te voy a obligar, Lyra Black -dijo haciendo reir a la chica.

La ojigris se seco las lagrimas y tomo el pañuelo que McGonagall le estaba ofreciendo.

-Nunca me contaste de tu esposo.

-Oh, veo que te interesa mi vida amorosa -se rio McGonagall, feliz de notar que Lyra habia dejado las lagrimas a un lado y ahora se encontraba interesada mirandola.

-Si, mucho.

-Bien, no voy a entrar en detalles porque no me parece apropiado. Pero cuando era joven conocí a un muchacho muggle que me pidio matrimonio, claramente acepte ya que yo estaba muy enamorada, pero luego me di cuenta que no iba apoder vivir ocultandole que era bruja, asi que luego lo rechace.

-Oh por Dumbledore -chillo la rubia- Usted es una rompe corazones.

-Cuando comencé a trabajar en Hogwarts aún seguia reuniendome con mi antiguo jefe, eramos amigos, pero un dia me sorprendió y me pidió matrimonio -siguió McGonagall- Me nege, aún me gustaba aquel muggle, pero Elphinstone era muy insistente, siguió proponiendome casamiento hasta que un día lo acepte.

-¿Y como fue? -preguntó la rubia sintiendose triste de repente.

Lyra habia estado dispuesta a dejar su sueño atrás para pasar el resto de su vida junto a Harry, pero ahora ya nada tenia sentido.

-Dije que nada de detalles.

-Por favor Minne, hágalo por mi. ¿ O me quiere ver llorar de nuevo?

-Paso aqui, en los terrenos de Hogwarts. Un día me vino a visar a mi trabajo y me lo pidio cerca del lago, no me puede negar. Luego ambos compramos una casa en Hogsmeade para que a mi me sea todo más comodo, él era muy considerado.

-Ya veo... -comento la rubia- ¿Entonces no dejaste tu trabajo por estar con él?

-Por supuesto que no. Ni siquiera cambie mi apellido cuando me case.

-Oh, a mi también me gusta hacer eso, pero no creo casarme nunca.

-Espero que te sirva mi consejo -comenzó McGonagall al notar el cambio de humor en la chica- A veces es mejor dejar ir al amor de tu vida para encontrarse con uno mejor, el amor propio. Se paciente, Lyra, los corazones se rompen y eventualmente se reparan, todo va a estar bien y vas a ver como ya todo va a dejar de doler. Tómate tu tiempo, alguien mucho mejor va a venir.

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