-Estas seguro que no quieres a Luke aquí?- pregunto Joffrey recostado sobre el trono de dragón a mi lado, donde estaba sentado.

-No... él cuidara a los niños por ahora, ambos estamos de acuerdo de que alterara a Aemond si digo lo que debo decir con él aquí.

-Creo que le dan mucha importancia a Aemond.

-Sé que no conviviste con él, pero cree en nosotros, es el único al que debemos mantener bajo control.

-Que tenga la dragona más vieja no lo hace peligroso, es grande y seguramente lenta...

-Vhegar... es parte del problema, primero no ignores que esa dragona es la más experimentada en guerra y segundo Aemond tiene una obsesión con vengarse de Luke y ser fiel a su madre... y ella, no es la mujer más maternal que conocerás, tiene en la mira el trono.

-Crees que nos traicionara? No hay un margen de error... donde nos deje en paz?

-No lo ha hecho desde que nací, no creo que lo haga ahora y si lo hace, Aemond es de sus mejores peones, es buen guerrero, tiene un buen dragón... y creo que tiene un buen panorama de estrategia... pero por ahora, solo debemos evitar un conflicto y Luke esta seguro que si viene a esto, se sentirá ofendido y no necesitamos otro enfrentamiento.

-Quitarle el otro ojo sería una ventaja- se rio.

-No empezaremos un enfrentamiento Joff, solo debemos de mantenerlos aquí hasta que regresen... o hasta que no tengamos opción.

-Están... muy nerviosos- esta vez lo vi dudar- por que debemos temer... tenemos más dragones.

-Sabes lo que es una guerra con dragones Joffrey?solo en Valyria pudo pasar algo así, aquí no hubo ese tipo de enfrentamiento y aun así, a día de hoy hay consecuencias de esos ataques... el mundo cambiará si eso sucede y aunque quiera asegurarte una victoria, no hay variables suficientes para hacerlo.

-Estaremos juntos Jace, eso nos hara ganar.

Joffrey no tiene miedo, normalmente decimos que es el más parecido a Daemon, pero Daemon tiene la experiencia a su favor, ya no busca la guerra de primera mano, pero no tiene miedo a ella, algo que Joff todavía no tiene... y me preocupa. Estoy del lado de mi madre en esto, "no daremos el primer golpe, pero no temeremos la batalla una vez dentro"

Mamá ha hecho un gran trabajo haciendo que Daemon no quiera dar el primer golpe, yo haré lo posible de este lado...

-Evitemoslo si es posible...

-Lo prometí y lo haré, pero quiero que sepas que aun en batalla, me tienes a tu lado... a ambos.

-Lo sé- suspire y no tuve más tiempo, porque la llegada de nuestros tíos fue anunciada.

-Es muy extraño que nuestra hermana nos llame a una audiencia, acaso hicimos algo que...- el primero en entrar fue Aegon con su altanería y sonrisa por delante.

Convivir con él me ha enseñado que no es un completo idiota, tiene una buena máscara de imbécil y bufón puesta, pero sus nervios están a flor de piel, hasta que me vio en el trono.

-Bienvenidos tíos- les di un pequeño saludo a los cuatro.

-Jaecerys?- pregunto Daeron.

-Si, tenia un aviso que darles, por eso el lugar y los protocolos, no es nada grave.- trate de explicar para que estuvieran más relajados.

-Aun así, es un poco extremo este lugar... no es así?- pregunto Aegon.

-Es un aviso que debo dar como actual regente de Dragonstone, en ausencia de mi madre...

Note en sus expresiones que todos empezaban a entender por que la importancia del lugar, ya que mi madre no estaba y yo soy su heredero... paso a ser el regente del lugar y por lo tanto tengo mayor poder que ellos aquí.

-Cuanto tiempo estará Rhaenyra fuera?- pregunto Aemond primero.

-Aun no lo decide, primero quiere conocer el estado del lugar antes de hacérmelo saber.

-Entonces podemos regresar a King's landing, después de todo ella es el propósito de este absurdo viaje.

Aunque Aemond se escuchaba seguro de sus palabras, sus hermanos no lo apoyaron, los tres guardaron silencio ante esa perspectiva.

-Pueden quedarse el tiempo que deseen y si es hasta que mi madre regrese, estoy seguro de que se alegrará de aun tenerlos aqui- no conteste explicitamente a la pregunta, por que no quería darle razones para irse.

-Eso es muy amable Jace, espero que nuestra estancia siga siendo buena para ambos lados- contesto Helaena tranquilamente, dándole un codazo discreto a Aemond.

-Claro que si, no hay ningún cambio en la convivencia, nada más había que informar este cambio por la clara ausencia que notarían.

-Si tanto le importa a Rhaenyra esto, por que se fue?- se volvió a quejar Aemond, pero esta vez note curiosidad en todos.

-Había un asunto que arreglar con los Arryn, un asunto con la sucesión- explique tranquilo sin entrar en detalles.

Mi mamá había dejado esta excusa, que aunque fuera mentira de sus razón, era real, recientemente ha habido un complicación al morir el sucesor de Jeyne Arryn, servía como cuartada perfecta.

-Los Arryn? -pregunto Daeron.

-Nuestra madre es hija de una Arryn... el tema la involucra- intervino Joffrey.

-Que tontería... otro bastardo terminara teniendo poder- se quejo Aemond para ellos, pero pude escucharlo claramente.

-Ya que les he comunicado esto, pueden seguir con sus actividades, ya que entiendo... quieren quedarse.

-Si, lo haremos...- contesto de inmediato Aegon.

-No pienso seguir ninguna orden tuya, lo dejo claro desde ahora- se quejo Aemond y salió de ahí.

-No te preocupes por él... no se irá de Dragonstone- Haelena le quito importancia a las duras palabras de su hermano- y tampoco te atacara.

-No causaremos problemas- insistió Daeron.

-Talvez un poco de alcohol ayudaría a....- empezó Aegon.

-No... tus prohibiciones y actividades siguen igual- sonreí ante su dramatismo.

-También quieres torturarme? Pensé que ahora podría ser tu tío favorito.

-No me convenceras Aegon...

-Que cruel...- hizo un sollozo fingido y solo rodé los ojos por sus tonterías, por lo menos volvía a ser él.

-Entonces yo también sigo a tu cuidado?- pregunto Daeron a Joffrey.

-Supongo...- Joffrey parecía cansado por esa perspectiva y me burle un poco de él, por lo menos solo tenía al hermano parlanchin.

-Ve con él Joff, por hoy acabamos aqui- le di un pequeño empujón, pero me volteó a ver como si lo hubiera apuñalado por la espalda.

-Pero...

-En serio? Entonces podemos ir a volar?- se entusiasmo Daeron.

-Traidor- me susurro y tuvo que dejarse arrastrar por nuestro tío, talvez me arrepienta después, Joffrey se vengaria de esto.

-Creo que ninguno se irá, pero debes saber que nuestra madre está más pendiente de los movimientos de tu madre de lo que crees.- se desánimo Helaena- cuando ella se entere, insistirá en nuestro regreso.

-Mientras el abuelo esté ahí, no puede obligarlos.- asegure.

-Nuestro padre... no es precisamente un buen estandarte en la familia- renegó Aegon- nuestra madre encontrara la manera y con la salud que actualmente tiene...

-Que quieres decir? Daemon mando curanderos, debería estar estable.

-No es lo que nuestra madre asegura... ella no ve más de unas cuantas lunas- aseguro Haelena.

Unas lunas? Eso era demasiado poco, no era suficiente... pero si mi madre se fue, es porque estaba segura del tiempo verdad? No nos dejaría con una problema tan grande, ella...

Y si ella no sabía? Y si las cartas aun no llegan? O han sido interferidas? Acaso ya hay un complot en nuestra contra? Que tanto de King's Landing esta a nuestro favor?

Debo hacer algo? Debo prevenir un ataque? Reforzar la seguridad? No... primero mis hermanos, talvez los Velaryon? No... ellos no deben tener más poder sobre nosotros, si alguien ataca, yo debo ser la cabeza de esto... pero...

-Jaecerys!- no me había dado cuenta que Aegon estaba tan cerca, me tenía tomado por los hombros y se veía preocupado.

-Debes respirar- escuche a lo lejos a Helaena.

Respirar... era un ataque de pánico.

-Luke... necesito a Lucerys- me costo hablar por la falta de aire.

Me levante con dificultad y sentí que me querían retener de nuevo en el trono, pero lo aparte de inmediato, necesitaba irme... buscar a Luke.

-Jace, tienes que respirar- escuche a Aegon.

Lo ignore, me volví a poner de pie y esta vez avance un poco, Helaena fue hacia mi y trato de ser mi apoyo, Aegon no tardo en estar a mi lado, pero sin tocarme todavía.

-Donde esta Lucerys?- pregunto Helaena.

-En la guardería... con los niños...

-Ve por él Aegon- pidió ella de nuevo.

-Si... si... yo voy- Aegon estaba asustado, su aroma era potente y aun en medio de mi bruma podía olerlo.

No tardo en irse y me quede junto a Helaena, que a sus posibilidades y mis negativas, me ayudaba a avanzar de manera lenta, pero sin dejarme caer.

-Lo siento Jace, no quería que reaccionaras así.

-No es tu culpa, yo no... no esperaba que el abuelo es estuviera tan grave.

-Aun hay tiempo, no debí...

-Hiciste lo correcto, no te mortifiques...

-Estaremos bien, no pensemos más en eso.

-Jace!- Luke llego a mi y por fin pude respirar.

Me aferre a su cuerpo y respire su aroma, el aroma de gardenias y brisa de mar... era totalmente Luke y me deje abrazar y reconfortar por él. Me abrazaba y acariciaba mi espalda, de forma sutil tocaba mi cuello para relajarme y que los otros dos no se dieran cuenta de la acción, muy omega, que aún debía ocultar.

Estuvimos así algunos minutos, demasiado tiempo quizá, nadie se movió y tampoco nadie pregunto nada, pero cuando pude abrir los ojos y mi respiración se había regulado, al primero que vi fue a Aegon.

Él mantenía su distancia, mordía sus labios y no apartaba la mirada de Lucerys, aunque parecía no estar viéndolo realmente, su aroma aún estaba agrio... el bonito olor a vainilla no estaba... pero tampoco olía rancio como cuando esta ebrio, estaba preocupado o nervioso? Ansioso...

-Estas bien Jace?- Luke me dio un pequeño apretón y regrese a él.

-Si... ya estoy mejor- susurre. Me puse mejor en pie, pero sin soltarlo- gracias.

-Siempre...- junto nuestras frentes y volví a cerrar los ojos- que sucedió?

-Surgió un problema que no habíamos contemplado.

-Es grave?

-Puede que debamos reforzar las guardias... y estar atento a ataques.

-Tan pronto?

-No... solo como prevención.

Esta vez me separe y recupere mi postura, Helaena se acerco y me dio un rápido abrazo antes de volver a poner distancia.

-Lo lamento, no sé que sucedió... pero creo que fue mi culpa.

-No es así, es un problema mio, de cualquier forma, gracias por la ayuda- voltee a ver a Aegon y esta vez toda su atención estaba sobre mi- también a ti, gracias por ir por Luke.

-Si... no... yo, siento no haber hecho más.

-No tenias por que saberlo, no deberías siquiera haberlo visto.

-Yo...- quiso discutir, note su ceño fruncido, pero se detuvo- aun sin saberlo, quería ayudarte y yo... no sabia, si me dijeras...

Luke entendió y nos dio espacio, se fue junto a Helaena y tuve que suspirar para poder hablar de esto.

-Me acompañas a los jardines de Aegon?

-Eh? Ah... si- estaba distraído, pero se pudo en marcha a mi lado.

-No tienes que sentirte responsable por mi, solo por que estamos conviviendo ahora.

-No es que me sienta responsable- me detuvo- ese ataque fue feo... sabes? No podías respirar y... me has ayudado, pero me sentí inútil ahora que por primera vez necesitabas ayuda.

-No es algo que quería que supieras- me avergonzó sus palabras, parecía sincero- la verdad, no es algo que quisiera que nadie supiera.

-Lucerys parece acostumbrado... y si no mal recuerdo, paso algo parecido en el burdel.

-Si... él y mamá me han ayudado a lidiar con esto, me avergüenza un poco que los demás lo vean, por que... se supone que soy un Targeryan y, estamos hechos para pelear... sufrir esto después de ir solo a una guerra, no es... muy heroico o digno de recordar.

-Oye... soy mayor que tu y nunca he estado en una batalla, tu... eres mucho mejor caballero y Targeryan qué yo en ese caso.

-No es que desmerite a nadie... solo, es vergonzoso que me pasará esto. Los ataques de pánico quiero decir...

-No ha habido grandes guerras o batallas en mucho tiempo, el rey... en toda su vida no ha ido a ninguna, no es vergonzoso, ni siquiera sabemos como actuariamos los demás en ese caso, creo estas mejor de lo que yo lo estaría...

Llegamos a los jardines y me condujo hasta un árbol bastante grande y nos sentamos bajo su sombra, pensé un poco antes de volver a hablar.

-No debí ir a esa batalla, mamá no estaba segura de dejarme ir... Daemon tampoco quería llevarme, pero no me iba a detener, aprendí mucho y creo que fui un gran apoyo... pero después de un tiempo y algunos enfrentamientos directos... empecé a tener los ataques y... bueno, regrese antes de tiempo de los Peldaños de Piedra.

-No sabia que habías ido, mi abuelo dijo que... era problema de los Velaryon, que ellos debían resolverlo.

-Si, no recibieron ayuda, por eso los fuimos a apoyar nosotros...

-Debieron de mandar ayuda.

-Bueno, las cosas ya pasaron... y ahora todos lidiamos con eso y fue una victoria, así que hubo cosas buenas.

-Pero tu...

-Lo que viste es lo más grave que me sucede, estaré bien... el maestre dice que surgieron por no estar mentalmente preparado para ver la batalla, pero que el tiempo y aceptar los detonantes me haga mejorar, es eso o volver a pelear y enfrentar mis miedos- reí sin gracia... era irónico.

-Esperemos no tener que llegar a eso, una guerra.

-Yo también... pero si sucede, creo que estaré listo.

-Las palizas que me has dado... lo garantizan- sonreí al notar su intento de subirme el ánimo.

-Talvez necesites algunas más para estar seguros.

-Eres cruel... sabes cuanto me he esforzado?

-No lo suficiente...

-Me estas retando?

-Talvez... ya veremos.

-Ya veras, te daré lucha en poco tiempo...

-Si, claro... podría considerar apostar por eso.

-Te arrepentirás...