Capítulo XXIV ● Rhaenyra
《....》- Alto Valyrio
______________________________
-Estas bien? El traje no te lastima?- pregunto Daemon con décima vez.
-No esposo, estoy bien...- rodando los ojos cansada- Daemon, solo vamos de viaje, no me pasará nada, Syrax me llevara con bien.
-Sé que lo hará, pero es un viaje largo y estas embarazada y... y no has hecho esto antes, solo quiero estar seguro- supiro- sabes que confío en ti... pero el embarazo...- frunció el ceño.
-Pensé que era yo la que tenia miedo a estas cosas?- lo interrogue con interés, en mis dos anteriores embarazos, se ha preocupado por mi sin duda, pero no al estado de estar tan nervioso.
-Nunca se puede estar tan seguro y ya sabes... todos tus embarazos los has pasado en casa, siendo cuidada, pero esto es diferente.
-Aunque no son nuestros terrenos, son nuestros aliados y vamos a buen tiempo, me han revisado y estoy en perfectas condiciones para ir y regresar...
-Bien, solo quería estar seguro- frunció el ceño- creo que estoy nervioso porque... no conozco este lugar, aunque somos aliados, no sé que esperar y tu... estas en un estado vulnerable, sabes que te protegeré, pero... me pone un poco nervioso todo esté asunto.
-Pensé que estábamos de acuerdo en que este es un buen momento para el viaje?
-Lo es... solo que... supongo que es mi instinto, estas son nuestras tierras y nuestra gente, no siento ninguna amenaza y sé que estas segura... siento que te pongo en peligro, no yo... más bien mi parte alpha, no sé, es complicado... nunca me había pasado.
-Solo estas siendo un alpha muy protector- sonreí al entender el problema- siempre serás el alpha de la manada y ahora debes separarte de los niños, además de llevar a tu esposa embarazada a un lugar que no conoces del todo... y debes asegurarte de que todo esté en orden, porque tus nervios están por todas partes.
-Supongo, la situación ahora no está bajo mi control y... creo que solo tengo que hacerme a la idea.
-Ve esto como tus viejas aventuras- le abrace y deje caer mi rostro sobre su pecho, cerca de su cuello para poder olerlo y frotar mi propio aroma en él- cuando eramos más jóvenes e hicimos promesas de viajar por todo el mundo y conocer todo tipo de gente y costumbres...
-Eran buenos sueños- me regreso el abrazo y ronroneo- Yo... despejare mi mente en lo que me despido de los niños.
-Esta bien, les haré el anuncio a mis hermanos y te alcanzaré después.
-Dales una advertencia de mi parte- recupero si sonrisa altanera y me dejó ir.
-Déjalos en paz...
-Lo prometo! Si regresamos y uno de nuestros hijos está herido... no respondo- amenazó y se fue.
Estaba segura de que cumpliría su amenaza y por el bien de todos, espero que cumplan... es vez una herida no será tan fácil de superar, creo que la última aun no ha sido superada.
Dioses, espero estar tomando la decisión correcta.
Suspire y llegue al comedor, donde estaban mis cuatro medios hermanos. Hoy estaban solos, mis hijos desayunaron conmigo en mi solar, hoy era una despedida familiar... dar las últimas instrucciones y repetirles los cuidados que deben tener para con Baelon y Viserys, con ellos yo ya estaba segura que cumplí con mi parte de avisos, pero ahora venía algo más complicado.
Guardar el secreto de nuestra partida no fue fácil, pero ninguno de ellos pregunto, así que no era necesario mencionar nada... hasta ahora, que sería muy evidente la partida y por otra parte, no podía dejar todo a la deriva y esperar que los niños los mantengan al margen.
-Buenos días- saludé y me senté en mi lugar.
-Buenos dias- saludaron.
Habían terminado sus alimentos, supongo que si hubiera tardado un poco más, no los hubiera alcanzado y esto se alargaria más, pero suerte la mía.
-Debo darles un anuncio- los cuatro me prestaron atención- ha habido unas circunstancias importantes que requieren mi atención, y estaré partiendo hoy mismo a mi destino para poder atenderlos.
-Vas al Norte?- pregunto Aemond. Supongo que era esperado, él es el más informado y quien más atento ha estado al movimiento en la fortaleza, además de su interacción con Luke.
-Así es...- no proporcione más información, no necesitaba que Alicent supiera más de lo debido.
-Por cuanto te iras? El Norte no es un viaje rápido- pregunto Daeron.
-Espero no más de una luna, dos si acaso... este bebé debe nacer en casa- toque mi vientre para darme más confianza.
-Y nos dejaras quedarnos?- note la desesperación en la mirada de Aegon, pero su cuerpo demostraba más nerviosismo qué esperanza.
-Claro, ustedes son bienvenidos aquí y yo fui quien los invito, no tienen ningún motivo para irse.
-Estamos aquí con la promesa de aprender nuestras tradiciones como Targaryen, pero eso ha sido poco... y muy nulo de tu parte Rhaenyra- vaya, definitivamente tenía algo de Daemon dentro de él, pero un poco tonto al hacer estas confrontaciones en este lugar.
-Has aprendido, creo que todos- respondí con tranquilidad- Acaso no has buscado enseñanzas en la biblioteca? Y de voz de mi hijo Lucerys? O Aegon no ha aprendido a manejar su vida? Apartado del alcohol, volviendo a la espada, a ser un jinete de dragón y aprendiendo Valyrio? Heleana ha recolectado con Dreamfyre y los jardines de Aegon le han dado consuelo... creo que quien más podría reclamar sobre este tema es Daeron, pero solo por su tardía llegada y aun así, Joffrey con gusto será su guía, alguna queja con ello... Aemond?
Su rostro iba decayendo con cada afirmación de mi parte, si bien entendía que Aemond se aislada, no podría decir que no estuviera aprendiendo algo de este lugar, lamentablemente nadie esperaba el vinculo que formó con Lucerys y se ha vuelto parte de su día a día, pensé que eso era suficiente para distraerlo, pero es necio y leal... aun debemos cuidarnos de él.
-Yo estoy bien con ese trato...- intervino Daeron, al no ver más respuesta de nadie- agradezco seguir viviendo aquí, aun con tu ausencia.
-No hay nada de que agradecer, sigue siendo nuestra casa ancestral, pero espero respeto de la misma manera, esta casa le pertenece a mi heredero, por lo tanto exijo se le de ese trato a Jacaerys en mi ausencia.
-Así será hermana- acepto Helaena, su trato fue más simple, parecía hasta tranquila con este acuerdo.
-Aun será mi niñera?- pregunto Aegon, aun nervioso, pero ya no tan tenso como al inicio.
-Seguirá siendo tu compañía, pero él debe ocuparse de mis deberes, talvez disminuya su tiempo juntos, amenos que quieras acompañarlo, en ese caso nada será diferente.
-Bien, espero tu viaje sea agradable- lo acepte como buenos deseos de su parte, ahora solo faltaba Aemond.
-Si quisiera irme, me lo impedirías?- insistió.
-No, pero tampoco podrás regresar...- frunci el ceño- Jace tiene tosa la autoridad para tomar decisiones de combate si te siente como una amenaza.
-Eso es un nivel muy alto de responsabilidad.
-Tengo plena confianza en él y si su decisión es atacarte, lo apoyare y respaldare en dado caso.
-Y si me quedo? Será lo mismo?
-Atacarás a alguno de mis hijos?
-En defensa propia? Si...
-Ellos también.
-Bien...- gruño.
-Bien...- concluí.
-Me voy a quedar- contesto una vez más.
-Espero que tu comportamiento siga siendo acorde a lo que he visto esta última luna...
-Dependerá del trato de mis sobrinos.
-Un trato justo, igual que siempre.
-Eso lo dudo- eso lo susurro y no iba a contestar a algo que no iba del todo dirigido a mi.
-Reitero, mis hijos están para ayudarlos, pero no son menos que ustedes, ellos tienen mayor estatus aquí, por lo que príncipes o no, si hay un daño... o un ataque...- no quise terminar la frase, pero deje que ellos asumieran el riesgo.
-Nos comportarnos Rhaenyra- acepto Aegon por todos y por fin pude respirar un poco más tranquila.
-Aunque haya dicho estas palabras, de corazón espero que puedan disfrutar estar aquí, no lo he dicho mucho, pero no creo que sean los malos de la historia y me agradaría que regresando, podamos convivir más.
-Sería agradable... -sonrió Helaena- yo también lo espero.
-Gracias...- le sonreí de vuelta.
No hubo más participación por parte de los chicos, pero todos se despidieron de buena manera, antes de salir del comedor, me detuve y recordé lo que dijo mi esposo.
-Daemon dijo que les advirtiera, supongo que iba implícito en mis palabras, pero él es menos paciente que yo...- y con eso salí del lugar.
Espero que eso sea suficiente para que no se les ocurra una idea estúpida como querer conquistar Dragonstone en mi ausencia o algo así...
Retome mi camino al pozo de dragón, donde ya me esperaba mi familia. Joffrey cargaba a Viserys y Luke a Baelon, Daemon terminaba de decirle algunas palabras a Jace cuando todos notaron mi presencia y vinieron a mi.
-Madre- susurro Jace y lo tomo de sus mejillas para acercarlo y juntar nuestras frentes.
-Es tu momento cariño... Dragonstone está bajo tu cargo, no lo olvides... no te doblegues...
-Somos dragones- completo la frase y lo sentí tratar de absorber mi aroma antes de separarse- Los cuidare- dijo señalando a sus hermanos.
-Cuídate a ti también Jace- bese su mejilla y pase al siguiente, Daemon tomo a Baelon y dejo a Luke libre- mi niño, dejo a los más pequeños bajo tu cargo.
-Estaré ahí para ellos mamá- me abrazo.
-Aemond esta tenso, no lo pierdas de vista...- susurre y bese sus risos, Luke era por quien más temía, pero rogaba por estar equivocada.
-No dejaré que nos dañe...-aseguro.
-Recuerda que no por ser omega, le da ventaja... Daemon te ha entrenado, úsalo...
-Solo en defensa propia...
-Ese es mi chico- lo abrace una vez más y fui con Joffrey- mi pequeño caballero, eres los ojos y oídos de tus hermanos, pero tu seguridad es primero, no te metas en problemas.
-Mantendré las cosas en orden- su postura era más recta de lo normal, y aunque llevaba a Viserys no flanqueo.
-Cuídate mucho Joff, en tus viajes vuela alto y te cuidado con los demás dragones, Tyraxes es el más pequeño por ahora.
-Solo hasta que Baelon pueda volar.
-Falta mucho para eso- bese su frente y me despedi de Viserys también.
Me acerque a Daemon, que también se despedía de Baelon, oliendolo un poco antes de dejarlo en brazos de Luke. Les dio un último mensaje a Jace y Luke, que no alcance a escuchar y regreso a mi.
-Lista?- me pregunto con su sonrisa confiada, parece que sus preocupaciones estaban olvidadas por el momento.
-Tanto como puedo estarlo- asintió y me ayudo a subir en Syrax antes de retirarse hacia Caraxes- 《Avy jorrāelan, ūndegon ao aderī》(Los amo, nos vemos pronto)
-《ȳdra daor qilōni ao issi》-se despidió Daemon y partimos. (No olviden quienes son)
Primero una parada corta a Marcaderiva y por fin... a el Norte, que los Dioses protejan a mis hijos y nos cuiden en este viaje... porque esta es mi primera vez en ambas cosas.
Un viaje tan largo y separándome de mis hijos.
-Ellos estarán bien!- grito Daemon, que voló cerca y rodeo juguetonamente a Syrax con Caraxes.
-Confío en que así sea!
-Son nuestros hijos! Lo harán...-sonrió y esta vez le seguí el juego en el vuelo. De nada servía preocuparme ahora, solo debo confiar...
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top