Capítulo XVIII ● Aemond
-Entonces...- escuche la duda en la voz de Daeron.
-Supongo que, ya que estamos los cuatro deberíamos hablar de que deberíamos hacer a partir de ahora.- trate de llevar el liderazgo de nuevo.
-Ni siquiera se que esta pasando, quisiera primero una explicación del por qué estamos aquí, de por qué estuve involucrado en esto y por qué hay un plan para el futuro?- se quejo Daeron, aun a la defensiva.
Desde que supe de su llegada, sabía que debíamos juntarnos, pero no es que lo conozca para poder saber sus intenciones. Hace mucho no nos vemos, la junta ayudaría a eso... pero de nuevo, que debo decirle a él, respecto a todo esto?
-No le hagas caso Daeron, solo esta paranoico- se quejo Aegon. Me costo traerlo aquí, su alcoholismo había bajado, su enfermedad también, pero los entrenamientos aún lo cansaban, no quería ni pararse de la cama.
-Mientras menos te quejes, podrás regresar más rápido a tu cama.
-No dejaré que lo manipules, ya te fije que olvides lo que nuestra madre quiere, es irracional.
-Tu eres el único irracional, estamos haciendo esto por ti!
-Nunca me han preguntado qué es lo que yo quiero!
-Porque cada cosa que dices es una vergüenza!- su mirada se hizo más dura, pero no me contesto, solo paso a Daeron.
-Si estas aquí disfruta, probablemente cuando nos obliguen a regresar no volveremos a tener esta libertad- suspiro- no estas obligado a nada, Rhaenyra nos invito a conocer nuestras costumbres Valyrias y eso es todo lo que nos pidió, el rey estuvo de acuerdo aunque nuestra madre se quiso negar, así que a partir de ahí, haz lo que creas mejor para ti.
-Aegon!- me queje.
Daeron no contesto, pero me observaba con precaución, no hubo más respuesta de mi parte, tenía que pensar mejor mis palabras, así que al final su atención cayó en Helaena.
-Tu que piensas hermana?
-Debes aprovechar el tiempo aquí, Rhaenyra nos dio una invitación... y cuando las torres se vuelvan a mover, partiremos.
-Así que estas del lado de Aegon?-pregunto de nuevo.
-Más o menos...
-Se están comportando como niños, nuestra madre nos dio una misión.
-No le vas a probar nada haciendo esto Aemond, solo... déjalo ir por un tiempo.
-Hago esto por ti! Por defender tu derecho, igual que ella.
-No hay ningún derecho, sabes que Rhaenyra es a la única que nuestro padre reconoce como Heredera.
-Te reconocería, si te comportarás como tal.
-Y que has logrado con eso? No eres tu el hijo perfecto? Bueno con la espada, con los libros, el valiryo o los dragones?
-No soy... el primer hijo- me mordí la lengua al reconocerlo.
-Solo te mientes a ti mismo, decides creer en nuestra madre... que no ha hecho pensar que Rhaenyra nos matará cuando quiera, pero aquí estamos... bajo su cuidado y sin amenazas.
-Por que sería un riesgo matarnos ahora.
-Eres un terco- gruño y se cruzo de brazos.
-Deberías pensarlo Aemond- hablo Helaena- de verdad quieres solo hacer esto?
-A que te refieres?
-Bueno... puedes no vigilarnos como madre pidió, y explorar otras cosas...
-Como que?
-Que tal al omega que entro en celo junto a ti?- un escalofrío entero me recorrió el cuerpo.
-Tienes un omega?- pregunto inmediatamente Daeron.
-No!- me negué. No pensaba hablar de esto, era un tema olvidado, yo no...
-En serio? Ignoraremos el gran tema?- insistió Aegon.
-Yo también prefiero hablar de Lucerys- apoyo Helaena.
-Ustedes son... no paso nada, mi celo se adelanto, coincidió y eso es todo.
-Lucerys? El hijo de Rhaenyra?- volvió a preguntar Daeron- Me perdí de muchas cosas verdad?
-No de tantas, esta es la más importante- se burlo Aegon.
-No pienso discutir esto- los detuve- solo recuerden que estamos aquí para investigar a Rhaenyra, deben escribir cartas a madre.
-Por qué haríamos eso? Nos invitaron a Dragonstone, no quiero que me echen tan pronto- se opuso Daeron.
-Solo Aemond lo hace, no tienes que escribir si no quieres- le sugirió Helaena- y tu, hermano... deberías escucharnos, disfruta este tiempo. Descubre que te gusta hacer.
-Yo se lo que quiero hacer.
-Ser un idiota de la espada y seguir a todos como un perro?- se burlo Aegon.
-Eres muy bueno en esas cosas, pero puedes ver más... Lucerys es muy bueno con la historia de Valirya y con el idioma... puedes volar más tiempo con Vhagar, quizá hasta hablar con Rhaenyra...
-Eso no nos beneficia en nada.
-Nadie te esta pidiendo que hagas eso, más que nuestra madre... pero te recuerdo una vez más... ella no está aquí- refutó Aegon.
Busque ayuda en mis otros hermanos, pero hasta Daeron parecía interesado en lo que Aegon decía. Por qué ninguno veía el inminente peligro, holgazanear y divagar no ayuda en nada, nos pone en riesgo... vulnerables, pero no puedo hacer nada, ellos tomaron su decisión.
Talvez yo pueda seguir enviando cartas... pero que puedo decir? Mi mérito y reconocimiento vendrían si los demás envían cartas, pero yo solo... no soy siquiera felicitado y tampoco me dan otro tipo de trabajo, todo lo que informo no importa, porque Aegon no es quien lo hace o actúa...
Yo solo quede en un limbo entre ambos.
-Hagan lo que quieran...- termine la platica y abandone la habitación.
No quería seguir escuchando sobre el incidente con mi celo y ellos tampoco escucharían mis peticiones, necesitaba estar solo... pensar un poco en cual es mi siguiente moviendo. Qué debo hacer ahora? No cuento con su apoyo y yo solo no cuento con nada...
Suspire derrotado y fui a mis aposentos. No tenía sueño, pero tampoco tenía humor para convivir con alguien más. Iba a salir al balcón, pero la tormenta empezaba a intensificarse, así que me quedé dentro, viendo el agua caer.
Yo... ciertamente sé mis habilidades, sé en lo que soy bueno y donde no, pero por muy bueno que sea peleando o investigando, no puedo manejarlos solo, son muchos y también soy vigilado...
Además... el maldito bastardo ahora es parte de mis problemas también. En serio un omega? Por qué nunca detecte su aroma hasta ese día? Lo ocultaban o apenas se presento? Demasiadas preguntas... demasiados problemas juntos.
Puedo manejar a mi madre y mis hermanos, aun puedo mandar pequeños informes por ellos, pero Lucerys? Lucerys es algo que no me vi venir... mi mente estaba confundida mientras pasaba mi rut, pero ahora... qué es lo que pienso sobre esto?
Rechazo. Ese es mi primer pensamiento, nadie aceptaría esta locura, pero en este lugar nadie ha querido hablar de ello. El celo de Lucerys terminó ayer, pero yo estoy bien desde antier, pude convivir con Daemon y Rhaenyra... ninguno dijo nada, pero notaba la mirada de Jacaerys.
Esperaban algo de mi? No... estaban siendo cuidadosos sobre como tomaría esto?
Como dije, no obtenía nada de tener un destinado, solo me rechazarían. Quien me rechazaría? Mi madre y abuelo... por supuesto que si. Mi matrimonio era importante para alianzas, un canje que he sido consciente toda mi vida, alguna vez esperaba ser pareja de Helaena, pero madre siempre ha insistido en casarla con Aegon, poco a poco tuve que tragarme mis deseos. Ya no importaba lo que quisiera, si no en lo que era bueno.
Rhaenyra y Daemon lo aceptarían? No, no entregarían a su hijo, no daba ningún benéfico casarnos, pero ellos buscaban eso? Un acuerdo político con sus hijos? Ellos se casaron en contra de todos, se casaron sin permiso del rey o del mundo... soñadores e idealistas, una tontería para alguien que se convertiría en un rey, una razón más para no apoyarla... aunque sería tan malo?
Sería malo que te preguntaran con quien quieres casarte?
Olvidemoslo, no tiene sentido pensar esto. No me gusta Lucerys, solo tenemos una deuda que nos ha mantenido unidos, verdad? Por que... él no es atractivo, no es... si lo es? Nunca había tenido la necesidad de pensar en esto, pero lo es?
Aunque no tenga los rasgos Targaryen, tiene la belleza de Rhaenyra, eso no se lo puedo negar, pero sus rasgos comunes... tampoco son tan comunes. Sus risos son llamativos y esos ojos grandes... bueno, probablemente si es algo llamativo, además ha crecido, su cuerpo ya no es el de un niño...
No... definitivamente no. No caeré en esto.
Me cambie de ropa y fui a mi cama, no necesitaba tener este tipo de pensamientos ahora, no hay manera de que lo que sea que tengamos termine bien... solo lo dejaré ir y ya. Con ese último pensamiento me force a dormir, pero no fue tan bien como esperaba, no lograba conciliar el sueño y toda la platica con mis hermanos y el tema de Lucerys, estuvo en mi cabeza.
Dormí mal y poco, me levante con poca energía y algo enojado. Desayune en silencio, ni siquiera podía pensar bien al tener a Lucerys de nuevo frente a mi. Mi entorno ni siquiera era interesante y mucho menos la comida, pero me forzaba a terminar para poder irme y despejar mi mente.
-Oye... - escuché la voz de Daemon, esperaba que alguien le respondiera, pero cunado solo hubo silencio, voltee para ver que sucedía. Me hablaba a mi.
-Si?- conteste nervioso. Él nunca se dirigía a mi, a nosotros en general.
-Toma tu espada, te espero en el campo de entrenamiento.- ordenó.
-Disculpa?- debía estar soñando.
-Que te espero para entrenar- repitió casi con fastidio.
Beso a Rhaenyra, se despidió de sus hijos menores y salió de ahí. Me quedé viendo a Helaena qué estaba junto a mi, tratando de buscar respuestas sobre si esto era real. Ella sonrió y asintió.
Me quedé inmóvil, yo... nunca admitiria esto en voz alta, pero admiraba a Daemon, él era la idea que to tenía de lo que es ser un Targaryen, pero también soy consiente que él es mi objetivo a vencer, no existía un mundo en donde... pudiera entrenar con él sin que nuestra vida esté en juego...
Levante la mirada, aun nervioso por lo que debería hacer y me encontré con Lucerys mirándome. Tenía una sonrisa comprensiva y su aroma aunque sutil pude notarlo... me relaje inmediatamente y aunque no hablo, vi el movimiento en sus labios.
"Ve"
No puse más excusas y me levante de inmediato. Corrí por mi espada, baje al campo de entrenamiento y antes de salir, trate de recomponerme. Recupere mi imagen más reladajada y salí, no quiera verme desesperado por esta oportunidad y mucho menos en frente de Daemon.
-Me han dicho... que de todos los hijos de la Hightower, eres el más competente- fueron sus primeras palabras al verme.
-Mis hermanos tienen sus propias cualidades...- debía ser cauteloso, aun no sabía si su invitación a entrenar era sincera o tenía otras intenciones.
-Si? Tomar hasta llegar al suelo?
-Aegon... es difícil, pero lo está intentando.
-Corrección, Jace lo está cuidando.- me mordi la lengua para no contradecirlo.
-Ambos... se están esforzando.
-Si, eso creo, y tu?
-Yo? No entiendo...
-Te he visto deambular, vigilarlos y de mis hijos Lucerys es el que mejor Valyrio habla, es un gran logro que él te reconociera en eso.
-Él lo hizo? -me incomodaba saber que él era demasiado consciente de mis actividades, pero me llamó más la atención el hecho de Lucerys y él como lo llamó su hijo.
Él reconocía a todos los hijos de Rhaenyra como suyos? Era evidente que no son del todo Targaryen, entonces... por qué los acogió tan fácilmente? Por que ellos y no nosotros?
-Supongo que dedujiste tu situación con Luke...- suspiro y poso sus manos sobre su espada "Black Sister"
-Que tipo de situación?- no seguía su hilo de pensamiento.
-Están unidos...- deje que sus palabras se asentaran y odie de mil formas, que el también quisiera hablar de esto.
-No pienso lidiar con esto ahora.
-Lo harás... mientras te doy una paliza con la espada.
-Soy muy bueno, he logrado derrotar a Sir. Cole.
-Crispin?- se burlo.
-Criston Cole...- por qué se burlaba?
-Crees que derrotarlo te hace bueno?
-Él te venció...- se rio con más fuerza.
-Ese imbécil me pego por la espalda y solo jugamos en una justa... ganar son palabras mayores para un espécimen como él...
-Rhaenyra lo hizo caballero por algo...
-Por que quería llevarle la contra a tu abuelo- le quito importancia- cuando le das poder a un hombre que nunca ha tenido nada, pierde la cabeza...
-Él es honorable y un gran maestro.
-Claro, tuve que luchar con Jace y Luke para quitarles mañas horrendas de ese tipo. Se supone que estuvo en batallas y solo los entrena jugar en la justas.
-Él no...
No me dejo siquiera terminar, ataco y alcance a pararlo, pero el llevaba el impulso y mi postura era mala, logro tirarme y apuntar a mi pecho.
-Él es un tonto con poder, pero tu eres ingenuo... creer que por derrotar a un hombre eres bueno y que ese hombre es el mejor caballero... por favor.- quito la espada de mi pecho -no sabes lo que es pelear en un campo de batalla.
-No sé me ha dado la oportunidad de probarme- me levante y me quite el polvo- nunca he querido ser un ganador de justas.
-Lastima niño, si surge una guerra... sabes que consecuencias tendrá... y probablemente de que bando pelearemos.
-Talvez... nada esta escrito en piedra.
-Si, pero parte de esto es por lo que vine a hablar contigo.
-Una guerra?
-Más o menos... todo depende de Luke, te dije que vine a hablar de su vínculo- volvió a mover su espada, pero sus golpes eran más débiles, un flujo más elegante- ser destinados no es una cosa tan simple.
-Es un mito...
-Supongo que para tu fe lo es, pero para las 14 llamas y para los Targaryen es un vínculo sagrado... algo que le reclamé mucho tiempo a mi abuelo.
-Tu abuelo?
-Jaehaerys, él fue un gran rey... pero nuestra familia se debilitó bajo su mando.
-Fue nuestra época más prospera, mi abuelo lo halagando demasiado
-Por que mi abuelo le dio lo que quería, les dio poder a los Hightower y no tenia problema con eso, logro que dejaran de juzgar nuestras costumbres... pero solo dio el beneficio hasta algunos de sus hijos... mi padre fue uno de ellos y no más, la influencia de los Ándalos y mi abuela lo alejo de lo que defendía.
-Él solo vio lo mejor para el reino- al escucharme dio un golpe más duro y me hizo retroceder un poco, pero no me hizo caer.
-No somos reyes por complacer al reino, todo lo que el mundo le reconoce, no tiene valor... todos sus hijos murieron o lo abandonaron, su destinada fue dejándolo solo conforme los años pasaron y a sus nietos nos puso en contra por una corona.
-Tu luchaste por esa corona!
-Por que era mi hermano! No porque quisiera ese poder- logro bajar ambas espadas y me dio un fuerte golpe en las costillas qué me quito un poco de aire, pero logre evadirlo y casi tirar su espada.
-Todos queremos poder, no creo que no desearas el trono.
-Junte un ejército para él, pero nunca me postule como candidato, no se que te dijeron, pero nunca hice ningún reclamo.
-Eso es... no lo creo- nos separamos de nuevo, no estaba concentrado en la pelea, me sentía confundido.
-Mi familia siempre ha sido primero, pero cuando Rhaenyra se presento, ella se convirtió en mi mundo... no hay nada que no haga por ella y así será hasta el final de nuestros tiempos o hasta mi muerte.
-No creo que los vínculos de alma hagan eso, tu forma de querer es...
-Retorcida? Si... he escuchado esas palabras de tu madre, pero así amo yo y así la cuidare a ella, pero mis hijos son igual, los protegeré...
-Yo... no he hecho algo contra ellos, Lucerys me ha atacado más de lo que yo lo he hecho.
-Lo sé, pero el se ha disculpado por muchos años y tu sigues guardando rencor y no dudo que las palabras de tu familia han hecho más grande esa brecha- guardo su espada, ambos perdimos el interés en la lucha- tu debes aprender lo que significa tener un destinado... no por mi o por las historias que tu madre ha hablado... busca en los relatos, en nuestra historia y descubrelo.
-Estas aprobando esto? Con Lucerys?
-He vivido en carne propia lo difícil que es ir en contra de esto... no puedo obligarte a aceptarlo, pero lo mejor que puedo hacer por Luke, es enseñarte esto.
-Es inesperado, debo admitir.
-No te confundas, aunque seas hijo de mi hermano y pareja de mi hijo... no dudaré de clavarte mi espada en el otro ojo, si estas en nuestra contra o si él sale lastimado.
No pude contestar, su presencia se volvió amenazante y su aroma me mantenía con la cabeza abajo... el seguía superándome en muchas cosas, pero no pensaba que la brecha fuera tan grande...
-Busca lo que te dije y mientras peleemos hablaremos de esto.
-Seguirás entrenandome?- me sorprendi.
-Peleando, nunca te entrenare...- dio una sutil despedida y se fue...
Una pequeña emoción retumbó en mi pecho y no dude en ir a la biblioteca una vez más. Aunque odiara el tema, quería demostrar que era capaz de hacerlo... que podía aprender.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top