-Bienvenido hermanito- La voz de Jacaerys fue lo primero que escuche al bajar de mi dragón. Voltee emocionado al verlo y fui a abrazarlo.

-Jace! Por qué mamá no está aquí?- pregunte extrañado, ella siempre viene a recibirme.

-Esta mandando unas cartas a Winterfall y a Marcaderiva.

-Sucedió algo?- no era normal hablar del Norte.

-Ella quiere hablar con nosotros, solo te estábamos esperando.

Guarde silencio. Jacaerys parecía relajado y sonriente como siempre, pero lo notaba rígido. Pasó su brazo por mis hombros y me mantuvo a su lado, casi con precaución. Que había pasado? No me había ido mucho tiempo, tan solo una quincena.

Desde que regresamos de King's Landing las cosas han estado tensas, nuestro padre ha estado más concentrado en reforzar nuestras defensas y haciendo actividades secretas con mis hermanos, mamá se ha encerrado en su solar y atendiendo las necesidades del pueblo... Jace aparte de sus actividades secretas, tiene que entrenar a nuestro tío inútil y luego están los otros dos tíos raros, el tuerto y Helaena, que aunque es linda, nunca entiendo cuando trata de hablarme.

La casa se había vuelto extraña, no me sentía a gusto y solo podía estar con mis hermanos menores para escapar de la tensión, pero no era suficiente, quería un poco más de libertad... y fui a donde siempre era bien recibido. Drifmark.

Sé que la princesa Rhaenys mantiene su distancia, a mi y a ninguno de mis hermanos nos trata como a Baela y Rhaena, pero estoy bien con eso, ella hace lo suficiente para recibirme en su casa. Lord Corlys por otro lado, ha estado ausente muchos años, lleva días de su recuperación después de su regreso.

Él es divertido, le gusta hablar de sus aventuras y la guerra, diría mamá "un poco orgulloso y vanidoso". Tampoco soy su favorito, él prefiere a Lucerys, pero... creo que he hecho las paces con eso, he tenido envidia por eso, pero Luke es amable y me consolaba cada vez que me sentía desplazado, no puedo estar enojado por ello, porque él me ha cuidado y protegido más que nadie.

Aun así, este lugar era divertido. Podía explorar todo lo que quisiera y el hecho de que no tenía ninguna herencia a mi cargo, me daba estas libertades. Como el abuelo no estaba, pude convivir abiertamente con todos y no tener supervicion. Pude ir en barco a algunos lugares cercanos, ayudaba a revisar los nudos, a quitar percebes, a pescar con lanzas, a moverme entre gente común.

Claro, mamá no sabía esto, ella debería seguir creyendo que no salía de la fortaleza del abuelo. Baela de vez en cuando me supervisaba, pero guardaba mi secreto.

Esta vez el abuelo me enseñó sus mapas y algunas de sus conquistas, después de su casi muerte, estaba más abierto a contarme cosas y fue emocionante, esta vez no era el hijo extra que debía escuchar, sino que era la prioridad, pero no debía hacerme ilusiones y debía volver a casa, aunque estuvieran esas serpientes ahí.

No entendía porque papá permitió esto, los ignora, pero aun así les permite estar en casa. Había algo extraño, algo estaba pasando, Jace dejándome entrar a donde estaba toda mi familia y ver esta pequeña reunión con mamá a la cabeza y a padre a su lado de pie, fue la confirmación.

-Padres...- saludé, pero no me acerque, me quede en mi lugar.

Jace cerro las puertas y se sentó a mi lado. Luke estaba a su derecha y había un asiento vacío a su izquierda, supuse mi lugar y lo tomé.

-Jacaerys, Lucerys y Joffrey- mamá nos dio una sutil mirada conforme nos nombraba- Daemon y yo decidimos que hay cosas que no podemos mantener ocultas, ya que más que protegerlos, estaríamos dejándolos en la obscuridad cuando el momento llegue.

-Paso algo?- pregunte. Algo había sucedido mientras no estaba.

Notaba el cansancio de padre, las heridas de Jace y Luke, hasta madre parecía más una reina que mi madre en este momento, había demasiada tensión y seriedad que no esperaba, o no conmigo por lo menos.

-Llego una carta de la princesa Rhaenys, mi padre volvió a caer en cama y ella está siendo amablemente ignorada por el consejo, sigue estando a lado de mi padre,  pero hay cosas que ya no podrá vigilar. Tenemos una ventaja en lo que sea que estén planeando, ya que mis medios hermanos están aquí.

-Estamos en guerra?- pregunto Lucerys.

-No aun no- contesto mamá firmemente- y no seremos nosotros quienes demos el primer golpe.

-Es por eso que se irán?- pregunto Jace. Lo cual causo sorpresa tanto en Luke, como en mi.

-Irse?- pregunte asombrado- nunca se han ido.

-Debemos hacerlo, hay cosas que he ignorado mucho tiempo- se veía decepcionada- me dieron el nombre de heredera, pero no se me preparo para ello y aunque tengo poco tiempo, necesito hacerlo.

-Y que haremos nosotros?- intervino Luke- tener a nuestros tíos aquí... es una ventaja con ustedes, pero estando solos, no creo que sea una buena convivencia.

-Si te molesta Aemond, sácale otro ojo.- se burlo nuestro padre y no pude evitar sonreír. Sabía que papá nunca se enojaría por atacar a los Hightower, pero mamá era otra cosa.

-No sacaran ningún ojo- mamá le dio un sutil golpe para detenerlo- no se atacarán en nuestra ausencia, aunque parezca mentira, Aemond es el más consciente de que sus acciones tendrán consecuencias y por otro lado.

-Aegon es un idiota-termino papá la platica- Helaena es inofensiva.

-Supongamos que es verdad y nadie sale herido en su ausencia- acepto Jace- cual es el plan? Qué se supone que estamos haciendo?

-Hoy he enviado cartas a los respectivos lugares que iremos, espero respuesta probablemente en algunos días, todavía tenemos tiempo.- explicaba mamá, mientras Daemon parecía inquieto- Jacaerys se quedara a cargo, sabe mi rutina y tiene experiencia en batalla, tiene espada y mente para quedar a cargo.

-Lo haré- acepto fácilmente. Probablemente era algo que ya llevaba tiempo planeandose, Jace estaba serio, pero se veía seguro en la responsabilidad que cargaba. Es mi hermano y creo que todos estamos de acuerdo que confiariamos nuestra vida sin dudar en él.

-Lucerys, sabes blandir la espada, pero aun dudas. Las semanas antes de mi partida te haré pelear hasta el cansancio, después de ello, no olviden a sus dragones- explicó papá- apoya a tu hermano y vigila a Aemond.

-Si Kepa...- Luke parecía más nervioso en sus responsabilidades, pero entendía que venía de enfrentarse a Aemond. No se la historia completa, pero entiendo que la falta de ojo viene por Luke.

-Joffrey, tu tendrás que ser su mensajero- me sorprendió que mamá me tomará en cuenta, normalmente me decía que era muy pequeño para involucrarme, así que sonreí al ser tomado en cuenta- ya que la princesa Rhaenys esta en King's Landing y Rhaena esta cubriendo el puesto de Corlys, mientras se recupera. Espero puedas ayudar a mantener la comunicación y actualización a flote.

-Lo haré- respondí de inmediato.

-Vuela alto con Tyraxes y cualquier problema avisa a tus hermanos o a Corlys.

-Si mamá- renegué al ser a quien más instrucciones daban.

-El asunto de los mocosos- continuo papá- ya que Luke tiene al mayor problema, Jace seguirás teniendo a Aegon y Joffrey te toca al menor.

-Qué? Tengo que cuidar al desterrado?

-Joffrey...- mamá uso ese tono de advertencia, que me hizo callar enseguida.

-Él es el menos Targeryan de todos nosotros, por qué debo ser yo? Prefiero estar con la tía Helaena.

-A nadie le gusta la idea de cuidar a nuestros tíos Joffrey- contesto Jace- lo hacemos por ayudar a mamá.

-Pero...

-Quieres cambiar de tío?- insistió.

Me quedé pensando, conocía poco de Daeron, pero en definitiva no podía ser peor que Aegon, ese hombre apestaba a putas y alcohol, en King's Landing también tenía otros horribles olores encima, aparte de ser un tonto... si, creo que no soy al que peor le fue.

-No, esta bien.- tuve que aceptar sin más quejas.

-Bien, ya que hemos terminado las responsabilidades, hay una última cosa que me ha motivado a actuar.

-Es importante que esto quede entre nosotros- ordenó padre y todos aceptamos.

-Lo que les voy a contar es algo que solo se ha contado de rey a heredero desde el tiempo en que Aegon fue Rey.

-Aegon el conquistador?- pregunte entusiasmado.

-Así es, y es algo que mi padre me dijo a mi y que yo debería decir a Jace... pero los tiempos han cambiado. Creía que era una carga que debía llevar sola, pero no ahora.

-Necesitamos el apoyo de todos y no podemos hacerlo si no saben toda la historia, no podemos protegerlos dejándolos en la obscuridad- aseguro padre.

-No diremos nada- Jacaerys hablo, pero los tres estuvimos de acuerdo.

-Aegon tuvo un sueño, el cual le llevo a empezar la conquista. Mi padre le llamo la canción de hielo y fuego... y hay una profecía escrita en su daga
"De mi sangre viene el príncipe que fue prometido y su voluntad será la canción de hielo y fuego"

-Un sueño? Y un príncipe prometido? Para que?- pregunto Lucerys, igual de confundido que los demás.

-Mi padre hablo del fin del mundo de los hombres.
Comenzaría con un crudo invierno proveniente del lejano norte. Cuando llegue el gran invierno, todo Poniente deberá enfrentarse a él- ambos, madre y padre se ven más serios de lo que pensaría por una profecía, no  recuerdo especialmente que Kepa creyera en ellas- y para que el mundo sobreviva, un Targaryen debe ocupar el Trono de Hierro. Un rey o una reina tan fuerte como para unir al reino contra el frío y las tinieblas.

-Eso... si eso pasa, tampoco estaríamos preparados- se quejo Jace- somos débiles ante dos posibles guerras.

-Jace, no creo que esta profecía sea dirigida a nosotros- lo detuvo madre- pero es un legado que debemos dejar, a nuestros hijos... y herederos.

-Por eso van al norte?- hablo Luke algo intrigado- van a comprobar la profecía?

-No podemos comprobarlo, solo creer que es cierto- acepto padre- nuestra espada no es para ese futuro problema, sino para defender este legado.

-Y... nosotros somos esa sangre?- pregunte algo cohibido.

-De que hablas Joffrey?- pregunto mamá confundida.

No era ciego o sordo, sé lo que que la gente dice de nosotros. Jacaerys es el más feroz al negar los susurros de  nuestro linaje y probablemente él es quien más los sufrió, pero lo sabemos, los tres lo sabemos y guardamos silenció. Aunque una profecía era diferente...

-Bueno... sé que todos aquí ignoramos lo evidente...- jugué con mi cabello algo incomodo, pero debía ser claro, nuestro futuro estaba en juego- es claro que eres parte de la profecía... eres la hija de Viserys y Aemma... la sangre Valyria corre en ti.

-Y luego?

-Bueno... si no consideras que esto aplica a tus medios hermanos... porque bueno, tienen sangre Hightower. - voltee a ver a mis hermanos y su mirada me dio a entender que sabían a lo que iba- nosotros... nosotros somos parte de esa profecía?

-Joffrey!- mamá grito, pero Kepa la detuvo.

-Aunque me duela, no podemos negar que ellos también pueden ser parte de la profecía, pero no confiamos en ellos y si inician una guerra, esto tampoco puede llegar a sus oidos - explicó padre- estamos tratando de proteger algo que nos pertenece a los Targaryen y ellos son más Hightower, qué nuestra sangre.

-No... no quería ofender, solo que... bueno, probablemente Baelon y Viserys tienen más sangre Targaryen que nosotros- suspire- nosotros sabemos lo que somos... pero no quiero que nos equivoquemos en proteger algo tan importante.

-Ustedes son mis hijos, tan Targaryen como sus hermanos menores- intervino mamá- Jacaerys es mi heredero, como ustedes son los siguientes en la línea, nada cambiará eso... entienden?

Los tres aceptamos y guardamos silenció, creo que cada uno analizaba sus palabras. Había muchas cosas en juego y... nuestras vidas eran las que estaban en peligro. Ya no solo para la sucesión de un trono, también para una guerra y para un futuro final de los hombres...

-Oigan, los amo- madre nos volvió a llamar la atención- confiaría mi vida a ustedes sin dudarlo y por eso les digo esto, protegeremos nuestra familia juntos, de acuerdo?

Iba a dar un sutil asentamiento de nuevo, pero Jace se puso de pie. Saco su espada y la puso frente a madre, para poderse hincar frente a ella.

-Yo, Jacaerys Targaryen... hijo de Rhaenyra Targaryen, heredera al trono de hierro, Reina de los Ándalos y los Rhoynar y los Primeros Hombres, Señora de los Siete Reinos y protectora del Reino, juro mi espada, mi lealtad y mi vida, por usted y por el legado de nuestra casa...

Quede sorprendido ante el juramento, y no fui el único, todos ahí estábamos impresionados y orgullosos. Seguiríamos a nuestra madre a cualquier lado que ella tome y de igual manera lo haríamos por Jacaerys, así que Lucerys y yo seguimos su ejemplo y juramos las mismas palabras.

-Estoy muy orgulloso de ustedes- hablo Kepa y nos ayudo a ponernos de pie.

Mamá sonreía orgullosa y nos abrazo a los tres, la tensión que había, se perdió en segundos y solo quedó felicidad y orgullo entre nosotros. Nadie aquí fallaría a sus promesas y todos lo sabíamos.

-Lo que sea que venga, lo enfrentaremos juntos- susurro mamá y todos afirmamos aquellas palabras.

-Iremos al norte, buscaremos información y haremos nuevas alianzas- nos informo- como dije, esto se los conté para que sepan la importancia de que nos mantengamos unidos y lo preocupante que es una guerra.

-Entonces es prioridad evitar la batalla?- pregunto Luke.

-Así es... por eso mis medios hermanos están aquí.

-Si no podemos detenerlos, por lo menos estudiarlos, ese es el propósito- dijo padre.

-Muy bien, estaremos atentos- acepto Jace.

-Y Joffrey, te unirás a nosotros a los entrenamientos en dragón, tu dragón es pequeño, así que no lo forzaremos tanto, pero debes estar por lo menos tres veces a la semana, si me voy, sigue entrenando con tus hermanos.

-Si Kepā...

-Ahora podemos...- el sonido de un dragón desconocido detuvo nuestra platica y papá fue el primero es descifrar lo que pasaba.

-El último Hightower llego...

Daeron...