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Al día siguiente

A primera hora del día, tras una noche sin pegar el ojo, se llevó las cajas de la residencia a la habitación de Jimin.

Las había guardado en el cuarto de almacén, a sabiendas de que él no estaba preparado para lidiar con el contenido tras la reciente muerte de Song-I. Todos sus lienzos estaban guardados en las cajas, y allí seguirían hasta que Jimin decidiera qué hacer con ellos.

La primera caja contenía su ropa, algunos tejidos terminados y otros en medio del proceso.

La segunda caja estaba llena de libros viejos, algunas novelas, poesías y otros sobre arte.

Por fin abrió la tercera caja, habían varios objetos. En el fondo había un montón de libros negros, con las páginas desvaídas y los lomos muy marcados. En la portada de los
libros había una etiqueta con la fecha, escrita con la letra inclinada de Song-I. Abrió uno y hojeó las primeras páginas hasta darse cuenta de lo que tenía entre manos.

Eran los diarios de Song-I. Eran diez que documentaban varias épocas de su vida. Y en una de esas páginas, estaba escrito cómo fue su vida junto a Jimin.

Mi Jiminnie ha aprendido hoy una nueva receta de ese chef famoso. Verlo trabajar con él me ha llenado el corazón de felicidad, lo mismo que oír su risa y ver cómo la tristeza desaparecía mientras removía la sopa. ¡Le ha quedado delicioso!

Esta noche, mi Jiminnie estuvo trabajando durante horas con Hobi y Jinnie, se han esforzado para preparar una cena deliciosa.

J

ungkook estaba sonriendo mientras leía, su esposo cocinaba delicioso y ahora entendía el porqué. Él había tratado con profesionales, siempre intentó superarse.

¡La semana que viene me llevo a mi Jiminnie a la casita! Podemos quedarnos sin pagar si trabajamos unas horas limpiando el resto de las casitas de alquiler. ¡Se emocionó mucho cuando le conté!

A mi Jiminnie le encanta la playa. Se sienta durante horas en la arena, dibujando o contemplando el paisaje, en absoluta paz. Me preocupa que
pase tanto tiempo solo, pero insiste que así es como se siente más feliz. Sin los ruidos de la ciudad, sin estar rodeado de gente. Tengo que
encontrar la manera de traerlo de nuevo.


Tendré que sacar a Jimin del colegio, pero sé que recuperará el tiempo
perdido porque es muy inteligente. El complejo turístico no está tan lleno en esa época, pero sigue haciendo buen tiempo y la casita estará libre. Lo
sorprenderé con esa noticia en su cumpleaños, justo antes de que nos vayamos.

Las horas pasaban y Jungkook seguía leyendo. No podía parar, Song-I escribía a detalle lo que ocurría en su vida. Le emocionaba saber más, pero no era lo que encontraba.

O así lo creía él.

Cuando revisó de nuevo la caja, se encontró con otro diario. Este era más pequeño y de color celeste decorado con una pequeñas nubes pintadas con acuarela.

Cuando la abrió, se encontró con la primera página decorada con flores secas y algunas fotografías junto a Song-I.

La semana que viene nos vamos a la playa. Abi Park tiene un amigo que es el dueño de un pequeño complejo turístico y ha hecho un trato con él.
Limpiaremos las casitas todos los días y, a cambio, ¡podremos quedarnos en una toda una semana sin pagar! Como somos dos para limpiar ¡terminaremos en un abrir y cerrar de ojos y tendremos todo el día para jugar! ¡Me muero de la emoción! No he estado en la playa desde que mis
padres murieron. ¡No puedo creer que lo haya hecho por mí! La quiero tanto tanto.

A Jungkook se le aceleró el corazón. Tenía que ser el mismo sitio. Song-I había mencionado las casitas y había fotos de las dos en la playa. Siguió leyendo.

¡Nuestra casita es preciosa! Es de un azul muy brillante con las contraventanas en blanco y está justo al final de una hilera de casas. ¡Puedo oír las olas todo el día y toda la noche! Solo hay seis casitas y como estamos en mayo, solo están medio llenas, así que Abi Park y yo terminamos a
mediodía todos los días y nos pasamos el resto del tiempo explorando. ¡Me encanta este lugar!

¡Hemos venido de nuevo a la casita! ¡Este es el mejor cumpleaños!

Sus ojos se le llenaron de lágrimas, una vacaciones trabajando era lo que se podían permitir. Solo comían en restaurantes gracias a la generosidad de los amigos.

Jungkook se dió cuenta de lo desenfrenada que era su vida. Porque desde niño tenía todo, podía darse el lujo de adquirir lo que quiera; sin embargo, había algo muy importante que nunca obtuvo...

El amor.

Song-I luchaba para darle todo a Jimin. Se esforzaba para limpiar esa casita y poder adquirirla gratis por una semana. Todo para regalarle algo especial.

Cuando pasó a la siguiente página, tuvo más ganas de llorar, pero no de tristeza, sino de felicidad.

Había encontrado un boceto con los bordes desgastados. Debajo decía el lugar dónde quedaba y una frase que le llegó al corazón.

"Mi trocito de felicidad, mi lugar seguro en la faz de la tierra"

Cerró los ojos aliviado. Había encontrado a su esposo.


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