Dos días de heridas

La agencia y la mafia llevaban 2 días buscando a Atsushi, no había ningún desastre en la ciudad pero el tigre tampoco aparecía ni siquiera Ranpo-san había sido capaz de hallarlo pues cada que daba con el paradero cuando llegaban el tigre se había esfumado como el aire y debía comenzar de nuevo, era frustrante para todos y más que no sabían si podía atacar a alguien o si seguía en aquella ilusión.

- Esto salio muy mal – decía Dazai

- Hay que seguir buscando – dijo Kunikida mientras acomodaba sus lentes

- ¿Dónde se habrá metido? – decía Kyoka

- Ya buscamos las cuevas Dazai – dijo Yosano

- Yo busque en las afueras de la ciudad – comentaba Kenji

- Nosotros recorrimos la ciudad subterránea – dijeron los hermanos Tanizaki

- Realmente no sé dónde podría estar – dijo Dazai en un suspiro

- Oigan ¿Qué hay de la chica? – dijo Kunikida

- ¿Qué chica? – preguntaron

- La hermana del perro mafioso – decía Kunikida – ella frecuentaba pasar tiempo con el mocoso

- Si, le pregunte a Gin-chan, ella dice que no ha aparecido por los alrededores – respondió Dazai

- El señor sombrero elegante me ha estado ayudando a buscar pistas – dijo Ranpo – el sale todas las noches a buscar nueva información

- Sí que se encariñaron con Atsushi – dijo Yosano

- Es difícil no hacerlo – sonrió Dazai

- Sigamos buscando

La agencia volvió a separarse en la búsqueda de su albino amigo, agencia y mafiosos buscaban al albino sin parar, la noche del día 7 decidieron reunirse

- Está bien, Atsushi no ha atacado a nadie – decía Fukuzawa – pero aun así no podemos dejarlo suelto en la ciudad. Ranpo, infórmanos

- Atsushi ha sido visto en pastizales, en la feria y en el riachuelo – decía Ranpo – solamente se le ha visto en forma de tigre

- ¿pastizales? – pregunto Junichiro - ¿Por qué iría a esos lugares?

- ¡Eso! – grito Dazai

- ¿Qué pasa Dazai? – cuestiono Chuuya

- Es por eso que va, nos está buscando – dijo Dazai

- ¿Qué? – pregunto Akutagawa

- Es simple – dijo sonriente Dazai – en los pastizales encuentra confort, es un tigre, le gusta ir a la feria y el riachuelo fue donde lo conocí, donde salvo a Kyoka y donde vamos seguido – decía Dazai – Además cuando explico lo que escuchaba y veía, menciono la luna y un riachuelo

- ¿pero por qué no se ha dejado ver? – pregunto Higuchi

- Eso es simple señorita – dijo Ranpo – Atsushi sigue con la ilusión, no puede vernos

- Si escucha pasos huira – dijo Naomi

- ¿Cómo podemos acércanos? – dijo Yosano

Mori, Fukuzawa, Ranpo y Dazai voltearon a ver a Chuuya con una sonrisa

- Esperen, yo no puedo acercarme tan fácil – decía Chuuya – saben que tengo que tocar el objeto o persona y si lo hago en un campo abierto simplemente saldré volando

- Por eso también usaremos a Akutagawa – dijo Dazai sonriente

- ¿Por qué me necesitaría a mí? – cuestiono Akutagawa

- Tu sostendrás al señor sombrero elegante y a Dazai– dijo Ranpo

- ¿Yo también? – pregunto Dazai

- Necesitas quitarle la habilidad Dazai – decía Kunikida

- Pero lo que le pasa sería más conveniente la doctora Yosano – replicaba Dazai

- No, sabes bien que tendría que estar a punto de morir para que pueda usar mi habilidad – decía Yosano – si lo lastimo volverá a huir

- Está bien, traigamos a Atsushi-kun de vuelta

Los mafiosos y Dazai se acomodaron cerca del riachuelo, esperaban ver al albino, a lo lejos toda la agencia y la mafia esperaban, si el plan fallaba todos irían por el chico. Pasaron horas hasta que lograron ver la silueta del tigre. Tal cual, apareció.

El tigre llego caminando imponente, sacudía su cuerpo y se acercaba al riachuelo a tomar agua, era la oportunidad perfecta, Dazai, Chuuya y Akutagawa se miraron para confirmar que estaban listos, cuando lo estuvieron, Chuuya y Dazai se tomaron de la mano, Akutagawa trajo a Rashoumon y lo enredo en las cinturas de ambos. Chuuya activo su habilidad y se acercaron lentos. Los detectives y mafiosos veían a los chicos cumplir su misión con nervios.

El tigre por su parte, solo miraba el reflejo en el riachuelo, para subir su mirada a la luna. Chuuya se dio cuenta de lo ocurrido y se detuvo

- ¿Chuuya? – susurro lo más bajo Dazai

- Algo le pasa a Atsushi – susurro bajo Chuuya

- ¿Cómo

- Esta... Extraño... - susurraba Chuuya - ¿Me dejarías intentar hablarle? – le pregunto Chuuya

- Ok... Solo, ten cuidado

Dazai soltó a Chuuya, haciendo que todos los espectadores se sorprendieran, Chuuya se acercó al tigre y hablo despacio

- Atsushi... - el tigre movió las orejas y volteo a ver al chico parado a su lado. El tigre solo lo miro – Atsushi... Soy yo, Chuuya – menciono – Hemos estado preocupados por ti... Por favor, vuelve...

El tigre miro al portador del sombrero, segundos después acerco su hocico olfatearlo y después para acariciarlo con el rostro del mafioso. Chuuya sonrió y acaricio al tigre, era el pequeño Atsushi. Dazai sonrió y se acercó lento para tocar al tigre y deshacer su habilidad. Pronto, Atsushi cayó ante ellos dejándolos sorprendidos

- ¿qu-que te paso? – pregunto Dazai

- Yo... No puedo verlos... - fue todo lo que Atsushi logro decir

Akutagawa se acercó corriendo con sus mayores, Chuuya cargaba a Atsushi quien se había vuelto a desmayar y Dazai suspiraba. Vio como todos los demás iban acercándose o más bien como llegaban corriendo

- ¿Qué le paso a Atsushi? – pregunto Akutagawa

- Como voy a saberlo – dijo Chuuya

- Son heridas muy profundas... - decía el mafioso pelinegro

Los agentes llegaron, Fukuzawa pidió a Yosano que atendiera a Atsushi de inmediato, lo cual hizo. Los miembros de la agencia regresaron a la agencia con Atsushi, por su parte, los miembros de la port mafia solo siguieron con su trabajo. Yosano se encargó de Atsushi, pero noto que sus heridas no eran sanadas

- Lo siento, no sé qué ocurre – decía Yosano al presidente

- Deberíamos llevarlo a un hospital – dijo Naomi

- Si Yosano-san no puede entonces significa que es alguna habilidad fuerte – dijo Dazai

- No lo creo – decía Ranpo examinando al chico – Estoy seguro que estas heridas se las hizo el mismo

- ¿Por qué Atsushi se lastimaría? – pregunto Kyoka

- Dijo que no podía ver – dijo Dazai

- Atsushi debió estar muy asustado, no identificaba a nadie y se veía en el viejo orfanato – Ranpo miro a sus compañeros – debemos recuperar la vista de Atsushi y sacarlo de esa ilusión

Los agentes estuvieron investigando, Dazai estaba cansando, se retiró dejando a Atsushi a cargo de Kunikida. Dazai termino en un bar en los barrios bajos donde se encontró con el pelinaranja

- ¿Cómo está? – pregunto Chuuya en cuanto vio a Dazai

- Está atrapado en esa maldita ilusión – dijo Dazai

- Pero a mí me reconoció, a ti también – dijo Chuuya

- Sí, pero no sabemos si fue olfato u oído – bebió – no ha vuelto a despertar y sus heridas no se van, Ranpo-san dijo que el mismo se lastimo - Chuuya bajo la cabeza

- Realmente quiero ayudarlo Osamu... - dijo melancolico – Me encariñe con él

- Me di cuenta Chuuya – acaricio su cabeza – Atsushi-kun estará bien, nuestro pequeño estará bien – le sonrió a lo que el portador del sombrero se sonrojo

- No digas esas cosas – lo miro - ¿Cómo siguen tus heridas?

- Estoy bien, ¿y tú?

- Estoy bien, Akutagawa es el que sigue desesperado por saber del chico

- Todo este tiempo suprimió sus sentimientos – dejo una pequeña risa – realmente duele cuando vez a tu persona amada en problemas y no puedes decir o hacer nada – dijo Dazai melancólico

- Pero Atsushi estará bien y cuando lo esté – Chuuya sonrió amable – lo llevaré al parque de diversiones

- Pareces su madre Chuuya – dijo Dazai riendo haciendo de nuevo a Chuuya sonrojar

- S-Si yo soy la madre... - trago saliva – ¡espero te hagas responsable como el padre!

Dazai se atraganto con su propio trago, después de escupir un poco de su licor tocio repetidas veces y miro a Chuuya ligeramente sonrojado

- Es-Esta bien – dijo Dazai nervioso – seré un padre responsable –le sonrió –

- Bastardo – respondió Chuuya sonrojado

La noche transcurrió entre tragos y bromas para ambos ex compañeros. De la mañana siguiente Dazai se despertó con una terrible resaca, tallo su cabeza mientras se quejaba del dolor, se limpió y cambio sus ropas.

Osamu Dazai iba camino a la Agencia, tenía que resolver el caso de Atsushi y al llegar, lo que sus ojos vieron lo dejaron más que sorprendidos, nada más y nada menos que la Port Mafia, en el pasillo esperando el ascensor. Dazai hizo cara de asco al verlos a todos reunidos.

- Dazai-kun – lo llamo Mori

- ¿Qué hacen aquí? – pregunto Dazai aun con su cara asqueada

- Venimos a ver al chico tigre – le respondió el líder de la mafia con una gran sonrisa

- Atsushi-kun no está para visitas – suspiro – además vamos a llevarlo de nuevo al campo, Ranpo-san dice que le vendrá bien el aire

- Entonces ayudaremos a la transportación – volvió a sonreír

A Dazai no le quedo de otra más que subir pisos con la Port Mafia, al llegar, el presidente rápidamente salió con tal brutal visita.

- Querido Fukuzawa, ayudaremos a la transportación del chico tigre – dijo Mori a ver a su canoso ex-compañero

- No es necesario, tenemos todo listo para la transportación de Atsushi – respondió

- Bueno... - Yosano lo miro – Me faltan más anestésicos, insiste en despertarse y una vez despierto no lo podremos controlar – dijo Yosano

- ¿Lo tienen dormido? – pregunto Chuuya

- Es la única forma de tenerlo quieto hasta ahora – respondió Ranpo y miro a Dazai – Si ya estas descansado podemos dejar los anestésicos ¿no es así?

- Si, Ranpo-san – le sonrío – me hare cargo de Atsushi-kun

- Con más motivo la Mafia ayudará, sigue en pie lo mismo, solo Chuuya-kun y Akutagawa-san vigilarán – dio una gran sonrisa a lo que Fukuzawa suspiro. Tenían trabajo

- Está bien, Dazai, Kunikida, trabajaran con los dos miembros de la mafia para tener salvo a Atsushi – dijo Fukuzawa

- Si presidente – respondieron Dazai y Kunikida 

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