Damon P.O.V

A la mañana siguiente me desperté y me fui a dar una ducha cuando volví supe que se había hecho la dormida así que le lamí la mejilla y ella se rió abrazada a Stefan.

- Buenos días, hermanita - le saludé mientras se giraba.

Stefan que también estaba despierto sugirió.

- ¿Por qué no vamos a tomar algo al Mystic Grill? - sugirió girándole la barbilla a Luna para besarla.

- Sí, venga, vamos a divertirnos los tres - añadió ella entusiasmada de pasar tiempo con nosotros.

De pronto entró Emma llamando a Luna.

- Mami, mami, mami - dijo entre lágrimas.

Luna la cogió en brazos y le preguntó.

- ¿Qué te ocurre? - le preguntó.

- Me han salido colmillos - dijo enseñándoselos.

Luna la dejó encima de la cama y yo sugerí.

- Podemos enseñarle a beber sangre humana - sugerí.

Luna me miró algo molesta pero dijo.

- No, no podemos, es mejor que beba de animal - dijo.

- Tranquilos, la llevo yo - dijo Stefan besándola para coger a Emma de la mano.

Luna y yo estuvimos esperando hasta que volvieron a casa. Dejamos a los niños en casa y Luna se cogió de nuestros brazos para ir hasta el Mystic Grill.

Desde el día que tuvo que morir otra vez para salvarnos ha estado más cariñosa conmigo, porque no quería que estuviera triste por la muerte de Ric.

Nos cogió la mano y nos llevó a la barra para pedir bourbon para los tres. Cuando trajeron las dos botellas que había pedido cogió una botella, me la acercó y dijo.

- Bebe - dijo con decisión.

Bebí un poco y cuando terminé de beber me besó tiernamente.

De pronto la sheriff se acercó a nosotros y dejó un periódico encima de la mesa para mí.

Luna, Stefan y yo lo leímos y dije.

- ¿En serio? - dije cerrando el periódico.

- Mejor que "El Consejo explota, la policía no tiene sospechosos" - me dijo.

- A no ser que el culpable esté justo a mi lado - dijo para mí.

- A mí no me mires. Siempre que mato, me anoto el punto - dije sonriendo para mi hermana que estaba preocupada por lo que me pudiera pasar y por lo que pudiera pasar en general.

- En serio, deja de mirarme con esa cara, Liz. Si me cargara a doce personas, no los volaría. Me daría un buen banquete - añadí al ver que seguía mirándome seriamente.

- La explosión se provocó desde dentro. No fue un accidente - siguió diciendo.

- Lo dices como si fuera algo malo. El Consejo ha muerto, mejor para nosotros - dije poniendo mi mano en el muslo de mi hermana logrando que se pusiera algo nerviosa.

- Conocía a algunos desde que era una niña. Eran mis amigos - me dijo Liz molesta.

- Pues intentaron matar a tu hija - contesté.

- ¿Quién es el nuevo? - pregunté viendo como se acercaba un hombre.

- Disculpe, sheriff - le dijo interrumpiendo nuestra conversación.

- ¿Podría hablar con usted un momento? Es sobre la explosión en la granja Young - añadió preguntando mientras mi hermana me cogía la mano mirándome con nerviosismo.

- Perdone, señor... - dijo Lizz.

- Connor Jordan - contestó estrechándole la mano.

- ¿Es usted un perito del seguro? - le preguntó.

- No, yo soy contratista independiente - dijo mirándome.

Entonces yo sonreí provocando que mi hermana se derritiese con mi sonrisa.

- ¿Podemos hablar en privado? - preguntó.

- ¡Claro! - respondió ella.

- Gracias - contestó él.

- Encantado también, señor Tío Ocupado - dije para mis adentros.

Luna me miró y nos sonrió.

- Menos mal que estáis vivos - comentó abrazándonos.

- Tranquila, ya ha pasado todo - dijo Stefan abrazándola.

- Últimamente nuestra vida es un constante cara o cruz, hermanitos - comenté para los dos.

- Bueno, hay que decidir si a Emma le damos sangre de animal o sangre humana - comentó Luna al cabo de un rato bebiendo de mi botella.

Le rodeé con mi brazo y la besé.

- Si te parece bien, creo que sería mejor para ella que bebiera sangre de animal - le propuso Stefan cogiéndole la mano.

Ella sonrió y asintió para luego soltar una tierna risita.

- Me encanta cuando me mimáis los dos - dijo sonriéndonos.

- Eh, si alguien te toca o hace algo... - dije apretando mi puño con una sonrisita tierna.

Ella me abrazó y me besó.

- Te quiero - me dijo.

- Bueno, creo que sería mejor que volviéramos a casa - añadió ella sonriéndonos.

- Ah, sí, se me olvidaba, tengo una sorpresa para ti - le dijo Stefan al acordarse.

- Oh, no hace falta que me prepares sorpresas. Me encanta pasar tiempo contigo sin necesidades hacer sorpresas - contestó con una sonrisa.

Era tan... no tengo palabras para describirla.

Cuando nos levantamos aparté a nuestra hermana de nosotros y le rodeé con mi brazo a Stefan para preguntarle.

- ¿Qué sorpresa le tienes preparada a nuestra hermana? - pregunté con una sonrisa traviesa.

- Nada de lo que tú quieras hacer con ella - contestó haciéndome sentir decepcionado.

- Además no lo puedo decir con ella cerca, se puede enterar y ya no sería una sorpresa - añadió para rodear con su brazo a Luna.

Ella sonrió y nos fuimos a casa.

Al llegar a casa Stefan bajó un momento a la despensa y volvió al cabo de un rato con una botella de champán y dijo.

- Es del año en que naciste - dijo.

- Oh, ¿es de 1849? - preguntó sorprendida.

- Sí - le contestó.

- Tenemos que celebrarlo - añadió.

- Celebrar ¿qué? - preguntó Luna.

- Que todo nos va bien, estamos vivos  y tú también - contestó abrazándola.

- Bueno, ¿quieres hacer los honores? - le preguntó.

- Vale - contestó sonriendo.

Cogió la botella, la abrió y salió disparado hacia ella el líquido provocando que se mojara la cara y se riera.

Hizo que vinieran tres copas con su mente y nos sirvió Champán en ellas. Después nos las dio y nos sentamos en el sofá con ella.

- Salud, hermanita - dije poniendo mi mano en su muslo para ponerla nerviosa.

Me bebí mi copa y ella se acurrucó junto a nosotros. Entonces Stefan le cogió su mano y la besó.

De pronto bajó Elemental y nos dijo.

- Lo de vuestra hija es grave - dijo.

Luna P.O.V

- En serio, ¿ahora tenías que interrumpirnos? - comentó Damon molesto.

- ¿Qué ocurre? - le pregunté a Elemental.

- Necesita alimentarse o de un animal o de una persona - contestó.

- Y tiene que ser ahora - añadió.

- Yo me encargo, tranquila, quédate con Damon - me dijo Stefan levantándose del sofá para quitarle el collar y dármelo mientras se transformaba en Emma.

Cuando se fueron me quedé con Damon y cuidé de él porque sabía que lo necesitaba aunque fingiera.

- ¿Qué te apetece hacer? - pregunté.

Sin embargo no pudo contestar porque alguien llamó a la puerta. Fuimos a abrir y resultó ser Tyler y Caroline. Tyler estaba herido y Caroline estaba asustada.

Los dejamos pasar, aunque muy a regañadientes de mi hermano, y lo curé.

- Túmbate en el sofá - le dije a Tyler.

- Mi hermana haciendo una obra caritativa, muy propio de ella - dijo Damon con una sonrisita algo molesta. Sabía que estaba molesto porque nos habían interrumpido en nuestro momento.

Le saqué las balas de madera con mi mente y cuando las saqué me fallaron las fuerzas y caí al suelo debilitada.

- Luna, ¿estás bien? - me preguntaron todos al mismo tiempo que mi hermano me ayudaba a levantarme.

- Sí, bueno ya te las he sacado - contesté algo desorientada mientras volvían Stefan y Emma.

Stefan se acercó a nosotros y entre los dos me ayudaron a sentarme en un sillón.

Damon le explicó lo que había pasado y él recogió las balas con unos alicates para dejarlas dentro de un vaso.

- La talla es especial - dijo cuando cogió una para observarla.

Damon cogió el vaso y lo dejó en la cocina para evitar que me debilitara más.

- De haber sido un vampiro normal habrías muerto - añadió para Tyler.

- Ese tío sabía lo que hacía. Debía llevar los guantes empapados en verbena. Estaba buscando un vampiro y no vaciló ni un segundo cuando me encontró - explicó.

- Estos grabados... - comentó tocando la bala y haciéndose daño al instante.

- ¿Están hechizadas? - le preguntó Caroline.

- No lo sé. Tienen algo - respondió mi hermano mirándolo.

- ¿Vais a ir al funeral que van a hacer en la iglesia? - nos preguntó Caroline ayudando a que se levantara Tyler.

- Sí - contestamos Stefan y yo.

- Ohhh, todavía no me he disculpado con Elena - comenté preocupada.

- ¿Cómo está? - añadí preguntando.

- Está viva, aunque no quiere acercarse mucho a los que todavía son humanos porque tiene miedo de no controlarse. Pero sabe que tú no querías - contestó para después irse con Tyler.

- Voy a ir a hablar con Bonnie, id vosotros mientras tanto a la iglesia - dijo provocando que Damon se pusiera contento.

- Genial, Stefan, ya te puedes ir - contestó Damon contento de tenerme para él solo.

- Damon, tranquilo - dije mientras Emma me abrazaba y yo la acariciaba.

- Tranquilo, te puedes ir yo cuido de los niños - añadí sonriendo.

Él me besó y yo lo abracé y Emma se acercó a Damon mientras él rodaba los ojos.

- Venga ya, si hasta vuestra hija quieres que te vayas, hermanito - le dijo.

- No, yo quiero que se quede papi - le dijo Emma molesta con Damon.

Entonces le miré a Damon y él resopló algo molesto.

- Bueno, tranquilos - dijo Stefan con una sonrisa.

- Luego me cuentas - le dije con una sonrisa al mismo tiempo que se iba.

- Mami, quiero ir contigo - me dijo abrazándome.

- No, tienes que quedarte en casa con tus hermanos - le dije con una sonrisa provocando que ella se cruzara de brazos molesta haciendo un puchero.

Damon cogió a Alura en brazos y yo cogí a Ethan y nos siguieron Emma y Nathan. Los dejamos en casa de mis padres y nos fuimos cogidos del brazo.

Al llegar me di cuenta que nos seguía un zorro naranja.

- ¿Emma? - le pregunté viendo como se transformaba de nuevo en ella.

- Emma, no puedes hacer eso delante de todo el mundo - le regañé.

- Tenía hambre, mami - me dijo con una sonrisa inocente.

La cogí en brazos y le di un poco de mi sangre.

Entramos y me mareé un poco.

- Damon, no me encuentro muy bien, huelo a sangre por todas partes y me muero de hambre - le susurré.

Él me dio la mano y fuimos al baño.

- Tranquila yo me quedo cuidando de Emma - dijo mientras cerraba la puerta y empezaba a vomitar sangre en el váter.

Damon P.O.V

- ¿Se pondrá bien? - me preguntó Emma preocupada al mismo tiempo que escuchábamos como vomitaba.

- No lo sé - contesté serio.

De pronto vino el mismo hombre que el del Mystic Grill y puse a Emma detrás de mí.

- Ah, tú otra vez ¿Acechando en funerales de pueblo? - dije protegiendo a Emma con mi cuerpo.

Entonces se acercó a mí y me dijo.

- No nos han presentado. Soy Connor Jordan - me dijo tendiéndome la mano.

- Damon. Soy misófobo - dije negándome a darle la mano.

- ¿Todo bien ahí dentro? - pregunté para mi hermana.

- Sí, tardo un minuto - me contestó agobiada.

Él apartó su mano y se separó de nosotros.

- ¿Qué te trae por Mystic Falls? - le pregunté.

- ¿Vendes biblias? - añadí preguntando.

Él rió y contestó.

- No, no, no. Vengo a hacer limpieza medioambiental - contestó.

- Me han dicho que el pueblo está contaminado - explicó.

- Ah, pues no lo sabía. Yo respiro muy bien - dijo mientras mi hermana tiraba de la cadena para salir con la ropa impecable y disculparse.

- Siento haber tardado tanto - se disculpó.

- No hay problema - contestó Connor.

- Disfruta de la estancia. Nos encantan los turistas y el paisaje es para morirse - dije amablemente.

- Oh - dije tapándome la boca fingiendo estar sorprendido.

- Qué macabro. Aún es pronto - añadí.

- Lo siento - me disculpé mientras Luna nos cogía de la mano a Emma y a mí para subir las escaleras y salir del baño.

- ¿Cómo estás? - le pregunté sentándonos en un banco de afuera.

- No me encuentro muy bien, pero seguro que no es nada - contestó echándose en mí algo cansada.

De pronto se acercó Chase a ella y se sentó a su lado.

- Hola, Luna - le saludó mientras yo cogía a Emma para ponerla a mi lado y protegerla de Chase.

- ¿Qué quieres Chase? - le pregunté molesto con él.

- Soy vampiro, como tú - dijo acercándose más a ella.

- ¡Eh!, espacio - dije apartándolo de mi hermana de un empujón.

- ¿Cómo ha pasado eso? - preguntó Luna aterrada.

- Has sido tú, me diste de tu sangre y bebiste de mi sangre hasta matarme y entonces lo disfrutamos mucho los dos juntos, ¿no te acuerdas? - contestó poniendo su mano en el muslo de mi hermana para ponerla nerviosa.

- Solo yo puedo hacer eso - dije molesto apartando su mano con cuidado de no hacer daño a Luna pero si a Chase.

- ¡¿Qué?! - exclamó mi hermana mirándome entre lágrimas.

- Yo jamás haría eso - añadió.

Le sequé sus lágrimas con delicadeza y le dije al idiota de Chase.

- Vete si no quieres que te parta el cuello - dije molesto rodeándola con mi brazo para apartarla de Chase.

Sin embargo me ignoró y Luna le pidió una vez más.

- Vete y no te alimentes de nadie, por favor - le pidió provocando que se fuera.

- Toma - dije dándole una bolsa de sangre que me había traído por si acaso.

- Gracias - contestó ella bebiendo de la bolsa que era sostenida por mí.

Separé la bolsa de ella y le dejé un momento para respirar. Le ayudé a levantarse con mi mano y le pregunté.

- ¿Mejor? - le pregunté sosteniéndola.

- No - dijo vomitando de nuevo.

- Luna, eh, tranquila - dije ayudándola a que no se manchara de sangre.

- No puedo - dijo preocupada mientras yo le limpiaba la sangre en su barbilla con mis dedos suavemente.

- ¿Qué es lo que me pasa? - me preguntó mirándome con esos ojitos tan tiernos.

- Hades me dijo que si revivía a alguien a parte de volverme oscura me podría pasar esto, pero yo no he revivido a nadie - añadió explicándome.

- No sé. Tal vez tu sangre de diosa rechaza la transición a vampira - contesté ayudando a limpiarle la cara.

- Me muero, ¿verdad? - me preguntó.

- No vas a morir - le dije mirándola a los ojos.

- Necesitas beber de las venas - añadí abrazándola.

- No. No, no. No puedo arriesgarme a matar a nadie más - dijo preocupada.

- Tal vez esté mejor muerta - agregó.

- Ni se te ocurra pensar eso, Luna - le dije enfadado con lo que había dicho. Me negaba rotundamente a perderla.

- Todo irá bien, ¿vale? - añadí acariciándole sus mejillas mientras ella se pegaba más a mí.

De pronto sonaron las campanas y nos cogimos la mano para entrar juntos. Luna cogió la mano de Emma, que estaba preocupada por su madre, y fuimos adentro. Allí ya estaba Stefan sentado.

Luna se sentó entre nosotros y Emma se sentó al lado de Stefan.

- ¿Qué hace Emma aquí? - preguntó Stefan.

- Sí, lo siento insistió en venir, quiero decir, nos siguió convertida en zorro - contestó ella algo cansada.

- Oye, April te estaba buscando. Quería ayuda para su discurso - dijo de pronto el quaterback rubito para nuestra hermana.

- ¿Dónde está? - le preguntó nuestra hermana.

- Pues no lo sé - contestó él.

Entonces la alcaldesa empezó a hablar y hice que se reposara Luna en mí, ya que la notaba cansada.

- Te quiero y te vas a poner bien porque eres la chica más poderosa del mundo - dije dejándole un beso en su frente.

- Sé que April Young quería decir unas palabras sobre su padre ¿April? - dijo de pronto la alcaldesa.

- April, ¿sigues aquí, cariño? - dijo una vez más la alcaldesa al ver que no venía.

Entonces al ver que no venía nadie preguntó.

- ¿Alguna otra persona quiere compartir sus pensamientos o sus recuerdos del padre Young? - preguntó.

Así que como nadie salía Luna decidió salir a decir unas palabras.

- Ahora que estoy aquí, estoy algo nerviosa - dijo mirándonos con una sonrisa tierna.

- El peor día cuando quieres a alguien, es el día en que lo pierdes - dijo mirándonos algo triste cuando dijo eso. Sabía que iba por nosotros y yo también me puse algo triste aunque lo disimulé.

De pronto escuchamos como caía sangre así que dije.

- Que nadie se mueva. No os giréis. Es una trampa - dije serio notando como Luna estaba muy nerviosa.

Stefan decidió salir a tiempo y le dijo.

- Tranquila. Tranquila. Ya te tengo - le dijo sosteniéndola.

La llevó de nuevo con nosotros y ella nos miró entre lágrimas.

- Lo siento - se disculpó secándoselas mientras nos abrazaba.

Entonces nos levantamos todos y los demás se pusieron a cantar una canción. Yo ni de coña iba a cantar. Así que entre los dos la protegimos de la sangre calmándola entre nuestros brazos. Emma estaba sentada en el banco.

- La sangre, la sangre. Puedo olerla. Hay mucha - nos dijo asustada mientras los dos la acariciábamos.

- Tranquila - le dije acariciándole su mano.

- Lo siento, todavía no sé controlarme - se disculpó.

- No te preocupes, aprenderás - contestó nuestro hermano.

- Ven, aliméntate de nosotros - añadió al cabo de un rato Stefan.

Él la abrazó y ella clavó sus colmillos en él para beber un poco de su sangre hasta que le tocó conmigo que primero la besé y luego la abracé para que lo hiciera.

Al cabo de un rato paró y nos dio las gracias.

- Estoy bien, pero la sangre aún puedo olerla. Tiene que ser April. Tenemos que ayudarla - dijo intentando ir ella sola.

- No podemos arriesgarnos, luego iremos nosotros - dijo Stefan incluyéndome.

De pronto Tyler interrumpió la canción y dijo.

- Amm..., perdón. Quería decir unas palabras sobre el padre Young - dijo Tyler.

- En primer curso, yo era un mocoso que pasaba de los deportes de equipo. No me importaba nada que no me afectara a mí. Pero el padre Young me hizo comprender lo importante que es ser parte de un equipo. De una comunidad. Saber sacrificarse en nombre de... - dijo siendo interrumpido por Connor que le disparó y calló al suelo entonces Stefan le tapó los ojos a Emma para que no viera lo que había pasado.

Entonces cogí a Luna de la mano y nos fuimos afuera todos.

- Damon, déjame curar a Tyler, por favor - me pidió ella.

- Ni hablar - contesté.

Luna P.O.V

- Damon, ve a por Connor y yo cuido de ella. Si pasa algo me dices, tranquilo - le dijo Stefan.

- Os agradezco que me cuidéis y estéis conmigo pero ya no soy la chica de antes que era pequeña y que estaba asustada por todo - dije mirando a Damon sobretodo.

- Está bien - dijo Damon para Stefan.

- Luna, ya lo sabemos pero podemos dejar que te pase nada antes no podíamos hacer nada cuando eras pequeña pero ahora podemos impedir que te hagan daño - respondió Stefan por Damon.

- Está bien - accedí entendiendo.

- Ten cuidado, por favor - añadí preocupada por él Damon.

- Tranquila, hermanita - me contestó abrazándome.

- Os quiero - les dije abrazándolos a la vez.

- Nos vemos luego, hermanitos - dijo Damon para irse.

Entonces Stefan me dio la mano y volvimos a entrar para ayudar a Tyler.

- Tenemos que dejar a Emma en casa de mis padres - le dije a Stefan.

- No es necesario, tranquila - dijo enseñándome el collar.

Emma que había visto el collar lo cogió para ponérselo rápidamente. Al ponérselo se convirtió en Elemental.

- Vuestra hija es una temeraria - comentó mirándonos a los dos con una sonrisa mientras entrábamos a ayudar a Tyler.

Entramos y vimos como Caroline le quitaba la bala de madera a Tyler que estaba en el suelo. Así que Tyler dijo.

- Voy a matar a ese cabronazo - dijo Tyler enfadado.

- Damon ha ido a por él. Quedaos aquí, voy a ayudarle - dijo soltándome la mano.

- Eh, ¿y qué pasa con April? - preguntó Elena preocupada.

- Nosotras nos encargamos - dijeron Elemental y Caroline al mismo tiempo.

- Voy contigo, Damon necesita ayuda - le dije a mi hermano.

- Está bien - accedió mi hermano dándome la mano.

Al salir lo llamamos entre los dos.

- ¡Damon! - lo llamamos entre los dos.

Cuando lo vimos en el suelo fuimos corriendo a ayudarle.

- ¿Estás bien? - le pregunté dandole mi mano.

- Sí, tranquila - me contestó.

- Volvamos a por Elemental para volver a casa - dijo Stefan comenzando a andar aunque lo paré y le dije.

- Bfff... estás buenísimo en traje, ¿lo sabías? - dije parándolo para besarle algo caliente.

- Y tú también, hermano - añadí abrazando a Damon.

- Luna, entre todas las chicas que he conocido tú eres la que está más buena y con diferencia, bastante diferencia - me dijo Damon coqueteando conmigo.

Eso me pareció muy tierno además de gracioso así que lo volví a besar.

- Ah aquí estáis - dijo Elemental cuando nos encontró.

- He curado a tu amiga y se pondrá bien - añadió algo enternecida viendo en la situación que estaba con mis hermanos.

Damon y Elemental se miraron y lo vi con claridad.

- Oh, no, de eso nada - dije mirando algo molesta a mi hermano mayor.

- ¿Por qué siempre tienes que... bueno que hacer que otras chicas se enamoren de ti? - dije a modo de queja aunque algo ruborizada.

Él me miró y me rodeó con su brazo para atraerme hasta él diciendo coquetamente.

- No puedo evitarlo, hermanita - dijo coqueteando conmigo. Y lo agradecí. Era super mono cuando se ponía de esa forma.

- Técnicamente estás en el cuerpo de nuestra hija o sea que si te acostaras con Damon sería como si nuestra hija se acostara con Damon - dije mirándole algo molesta a Elemental.

- Sí, perdona tienes razón. Es que bueno, es mono tu hermano - dijo sin pensárselo si quiera.

Mi hermano sonrió y dejamos así la conversación para volver a casa.

Stefan me cogió la mano y me llevó a sentarme al sofá para prepararme un vaso de bourbon. Damon se sentó conmigo y hizo algo que me gustó mucho. Me quitó la falda y las bragas para meterme su puño y provocar que gimiera de gusto.

- ¡Ah! ¡Damon! - gemí tumbada en el sofá.

Supuse que lo había hecho por impulso y por las ganas que tenía de acostarse conmigo.

- ¿Te ha gustado, hermanita? - me preguntó sacándome su puño aunque no le dejé y lo sujeté con mis manos.

Stefan estaba recogiendo a los niños con Elemental. Al volver le quitó el collar y volvió a ser Emma.

Entre tanto Damon estaba sacando y metiendo su puño al mismo tiempo que yo gemía de placer.

- ¡Ah! ¡Ah! ¡Ah! Me voy a venir no pares - le avisé gimiendo entre jadeos.

Cuando me vine paró y sacó su puño para lamerlo y después me besó.

- Ufff... estás buenísima, hermanita - dijo lamiendo su puño.

- Eres adorable - comenté mientras me volvía a poner las bragas y le acariciaba las mejillas.

Stefan que había terminado de prepararme mi vaso de bourbon se acercó a mí y me dio mi vaso pero antes de que lo cogiera Damon se adelantó y lo cogió para darme de beber.

- Damon, no soy un bebé - dije sentándome en el sofá.

Stefan se sentó a mi lado y me eché en él con una sonrisa. Pero no debí hacerlo porque inmediatamente él se puso a hacerme cosquillas.

- Con esto calmarás un poco tus impulsos - me explicó haciéndome cosquillas mientras yo me reía.

- Hemos visto a Chase - dijo de pronto Damon.

- Y estaba muy raro - añadió provocando que parase de reírme y Stefan parase de hacerme cosquillas.

Damon estaba serio.

- Luna, no estoy así por ti - dijo al ver mi cara de arrepentimiento.

- Estoy así por Chase - dijo apretando sus puños.

- ¿Qué le ha hecho ahora? - le preguntó Stefan.

- Dice que ella y él se han acostado - dijo apretando el puño.

Inmediatamente me aparté de él arrepentida porque no sabía si era verdad o no. Pero no quería hacerle daño.

- Ya vale, Damon, la estás asustando - dijo Stefan al ver mi cara mientras me rodeaba con su brazo.

- Lo entiendo, Stefan, pero el idiota de Chase va a pagar por lo que le haya hecho a Luna - dijo cerrando su puño.

- Ven, tengo algo preparado para ti - dijo Stefan al cabo de un rato dándose cuenta de algo.

- ¿No estás enfadado conmigo? - le pregunté cogiéndome de su brazo.

- ¡¿Qué?! No, jamás me enfadaría contigo - dijo abrazándome para relajarme.

Stefan cogió mi vaso y me dio de beber bourbon como si fuera un bebé.

- Mmmm... No soy un bebé - dije algo más tranquila.

Stefan sonrió y me terminé de beber el vaso.

- Lo sabemos, Luna - dijo Stefan besándome para coger mi vaso y dejarlo en una mesa.

- Bueno, vamos - dijo Damon algo molesto con Stefan.

- Voy a ponerle el collar a Emma - dije con una sonrisa.

Subí arriba y le puse el collar a Emma y aproveché y les di de mi sangre a todos. Bajé y me encontré a mis hermanos esperándome sentados en el sofá y bebiendo bourbon.

Me acerqué y me senté entre ellos con una sonrisa.

- Ya he terminado, ¿nos vamos? - pregunté con una sonrisa.

- Échate en mí - me dijo Damon haciendo que me echara en él.

- Vamos - dijo Stefan dándome la mano.

- No, la quiero para mí - dijo Damon cogiéndose de mi brazo provocando que me riera.

- Sois los mejores - les dije con una sonrisa.

- Vamos, Damon - dije al cabo de un rato soltándome de su brazo.

Mis hermanos me cogieron la mano y nos fuimos a la entrada del instituto, donde según Stefan habíamos quedado con todos. Stefan nos dejó un momento a solas y volvió con unas cajas de cartón. Entre tanto Damon y yo estuvimos disfrutando de la compañía de ambos. Nos sentamos en un banco y él me preguntó.

- ¿Te gusta esto? - me preguntó poniendo su mano en mi muslo provocando que me pusiera nerviosa y ansiosa de hacerlo con él.

Yo asentí algo nerviosa y él se rió un poco. Entonces se me ocurrió meter mi mano en su camisa para rozarle su piel y hacerle unas caricias.

Al volver Stefan con las cajas saqué mi mano de su camisa y a mi hermano le molestó pero aún así le preguntó.

- Stefan. ¿Qué hacemos aquí? - le preguntó levantándose del banco al ver que me había levantado para ayudarle.

- Terminar la ceremonia que no pudimos celebrar antes. Tenemos que empezar a reponernos - dijo mientras ambos repartíamos los farolillos.

- Todos hemos perdido mucho últimamente. Y nos hemos estancado. Evitamos el tema, hacemos bromas, ignoramos cómo nos sentimos. Nos negamos a afrontar el duelo - dijo al terminar de repartir farolillos.

Ese pequeño discursó provocó que me entristeciera al recordar lo que sufrí tras su muerte. Pero supuse que Damon se encontraba peor que yo, ya que casi todos sus amigos habían muerto, Ric, Rose...

- ¿Vais a encender farolillos? - preguntó provocando que lo mirase entre lágrimas. Estaba así por él porque me sentía triste por él.

- Sí. Todos necesitamos esto - contestó Stefan.

- Lo que necesitamos es saber quién es el cazador y qué sabe de la muerte del Consejo. Tenemos cosas más importantes que hacer que esto - dijo Damon molesto al ver mis lágrimas.

- Esta noche no - le contestó Stefan.

Entonces él soltó una risita de molestia y Stefan encendió un farolillo y dijo.

- Este es por mi amiga Lexi y por Alaric - dijo Stefan lanzándolo.

Le pasó el encendedor a Matt que dijo.

- Este es por Vicki - dijo encendiendo el farolillo para lanzarlo y pasarle el encendedor a Caroline.

- Este es por mi padre. Y el de Tyler - dijo encendiéndolo para pasárselo a Jeremy.

- Por nuestros padres, por Vicki, Anna y Alaric - dijo encendiendo su farolillo para lanzarlo y pasarle el encendedor a mi hermano.

- Ni de coña. No pienso hacerlo - contestó mi hermano yéndose.

- Yo... - dije mirando a Stefan y a Damon.

- Ve con él, tranquila te necesita - me dijo Stefan con una sonrisa que me tranquilizó un poco.

Al ver que Damon se había alejado me acerqué rápidamente a él deprisa.

- ¡Eh!, Damon - le llamé acercándome a él.

Damon me miró y yo le abracé preocupada por él.

- Vamos a donde quieras, ¿vale? - le dije rodeándole con mi brazo.

- Vamos al cementerio - me contestó algo serio.

- Vale - dije haciendo que nos siguiera con mi mente una botella de bourbon de la que pudiéramos beber los dos.

Nos sentamos juntos en el suelo del cementerio, en frente de la lápida de Ric y le di de beber de la botella de bourbon con ternura para que no se sintiera triste.

- No estés triste - dije acariciando sus mejillas.

Damon P.O.V

Me gustaba eso de que mi hermanita pequeña intentara cuidarme como si fuera su hermano pequeño pero me molestaba al mismo tiempo que se sintiera culpable por la muerte de Ric. Estaba molesto porque no quería que se sintiese así de mal.

- Eh, vale, hermanita, estoy bien - le dije haciendo que se echara sobre mí.

- No quiero que sufras por mi culpa - me dijo mirándome con unos ojitos tiernos entre lágrimas.

La abracé con mis brazos y ella me dijo.

- Te amo, Damon - me dijo besándome.

- Luna, simplemente estoy triste por la muerte de mi amigo, no es por ti, no es culpa tuya - le expliqué acariciándola.

- ¡Maldita sea, Luna, yo tampoco quiero que sufras! - añadí exclamando para cogerla y sentarla en mi regazo con sus preciosos ojos mirándome.