Pues la discusión había comenzado, Chloe estaba visiblemente enojada y cuando se ponía así no comprendía razones. Ella era la reina abeja del colegio y como tal se le debía respeto o al menos eso era lo que ella creía. 

—Ya te lo dijeron todos, no se omitió a ningún estudiante, todos fueron notificados, ¿cierto? —alegó una vez mas el muchacho, quien como en pocas ocasiones se veía totalmente molesto.

—¡Pues yo, ya te dije que no es verdad! —la molesta Chloe se cruzó de brazos.

—Escucha niña caprichosa, todo esto se vuelve muy molesto y aun que a ti no te guste, ya se hizo el cambio. Así que toma tus cosas y ve para donde te corresponde
—sus ojos azules se centraron en el rostro de ella con extrema molestia. Ese era el, Luka Couffaine. Alguien que para muchos pasaba desapercibido debido a lo reservado que era en la escuela. El y su hermana eran un poco diferentes y eso para muchos de sus compañeros los convertía en un par de apestados. Pero desgraciadamente una oportunidad tan buena como estudiar en Françoise Dupont no se puede desperdiciar, así que por ende a diario tenía que soportar a todos esos tipos que asistían con ellos a la escuela. Chicos que tenían ciertas ventajas sociales y económicas, y que no estaban al tanto del sistema de desigualdad que impera en su propio país.
Claro estaba que no todo el mundo era así, pero la mayoría se sentía mas y esa era una de las razones, por las que prefería juntarse con los amigos de se hermanita, pues entre ellos había encontrado un ambiente comodo.
Juelka: La única persona que le daba un propósito a su vida era ella. Su hermanita necesitaba de el y a cambio de su ayuda le mostraba su respeto y admiración. Luka no podía permitir jamas que alguien la hiciera llorar.

Los labios rosas de Chloe formaron una sarcástica sonrisa, enderezó su postura, respiró profundo y con firmeza se plantó frente a el sólo para burlase despiadadamente. —¿De verdad? ¿me estas ordenando algo a mi? ¿Quién te crees? Maldito Punk de mierda. Puedes irte al diablo —palabra tras palabra, el ambiente se calentaba cada vez mas.
Ninguna de las personas presentes se animaba a hablar, sinceramente aquella discusión era solo de ellos y meterse parecía para nada buena idea.

—Rose, ¿podrías prestarme la lista que te dieron por favor? —de inmediato, la chica se la entrego. Una lista que aparentemente se les habían entregado a todos y cada uno de los estudiantes del colegio. —Muy bien— Analizó con cuidado la hoja con todos los nombres de la clase —Bourgeois, aquí estas. Tus cosas se movieron al casillero 17 del área 4, este casillero le pertenece ahora a Marinette Dupong-cheng

La peli-negra apenas y asomaba la cabeza y por su parte la Chloe estaba que echaba humo por las orejas y fuego por la boca.
—¿QUE? ¿SE ATREVIERON A TOCAR MIS COASA SIN MI AUTORIZACIÓN? ¿QUIÉN MIERDA SE ATREVIÓ?. —Algo asustada la profesora quien esperaba al director se escondió detrás de Marinette.

—Deja de actuar como una inmadura. Niña arrogante, mimada y consentida. Ve a tu área y deja de hacernos perder el tiempo. Las clases ya están por iniciar y a nadie le gustan tus berrinches.

—Creo que no estas informado de con quien tratas ¿cierto? Puedo hacer que te la pases muy mal maldito vago.

—¡No me digas! — respondió el chico con una sínica sonrisa despreocupada, encendido aun mas el fuego en Chloe.

—No creó que quieras comprobarlo— enojada se acercó a el y eso era una mala señal, pues Chloe molesta era capaz de todo. Incluso golpear a una chico de manera abusiva, sabiendo que este Jamás respondería. —Mira estúpido punk, tu a mi me respetaras o te juro…

—¡CHLOE, detente por favor! —La voz de Adrien la hizo voltear de inmediato. —te estas portando muy grosera con todos nuestros compañeros, ellos te están explicando como sucedieron las cosas. No seas inmadura trata de comprender.

—Al fin, alguien consiente.

—¡tu cierra la maldita boca cierra la maldita boca! —y de nuevo se acercó muy enojada a Luka, una vez mas dispuesta a destruirlo.

—¡Basta Clo! —Extrañamente la muchacha se detuvo. Su corazón latía rápido y deseoso de golpear al insolente que tenía enfrente, pero la voz de su amigo parecía ejercer cierto poder sobre ella. —Prometiste que no pelearías mas. Dijiste que querías ser mejor persona, que lo harías por mi —y con aquellas palabras la frenó al demonio por completo. Chloe miró con molestia a
Luka, tomó sus cosas y dejó de discutir.

—Vez, Chloe es mej…
Inesperadamente de un puñetazo tiró a Kim, quien se había acercado a ver el chisme. Sin duda dejó a todos sorprendidos, no solo por su fuerza, si no por la furia que desbordaba en ese momento.

—¡señorita Bourgeois , no puedes hacerle algo así a un compañero, te reportare por este salvaje comportamiento! —Gritó furioso el director, mismo que acababa de llegar y quien fue totalmente ignorado por la rubia.

—¿Juls, estas bien?— De inmediato Luka corrió junto a ella, pero la callada chica solo respondió a su hermano con una linda sonrisa. La cual confirmaba perfectamente que estaba bien y que sobre todo estaba satisfecha al ver que el temible demonio de Françoise Dupont no había logrado doblegar a su querido hermano.

—No importa cuanto tiempo pase, Chloe no deja de ser una odiosa, aprovechada e inmadura —comentó Alya con cierta pizca de fastidio.

—Es verdad, presume ser una princesa pero no sabe comportarse como una, es demasiado violenta —se le unió Marinette a la morena.

—Clo es una persona muy buena, solo es algo explosiva —comentó Adrien con algo de pena. A el no le gustaba para nada que Chloe diera esa clase de shows. —Señor Damocles no sea tan duro con ella —Adrien parecía bastante preocupado, sabía que las acciones de su amiga habían llegado demasiado lejos y quizás traerían consecuencias terribles para ella.

—comprendo que sea su amiga joven Agreste, pero este comportamiento es inaceptable en esta institución.

—Pero…

—Max, lleva a Kim a la enfermería por favor, para que le echen alcohol o algo
—ordenó el robusto hombre. Pues en todos sus años de docencia jamás se había topado con un personaje como Chloe Bourgeois.
—Adrien. No te preocupes. — Sonrió decidió. —ve a clases, todos vayan.

Algo apenado Adrien tomó sus cosas y caminó hasta su salón, siendo seguido por el resto de sus compañeros y al mismo paso que Marinette, quien con cariño le trataba de consolar.

—¿Cómo puede alguien como Adrien ser amigo de ella. El parece tan amable seguro Chloe lo amenaza —dijo Max, ayudando a Kim a ponerse de pie.

—¿Amenazar? No seas tonto, ella tiene mal carácter pero seguramente con el es un cubito de azúcar, además Chloe es bellísima ¿verdad Luka?.

—¿Bellísima?, No lo creo. Vi tu cara de terror mientras ella estaba aquí, es un gorila en el cuerpo de una mujer. Sinceramente espero y le hagan pagar su comportamiento.

Sus deseos estaban a punto de volverse realidad, pues esa misma tarde después de clase, el director  al fin se armó de valor y decidió enfrentar a su mas grande dolor de cabeza. 

—No se por que esta creando tanto lío, por algo tan absurdo —dijo la rubia despreocupada miraba su celular, restándole importancia al señor Damocles, quién la miró de manera fija y solo movió la cabeza.

—señorita Bourgeois. Desde que traté con usted por primera vez, me pregunté en que clase de persona se convertiría en un futuro. Y siempre he querido suponer que los años la van a hacer cambiar y se convertirá en un miembro funcional para este país. Que usted ingresó a esta honorable institución para poder ser alguien en la vida. Este lugar es exclusivo y solo admite a personas con deseo de aprender y por ende los cupos son muy limitados. Espero que usted este aquí por ese deseo. Pues de otra manera afirmaría que solo pudo ingresar por él poder de su padre.

—¿Qué quiere decir?¿Por que siempre habla con rodeos? ¿No le parezco una estudiante digna? —respondió bastante enojada, dejando a un lado su celular.
—¡Vamos, hable que tengo muy poco tiempo para tratar esta clase de asuntos. Hoy es día de hacer compras! —Por primera vez en mucho tiempo el directo de Françoise Dupont alzó la voz y le ordenó respeto a la chica.

—Mira Chloe, siempre eres tu con quien tengo este tipo quejas. Golpes, Peleas, groserías a los profesores, etc. Y al ser un problema recurrente este comportamiento merece una expulsión definitiva, pero como ya debes saber, muchos factores me lo impiden.

—Solo le pegué un puñetazo a un idiota, soy  una chica frágil ¿Que tanto daño pude causarle? ¿Cuál es el problema? Estaba muy molesta, ¿dígame a quien se le ocurrió esa estupidez de cambiar de casilleros? Es una mierda, o al menos me lo hubieran hecho saber.

—el problema aquí no es el idiota al que golpeaste, el problema es que es el quinto idiota este mes al que le pegaste debido a una rabieta. Además ya te lo dijeron tus compañeros, todo el mundo se enteró del cambio de casilleros. Se informó por whatsapp, facebook, inclusive se hizo una junta para notificar.

—¡La junta, la junta, la maldita junta! ¡Todo el mundo habla de eso, pero jamás me enteré de nada! —se cruzó de brazos, sin comprender razón alguna.

—¿Eres alumna de otra escuela?, por que solo así no te enterarías. Marinette dice que intentó por todos los medios darte tu notificación, pero tu la ignoraste, así que Sabrina tubo que encargarse de mover tus cosas.

—Esa maldita panadera siempre interponiéndose en todo, ¡Demonios! — se levantó enojada dispuesta a ir a enfrentar a la pobre Marinette. Pero entonces la firme voz del director la detuvo.

—Siéntate Chloe —ordenó el corpulento hombre sin dejar de mirar su computadora y sin perder de ninguna manera la compostura.

—¡Deje de llamarme Chloe! —gritó bastante molesta. —¿sabe que? Esta bien, expúlseme, que mas da, no me importa es una buena oportunidad para ir a la playa, tengo muchas ganas relajarme en un clima mas cálido y ya verá el castigo que recibirá por parte de mi papi.

—Eres demasiado engreída —sonrió triunfante el hombre. —Expulsarte es como premiarte, así que he decidido que que llegó el momento de otorgarte un castigo.

La rubia soltó una infame carcajada salida de lo mas profundo de maléfico ser
—¿Castigo? ¿De que demonios habla? —no podía dejar de burlarse de manera sínica. El hombre frente a ella se trago todo su coraje esperando para dar el golpe.

—El señor Ríos, nuestro intendente esta enfermo y tardará algunas semanas en volver.

—¿y eso que tiene que ver conmigo? Contrate a un intendente nuevo y ya
—Chloe ya estaba perdiendo la paciencia, no soportaba para nada que la gente le hablará con rodeos y esa pequeña discusión ya no le estaba gustando. Pues el director le había dejado de hablar con respeto y ahora la tuteaba.

—¡Si tienes razón!. La escuela necesita a otra persona. Pero no contrataremos a nadie mas. Serás tu quien lo cubra estas semanas, limpieza de pasillo, salones y sobre todo aseo de baños. Todo esto por supuesto lo harás antes y después de clases.

—¿PERDIÓ LA RAZON? —en un solo movimiento se puso de pie y golpeo el escritorio. —¡ESO ES RIDÍCULO, PAPI JAMÁS LO VA A PERMITIR!.

—Hace rato hablé con tu padre y el honorable alcalde esta de acuerdo dijo: “denle un castigo ejemplar a mi hija” y ser expulsada en tu caso no lo es —la chica maldijo mentalmente a todo el mundo. Ahora comprendía su seguridad, pero eso no se quedaría así. La orgullosa mujer tomó su celular y llamó en repetidas ocasiones a su papá, pero este jamas atendió. —¿Tu padre no te informó de su viaje a Estados unidos? Al parecer regresará en una o dos semanas.

—¡Pues no lo haré!.

—Pues no tienes otra opción, ya que si te niegas también te perderás la fiesta de primavera y demás privilegios.

jaque mate.

—todo esto, por culpa de ese Punk, si no me hubiera provocado, jamás hubiera golpeado al inútil de Kim —se lamentó en voz alta, haciendo el mas terrible de los berrinches.

—Deja de buscar culpables, por que la única que provocó esto fuiste tu, así que si no tienes algo mejor que decir vete a casa. Las clases terminaron y  tu primer día como intendente comenzará mañana antes de clase.

Molesta y con expresión de pocos amigos Chloe se levantó de la silla pero antes de salir de la oficina se detuvo, solo para advertir de lo terrible que sería su venganza. —¡usted y el mal nacido de Couffaine se arrepentirán!.

—Lo que digas niña. Vete ya o se te va a ser tarde para hacer tus compras.

Chloe echaba humo por las orejas, estaba tan molesta que no podía controlarse. Y por su parte el director brincaba de felicidad, pues al fin se había enfrentado al peor de sus temores y mejor aún había resultado triunfador.

La chica llego hasta el estacionamiento, pateó un par de veces una bicicleta que esta allí, mientras esperaba el maldito auto que la llevaría a casa.

—¡Clo!.

—¿Qué haces aquí? ¿Por qué no te has ido a casa? ¿A caso esperaste tanto tiempo sólo por mi? —maravillada corrió hasta el rubio que lucía algo desanimado.

Caminaron por la escuela durante un rato hasta llegar a una pequeña banca, donde ambos tomaron asiento. Ninguno de los dos decía algo, ella apenas y lo miró pues estaba muy sonrojada.—En realidad, yo estaba muy preocupado por ti. ¿Dime, fueron muy duros contigo? —preguntó al fin Adrien tomándole la mano a su amiga con mucha preocupación

—El director es un bastardo. El quiere que trabaje como intendente de la escuela ¿puedes creer esa tontería? Soy Chloe Bourgeois, prefiero ser expulsada antes de pasar por una humillación así y todo esto es por culpa de ese Punk.

—fuiste tu, quién golpeó a Kim.

—ya lo se pero no me importa. Además sabes que los jueves no son mi día favorito de la semana —arrugó la nariz con notable desagrado. —¡Maldito Gordo lo odio! Haré algo horrible, algo que lo va a hacer enojar. No tendrá mas opción que botarme, nadie le gana a Chloe Bourgeois —reía sin darse cuenta de las lagrimas que habían comenzado a brotar de los ojos color esmeralda que tanto le gustaban.
—¿Qué? ¿Por qué lloras?.

—Aceptaría todo menos que tu no estuvieras, por favor no hagas que te expulsen, no te vayas de la escuela ¿si? Clo, mi mundo no estaría completo si tu no estas. Tu eres una amiga valiosa. —la tristeza de Adrien era genuina. No soportaba la idea de perder a su Clo. Ella no era la persona más agradable de todo el planeta, era cierto. Pero si había sido una buena amiga con el, una persona incondicional que lo había llenado siempre de alegrías y le brindaba su afecto incondicional. Adrien la miraba como a una hermana y en el fondo siempre la había considerado una buena persona.

—¡Oye, ya basta ¿si?!. No haré nada pero deja de llorar pareces un tonto.

—¿Prometes no hacer nada?.

—Bien, lo prometo.

—Clo no soportó la idea de estar sin ti —De manera amable sonrió, pues cada acción de Adrien le demostraba que no tenía que perder las esperanzas y que quizás con un poco de paciencia el se volvería mas que su amigo.  Mas tranquilo, el rubio le ofreció la mano a su amiga. —te compraré un helado y te llevaré a tu casa.

—Esta bien—  sonrió ella.

(…)

Ya en la noche, en su cuarto Chloe meditaba todo lo sucedido, mientras con una pelota golpeaba el techo, al par que su amado gato ronroneaba a su costado intentando llamar su atención. «¡Maldito Punk!, todo es su culpa»  masticaba su goma de mascar de fresa. Mientras repetía una y otra vez. —Escucha niña caprichosa, todo esto se vuelve muy molesto y aun que a ti no te guste, ya se hizo el cambio.— irritada arremedaba las palabras del chico con odio. —Debiste ver su estúpida cara de caca —Soltó esto último con extremo coraje.  —como la odio, pero esto no se quedara así, nadie se mete con Chloe Bourgeois y vive para contarlo.

CONTINUARA...

¿Que les pareció el capitulo?

¿Que creen que va a pasar?

Este es el segundo capítulo esperando que les gusté mucho. Ya viene lo bueno.

Bueno Sin mas me despido.

Gracias por leer y perdón por las faltas de ortográfica. Si les gusto no olviden comentar como siempre su opinión es importante❤❤