La diferencia de altura ⬆️, para los que se preguntan si Lui es enano no, Lean es menor que Lui.

Narra Lean:

Llegamos a los Relling Bulls pero nos encontramos a Shu.

Shu: ya no pueden entrar!

Lean: como que no?!?

Shu: ya habíamos hablado de eso.

Lean: no te escuché, estaba entrenando.

Shu: Si no llegaban antes de las 5, que es cuando todos están ocupados con sus respectivos entrenamientos, tendrían que quedarse afuera, ya que ahora todos están en los pasillos por el descanso.

Lui: porqué?

Shu: porque nadie puede saber que eres un niño.

Lean: entonces hasta cuándo podemos volver?

Shu: hasta el toque de queda, a las 8.

Lui: y a dónde iremos mientras?

Shu: pueden ir al centro, después de todo querías conocer el lugar, no?

Lane: no soy niñero! No voy a cuidar al niño!

Lui: entonces supongo que no quieres a Lucifer de vuelta?- dijo mirándome travieso pero con arrogancia.

Lane: de que hablas? Lucifer está en mi bolsill...- me callé porque realmente no estaba ahí.

Lui: qué? No encuentras a tu bey?

Lane: ¡¡eres un maldito carterista!!

Lui: que te digo- dijo mirándose las uñas- tengo muchos talentos ocultos.

Lane: vete al infierno!

Shu: Lane! No le digas eso al niño!

Lui: tranquilo Shu- dijo con un tono tranquilo- después de todo de ahí acabo de salir.- dijo con una cara tan cínica que hasta a mí me asustó- bueno, nos vamos ya?- dijo con un tono dulce y tierno.

Shu no salía de su shock todavía cuando Lui me tomó de la mano y intento jalar me.

Lui: Vámonooos, porfaaaaa- dijo asiendo puchero con sus cachetes inflados e intentado moverme de mi lugar. Era demasiado lindo.

Lane: tch... Cómo sea.

Caminamos hasta llegar al centro.

Lane: dónde quieres ir?

Lui: no lo sé...- dijo cuando algo llamó su atención- ahí! Por favor!- dijo sujetándose de mi abrigo y señalando una tienda de cierto dulce.

Lane: te gustan los dangos?

Lui: mucho!- dijo observando el lugar con cierto brillo infantil es sus ojos- es mi dulce favorito!

Lane: entonces vamos- dije con cierto ruborcito, era muy lindo así, pero me daba vergüenza admitirlo.

Lui: Yei!!!- dijo y salió corriendo en dirección a la tienda.

Lane: lo que faltaba!- corrí tras de él- no corras!

Lui: ven! Si eres blader debes tener buena condición física!

En la tienda...

Lane: que quieres pedir?

Lui: hanami dango por favor!- dijo señalando los dangos dulces de 3 colores.

Lane: entonces si tienes modales?

Lui: tenerlos y no usarlos son dos cosas totalmente diferentes.

Lane: Haste a la idea que ésto no es Japón y tal vez no sean tan buenos.

Lui: no importa! Me encantan los dangos! 🤭

Señora de la tienda: que niño tan lindo.- dijo en un tono amistoso.- que te parece si te regalo una caja extra de dangos?- al pequeño le brillaron sus ojitos- de que sabor quieres?

Lui: pueden ser esos salados?- dijo señalando los que estaban expuestos en la vitrina.

Señora de la tienda: seguro? A los niños normalmente les gustan más los dulces.

Lui: es que son para mi amigo y su erizo! Y no les gustan mucho las cosas dulces.

Señora de la tienda: ya, entonces ten!

Lui: gracias!- dijo saliendo de la tienda.

En una banca en el parque...

Lui: éstos son para tí!- dijo dándome la caja con los dangos salados.

Lane: por cierto, como sabías que a mí y a Harry no nos gustan mucho las cosas dulces.

Lui: es que cuando me encontré con Harry la primera vez olía a sal...

Lane: y eso que?

Lui: normalmente el azúcar tiene un olor más fuerte que la sal, y Harry olía salado, no dulce, y puedo suponer que guardas a veces comida en tu bolsillo junto a Harry?- yo asentí dándole la razón- entonces casi nunca comes cosas dulces, porque no te gustan! Y no las guardas en tu bolsillo porque casi no las comes, además! Si llevas algún alimento en tu bolsillo es porque te gusta y lo quieres llevar contigo, no?

Lane: tienes razón- dije dándole un mordisco a mi dango salado- eres muy listo, no has considerado ser detective?

Lui: si,- se come una de las bolas del dango de una y la mastica- pero lo mío es ser blader.

Seguimos en silencio, pero no uno incómodo, hasta que acabamos de comer.

Lane: devuélveme a Lucifer.

Lui: déjame pensarlo... No!

Harry me miró como pidiéndome que lo distrajera y eso hice, después de todo nos entendemos bien y ya había comprendido su plan.

Lane: Lui- me volvió a ver- cuál es tu color favorito?

Lui: eh? Supongo que el blanco, tal vez celeste o quizás morado.

Dirigí mi mirada a Harry que ya se había metido a la ropa de Lui sin que este se diera cuenta.

Lane: Lui, dónde está mi bey?

Lui: no te diré!

Lane: tu te lo buscaste, Harry! Ahora!

Harry se comenzó a restregarse contra el costado de Lui... y adivinen quién recupero a su bey.

Lui se recostó en mi hombro y comenzó a hablar.

Lui: como conociste a Shu? Según me han dicho yo le dejé un recordatorio permanente de que no debía meterse conmigo en la cara, me arrepiento un poco.

Lean; entonces esa cicatriz se la hiciste tú?- el infante asintió- pues yo...

Le estaba relatando la historia cuando noto que su respiración era más calmada y su cuerpo era más pesado.

Se había quedado dormido.

Lane: ya es hora de volver- dije y comencé a caminar con Lui en mis brazos hasta el edificio de los Relling Bulls.

Pensamientos de Harry: ya sabía yo que me iba a volver a meter a la ropa del niño, y seguro pasará otra vez.

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Que les pareció el capítulo? Me expresé bien?