ACTO II (Doceava Escena)

Escena XII: La historia personal de Iryuto Tacuri en la región de Huancayo

Fecha: 12 de abril del 2019 (Noche)

Personajes:

· Iryuto Tacuri

· Lugio Arotengo Ccalla

· Huancaíno

· Huancaína

Lugar: Wari Willka - Huancayo

(Descripción del lugar: Wari Willka es un espacio amplio que consta de los siguientes aspectos. En primer lugar, el suelo es un césped verde que se halla debajo de una casa de piedra. En el centro del escenario se halla un muro hecho de piedra en forma cuadrangular. Además, el ambiente se halla iluminado, porque la escena es de tarde. En segundo lugar, puedo decir que existen muchas piedras en el piso excepto en los dos lados del escenario.)

(Se abre el telón)

(Ingresa Lugio Arotengo Ccalla caminando al escenario por el pasillo izquierdo)

(Ingresa Iryuto Tacuri caminando al escenario por el pasillo derecho)

Lugio: (sincero) Amigo, ¿Me pregunto cuál es la razón de que Holinoico nos haya seguido hasta aquí? Me siento completamente listo para enfrentarme a él, aunque a veces sea necesario prepararse para derrotarlo. Siento que es un problema en nuestro viaje, porque siento que nos distrae de nuestro objetivo. Definitivamente, me siento profundamente convencido de que él nos va a seguir molestando.

Iryuto: (cordial) Lugio, es que considero una falta de respeto que ese maldito Lugio siempre nos siga persiguiendo a todas partes como si fuéramos ratas para atrapar. Nosotros solo hemos venido caminando, porque queremos llegar a Lima. Quiero que se aleje de nosotros cuánto antes. Espero que ese espíritu se vaya por mis poderes de curandero. También puedo hablar con los espíritus por si no lo sabías.

Lugio: (sincero) Iryuto, siento que eres fundamental en este viaje para poder alejar a los espíritus demoníacos. Es cierto que Holinoico puede cambiar, pero él no lo quiere hacer. No queda de otra que decirle a él o alejarnos. Lo que más temo es que me haga olvidar de mis propias metas. En realidad, es primordial que vengamos armados.

Iryuto: (cordial) ¿A qué te refieres con estar armados? En realidad, me gustaría decir que Holinoico es una buena influencia, pero no lo es. Nuestro armamento debe estar constituido por muchas ramas para ahuyentarlo. No conocemos muchos sobre pelear, porque ni siquiera sabemos dar golpes. ¿Quieres practicar o mejor elaboremos la fogata que no pudimos hacer?

Lugio: (sincero) Iryuto, es momento de que empecemos a planificar nuestras historias de terror. Te quiero contar varias experiencias terroríficas que he vivido alrededor de mi infancia. Siento que a veces resulta innecesario discutir por Holinoico cuando podemos pasar un buen momento en una fogata.

Iryuto: (cordial) Lugio, es hora de que pensemos en construir una buena fogata. Además, siento que es necesario contar más de tres historias que también pueden ser anécdotas. Si quieres tambien podemos intentar conseguir comida o por lo menos encontrar un río para beber agua de allí. Espero que andes preparado para lo que se viene.

Lugio: (sincero) Amigo, quiero estar al lado de ti en toda la noche. No me quiero despegar, porque creo que la oscuridad se vuelve peligrosa. No deseo que Holinoico aparezca y vuelva a molestarnos mientras disfrutamos. Yo iré a conseguir yesca y si quieres tú puedes conseguir la leña para que la fogata funcione.

(Ingresa el huancaíno caminando al escenario por el pasillo izquierdo)

(Ingresa la huancaína caminando al escenario por el pasillo derecho)

Iryuto: (cordial) Lugio, espero que comiences a pensar de una forma más positiva. A veces pienso que eres muy pesimista en todo este viaje y necesito que empieces a cambiar tu forma de ver el mundo. Si empezaras a hacerlo, entonces siempre tendrías conciencia de que siempre debes intentar pensar en forma positiva.

Lugio: (pesimista) Es que a veces le da miedo no cumplir mis sueños más profundos. Ojalá algún día comprendes los pensamientos que tengo. A veces suelo imaginar que mis padres me dicen que debo regresar a casa y a veces eso me pone mal, porque quiero sentirme feliz para mí. Asimismo, planeo empezar a meditar tal vez.

Iryuto: (amable) Lugio, es una buena oportunidad para que te comente mi historia. Cuando era niño, mis padres siempre me recomendaban que fuera abierto con las personas para obtener aprecio de ellas. Incluso me dijeron que debía a veces sostenerme o cuidarme a mí mismo en caso de ser necesario.

Lugio: (sincero) Iryuto, ¿Y cómo viviste tu infancia? ¿Acaso siempre te recomendaban ir hacia cualquier lugar sin tener que pensar en lo que ibas a necesitar? En mi caso, mi padre era súper protector conmigo, porque pensaba que era menos atento que mi hermana. Siempre paraba pendiente de mí. Una vez pensé que era demasiada protección.

Iryuto: (intrigado) Lugio, mi padre era serio hasta que una vez mi madre le contó un chiste y se río. Aquella risa significaba un pequeño instante de felicidad para él, porque cuando murió mi madre nunca volvió a sonreír. Es una tristeza que ese hombre o más bien mi padre se mantuvo serio hasta el día cuando recordamos a mamá.

Lugio: (sincero) Iryuto, es tiempo de que comencemos a contar nuestras experiencias. En una ocasión, mi madre que debía ir a la plaza para comprar pan y fui, pero me perdí. Por eso, te pedí que me acompañarás para que no me perdiera por ningún lugar. Ojalá no te haya aburrido de ninguna manera y puedes seguir contándome tu vida.

(Lugio Arotengo Ccalla pone su brazo izquierdo sobre los dos hombros de Iryuto Tacuri)

Iryuto: (cordial) En mi adolescencia, me acuerdo que siempre cautivaba a las chicas, pero mi padre me pedía que me enfocara en el curanderismo. Mi padre siempre quería que fuera fuerte por fuera y dócil por dentro. No quería que aquel joven curandero se convirtiera en un falso adivino que no realizaba sus labores de manera correcta.

Lugio: (sincero) Amigo, es tiempo de que me empecemos a estar serios. Busco obtener alguna experiencia mala tal vez y podamos solucionarla para evitar que se convierta en una herida dañina que pueda afectar nuestro presente. En realidad, a mí me gustaría que me contaras más de tu adolescencia temprana tal vez. ¿Alguna vez te has sentido enojado?

Iryuto: (nostálgico) Lugio, es mejor que no te lo cuente, pero veo que lo deseas escuchar. Cuando tenía diecisiete, mi padre rompió todos mis instrumentos que servían para el curanderismo. En aquella ocasión, incluso tenía ganas de pegarle muchas veces hasta que arreglara todas mis herramientas. Tengo mucho apego a mi oficio de curandero hasta ahora. Espero que él haya aprendido la lección.

(Iryuto se acerca al huancaíno y comienzan a hablar entre ellos)

(Lugio se acerca a la huancaína y comienzan a hablar entre ellos)

Huancaíno: (bondadoso) Buenas noches, ¿Ustedes necesitan algún abrigo o acaso necesitan alguna carpa para pasar toda la noche y protegerse del frío? Es momento de que todos empecemos a cuidar, porque a veces el frío de la sierra suele ser terrible en la noche, porque incluso nos podríamos congelar.

Iryuto: (amable) Señor, necesitamos que alguien tenga un fósforo para armar la fogata. Siento que podemos quizás conseguir refuerzos de algún lugar. Me gustaría saber si es que alguno de ustedes ha visto leña, porque queremos tener una noche agradable en este momento. Quiero pensar en positivo definitivamente. Todo saldrá bien.

Huancaína: (amable) Es mejor permanecer tranquilo por mucho tiempo en vez de pretender que todos. Me gustaría saber que nos acompañasen para ganar tiempo y que no se mueran de frío. Uno no puede pretender dormir en el campo abierto cuando una gente bondadosa como nosotros puede. Mejor vayan a nuestra casa.

Lugio: (dormilón) Señores, mi amigo y yo estamos listos para acostarnos en cualquier lugar que tenga cama o al menos en donde podamos dormir. No quiero sentirme agotado o mal si es que duermo en el campo mientras mis pies se encuentran sufriendo por el frío.

Huancaíno: (cordial) Lugio, es hora de que empecemos a tomar mayor seriedad y que considero una mejor forma de comenzar a conocernos es que vayan a otra casa para pasar la noche. Creo que así no pasarán tanto frío en la noche.

(La huancaína se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo)

(El huancaíno se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo)

(Iryuto Tacuri se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo)

(Lugio Arotengo Ccalla se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo)

(Cierre del telón) (Fin de la escena XII)

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top