—Manuel me tomo mucho tiempo juntar el coraje para estar aquí, así que te pido por favor que me escuches, si no lo haces podrías arrepentirte, porque lo que tengo que decirte es muy importante, agradecería que no me interrumpieras, responderé las dudas que tengas cuando terminé de hablar— pidió

—Esta bien— aceptó él

Todas las personas reunidas en ese lugar se encontraban altamente intrigadas

—Ya paso 1 año desde que nos divorciamos, no estoy aquí para intentar recuperarte o pedirte algo, yo ya superé lo nuestro, medite mucho sobre si debía decirte esto o no, pero se que las mentiras no pueden ser ocultas para siempre y tarde o temprano terminarias enterandote y seria peor, en primer lugar Víctor y yo estamos juntos, en una relación muy seria, incluso nos comprometimos, antes de que alguno se altere— observando a Manuel & Alex— no planee esto, fue algo que simplemente se dio, al separarnos no soportaba vivir aquí y verte feliz con Chiara por todos lados, decidí comenzar de nuevo, por cosas del destino terminé comprando un boleto de avión hacía España, un día simplemente nos encontramos con Víctor y comenzamos a hablar, él quiso ayudarme, sabía que no era fácil comenzar de nuevo en un lugar desconocido, con el tiempo nos hicimos amigos y a pesar de que reprimía todos los sentimientos que comenzaban a surgir por él, al final dejé de ser tan dura conmigo misma y decidí ser feliz, tal vez esto no les parezca correcto, pero así es, nos amamos y queríamos que lo supieran por palabras nuestras y no por alguien más— explicó

—No puedo creerlo Víctor— dijo Manuel molestó

—Aún no terminó— declaró Mara seria— a los meses de estar viviendo en España yo me di cuenta de que estaba embarazada—vio como Manuel la miraba de manera acusadora— el bebé es tuyo Manuel, si no me crees esta bien, pero es la verdad, no lo sabia cuando nos separamos, al ir a la consulta médica recibi muchas opciones, pero escogí la que era mejor para mi, no te dije nada antes porque no quería discutir, se que puedes estar pensando muchas cosas, no fue mi intención quedarme embarazada, no estoy aquí para pedirte nada, mi hija está bien y no te necesita, tampoco quiero que esto afecte de alguna manera la relación con tú novia, pero quiero ser completamente libre y hacer lo que quiera con Víctor y mi hija, sin tener miedo de que nos descubran, créeme yo no podía asimilar todo lo que pasaba cuando lo descubrí, esa seria toda la verdad y la razón por la cual quería que habláramos— terminó de hablar

—¡Me estas diciendo que te revuelcas con mi hermano y tenemos una hija!—gritó molestó

Se acerco a ella de manera muy amenazadora

—¡Detente!— advirtió Víctor, parandose frente a su prometida

—Tú apártate del camino, eres un imbecil, ¿Como puedes meterte con mi ex esposa?, existiendo tantas personas en el mundo, ¿Quieren que me crea la puta historia de que todo sucedió por coincidencia entre ustedes?, los dos son un par de sin vergüenzas, no se como tienen la decencia de venir aquí, no creí que fueras una mujer tan malvada, si estás utilizando a mi hermano para vengarte de mi puedes parar, no esta bien, eres peor que Carmín, no comprendo como pude enamorarme de ti, casarnos fue lo peor que pudo pasarme, te odio— manifestó llenó de furia

Mara no pudo resistir las lágrimas, cada palabra que Manuel pronunciaba era como una puñalada en su corazón, ¿Como él podía decir esas cosas de ella?, ¿Utilizando a Víctor para vengarse?, era completamente estupido, ¿Decir que es peor que Carmin?, si claro, ¿Acaso ella mentía a sus seguidores?, ¿Humillaba a las personas para conseguir lo que quería?, de todas las cosas que podía decirle, eso era lo más bajo, no podía reconocerlo, ese no era el Manuel con el que se caso

—Manuel intenta calmarte— solicitó Paula, mientras intervenía en la discusión

—Acaso ¿Escuchaste lo que dijeron?, están juntos y criando a mi hija— le dijo dolido

—Yo ya lo sabía, hace unas semanas visité de sorpresa a Víctor y los vi, ellos me contaron como ocurrieron las cosas, yo no dije nada porque eso no me correspondía a mi, ellos debían contarlo— explicó

Manuel parecía que iba a echar fuego por lo ojos y sus puños estaban apretados esperando poder lanzar un golpe

—Esta bien, enojate conmigo, grita, golpeame, pero no permitiré que sigas lastimando a Mara, comprendo que estés molestó y todo esto sea difícil de asimilar, pero no te da el derecho de hablar así de ella, quizás si fue un error que se casaran, pero entonces sería tú culpa, si no lo amabas ¿Porqué se lo propusiste?, pudiste desistir de todo y ser feliz con Chiara, no es justo que intentes hacerla responsable de todo, jamás estuve convencido de que esta fuera una buena idea, sabia que no escucharias ya que eres tan parecido a papá, era obvio que explotarías fácilmente, pero te advierto una cosa, yo juré proteger a Mara, la amo, no importa si crees que conocernos fue una casualidad o alguno de los dos simplemente intenta lastimarte, amo a Jane, aunque no lleve mi sangre, ella es mi hija, eres libre de hacer lo que quieras, pero ahora que lo sabes debes tomar una decisión, la niña no es ningún juguete o premio, si quieres ser parte de su vida debes ser honesto, si no quieres, esta bien, ninguno intentará convencerte de lo contrario, si estamos aquí era para decirte todo esto en la cara, pero ya que terminamos de hablar, puedes irte— exclamó bastante serio

Manuel dio un gran portazo al salir de la casa, la niña comenzó a llorar y Mara fue a verla, en la sala solo quedaron Víctor, Alex y Paula

Todos permanecían sentados en silencio, habían sido declaraciones bastante fuertes las que presenciaron

Víctor llevó sus manos a su cara, todo fue más intenso de lo que imaginó, se sentía frustrado, se contuvo de golpear a Manuel, ¿Como su hermano podía ser tan egoísta?, no lo entendía, sentía que su cabeza iba a explotar

—Hijo, no debes preocuparte, todo estará bien— comentó dulcemente su madre

Alex camino hacia la habitación, vio a Mara arullando a la niña, siempre se mantuvo al margen de la relación que Manuel tuvo con ella y fue un poco incómodo estar presenciando todo lo que paso, pero a diferencia de su hermano, él entendía a Mara, le daba mucha lástima ver como Manuel le decía todas esas cosas horribles, ni siquiera se dio la oportunidad de conocer a la niña, sí, para él también fue sorprendente enterarse de que Víctor mantuviera ahora una relación con ella, pero con el paso del tiempo comprendió que el amor suele ser bastante curioso, ambos parecían felices, Manuel era muy feliz con Chiara, ¿Porqué se molestó al enterarse de todo?, su hermano tenía razón, Manuel se parecía mucho a su padre y no eran cualidades muy agradables para heredar

—Mara ¿Estás bien?— le preguntó

Ella se asustó al escucharlo, pensó que Víctor podría llegar a la habitación, pero ver a Alex ahí si fue bastante raro

—Sí, no te preocupes— dijo ella intentando sonar convincente

—Lo admito, todo fue algo incómodo hace un momento, pero quiero que sepas una cosa, si ustedes me lo permiten yo quiero formar parte de la vida de Jane, es mi sobrina y consideró que no tiene la culpa de nada, los adultos somos complicados, no intentaré defender a Manuel, tampoco es necesario que hablemos de él, Mara somos familia, no estás sola, sin importar lo que ocurra, te doy mi palabra de que puedes contar con nosotros, mamá está muy feliz por tener una nieta— expresó

Mara le dio una pequeña sonrisa, no se esperaba eso, en el pasado jamás intercambiaron más de una cuantas palabras banales, pero fue muy sincero en lo que dijo y eso fue muy tierno

—Amor— dijo Víctor entrando a la habitación, no imaginó que Alex estaba ahí, creyó que se había encerrado en su habitación

—¿Nos vamos?— le preguntó ella

—Sí, venía por ustedes— dijo tomando las cosas de la niña

—Si les parece bien, seria lindo que vinieran a comer otro día, así podríamos conversar tranquilamente y quisiera compartir algo de tiempo con mi sobrina— mencionó Alex

Víctor no podía creer lo que escuchaba, pero se alegró tanto, la pequeña familia se despidió y salieron de la casa

Manuel los observaba a lo lejos, tenía muchos sentimientos mezclados, sentía una gran traición por parte de ambos y sinceramente no sabia que pensar sobre la bebé, con cuidado masajeo su puño, al salir de la casa estaba tan molesto que lo estampó contra un árbol intentando liberar toda esa furia que tenía acumulada, vio como el auto se marchó y él decidió caminar hacía su departamento.

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—Manu, ¿Qué pasó?, te estuve esperando en el bar en compañía de mis amigos, ya te había comentado que hoy iríamos a tomar algo, te estuve llamando y no respondías, dijistes que pasarían a casa de Paula un rato y luego nos veríamos ahí— dijo Chiara, quien estaba parada de brazos cruzados frente a su novio, esperando una explicación

Manuel tomo la cerveza que tenía en la mesita de centro y bebió, permaneció en silenció

—Manuel, te estoy hablando, ¿Qué te ocurre?— le preguntó

—Chiara, no quiero hablar ahorita— dijo en un murmullo

La rubia se dirigió molesta a la habitación, si él no quería hablar, bueno, ella no iba a permanecer en el living mientras Manuel seguía tomando y la ignoraba, pero había algo que no la dejaba tranquila, su novio parecía molesto, preocupado, ni siquiera era capaz de leerlo correctamente, lo que sea que haya pasado, debía ser algo grave, de pronto se sintió mal por ser tan dura con él, pero decidió quedarse en la cama y esperar a que llegará, no quería hostigarlo, si necesitaba espacio, se lo daría.

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