Ayano miraba decidida a aquel jefe del grupo de los Yakuza.

Le decía jefe de los Yakuza porque ese no es su nombre, Yakuza es un término para un grupo de crimen organizado de Japón, normalmente llamado la Mafia por el resto de Latinoamerica o mejor dicho los que hablan español.

El Jefe la miro, simplemente serio, estaba sentado en una silla fumando un cigarrillo.

-Necesito tu ayuda, jefe de los Yakuza -. Dijo Ayano.

El parecía hacerse el sordo.

Ayano se acerco y el apunto con su arma.

Ayano ya sabia que haría algo así, pues sin dudas el estaba muy protegido.

El delincuente que estaba paralizado afuera, entro y vio la escena, quería decir algo pero tartamudeaba.

-H-her-mano -. La verdad es que no son hermanos realmente, solo son hermanos en el grupo de los Yakuza al igual que las Streak se llaman como one-san o hermana.

-¿Esta es la chica que tu trajiste? -. Le pregunto el jefe al delincuente que temblaba de miedo.

-S-si -. Tartamudeo.

-Dije que no la quería ver -. Dijo serio.

Pero esa seriedad le daba un miedo terrible al delincuente.

-S-si h-hermano... P-pero... -.

-¿Me estas llevando la contraria?!!-. Casi grito.

-N-No -.

Ayano desvío su atención de la discusión y la fijo en la oficina.

Era completamente oscura, llena de libros y con ceniceros llenos de cigarros fumados, por todos lados.

De repente vio como el delincuente se arrodillaba rogando perdón en el suelo.

-Yo... L-le debo la vida... H-hermano -. Se justifico el delincuente.

-No me importa!! -. Ayano lo miro, era increíblemente difícil de persuadir, si no es algo de vida o muerte el no prestara atención a lo que le digas, Ayano fijo toda su atención a un sorpresivo punto rojo que apuntaba justo en la cabeza del jefe de los Yakuza -Tal vez cuando ella salve mi vida podre... -. Era suficiente hablarío pues Ayano ya había saltado encima del jefe de los Yakuza y lanzándolo con silla y todo hacía atrás, Ayano salvo su vida, pues un balazo dio en un cenicero que estaba detrás de él, solo segundos después de que Ayano lo salvara.

El jefe la miraba sorprendido, al parecer no se lo esperaba, Ayano tomo la pistola que el jefe había soltado, y apunto por donde había venido el disparo, noto que a través de una pequeña rendija de la ventana, la bala había pasado, pues de seguro los vidrios eran antibalas, noto al atacante que parecía estar recargando su rifle, estaba en la cima de un edificio a varios metros de distancia, pero eso no era tanta dificultad para Ayano, ella apunto se demoro un tiempo pero disparo y atino justo en la cabeza.

No era tan difícil, siempre jugaba juegos de acción en su SaikouStation, solo tenia que medir bien la fuerza que ejerce el arma al disparar.

Al ver como la víctima caía al suelo y asegurarse de que no se levantó miro al jefe y le tendió la mano.

-¿Estamos a mano ahora? -. Dijo Ayano con una sonrisa en la cara.

......

-Me niego!! -. Grito Ayano.

-Si no lo haces, entonces tendrás que en prestarme de otra manera tus servicios -. Sonrió pícaramente el Yakuza esperando que ella se asustara o entendiera el doble sentido de sus palabras.

Era inútil pues Ayano siguió con la discusión.

-Lo haré, seré su guardaespaldas cumpliré misiones, pero no puedo matar a ningún alumno de Akademi High School -. No lo hacía por miedo a la reina Megami Saikou, lo hacia por principio, seria idiota arriesgarse a ser descubierto sobre todo si siempre tiene detrás a Nemesis-kun o a Nemesis-chan, adoradores de la justicia.

-Sabes ¿Porque no vuelves mañana y veré que puedo hacer? -. Ayano asintió, dejo el arma que aun estaba en sus manos sobre una pequeña mesa, y se dirigio a la salida, sabia perfectamente cual era la salida asi que no espero a nadie y se fue a su casa.

Ayano no pudo ver que en cuanto salio uno de los guardaespaldas que al fin había despertado iba a tomar el arma que Ayano había dejado, pero él Yakuza se lo impidió y la tomo él, no parecía tener alguna otra intención platónica, pues les dijo a uno de sus sirvientes que investigara las huellas que habían en el arma.

El Yakuza no trabajaría con alguien desconocido por solo haberle salvado la vida, necesitaba información, toda la información de aquella pequeña asesina.

....

Budo también a desaparecido!!

Ayano estaba paralizada, porque estaban desapareciendo personas en Akademi High School, eran conocidos de Ayano y también no tan desconocidos, tales como el secreto hijo millonario Riku Soma el enamorado de Kokona, Ayano los había ayudado a estar juntos solo para ganar popularidad, y también hacerse amiga de Kokona, para obtener información, sobre los Ronshaku.

Aunque habían varios nombres mas, no le eran para nada conocidos a Ayano.

Budako lloraba desconsoladamente en los brazos de su mejor amiga Taeko, aunque Ayano se sentía algo celosa también sentía pena por aquella chica.

La verdad es que Ayano tampoco había visto a Budo en bastante tiempo, la razón era porque tenia un importantísimo combate de artes marciales fuera de la ciudad, hasta cuando volvió, el mismo día en que su hermana había llegado, por lo que él tubo que hacerse cargo de ella y enseñarle la academia, también ayudar en el entrenamiento de los participantes del club, aunque también parecía tener problemas con su horario pues él, Taro y Oka saldrían este año y si irían a la universidad.

Esas fueron las principales razones porque no lo ha visto, aunque ella creyó que tal vez el se había rendido con ella.

....

-Tendrás la misión de eliminar a mi competencia -. Le dijo el Yakuza a Ayano.

-Tu vestimenta no es muy típica, por lo que te daremos una algo diferente, y todos tienen que tener estos tatuajes -. Dijo levantando la manga de su camisa, mostrando sus tatuajes, que antes Ayano no había notado -Pero como eres una estudiante, usaras esto -. Uno de sus miles de guardaespaldas le extendió a Ayano una manga, cuando te lo colocas se combina con tu piel y parece que tuvieras el tatuaje, la verdad era bueno si alguien lograba reconocerla y veía los tatuajes de seguro la buscarían y si no los tenia saldría libre.

-Esta Bien -. Dijo Ayano.

De la nada la gatita negra apareció saltándole en la cabeza, parecía gustarle saltar sobre la cabeza de Ayano, o tal vez porque era la manera mas rápida de llamar la atención de Ayano.

Ella la saco de su cabeza y la miro.

-Miau... -. Dijo la gatita parecía alegre.

-Esa gatita es tuya -. Dijo el Yakuza.

-Eh... No... Solo me sigue donde voy -. Dijo Ayano poniendo a la gatita entre sus brazos.

-Te entiendo, también tengo uno de ellos -. Ayano lo miro extrañada pero al ver como un gato gris se paraba en frente de su hombro, lo comprendió, también parecía ser un demonio gato.

-Oh... Si... -. No sabia que decir, al parecer ahora tendría que tenerle respeto al Yakuza si no podría terminar herida o peor muerta.

-Bienvenida a los Yakuza -. Dijo acercándose a Ayano y extendiendo la mano, lo que sorprendió a sus guardaespaldas, jamas había hecho tal cosa el Yakuza, Ayano miro la mano pero igual la acepto, lo que creía que seria un apretón de manos, fue cambiado totalmente por el Yakuza, que levanto su mano y la beso - Ayano Aishi -. Termino de decir.

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Primer capitulo del tercer Libro.

Si que ha crecido las fans de este libro, ya somos muchas las nuevas chicas que se han unido, por lo que quiero agradecerles.

Saludo a AlejandraSantana287 hola querida hermanita DanielalaNekochan que me ha enviado un hermoso dibujo de Ayano Aishi.

No olviden....

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Bye Bye.