Osma se lanzo sobre mi, en esta posición lo único que podía hacer era, una maniobra que aprendí hace mucho tiempo, normalmente de un vídeo juego (Resident Evil 4) , puse mi pierna justo sobre su pecho, impulsándolo hacia detrás de mi y tirándolo lejos, en el vídeo juego el malvado se rompía el cuello, esperando que a Osma no le pasara lo mismo, lo mire, el dio una voltereta en el aire y cayo arrodillado, sin duda una gran flexibilidad.

La cual el no podía tener por ser hombre, parecía ser mas la de una mujer, por lo que llegue a la conclusión de que estaba siendo manipulado.

Volvió a girarse, yo aun estaba en el suelo, por lo que me maldecía a mi misma por no haberme levantado, en un intento de escapar gateando él se abalanzo contra mi, intentando darme en la espalda esta vez tampoco pudo hacerme mas daño que rozar mi ropa, Ayato lo había tecleado, y los demás me estaban rodeando en un intento por protegerme.

El que estaba controlando a Osma noto la diferencia de numero por lo que solo se decidió a huir, intentando correr para darle la vuelta a la escuela, Rival-kun se le lanzo, ambos forcejeaban hasta que alguien mas ataco a Rival-kun.

Mi corazón dio un vuelco al notar que era Ako, donde justo detrás venia Osoro, ambos con la misma cantidad de cuchillas en cada mano.

Rival-kun no se retiraba, estaba dispuesto a pelear, Ayato y Neme-kun también se le unieron, sacando sus cuchillos comenzó una gran pelea.

Esperando que no se lastimaran entre si, intente levantarme, pero al notar que si me había logrado cortar mi pierna no me levante, el esfuerzo haría que sangrara mas, mire el pasillo, de ahí venían Midako y Mujako.

Mujako al notar que sangraba se me acerco con su botiquín y comenzó a curar mi herida, yo solo estaba fijada en como iba la pelea, la cual fue completamente interrumpida por Midako, el cual le dio un golpe detrás del cuello a Osma dejándolo inmediatamente inconsciente, una patada dirigida a Ako que cayo y fue detenido por Neme-kun, y a Osoro solo le quito el arma y fue lanzado contra el suelo (como las profesoras con Yandere), sorprendida por la reacción ninja del profesor, creí por un momento que todo estaba bien ahora, pero al ver sobre la pared a Info-kun junto a Budo, sabia que algo no iría bien, Info-kun apunto al profesor, a Ayato y a Neme-kun con un arma, el cual era de electro shock, haciendo que no se pudieran mover, como también estaban tocando a Osoro y a Ako ellos también sufrieron el Electro Shock, ambos se acercaron corriendo hacia donde estaba yo, los chicos intentaron detenerlos, pero recibían o un electro Shock o un golpe de Budo, hasta que cada uno de ellos cayo, solo quedaba Mujako, que con esfuerzo le logro quitar el arma a Info-kun, pero el tenia algo debajo de la manga, se electrocuto a si mismo, tal Kamikaze y al mismo tiempo a Mujako.

Después de todo solo quedábamos Budo y yo.

Tal como en los primeros días.

Nos miramos a los ojos, el no parecía reconocerme y eso me dañaba, lágrimas descontroladas, en mis ojos nublaban mi vista, baje la cabeza un poco, esperando el horrible destino que me esperaba, la muerte, de la cual esta vez ninguno de los chicos podría salvarme.

Escuchaba claramente como los otro se quejaban pero no podían decir nada coherente.

Solo podía escuchar un "No..." entrecortado.

Sacando de sus bolsillos los tres cuchillos que iban cada uno entre medio de los dedos, tal como garras de un tigre, se acerco a mi, levantando la mano, dándole impulso al ataque.

¿Que podía hacer? no podía dañar a un amigo, por mas que lo intentara mis músculos no reaccionaban, tenia miedo, solo quería creer que esto era una cruel pesadilla.

Cerré los ojos esperando el golpe, escuche como los hojas de las cuchillas cortaban el viento, por la velocidad en la que se dirigían a mi, solo esperaba escuchar el sonido de enclavamiento contra mi piel.

En vez de eso escuche un sonido rechinante tal como lo es cuchilla contra cuchilla.

Abrí los ojos en frente de mi ya no se encontraba Budo si no que... Alguien desconocido para mi.

Con uniforme extraño, Bastón café con lineas rojas, pantalón gris claro, además de tener un pelo negro y en su rostro tener una mascara.

Nada me era familiar.

Budo retrocedió, parecía estar sorprendido, esta vez no intentaba atacar, si no que huir, mire a mi alrededor, cerca de mi se encontraba el arma de Electro Shock que traía Info-kun, la tome y le di un disparo a Budo, donde el solo se tambaleo y cayo al piso inconsciente.

Suspire esperando que todo al fin haya terminado.

Pero quedaba el chico desconocido en frente de mi que me observaba sin decir nada.

-¿Quien eres? -. Me decidí a preguntar, el solo sonrió ya que la mascara solo le cubría la parte de arriba de su cara -¿Que quieres? -. Sonrió nuevamente, ¿solo me estaba molestando o que?.

Al ver como los chicos intentaban levantarse, me sorprendí, mas o menos un electro shock como el que recibieron, haría que no se movieran por al menos una hora y solo habían pasado minutos.

-Chicos -. Dije alegre, incluso el profesor y el enfermero intentaban levantarse, estaba algo feliz que los que fueron controlados aun no se movieran.

Mire a mi nuevo salvador desconocido que se notaba molesto, al ver como los chicos lentamente se levantaban.

El chico intento acercarse a mi pero yo ya estaba preparada, tenia el arma apuntándole, parecía sorprendido.

-Ayano... -. Desvíe la mirada por el llamado de Ayato, solo un poco, distrayendo y rápidamente el desconocido aprovechó, tomo mi muñeca donde tenia el arma y la alejo de si, se acerco peligrosamente a mi y con su otra mano tomo mi cintura, acercando me mas a el para robarme un beso, un apasionado y deseoso beso -Tu!! Maldito!! -. Grito Ayato aun intentando levantarse, este solo sonrió, me soltó y corrió hacia el muro que de un salto pudo pasar para desaparecer.

Yo solo quede petrificada, al ver como lentamente todos se recuperaban y se empezaban a poner de pie.

-Estas Bien Ayano-chan -. Mujako me extendió la mano, la cual acepte para levantarme, en su cara podía ver el dolor que sentía, tal vez por sus músculos encogerse y estirarse por el Electro Shock, al ya estar prácticamente de pie, juntos notamos los muchos rasguñones que tenia mi ropa y como lentamente se abría hasta mostrar un poco de mis sostenes y mi cintura.

Sangrado nasal para todos y cada uno de los chicos.

Rápidamente me abrace a mi misma, avergonzada.

-S-Son Negros -. Dijo uno.

-Callense!!-. Solo grite, no podía ver quien fue, solo miraba el suelo intentando tapar me a mi misma.

-¿Y hacen juego? -. Pregunto otro, yo solo estaba consiente del inmenso sonrojo que empezaba a aparecer en mi cara.

-Basta!!-. Grito Midako dándome su chaleco para cubrir me.

Ninguno de los presentes, parecía estar libre del sangrado nasal, incluso Rival-kun que parecía haber estado preocupado de su hermano, pero ya no.

-Pervertidos... -. Susurré.

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Algo de humor no es malo después de un momento de tensión.

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Bye Bye. ~♥