-Se acabó el tiempo... El baile es el viernes... ¿Qué hago?

-Lo siento mucho Lucy, traté de encontrar a alguien pero ni siquiera el dinero ayudó a convencerlos.

-Me ayudaste y te agradezco...

-¿Qué crees que pase con Jackie?

-De seguro me convertiré en la burla de la escuela, es muy carismática así que no tardará en que el resto le siga el juego.

-¿Y piensas permitirlo?

-Pienso aguantar hasta que entre a la preparatoria para que...

-¿Para que te cuide?- Lucy asintió con vergüenza a la pregunta de su hermano.

-Lucy quiero que entiendas lo que voy a decir, yo te protegeré toda mi vida, nadie te pondrá una mano encima frente a mí pero tienes que cuidarte sola ¿Qué pasará cuando yo no esté? Soy feliz si tú estás bien pero eso no implica que no puedas protegerte.

-¿Entonces qué hago? ¡Hermano estoy desesperada! Ya no sé qué hacer, trato y trato de pasar desapercibida pero personas idiotas como ella llegan una tras otra tras otra ¡Ayúdame!... Ayúdame...

Lincoln lo pensó un momento, sintió las lágrimas de Lucy, le dolía pensar en el abuso que estaba sufriendo, sabía perfectamente lo que tenía que hacer pero dudó, muchas variables, un solo paso en falso y todo se vendría abajo, adiós reputación, adiós novia y Lucy quedaría aún peor pero si todo salía bien posiblemente su hermana tendría la confianza de seguir adelante por sí misma así que tomó aire, una decisión y con dulzura besó la cabeza de su hermana que se sorprendió por su acción.

-Está bien... Puedo hacerlo.

-¿Hacer qué?

-Puedo fingir... Esta farsa.

-¿Fingir? Lincoln no...

-¿Tenemos opciones?

-No pero...

-¿Serás menos infeliz si lo hago?

-Tal vez, no lo sé pero...

-¿Necesitas ayuda?

-Si... Si... ¡Si! ¡Si la necesito!

-Será el más grande favor que pueda hacer, no me hagas arrepentirme Lucy, una noche, un baile, ganamos y nos llevamos el dinero del premio, quiero visitar a Haiku por sorpresa, ambos ganamos así que... ¿Estás lista?

-Ya no recuerdo ni los besos
Mi corazón está vacío
Ya no hay recuerdos de mi vida
Ya no recuerdo ni quién soy...

-¿Y eso qué fue?

-Digo lo primero que se me viene a la mente cuando estoy nerviosa o avergonzada.

-Entiendo... Pero si hacemos esto vamos a poner reglas. Número uno: nada de contactos como los del parque, puedes tomar mi brazo y ya. Número dos: si es que no ganamos nos iremos a casa directamente, nada de peleas con esa chica y número tres: espero que entiendas que estarás en deuda conmigo, una verdadera deuda.

-Si Linc... Lo que digas.

-Es raro que me llames así.

-Lo siento.

-No importa... ¿Ahora qué hacemos para que nadie note mi voz? Si dices que el hermano de Rusty estará ahí podría reconocerme por hablar y no me puedo quedar callado toda la noche.

-¿Y que tal si esa es la respuesta?

-No te entiendo.

-Lisa dijo que había construído algo para aprender cualquier cosa por cuarenta y ocho horas, fue para un examen de Leni, podríamos aprender a hablar lenguaje de señas y así no tendrías por que hablar.

-¿Y crees que esa cosa funcione?

-Si, se lo robé para mis pruebas de matemáticas.

-Confío en ti gaslty.

-¿Gaslty?

-Es un Pokémon oscuro, te queda.

-¿Gracias? Creo.

-De nada mi estimada gastly.

-No importa... Hoy es miércoles así que mañana hay que preparar todo.

-Sabes... Haiku hacía lo mismo cuando hablábamos de algún problema, preparaba todo desde antes para estar a tiempo...

-Lo sé, ella me enseñó a hacerlo pero no hagas que me ponga más triste de lo que ya soy.

-Lo entiendo y créeme yo tampoco quiero ponerme triste ahora... ¿Entonces qué hacemos?

-Creo que tendremos que buscar ropa a juego.

-Muy bien pero ¿Tienes algo para mí?

-No pero podemos improvisar ¿Tienes algo que sea morado y formal?

-¿Por qué morado?

-Es el punto medio entre nuestras personalidades.

-Espero que no te lo tomes tan en serio.

-Solo es para ganar.

Durante el resto del día Lincoln y Lucy hablaron de un mar de posibilidades, primero robaron el artefacto de Lisa que eran un tipo de audífonos pero no los iban a usar hasta el otro día, se pusieron de acuerdo en toda su mentira para no errar al momento de decir alguna cosa sobre ellos, a Lincoln se le hizo raro planear y hablar de cosas así con Lucy y a ella también le pasaba lo mismo, decidieron dormir temprano para calmar un poco sus nervios...

-Y con esto he terminado la labor ¿Cómo se siente?

-Mucho mejor ¿Qué es ese menjurge extraño?

-Solo herbáceas que mi hermana trae de vez en cuando, son medicinales.

-Ya entiendo... ¿Y cómo puedo agradecer a tan bellas manos que me han curado?

-Siete monedas de oro.

-¡¿Qué?!

-Es el costo y espero un bebé, necesito el dinero y le he curado tan bien que no quedará rastro alguno de herida profana.

-¿Y si vuelve?

-Le regresaré una moneda, es lo justo.

-Lo haré si me deja regresar por las noches.

-Ni hablar, exijo mi paga.

-No lo estaba preguntando, veo que sus hijos crecen sin padre alguno.

-Él está pronto a volver con nosotros.

-No creo, las mentirillas son el pan del día de las curanderas solitarias.

-No se me acerque.

-Solo serán unos momentos.

-¡Qué no!- un ademán astuto tira agua hirviendo sobre aquel hombre que se retuerce del dolor mientras que la chica lo golpea con una silla -¡Largo de mi hogar!

-¡Maldita bruja!- exclama de manera tan vil que arroja tres monedas a la cara de la mujer.

Sus hijos son cómplices de lo visto, protegen a su madre alejando a gritos a aquel viejo cerdo.

-¿Está bien madre?

-Si cariño, su padre debe de estar por llegar.

-Madre no creo que sea así, han pasado cien lunas dos veces y padre no vuelve ni tampoco vuestra hermana ¿Qué se supone que hagamos?

-Espera Bellancylle, él no miente, jamás lo ha hecho, solo hay que seguir esperando a que regrese, sé que lo hará.

-¿Y si no vuelve?

-Tú y yo cuidaremos a la familia por él, como mujeres es nuestro trabajo cuidar aquí, vuestro padre trae el pan a la mesa pero a él le gusta que trabaje para no ser una inútil, distinto como pocos y un galante de las palabras, ese es tu padre.

-Confío en usted madre, debe de cuidarse a sí misma antes de negarse el descanso.

-La casa debe de estar siempre en orden cariño que tu hermano nacerá muy pronto.

-Lo sé madre, solo espero que mi padre esté aquí a tiempo para ayudarle, apenas terminó el talismán que los espíritus le pidieron crear.

-Si, me tomó días de vela pero está hecho, a partir de la próxima luna llena ambos danzaremos bajo el cielo estrellado hasta que muera la creación.

Solo que desconocían el paradero de quién ellas buscan el cuál se encuentra en una situación bastante delicada.

-¿Es... Está mejor... Li... Lisher?

-Si... Pero hay que avivar más el fuego... Tengo... Las tiras del hierro que arde guardado entre mis co... Cosas... Iré por él pero cierra los ojos.

-Si... No se preocupe.

Lisher y Lodius se encuentran abrazados completamente desnudos, el invierno llegó y la pequeña cabaña que usan de refugio no es suficiente, las heridas de Lodius son problemáticas y el frío podría matarlo, Lisher le propuso compartir el calor pues los pies también se le congelan y no siente ni las posaderas por las temperaturas tan extremas.

Lodius hace caso y cierra los ojos fuertemente, Lisher arroja su descubrimiento al fuego junto a más leña que enseguida arde tan fuerte como la llamarada de una calorífica mañana, luego se recuesta a un lado de Lodius en completa vergüenza.

-¿Así está mejor?

-Perfecto Lisher... ¿Entonces nos abrazamos?

-Sería lo más exacto para sobrevivir esta nevada... Pero no hagáis nada, me recostaré sobre vuestro brazo... Pero tengo un poco de vino que podemos compartir para evitar el pensar sobre fríos ¿Te apetece un trago?

-Por supuesto Lisher.

Recostada sobre su brazo beben de una pequeña botella que mantenían al lado del fuego para evitar que se congelara, beben poco a poco hasta que el frío comienza a ser un simple y mero olvido... Y de verdad que lo olvidaron pues después de esa abrieron otra botella y otra y otra más... Pasaron un par de horas hasta que...

-¡Ah! ¡Si! ¡Lodius! ¡Más fuerte!

-Lisher... Mph... No deberíamos de hacer esto...

-Estamos... ¡Ah! Manteniendo el calor... Pero si no habla yo tampoco lo haré...

-¡Lisher! ¡Estoy a punto...!

-¡Yo iguaaaahhhh!

Terminados sus asuntos el sueño se apoderó de ambos que durmieron hasta el día siguiente.

-Lisher... ¿Qué hemos hecho?

-Mi culpa... Lodius yo no quería pero la bebida se apoderó de ambos... ¿Estamos de acuerdo en que fue un error?

-Definitivamente fue un error... ¿Qué haremos si...?

-Nada, no pienso hacerte pasar por una desgracia, puedo confiar a mi hijo si es que lo tuviere a mí misma sin problemas.

-Gracias por no hacerme sufrir más de la cuenta Lisher.

-No agradezca, fue mi culpa y estoy dispuesta a aceptar mi propio pecado, no debí cortejar al padre de mis sobrinos.

-Ni yo a la hermana de mi amada.

-Dejemos este asunto en el pasado de la fogata... Por mi culpa tus heridas empeoraron y mi vientre duele.

-Siento eso pero mejor sigamos avanzando hasta ir con Lefhara, de seguro estará esperándome para terminar por completo el talismán que llevamos mereciendo por años.

-Su vida no podría ser mejor Lodius, son padres, viven en una linda cabaña mientras somos colegas de investigaciones, no sabes lo arrepentida que estoy de lo que he hecho.

-No te mortifiques pensando en el error que hemos cometido, seguiremos siendo compañeros y por mientras tenemos que seguir compartiendo el calor por las noches o de lo contrario podría empeorar, siento hacerle pasar por esto pero requiero su ayuda.

-Lo sé y seguiremos compartiendo calor por las noches... Pero tratemos de solo dormir durante esos momentos, alejemos la bebida embriagadora de nosotros y piensa en mi nuevo sobrino ¿Es un buen plan, Lodius?

-Es el mejor que podemos hacer en nuestra situación...

Me pregunto ¿Qué pensará de mí la hermosa Lefhara?

-Otro sueño... Ya ni me sorprenden... Tendré que anotar otro a la bitácora de Lucy, por lo menos ahora me dejan recordar los sueños pero lo siento "Lodius" hoy no tengo tiempo para ti.

¡Oh, hola! No te había visto desde hace un tiempo, ha pasado mucho desde que te hablé pero hoy necesito desahogarme. Lucy tiene problemas con una chica y parece tonto pensar que la única manera que encontré de brindarle ayuda fue haciéndome pasar por su novio... Si suena más enfermo de lo que creen pero solo será eso, le he dicho que lo máximo que haremos será tomarme del brazo o incluso de las manos, lo he hecho con el resto de mis hermanas así que no tendría que ser extraño... Pero algo me dice que esto no va a terminar bien, es muy tarde para decir que no y hacerle pasar aún más pesares a Lucy... ¿Crees que sea lo correcto? Si la descubren su imagen quedará peor y yo estaré de seguro más que castigado... Tengo que pensar mucho.

-Hola Lincoln ¿Puedo entrar?- su hermana le pide desde el otro lado de la puerta.

-Si, adelante- cuando entra Lucy está despeinada y con un aspecto de flojera pura -¿Mala noche?

-Más bien mala mañana, Lynn me despertó de un grito, se pegó en el pie con la pata de su cama.

Vine a preguntar si tuviste el mismo sueño.

-Si y no te preocupes ya está en la bitácora.

-¿De verdad? No será que quieres evitar anotarlo.

-¡Si, está bien! No quiero escribir otro sueño.

-Tendrás que hacerlo, esta vez te toca a ti.

-Ya lo sé... Pero quería pensar más en las cosas que haremos mañana.

-Está cubierto, saldrás de hurtadillas cubierto por Luna, estaremos juntos antes de la entrada y no hablarás para nada ¿Simple no?

-Es tan simple que creo que puede salir mal.

-Confío en que no.

El día llega, con ayuda de Lucy roban el experimento de Lisa que ayuda a ambos aprender el lenguaje de señas, lo practican unas horas para ser fluido, Lincoln le pide a Luna que lo cubra pues quiere ir a escaparse un rato por la noche para ir a ver un lanzamiento de un cómic y ella acepta a cambio de un poco de dinero, sale antes para no congeniar con Lucy que se arregla desde antes.

-¿Entonces invitaste a alguien al baile?

-Si... Solo por no ir sola.

-¡Mentira! Te conozco desde que te cambian los pañales, pones tus manos detrás de la espalda y cierras la punta de los pies cuando estás nerviosa ¿Quién es?

-Nadie Lynn en serio.

-¿Y entonces por qué el perfume?

-Soy amante de la verdad de la noche pero eso no quiere decir que no sea femenina, me gusta verme bien.

-¿Y el brillo labial? Sé que es de Lola pero jamás lo usas ¿Te gusta? ¿Tienes novio?

-Nada de eso Lynn, esto sólo será acción de una sola noche pero tengo que guardar mi apariencia y además... ¿Crees que me veo linda?

-Ay por Dios si le dices esto a alguien romperé tu estatua de Edwin, sí Lucy te ves linda pero podrías mejorarte un poco... ¿Qué dices de un par de flores? Nuestras hermanas me ayudaron durante mi baile y las usé, se veían lindas ¿Qué dices?

-Suspiro, creo que no serían tan mala idea ¿Pero dónde las consigo a estas horas?

-Aún guardo las que yo usé, lo hago porque en ese baile di mi primer beso...

-Que romántico.

-¡Te dije que no lo menciones! Como sea te las presto pero trátalas con cuidado, son de plástico así que será sencillo si hasta yo pude hacerlo.

-Gracias Lynn pero no creo que sea para tanto.

-Lucy si hasta yo pude besar a alguien esa noche tú puedes conseguir algo mejor a lo que alguna vez tuviste, piensa menos negro.

-Y más blanco...

-Algo así... Piensa más en blanco.

-Si... ¡No! Mejor no.

-¿Estás bien?

-Si, solo algo nerviosa.

Con una maleta en mano y despidiéndonos de sus hermanas sale caminando en dirección al baile solo que dentro de su casa algo también se da.

-Entonces hoy es su baile ¿Sabes a quién invitó?

-No me quiso decir y esa cosa que lleva me parece sospechosa ¿Qué crees que esté planeando?

-No sé... ¿Puedes seguirla? Llamaré a Lincoln para que él y Luna la sigan por ahora y si llega al baile irás tú para saber quién es el susodicho, no podemos dejar que otro idiota se le acerque a Lucy.

-¿Desde cuándo te volviste tan autoritaria Leni?

-¿Qué es eso? Sólo trato de ser como Lori y Luan a veces me ayuda a hablar y a pensar sobre ustedes.

-Supongo que no te damos tareas fáciles, bien iré directo hacia el baile y tú llámalos.

Lucy llegó a hurtadillas hasta el lugar de Lincoln, él la esperaba bien vestido y arreglado.

-No te ves tan mal.

-¿Segura? Creo que pude hacer algo mejor si me dejaras peinarme y ponerme algo.

-Podemos hacer eso luego, aquí tengo todo lo necesario y ahora por favor no te muevas. Por cierto ¿Cómo vas a llamarte?

-Solo llámame por mi segundo nombre, Albert.

-De acuerdo "Albert", aún sigue sonando extraño llamarte así.

-Lo sé pero a mí me gusta, me recuerda siempre al abuelo.

-Suspiro, que lindo sentimiento.

Una hora de intenso maquillaje, perfumes y un peinado en la peluca hecho por la misma Lucy dejaron completamente irreconocible a Lincoln, se veía más esbelto con un cabello negro profundo adornando su cara más una pequeña barba creciente y unos lentes grandes.

-¿Entonces cómo me veo?

-Lindo.

-¿Lucy?

-¡Quiero decir...! Te ves bien o bueno, me gusta lo que hice.

-Gracias... Mejor vamos de una vez.

Guardaron muy bien la maleta de Lucy en aquel lugar escondido solo que antes de irse caminando Lincoln hizo un ademán para que Lucy tomase su brazo.

-Well pretty woman ¡Take My arm!

-¿Y ese acento inglés?

-Un pequeño diálogo que quería usar en algo así ¿Suena bien?

-Demasiado bien... Lincoln.

-¿Si Lucy?

-Gracias por ayudarme.

-No agrade...

-No Linc es en serio, te arrastré a esto por lástima y aún así (sniff) quieres ayudarme.

-Lucy quiero que entiendas esto, nuestras hermanas y nuestra madre son las chicas más importantes para mí, Haiku está entrando a ese círculo también pero le falta un poco, quizá cuando vivamos juntos pase a ser de las primeras pero quiero que entiendas que siempre vas a contar conmigo. Hoy te demuestro que no importa las cosas malas que hagas o los errores que cometas, siempre estaré dispuesto a ayudarte y no porque sea mi obligación sino porque te quiero además he pensado que hay chicas que han llevado a sus hermanos y solo se ve raro e incluso hay chicos han llevado a sus madres y no pasa nada así que vamos a divertirnos juntos ¿Qué dices?

-¡Te quiero!- uniendo sus cuerpo en un abrazo Lucy quiere llorar de la felicidad, una lágrima escurridiza se derrama desde lagrimal pero Lincoln la detiene con su mano.

-Yo también te quiero, no llores, tienes una bonita cara como para llorar.

Lucy no supo responder a eso, le habían dicho que era genial y hermosa pero de maneras muy simples, por primera vez la hicieron sentir linda como mujer... Aunque fuera su hermano.

Una pequeña sonrisa arqueada se forma en su cara y por lo menos quiere darle algo único a su acompañante.

-Espera Linc... Quiero mostrarte algo.

Un paso al frente bastó para quedar cara a cara, Lincoln se avergüenza por la cercanía pues siente su respiración y jura que hasta siente su mirada.

-¿Qué... Qué estás haciendo?

-Quiero darte algo que espero guardes  por siempre, no sé cuándo podré hacerlo otra vez así que abre los ojos...

Con temor toma la mano de Lincoln pasando sus dedos por el flequillo que cubre su mirada, con nervios lo aparta cuidadosamente dejando ver sus ojos mientras divisa en una dirección contraria evitando mirarlo.

-¿Por qué haces esto?

-Tú... Me estás prestando tu ser Lincoln, lo mínimo que puedo hacer es prestarte mi alma, estas son las ventanas de mi alma.

-A veces olvido que tienes ojos verdes, muy coloridos para alguien tan apática como tú pero quiero verlos directamente.

Sin apartar la mano de su flequillo voltea con calma su rostro observando su penetrante mirada, se queda completamente embobado, perdido en el medio de un mar de crisantemos verdes que se marchitan en la oscuridad de la noche debajo de la luna llena.

-No sabía que pensabas así...

Sin darse cuenta recitó su bello pensar acerca de los ojos de Lucy.

-Lo siento Lucy pero...

-No te disculpes, gracias por pensar eso.

-Es más fácil adivinar tus sentimientos cuando veo tus ojos.

-Por eso no los muestro.

-Son lindos...

Lamentablemente la atmósfera fue rota debido a una llamada de Luna que Lincoln tuvo que contestar.

-¿Luna?

-¡Gracias al cielo! Hermano código rojo ¡Lucy tiene un nuevo pretendiente! ¿Estás disponible?

-Lo lamento Luna pero no, acaba de empezar una batalla campal por un cómic y tengo que entrar a la pelea pero no te preocupes, se veía muy agradable cuando Lucy me habló de él.

-¡Rayos! Como sea iré a vigilar y si puedes nos alcanzas, nos vemos.

Al colgar Lincoln no quería preocupar más de la cuenta a Lucy así que le mintió sobre alguna cosa de música cualquiera.

Caminaron sin hablar, la pena que acababan de encontrar era extraña, nueva para ambos y lenta como sus pasos. Antes de llegar al baile Lucy detuvo a Lincoln tomándole de la mano.

-Es para aguardar apariencias ¿Te molesta?

-No, está bien... Solo que me había desacostumbrado a que alguien tomara mi mano así.

-¿Así cómo?

-Con tacto.

-Me... Mejor entremos.

-Lucy... Te sudan las manos.

-Eso pasa... Muy seguido...

Antes de entrar fueron bombardeados de música y luces parpadeantes, Alice los intercepta en la entrada pues incluso ella está sorprendida por la pareja de Lucy.

-¡Por Dios! ¡Es real!

-¿También tú? Creí que no nos llevábamos tan mal.

-No pero Jackie dijo varias cosas... Maldita mentirosa... Pero no importa, están aquí y siendo sincera tienen mi voto ¿Pero no me vas a presentar?

-Oh claro, Alice él es Albert.

-¡Hola amigo!

Lincoln levantó la mano en son de paz sin decir ni una sola palabra.

-¿Qué no habla?

-No.

-¿No?

-Él es mudo.

-Oh... Lucy lo lamento, Albert perdóname no quería sonar grosera.

Lincoln le mostró el dedo pulgar en señal de que no había problema alguno sumado a una sonrisa carismática.

-Sin duda convenceré a más personas para que voten por ustedes, considérenlo como un favor por ser grosera.

-Gracias Alice- caminando de la mano Lucy se recuesta sobre su brazo con una sonrisa de oreja a oreja, en señas Lincoln le pregunta si también eso es para "guardar apariencias" -no, estoy disfrutando dejar callada a la gente sin si quiera mover un músculo.

-(Me siento feliz por ti)- le contesta moviendo las manos sonriente.

-¡¿Pero qué tenemos...?!- Jackie llegó para amedrentarlos pero Lincoln solo dejó caer un poco de ponche que habían tomado sobre el suelo haciendo resbalar a la arpía.

-(Te cuido la espalda Lucy, no dejemos que esa tonta te arruine tu noche).

-Gracias Linc.

-(No agradezcas, te quiero y siempre te protegeré).

-¿Lo prometes?

-(Lo prometo y si no que me parta un coco).

-¿No querrás decir "que me parta un rayo"?

-(No soy tan tonto como para llamar mi muerte ¿Qué tal si después también te ando persiguiendo en las noches y en tus sueños?)

-Ja, sería bastante intrigante eso pero no quiero, prefiero que el Lincoln de carne y hueso comparta mis sueños de fantasmas y entes sin descanso.

-(Hablando de eso ¿Crees que eso de la "profecía" o no recuerdo qué cosa regrese o ya venga por nosotros?)

-Empiezo a creer que los espíritus son algo idiotas ¡Que se pudran esta noche! Hoy quiero celebrar mi poca felicidad en un baile mundano y movido al lado de la única persona que me entiende.

-(Nunca te había visto tan eufórica).

-Suele suceder cuando estoy sola pero hoy ya no aguanto, haré lo primero que me llegue a la cabeza.

-(¿Y qué tienes en mente?)

-¿Quieres ir a molestar a Jackie?

-(Será un placer madame)

Sin soltar la mano de Lucy van para acechar a Jackie a la que le hacen de todo, desde hacerla caer, arrojarle comida desde lejos, tirarle agua para correrle el maquillaje y hasta prenderle un poco el vestido con una vela que ahí había haciendo que mucha gente se le tirara a golpes para tratar de apagar el fuego. El ogro que atormenta a Lucy ha quedado devastada mientras que los dos "novios" aguantan sus carcajadas para no ser tan obvios.

-(¿Te la estás pasando bien Lucy?)

-Como no tienes idea. Lincoln quiero salir un rato.

-(Si)

Lucy lo llevó al techo de la escuela, debajo de las estrellas y alejados del ajetreo de la fiesta Lucy se recuesta en el techo mientras que Lincoln la vé estando de pie a un lado de ella.

-Tranquilo ya puedes hablar.

-Por fin, guardar silencio estando casi muerto de la risa es cansado, me comprarás un Flippy cuando esto acabe.

-Hecho.

-¿Y por qué querías subir?

-Tú lo dijiste, es mi noche y las risas deben de cesar de vez en cuando para dar paso a la serenidad, mi ser pedía una noche mágica y distante de todo lo que hace que mis pensamientos turbios dejen de lastimarme con tal brusquedad.

-Tan poética como siempre.

-Suspiro, ya sabes cómo soy.

¿Y cómo van las cosas con Haiku?

-No puedo decir que geniales pero al menos aún hablamos como siempre, hoy coincidimos con no poder hablar, ella por sus clases y yo por esto ¿Por qué la pregunta?

-Mera curiosidad.

-¡Ahí están! ¡Fueron ellos!- desde el suelo Jackie grita acusándolos acerca de todos los "accidentes" que ha sufrido, un par de profesores también suben al tejado con solo segundos de diferencia, los pasos son crujientes y retumban en los oídos de ambos.

-Rayos, sabía que nos descubrirían.

-Más te vale que ganemos ese dinero y por favor no te muevas.

-¿Qué vas a...?

-¡Ese estúpido de Lincoln jamás llegó!

-Tampoco responde su teléfono ¿Crees que algo le haya pasado?

-¡Ni hablar! Sabes que él siempre nos ignora cuando salen sus cómics ¿Recuerdas la ves que olvidó a Lily en la piscina de pelotas?

-O cuando casi se rompe la mano por la riña de esa caja.

-¡Ves, de eso hablo Luna! Y ahora que Lucy nos necesita se hace el tonto.

-Ya, ya, gritarle al aire por Lincoln no resolverá nada. Lucy subió con ese chico desde hace dos minutos y no parece que tenga malas intenciones, si nos acercamos solo los vamos a incomodar.

-Las apariencias siempre engañan Luna, no quiero golpear a otro idiota que le rompe el corazón a Lucy.

-Aún recuerdo ese día, ni tú ni Lincoln estaban felices.

-¿Cómo lo íbamos a estar? Lucy estaba quebrada encerrada en mi cuatro, tuve que dormir otra vez con Lincoln y vaya que se molestó.

-Yo también quería ir.

-Si pero ¿Quién más la habría consolado?

-Gracias por el voto de confianza.

-¡Espera! ¿Ya viste? Varios profesores están subiendo hacia ellos.

-Rayos, los van a interrumpir, ya no recuerdo ¿Esto ameritaba un reporte?

-Nah solo les llamarán la atención y los van a obligar a bajar.

-Pienso que Lucy se ve muy delgada.

-Lo sé, le he dicho que haga ejercicio una y otra vez pero siempre dice "mi cuerpo está bien" puras tonterías de niña floja.

-Espera... ¡Lynn mira!

-¡Oh por Dios! ¡Se están besando! ¡Llama a las chicas!- solo bastaron tres segundos para tener al resto de sus hermanas al teléfono.

-¡Chicas es oficial! ¡LUCY TIENE NOVIO!

-¡¿Se puede saber qué están haciendo aquí arriba?!

-Bu... Buenas no... Noches señorita Ritz, solo subimos a de... Di... Disfrutar de la vista.

-¿Saben que no pueden estar en el techo? ¿Cuánto tiempo llevan aquí arriba?

-Co... Como una... Una hora... Pe... Pero ya íbamos a bajar.

-¿Entonces han estado aquí toda una hora?

-Ma... Más o menos.

-Lo siento pero la señorita Jackie dijo que le han estado jugando una broma tras otra durante toda la noche- al ver a Lucy siendo abrazada de la cadera con su cara tan cerca de aquel chico sabía que no iban a perder el tiempo en una aburrida fiesta, claro que a su parecer habían tenido una sesión de "cariñitos" durante toda la noche así que solo les pidió que bajaran y que no subieran más pero... ¿De verdad se besaron? Por qué no retrocedemos unos segundos...

-Más te vale que ganemos ese dinero y por favor no te muevas.

-¿Qué vas a...?

Con firmeza la tomó por la cadera juntando sus frentes, Lucy no sabe cómo reaccionar, por primera vez bailaba al son de alguien más, la siempre autoritaria e independiente Lucy se encontraba danzando en la mano de Lincoln quien besó su barbilla con gentileza y audacia.

-Lisa dijo una vez que las demostraciones de afecto hacen que la gente aparte la mirada por la incomodidad, no te muevas.

-Si... Pe... Pero.

-Lucy, te dije que no te muevas.

Solamente un beso en su barbilla bastó para que todos creyeran que se estaban besando, una vez abajo Jackie los esperaba furiosa pero ellos se siguieron de largo.

-Lincoln...

-(No digas nada, por favor no empeores lo que acabo de hacerte, perdóname Lucy)

-No te disculpes, todo está bien... Es solo que... Fue raro.

-(Ni lo menciones)

-No Linc en serio.

-(Jamás)

-Siento que hagas todas estas cosas extrañas.

-(Solo no lo menciones, eres una de las personas que más quiero, por ti y por el resto de las chicas haría cualquier cosa solo que espero que sepas que luego de esto pasarán unos meses para que te vuelva a hacer un favor)

-Lo comprendo pero también espero que sepas que haré cualquier cosa que yo quiera hacer para agradecerte y lo vas a aceptar.

-(¿Solo así?)

-Exacto

-(Aceptaré si me haces otro cómic)

-¿De verdad te gustó?

-(Un poco extraño y con cierto toque de terror para mi gusto pero lo disfruté)

-Pensaré en hacer algo mejor, lo que haces por mí merece más.

-(Puedes pensar en eso después, hay que ir a tomarnos la clásica fotografía para tu anuario)

-No sé si quiera.

-(Algún día recordaremos esto con risas y como una experiencia curiosa, quisiera que mis hijos vean que su tía Lucy estaba algo loca)- en un parpadeo Lucy lo jaló de la oreja hasta inclinarlo justo frente a ella.

-¿Me dijiste loca?

-(Solo un poquito)

-Está bien, lo merezco.

Por cierto... Me gusta tu perfume.

-(¿Qué te dije?)

-Lo siento, mejor vamos por la foto.

Al ser una de las parejas nominadas para los reyes del baile fueron de los primeros en pasar, les pidieron hacer una pose linda para ganar, Lucy no tenía idea de cómo hacer algo así pero ya no quería que Lincoln manejara todo así que tomó las manos de su hermano y se abrazó con ellas.

-¡Perfecto! ¡Digan Whisky!

Al tomar la foto y mostrarla ante ellos Lucy se sorprendió pues la cara de él hervía de la vergüenza mientras que la suya se veía extrañamente feliz, sus caras juntas solo aumentaron el morbo en Lucy de imaginar que algún día quería tener algo así de auténtico y lindo como lo que estaban fingiendo porque sí, a final de cuentas solo vivía una mentira de una noche.

-Como Cenicienta...

-(¿Qué dijiste?)

-Nada... Nada que importe.

-(¿Crees que ganemos?)

-Necesito ganar o sino...

-(Hey todo está bien, Haiku entenderá si solo nos vemos durante las vacaciones pero ¿Te divertiste? Exceptuando lo que te hice hace un rato)

-Si pero no se me hace justo.

-(¿De verdad hay algo que sea justo en esta vida? Creo que los pequeños momentos que nos hacen felices son aquellos espontáneos que queremos guardar por nosotros y que cuando los recordamos nos hacen ver que nuestro viaje no ha sido tan malo)

-¿Y cómo puedo ser feliz sabiendo (sniff) que vivo una mentira?

-(Solo tú sabes si las mentiras valen para sonreír un solo día durante un segundo, hoy nos vengamos de Jackie, viviste y jugaste en un baile y ahora estás a punto de ganar dinero por solo una foto ¿No crees que esto no es tan malo después de todo?)

-Solo creo que te estoy haciendo sufrir.

-(Sentirse raro no es lo mismo que sufrir ¿O me has visto llorar? Además gracias a ti he avanzado en mi dolor de perder a la chica que me gusta. No me dejaste solo y me ayudaste a ver que las demás también me quieren como yo a ellas, creo que el hacernos favores imposibles es la escencia del cariño que los once nos tenemos, si me lo volvieras a pedir fingiría una noche más contigo)

-¿Y si... Y si...?

-(Lucy no hay nada que me haga sentir más tranquilo que el ver cuándo sus problemas desaparecen ¿Recuerdas cuando me metí en su protocolo de hermanas? Traté de ayudarles y lo empeoré pero créeme que hice lo que pude.

A lo que quiero llegar es que aunque nos equivoquemos una y otra vez siempre hallamos la forma de solucionar nuestros propios errores y sé que en algún momento encontrarás la manera de solucionar tus problemas sola y a tu manera pero si necesitas ayuda con eso solo pídelo ¿Entonces qué dices? ¿Un incómodo abrazo de hermanos?)

Sin dudar Lucy lo abraza entre pequeños sollozos que lloran desde su flequillo -un abrazo de ti nunca sería incómodo, gracias por cuidarme la espalda.

-¡Y por fin ha llegado el momento que muchos estaban esperando! ¡LOS REYES DEL BAILE!- Alice junto a un grupo de numerosas chicas han anunciado la razón del venir de Lincoln... O así lo cree él -primero veremos a la pareja con menor cantidad de votos llegando a... Uy, solo cinco ¡Rocky y Jackie!- ningún aplauso sonó más que el de ella misma para darse ánimos -la segunda pareja con menos votos es... ¡Charles y Tsuky! Con un máximo de treinta votos, lo siento chicos pero no olviden que son una bonita pareja- aplausos suenan para despedir a tan curioso par -ahora vayamos con el tercer lugar... Ganadores de un par de pases sin reportes por llegar tarde son para... ¡Laura y Jean! ¡Felicidades chicas! Ahora pueden quedarse a darse miel antes de entrar si saben a lo que me refiero- tomadas de las manos ambas chicas pasan por su premio y su muy merecido aplauso, sus amigos les gritan y abuchean por no ganar mínimo el segundo puesto- el segundo lugar... Ganadores de un par de mantas y almohadas por si quieren usarlas esta misma noche en el campo de fútbol... Son para... ¡Monic y Jason! Con un total de ochenta votos ¡Qué los disfruten amigos!

Varias parejas faltaban y los premios pequeños habían volado, tanta era la espera que solo carcomía sus nervios, las manos les sudan a ambos y su pulso aumenta por la emoción de creer que tal vez, solo tal vez podrían ganar.

-Y por último... La pareja por la que yo misma decidí votar y que la mayoría al parecer también, una combinación extraña y bastante tierna, la física dice que las cargas negativas se atraen y no existe mejor representación para ello que estos dos, los ví por primera vez en persona y creo que no hay pareja que destaque más en este baile pero eso sí, no se los dejaremos fácil pues tenemos un par de actividades para que ganen el dinero... Con ustedes... ¿Quieren escuchar?

-¡SI!- gritan en coro tantos estudiantes que hacen retumbar el gimnasio.

-¡No los escuché!

-¡SI!

-¡Más fuerte!

-¡DILO YA!

-Ay tranquilos no se enojen, bueno, el primer lugar es para...

¡ALBERT Y LUCY! ¡PASEN A RECOJER SU PLATA TORTOLITOS!

Lucy no lo podía creer, realmente había ganado, cumplió su parte del trato ¡Ganó! Por encima del resto de chicas y sobretodo por encima de Jackie quien divisó a lo lejos haciéndole un berrinche a su novio, sentía que las piernas le temblaban y si sus manos sudaban ahora parecía que podía sacar agua de ellas, con muchos nervios pasó al frente del lado de su hermano.

-Ahora escuchen, como dije antes tendrán que pasar una pequeña prueba que representa este baile así que aquí frente a todos nosotros y sobretodo frente al consejo estudiantil primero nos responderán una cosa ¿Qué son ustedes exactamente?

Lucy temblaba de la duda ¿Podría decir que solo eran amigos? ¿Qué tal si la siguiente prueba les afectaba en ello? Dudando una y otra vez dejó de pensar así que Lincoln tuvo que tomar las riendas del asunto otra vez.

-(Somos novios)- dijo moviendo las manos sin que nadie lo entendiera salvo Lucy.

-¿Qué fue lo que dijo Lucy?

-Di... Dijo que... Que somos novios...

-¡Qué bonito! Sin duda alguna ver a alguien contar sobre sus sentimientos sin hablar es muy dulce ¡Y hoy se van a demostrar aún más su amor!

La prueba es sencilla para una pareja... Díganos ¿Por qué? Lucy ¿Qué te llevó a invitarlo a él? ¿Qué aman el uno del otro?

-¡¿Qué?! ¡No puedo!

-¿Pasa algo Lucy? ¿Qué no quieren el dinero del premio?

-Es que... Soy... Él... Soy penosa ¡Si! Soy muy penosa- con una gentil mano sobre su hombro alguien le sonríe, le hace saber que entre todo ese caos que ella misma ha causado todo está bien, puede hacerlo pues de todas formas no ganar sería una tontería -está bien...

-¿Entonces? ¿Nos contarán?- llamando su atención Lincoln le presta su teléfono a aquella chica que los estaba presentando para que lea la primera línea de muchas que tiene planeadas -entonces empiezas tú... Lucy, él dice que una de las cosas que más te hace especial es esa cualidad de poder escuchar al resto aún si eso implica no obtener lo que quieres, que es justo como cuando comprendiste los sentimientos de tu hermana y mentora Luan.

-¿En serio Li... Albert?

Lincoln asintió feliz de decirle algo bueno a su hermana.

-Pu... Pues yo, me gusta que nuestros sueños están conectados, tengo algo único que compartir y que mejor con la única persona que me hace hacer lo correcto y que siempre me sonríe.

Escribiendo rápidamente Lincoln le da de nuevo el teléfono a aquella chica.

-Ahora dice... Que aunque aunque seas dura e independiente y a veces pareces una piedrita en el zapato su suerte es que estés con él, que los tiempos han cambiado su manera de vivir y que gracias a ti conoció el amor... Ay... No quiero llorar.

-A mí me gusta que los detalles que haces por los que amas son los más hermosos y sinceros que he visto, a veces doy por sentado que siempre estarás para mí y aunque sé que así será tú me has hecho mejor en unas semanas de lo que yo misma he hecho por mí en años, hoy siento que hay alguien que me ha cuidado por siempre...

-Todo reino tiene sus reyes, vamos a hacer de este odio nuestra fuente de apoyo, toquemos el cielo rompiendo los vientos mientras vemos el pasado para cuidarnos del porvenir... Hay cosas más grandes que yo y sé que soy bastante inútil (sniff) pero en el momento en que llegaste a mí me asustaste al verme tanto que... Había olvidado los hermosos ojos que tienes... El universo se queda pequeño comparado a las cosas que estaría dispuesto a (sniff) a hacer por ti ¿Hasta que la muerte se lleve a alguno? Sabemos que puede no ser así ¿Por qué no mejor hasta que el tiempo se pare? Hoy di un salto al destino que he elegido, no te mortifiques pensando en lo malo que hoy sucedió porque todo está bien... Te quiero Lucy.

(Sniff) oye... ¡Lucy tienes que seguir traduciendo porque estoy llorando!

-Yo lo haré... No puedo dejar que pase un segundo más, no he podido ni pararme a hablar ¿Quieres hacerme feliz? La felicidad es tan mundana que su poder de ser tan efímera me abruma, no quiero un final feliz pues el verte me hace pensar en los problemas infinitos de la vida que sé que quiero vivir porque sino... ¿Qué de interesante tendría la vida?

-(Lucy... No sé qué decir...)

-No digas nada, ya has dicho suficiente pero ¿De verdad te gustan mis ojos?

-(Con o sin ojos, buena o mala, empoderada o frágil tú eres Lucy Marie Loud y eso es algo que nadie te va a quitar)

-Creo... Que hoy soy feliz... Eres mi gran héroe... Por eso te quiero... Y siento hacerte esto pero Albert... Tú y yo siempre podemos empezar desde cero...

-¡Ya! ¡Ya no hablen Lucy! (Sniff) ¡Están haciendo llorar a toda la escuela!- Alice con lágrimas escurriendo por su rostro manchando su cara por el maquillaje le da a Lucy un sobre con el dinero que habían ganado -ahora... Por favor... Abran el último baile de esta noche.

Al igual que un caballero él se reverencia frente a la damisela que tiene enfrente mientras que la pista de una canción comienza a sonar, en secreto Lincoln besa su mano y le susurra:

-Disculpe mi atrevimiento hermosa dama ¿Me permitiría una pieza antes de terminar la noche?

-¿Pe... Pero qué hay de... De mi mentira?

-¿Mentira? Lo que yo veo es una dulce jovencita que tiembla por sus dudas, quiero apaciguar tus pesares bailando ¿Qué dices? Prometo no hacerte nada raro esta vez.

-Jamás lo has hecho y jamás lo harías... Bailemos.

Al tomar su mano algo sucedió, una mera imagen reflejada. Dejaron de estar en el gimnasio de la escuela de Lucy para pasar a estar en el medio de un palacio con una orquesta abriendo el paso a un bello baile.

-¿Viste eso Linc?

-Si... Pero vamos a ignorarlo, tú lo dijiste ¡Que esta noche se jodan los espíritus! Solo son cinco minutos, cinco minutos en los que solo tú y yo estaremos aquí.

Lucy no puede negarse y es ella misma quien toma la mano derecha de Lincoln y la pone en su cadera mientras que en la izquierda entrelaza sus dedos con los suyos.

-Ilusiones nadamás Lincoln, tantas noches de oscuridad parecen no acabar, me he dejado desafiar y aunque sé que por mi culpa nada será igual y que además lo pagaré con creces quiero saber que mis lágrimas no serán en vano porque como yo solo hay una y por favor déjame decirte que amo esta versión de Lucy, soy yo pero no soy yo, soy Lucy pero no la de antes y hoy no quiero perder mi noche de gloria.

-Y no podría ser mejor Lucy, quiero a la Lucy que habla conmigo, a la que lee por las noches y suspira por su verdadero amor por las mañanas.

-¿Cuál verdadero amor?

-Tu cama.

-Jajaja tienes razón.

-Aguarda... ¿Esa es tu risa?

-Si... Siempre la ahogo porque no me gusta como suena.

-No deberías de hacerlo, es una risa...

-Boba e infantil.

-En realidad iba a decir que es femenina y risueña, me gusta.

-Creí que amabas la de Haiku.

-La amo pero ella se ríe con más pena, sin embargo tú te contienes para no ser auténtica. Lucy...

-¿Si?

-Solo hay una cosa que puedes hacer para que pueda perdonarte esto y fingir que nada ha pasado entre nosotros pero tienes que hacerlo.

-Lo que sea ¿Qué tengo que hacer?

-Sé tú misma, sé Lucy Marie Loud, sé la Lucy que hoy baila conmigo, la que ríe y crea poemas de oscuridad hermosa y brillos dolorosos, sólo sé tú y nadie más que tú ¿Lo harás?

-Claro... Prometo tratar de hacerlo.

-No trates, serás más feliz o triste, tú me entiendes pero cuando lo hagas y créeme que cuando pase ahí estaré para ver en la magnífica persona que sé que eres porque no eres un diamante en bruto, tú brillarás tanto como solo tú quieras...

-Lincoln.

-¿Si?

-No quiero perder esto esta noche.

-No perdemos nada en la vida, verás que en el futuro tendrás noches aún mejores.

-Si pero quiero conservar esta.

-¿Qué dices de una última foto cuando salgamos?

-Eso sería lo más cercano a la felicidad.

Juntando sus cuerpos meneándose de un lado al otro ambos se pierden del resto del mundo, dejan de pensar si es que los ven, si están haciendo alguna tontería o si quiera el por qué están ahí, olvidan los espíritus, los sueños y hasta sus lágrimas, durante cinco minutos olvidan que el mundo existe.

La música ha cesado y con ella el baile, la farsa ha llegado a su fin pero Lucy se queda colgada completamente del brazo de su acompañante, restriega su cara una y otra vez para recordar su escencia, su olor y su aura que emanan cariño y comprensión que son como con las que siempre soñó.

-Veo que eres muy cariñosa Lucy.

-No me gusta serlo a menos que yo quiera... Pero si le dices a alguien también te perseguiré en tus sueños.

-Jajaja sería extrañamente familiar, un deja vu quizá.

-¡Alto!- Jackie está que hecha fuego por los ojos, ella sabe que su noche fue fatal por su culpa.

-¿Lincoln qué hacemos?

-Tranquila solo faltan cinco.

-¿Cinco qué?

-Tú aguarda, tres... Dos... Uno...

Fuera de los diez metros límite reglamentarios de las escuelas Lincoln se posa firme frente a Jackie, quiere patearla pero es una chica así que por lo menos quiere lastimar más su orgullo.

-¡Ustedes se las verán conmigo!

Lincoln solo se reverenció hacia Lucy invitando a que se desahogara con ella y por supuesto que ella aceptó, caminó hasta Jackie y le escupió en sus zapatos.

-Listo, tienes más de mis desechos, disfrútalos y por cierto... Te gané.

-¡Eres una...!- a punto de soltarle una cachetada a Lucy su mano se detiene, siente una presión en su brazo como nunca antes había sentido, voltea y a su lado un chico mucho más grande que ella la detiene con una cara llena de ira -¡¿Tú qué mudito?!

Lincoln la soltó, sabía que un golpe no le haría nada a una mujer como ella así que alejó su mano de Lucy y fue hasta el borde de la calle, tomó un poco de pasto con lodo y lo arrojó en contra del vestido de aquella presumida.

-¡Ya déjame! ¡Rocky!

Llamando a su novio acude a su rescate, al verla llorando solo puede pensar que es culpa de Lucy.

-¡¿Qué le hiciste a Jackie?!

-¡Qué te importa maldito arrastrado superficial!

-¡No te voy a dejar que me hables así!

-¡Yo te hablo como se me pegue la gana!

-¡Cállate!- un parpadeo, solo tuvo un parpadeo antes de que su nariz chocara fuertemente contra el suelo cegando cualquier movimiento.

-Oh por cierto Rocky quería presentarte a mi novio Albert ¿Ya sentiste sus músculos? ¿Fuertes no?

-Eres una...- otro azote en el frío y duro pavimento lo dejan retorciéndose sin saber qué hacer.

-¡Es todo! ¡Te voy a demandar maldito animal!

-Eso si primero puedes encontrarlo Jackie ¿Nos vamos cariño?

Asintiendo Lincoln extiende su brazo mientras que Lucy lo toma no sin que antes ambos se volteen y le restrieguen en la cara que ganaron.

-¡Los odio!

-Sabes Jackie que bueno que me lo recuerdas porque si me vuelves a molestar él va a venir completamente solo... Veamos si te gustará seguir así.

-¡Ya largo!

Dando pequeños saltitos alrededor de Lincoln esparce alegría por doquier, tararea alguna marcha fúnebre mientras se cuelga de un poste de luz.

-Veo que te divertiste.

-Si y mucho, creo que con lo que hiciste me libraré de ella por un tiempo.

-Y si no sucede dímelo, podemos resolver estas cosas sin necesidad de tanto circo, maroma y teatro Lucy.

-Si pero me gusta el drama, es parte de la vida el disfrutar de la exageración empírica del flagelo mismo que vivimos día con día, no me gusta ser agresiva porque siento que me aleja de la persona que quiero ser así que por eso nunca volví a golpear a Jackie.

-Ese es tu problema Lucy.  Tú puedes ser la persona más amable, carismática y linda del mundo pero también puedes mandar a todos y todo a la mierda cuando lo necesites, eres más de lo que crees y te lo puedo asegurar.

-¿Y cómo sé que no lastimaré a nadie?

-¿Y qué te importa si alguien más sale lastimado? La que importa eres tú y ahora si no te molesta tengo que regresar a hacer tarea, quiero dejar todo bien hecho en este tiempo antes de ir a ver a Haiku, le llamaré cuando esté allá para darle una sorpresa, creo que con esa mitad de dinero más el que tengo ahorrado me alcanza para sobrevivir por allá unos dos días.

-No, querrás decir con estos quinientos dólares.

-Sé a lo que te refieres y no Lucy, es mitad y mitad.

-Este era el acuerdo y el pago, al igual que tú quiero cumplir mi promesa pero no te la dejaré fácil, llévame cargando de aquí hasta casa, quiero sentirme que vuelo de nuevo sobre el...

-¿Ya te dolieron los pies por andar en tacones verdad?

-Suspiro, me descubriste pero eso no me quita el dolor ¿Entonces me cargas?

-Digo que me romperás la espalda pero está bien, por un lindo final de una divertida y única noche.

Quitándose los tacones y saltando a la espalda de Lincoln muerde su hombro.

-¿Y eso?

-No estoy gorda.

-Jajajaja entiendo Lucy.

-Más te vale... Linc, gracias por lo que has hecho por mí.

-Recuerda que la única manera de agradecer es siendo tú misma así que trabaja en ello ¿De acuerdo?

-De acuerdo Linc, te quiero.

-¿Y eso? Hoy si que has estado muy cariñosa.

-Disfruta porque mañana mis cariños estarán enterrados en el patio junto al pescado de Lily.

-Lo bueno que te grabé diciendo que me quieres, aw ¿Quién es una linda hermana menor?

-Cállate.

-Nop porque yo también te quiero.

Hundiendo su cara completamente enrojecida detrás de la espalda de Lincoln debido a las palabras de ternura sobre quererla se deja llevar.

Un corto camino de regreso a casa en el que hablan de cosas sin sentido, tuvieron que separarse pues Lincoln debía de quitar el maquillaje y la muda de ropa de sí mismo además de que así le daría tiempo a Lucy de regresar sola sin levantar sospecha alguna. Llegó a casa, las luces apagadas y ningún sonido a su alrededor, con sigilo como solo ella sabe hacer logra escabullirse hasta su habitación pero...

-¡Ahí estás!- el grito de Luna es tan directo que hizo que cayera de espaldas pues ella y el resto de sus hermanas estaban en su habitación esperando su regreso.

-¿Ahora qué hice?

-No te hagas la tonta con nosotras Lucy ¡¿Por qué no nos dijiste que tenías novio?!