Saliendo del avión Alin fue corriendo a la sala en donde recogen las maletas
-Aun no entiendo por qué si ya habías enviando tus cosas a la casa traes maleta.
-Es que... No, no hay excusa- dijo restándole importancia.
Reí ante la actitud infantil de amiga mientras buscaba la salida para pedir un taxi.
-¿Alguien vendrá a verte?
-No- Contesté un poco más seca de lo que quería
-Está bien...
Sé que le dolió, pero antes de que pudiera disculparme un taxi se paró enfrente de nosotras.
-Abriré la cajuela- Alin fue a la parte trasera del carro mientras yo subí y le explicaba al taxista la dirección.
No le contaba de mi vida pasada a Alin pero no por que tuviese un pasado obscuro, ni porque no tuviera la confianza, solamente me dolía pensar en eso.
Ya sabía el recorrido de memoria, la última vez que pasé por este esperaba que Luke viniera y que tratara de detenerme así esto se convertiría en una escena de una película de los 80's... porque él sabe cómo soy, sabe que esas partes de la películas son las que más amo. Pero no. No fue para nada así, ni siquiera fue al aeropuerto, en realidad no había nadie, Luke era la única persona que necesitaba para ser feliz.

Alin observaba maravillada el paisaje que teníamos.
-¿Te gusta?- Pregunté para romper el silencio
-Esto es mucho mejor que en las fotos.
-Es mejor en otoño cuando la cuidad toma tonos naranjas y amarillos.
-Wow...
Dejé que mi compañera para que disfrutara de toda esta experiencia.
***
Llegamos a la casa en la que estaba Katia en el patio junto a su novio en turno.
-Dijiste que nadie te visitaría. -Preguntó confundida.
-No vino a visitarme.
-¿Entonces?
-Ella rentaba la casa.
Katia al verme corrió hacia mí para abrazarme
-¡Nina! ¡Tanto tiempo! ¡Sigo sin creerlo!
-Katia... ¡Hey! -Sonreí falsamente
-¡Debemos de ponernos al corriente! Pasaron tantas cosas desde que te fuiste.
-Eh.... Ella es Alin, mi compañera en los cursos. Alin ella es Katia, íbamos juntas en primaria.
-Hola.- Alin le tendió la mano pero Katia era más... cariñosa, así que no fue sorpresa cuando envolvió a Alin en sus brazos mientras le decía cosas como "Bienvenida" "Que gusto" etc.
-Nina me encanta que hayas regresado pero... ya sabes- dijo mientras miraba al chico que estaba alado de ella.
-Eh... claro, luego nos vemos.
-Adiós chicas... Por cierto, tengo muchas noticias sobre Lu...
-Adiós.
Tomé las llaves y a Alin de la mano para alejarnos de ellos lo más posible. Era mi primer día y ya estaban a punto de mencionar a Luke.
-¿De quién hablaba Katia?
-¿Qué?
-Kata dijo que tenía noticias de un... ¿Tipo?
-Ah... nada, uno de sus ex novios.- Mentí.
-Oh... ¿Ella siempre es así?
-¿Cómo? ¿Energética? ¿Parlanchina? ¿Cariñosa?
-Jajaja, todo eso.
-Si... ella es así. Te mostraré tu cuarto.
-Es una casa muy grande para una persona.
-No estaba sola.
-¿Alguien vivía contigo? ¿Katia?
-Sí, mira, arriba el primer cuarto es mío. Luego está un baño y luego tu cuarto.
-Excelente, deja voy por las maletas que se quedaron afuera.
Cuando Alin salió por fin pude apreciar mi casa y por primera vez dejé de llevarme por los recuerdos voluntariamente. Miré las escaleras y pude ver a Luke y a mi resbalándonos con cajas de cartón, miré la sala y ahí estaba yo dormida encima de él mientras veíamos películas de Netflix, en la cocina yo ponía la mesa y el cocinaba.
Sentí los ojos llorosos cuando Alin cerró la puerta.
-Listo, ya había una señora que estaba viendo las maletas y... ¿Qué pasó?
-Sólo... sólo extrañaba a mi casa.
-Oh... Nina, ya estas acá y lo mejor es que no estás sola.
-Gracias Al, mira te enseño tu cuarto.
***
-Ya no puedo más. Estoy cansada...
Habíamos pasado poco más de 2 horas
-Sólo llevamos una caja.
-¡Pero era la más grande! - Gimoteó la pelirroja a mi lado.
-No, la más grande está en la cocina.
-Ya no quiero desempacar otra caja. Ni siquiera debimos de hacer esto, tomamos un vuelo de quien sabe cuántas horas.
-Está bien mujer, mañana continuamos.
-Wuh... hasta mañana Nina...
-Hasta mañana Al. Bienvenida.