El azabache y el albino habían llegado a casa del segundo, Akutagawa se sorprendió de aquel departamento, era alto y bastante grande, no era lujoso pero sí que era un condominio costoso - ¿vi-vives aquí? – pregunto el azabache

- Si – respondió Atsushi sin mirarlo

- ¿eres hijo de mafiosos o traficantes?

- Cla-claro que no – dijo el albino – es casa de mi abuelo, él tiene muchos premios e hizo muchos trabajos en el gobierno

- ¿vives con tu abuelo? ¿tus padres?

- Murieron – dijo el albino y el azabache ya no supo que decir, ¿ahora qué haría? Estaba a solas con el chico que le gustaba, entonces... podía hacerlo, podría conocerlo mejor ¿no?

Siguió a Atsushi hasta la habitación de esté, demasiado simple al gusto de Akutagawa, solo había una cama y un ropero, había un tigre de peluche grande en su cama el cual llamo su atención, también había una enorme repisa con libros, fue lo que más llamo su atención - ¿te gusta leer? – pregunto el azabache

- Si, admiro mucho a Robert Stevenson – dijo el albino sonriente mientras sacaba la mesa de centro

- ¿Cuánto lees? – pregunto el azabache

- Casi todo el día leo – respondió acomodando sus libros de estudio en la mesa

- Ahora entiendo por qué no eres bueno en matemáticas – dijo el azabache – no leas solo fantasía, lee matemáticas y te ira mejor

- ¿lo crees?

- Si, por supuesto – dijo el azabache sentándose a su lado – comencemos

Akutagawa y Atsushi llevaban un buen rato estudiando, ninguno de los dos había peleado y la verdad Akutagawa se sentía feliz aunque en su rostro no lo expresaba, el albino se veía cansado pero había logrado entender bien las cosas así que decidió hacer algo lindo por él – descansemos – dijo el azabache

- ¿en serio? – pregunto Atsushi con el brillo en sus ojos

- Si, si te esfuerzas tanto luego serás más idiota – expreso. Y de inmediato se regañó mentalmente ¿Por qué siempre terminaba insultándolo?

- Oye – se quejó Atsushi

- ¡HE LLEGADOOOOOOOOOOOUUUU U- UY ~ - escucharon ambos chicos aquella voz cantar, Akutagawa se quedó en shock mientras Atsushi suspiro

- Estoy en la habitación – grito Atsushi

- ¿su abuelo? – se preguntó el azabache en su mente pero su gran sorpresa fue ver a Dazai entrar

- ¡Atsushi-kun! ¿ya cenaste? – pregunto Dazai y miro al azabache – o ma ~ ¿están estudiando?

- Si Dazai-san – sonrió Atsushi – llegaste más temprano

- Oh bueno, ya sabes, Chuuya que solo quiere pelear – dijo mirando a otro lado

- Si, peleas – dijo Atsushi burlón

- Bueno... ¿quieren cenar? – pregunto Dazai sentándose enfrente de Akutagawa

- Ya entendí – suspiro el albino levantándose y miro al azabache – haré la cena, por favor espera un momento

Atsushi había salido de su habitación y Dazai miraba a Akutagawa sonriente, obviamente el azabache estaba molesto pero el castaño poso sus codos en la mesa y recargo su mejilla en sus mismas manos – entonces... ¿estudiaban?

- Estudiábamos – confirmo el azabache

- ¿Qué estudiaron?

- Matemáticas

- ¿Qué...

- ¿Qué hace aquí Dazai-san? – pregunto serio el azabache

- Yo solo vengo a gorronear la cena – sonrió Dazai

- Eso es descarado

- No puedo evitarlo – comenzó Dazai sonriente – lo de Atsushi-kun es tan delicioso, tan blanco y solo quiero más y más de él, es imposible no querer tenerlo cada noche y

- Da-Dazai-san – trago saliva el azabache mirando al castaño

- ¿Qué? – sonrió malignamente Dazai – obviamente hablo del arroz que prepara

- ¿Por qué viene a cenar aquí? – pregunto

- Vivo al lado – dijo Dazai sonriendo – pero mis padres y el abuelo de Atsushi-kun trabajan hasta tarde así que Atsushi-kun y yo convivimos todo el tiempo

- ¿así?

- Si, a veces yo vengo... - dijo burlón – a veces él va – sonrió al azabache. Akutagawa estaba furioso por como el castaño le trataba ¿Qué le pasaba a ese fastidio de persona?

- ¡Dazai-san!, ¡Akutagawa! – grito el albino llamándolos

- Es hora de cenar – dijo Dazai levantándose – por cierto, la habitación de Atsushi-kun siempre esta tan arreglada... debería dormir más en ella ¿no crees? – dijo Dazai saliendo de la habitación

Dazai comía placentero el arroz que había preparado Atsushi con algo de pescado frito, mientras Atsushi esperaba al azabache. Akutagawa había salido de la habitación con su maleta y el albino lo miro – ven a cenar, seguiremos después de ello – dijo sonriente el albino

- ¿cenar tu porquería? No gracias – dijo el azabache molesto – me largo a mi casa, no quiero que oscurezca – dijo saliendo del departamento

- Ah, esp-espera Akutagawa – le llamo Atsushi siguiéndolo

Lo siguió por todo el pasillo hasta alcanzarlo en el elevador, apenas había logrado entrar y eso sorprendió al azabache, Atsushi respiraba para recuperar su respiración y miro al azabache – n-no te vayas solo – dijo Atsushi – te acompañare a la estación

- No soy un niño para que cuides – se quejó el azabache

- So-solo quería acompañarte para agradecerte – menciono el albino ya recuperando su aliento

- Te hubieras quedado con Dazai-san a cenar tranquilamente – dijo cruzándose de brazos

- Dazai-san cena siempre conmigo

- Lo sé, muy rico, ¿no?

- ¿eh? Pues a Dazai-san la gusta mucho y – Akutagawa tomo el cuello del albino, estaba furioso de ello

- Escúchame bien pesado de mierda, no estoy aquí para ser tu amigo, lo último que quiero es ser tu amigo, quiero terminar esto de una vez y – Akutagawa se quedó callado al ver al albino, Atsushi parecía querer llorar - ¿Atsushi? – le llamo mientras soltaba su ropa y dejaba de amenazarlo

- Yo... solo quería agradecerte – dijo limpiando sus ojos – antes nos llevábamos muy bien... hoy pensé... solo pensé que podríamos ser amigos de nuevo... pero lo entiendo perfecto ahora – dijo tragando saliva – gracias por ayudarme, estudiaré duro y leeré más de las matemáticas que otra cosas

- Atsushi, es que yo realmente – el elevador se había abierto y el albino aprovecho para salir por el pasillo hasta las escaleras de emergencia para volver a su casa. Akutagawa se había quedado paralizado, lo había arruinado.

El día siguiente Akutagawa había llegado a la escuela casi como si de un zombi se tratará, mayor fue su sorpresa cuando el albino no apareció en todo el día.

Lo había jodido todo, y lo había jodido en grande, ¿Por qué tenía que hacer ese tipo de cosas? ¿Por qué se enfadaba con el albino y no con él castaño? ¿y por qué Dazai se empeñaba tanto en molestarlo? Sabía que le gustaba el albino entonces ¿Por qué? ¿Por qué tenían que ser las cosas así?

A la salida, salió casi como un suspiro, no quería saber nada de la escuela, pero si escucho al pelinaranja gritar – ¡Atsushi! – grito Chuuya llamando la atención del azabache, vio como el pelinaranja se acercó a una motocicleta donde había dos chicos más, reconoció a Dazai por las vendas pero al otro no. Vio a Chuuya colocarse el casco y montar la motocicleta con los otros dos chicos. Tres en una motocicleta, eso era peligroso pero parecía no importarles, arrancaron yéndose lejos de la escuela

- Ese era... ¿Atsushi? – pregunto el azabache viendo como la motocicleta desaparecía.

Akutagawa había llegado a su casa, no hizo caso a sus padres solo se metió a su cuarto donde se encerró, suspiro profundo pues quería descansar de todo el embrollo en su cabeza pero ¿Cómo? Los exámenes se acercaban. Tomo su mochila y la volteo para sacar todo, allí lo vio, había una nota que desconocía, y al leerla se sorprendió. "Déjalo en paz, es mío. Si te metes con él, tú serás el siguiente." - ¿Qué Carajos significa esto? – Dijo Akutagawa mirando el papel y el recuerdo de cuando Atsushi perdió sus cosas y fueron rotas llego – alguien... ¿lo molesta? – se preguntó

¡Hola a todos! :3 si, ando actualizando así que prepárense para lo bueno. La verdad esté fanfic no lo tengo en mente como uno largo, espero les gusten

¡Gracias por leer!