Capitulo 4

Oye, oye, tú, tú
No me gusta tu novio
De ninguna manera, de ninguna manera
Creo que necesitas uno nuevo
Oye, oye, tú, tú
Podría ser tu novio

Oye, oye, tú, tú
Sé que te gusto
De ninguna manera, de ninguna manera
No, no es un secreto
Oye, oye, tú, tú
Quiero ser tu novio

Estás tan bien, te quiero la mía, eres tan deliciosa
Pienso en ti todo el tiempo, eres tan adictiva
¿No sabes lo que puedo hacer para que te sientas bien?
No finjas, creo que sabes que soy precioso
Y demonios, sí, soy una maldita principe
Puedo decirte que también te gusto y sabes que tengo razón

El es como lo que sea
Puedes hacerlo mucho mejor
Creo que deberíamos reunirnos ahora
Y eso es de lo que todo el mundo habla

Oye, oye, tú, tú
No me gusta tu novio
De ninguna manera, de ninguna manera
Creo que necesitas uno nuevo
Oye, oye, tú, tú
Podría ser tu novio

Oye, oye, tú, tú
Sé que te gusto
De ninguna manera, de ninguna manera
No, no es un secreto
Oye, oye, tú, tú
Quiero ser tu novio

Puedo ver el camino, veo la forma en que me miras
E incluso cuando miras hacia otro lado, sé que piensas en mí
Sé que hablas de mí todo el tiempo una y otra vez
Así que ven aquí y dime lo que quieres oír
Mejor aún, haz que tu novio desaparezca
No quiero oírte decir su nombre nunca más
Y otra vez, y otra vez, y otra vez, porque

El es como lo que sea
Lo haces mucho mejor
Creo que deberíamos reunirnos ahora
Y eso es de lo que todo el mundo habla

Oye, oye, tú, tú
No me gusta tu novio
De ninguna manera, de ninguna manera
Creo que necesitas uno nuevo
Oye, oye, tú, tú
Podría ser tu novio

Oye, oye, tú, tú
Sé que te gusto
De ninguna manera, de ninguna manera
No, no es un secreto
Oye, oye, tú, tú
Quiero ser tu novio

En un segundo estarás envuelto alrededor de mi dedo
Porque puedo, porque puedo hacerlo mejor
No hay otro, así que ¿cuándo va a hundirse?
Es tan estúpido, ¿en qué diablos estabas pensando?

En un segundo estarás envuelto alrededor de mi dedo
Porque puedo, porque puedo hacerlo mejor
No hay otro, así que ¿cuándo va a hundirse?
Es tan estúpido, ¿en qué diablos estabas pensando?

Oye, oye, tú, tú
No me gusta tu novio
De ninguna manera, de ninguna manera
Creo que necesitas uno nuevo
Oye, oye, tú, tú
Podría ser tu novio

De ninguna manera, de ninguna manera

Oye, oye, tú, tú
Sé que te gusto
De ninguna manera, de ninguna manera
No, no es un secreto
Oye, oye, tú, tú
Quiero ser tu novio

De ninguna manera, de ninguna manera

Oye, oye, tú, tú
No me gusta tu novio
De ninguna manera, de ninguna manera
Creo que necesitas uno nuevo
Oye, oye, tú, tú
Podría ser tu novio

De ninguna manera, de ninguna manera

Oye, oye, tú, tú
Sé que te gusto
De ninguna manera, de ninguna manera
No, no es un secreto
Oye, oye, tú, tú
Quiero ser tu novio

De ninguna manera, de ninguna manera
Oye, oye


El día transcurría con normalidad en el hospital, pero en el corazón de House, la tormenta de celos rugía con furia. Desde temprano, había notado cómo Lizzy y Chase compartían risas y gestos de complicidad, y eso lo llenaba de frustración y angustia. Cada vez que intentaba acercarse a Lizzy, se encontraba con la presencia de Chase, como si estuviera constantemente interponiéndose en su camino hacia ella.

Mientras observaba desde la distancia, House luchaba por contener sus emociones. Los celos lo consumían, y no podía soportar la idea de ver a Lizzy con otro hombre, aunque fuera solo como amigos. El pensamiento de perderla lo llenaba de pánico y desesperación, y eso lo llevaba a comportarse de manera grosera y distante con ambos.

Decidida a confrontar a House sobre su actitud, Lizzy se dirigió hacia su oficina con paso firme. Al llegar, lo encontró sumido en sus pensamientos, mirando fijamente por la ventana con una expresión sombría en el rostro.

—¿Qué demonios está pasando contigo, House? —exclamó Lizzy, su voz llena de preocupación mientras entraba en la oficina.

House se sobresaltó al escuchar la voz de Lizzy, y se volvió hacia ella con una expresión de sorpresa y resentimiento.

—¿Lizzy? ¿Qué haces aquí? —preguntó House, su tono de voz mezcla de sorpresa y hostilidad.

—Necesitamos hablar —dijo Lizzy, su voz firme pero comprensiva mientras se sentaba frente a él.

—¿Qué quieres, Lizzy? —preguntó House, su tono de voz lleno de amargura y resentimiento.

Lizzy frunció el ceño, sintiendo un nudo en la garganta al enfrentarse a las emociones que había estado tratando de ignorar.

—¿Por qué te comportas así, House? ¿Qué te he hecho para que me trates de esta manera? —preguntó Lizzy, su voz llena de angustia y confusión.

House bajó la mirada, sintiendo un pinchazo de remordimiento al ver el dolor en los ojos de Lizzy.

—No lo entiendes, Lizzy. No puedo soportarlo más —confesó House, su voz llena de desesperación y anhelo mientras se acercaba a ella.

—¿Qué no puedes soportar? ¿Qué está pasando, House? —preguntó Lizzy, su tono de voz suave y comprensivo mientras levantaba la mirada para encontrarse con la de él.

—Tú... tú y Chase, siempre juntos, riendo, compartiendo momentos... no puedo soportarlo —dijo House, su voz llena de amargura y celos mientras luchaba por contener sus emociones.

Lizzy se quedó sin aliento ante las palabras de House, sintiendo un cálido resplandor de esperanza arder en su pecho.

—House, yo... —comenzó Lizzy, pero las palabras se atascaron en su garganta mientras luchaba por encontrar las adecuadas para expresar lo que estaba sintiendo.

En ese momento, House se acercó a ella y tomó su mano entre las suyas, enviándole una mirada llena de complicidad y amor.

—Lizzy, no puedo soportarlo más. Estoy profundamente enamorado de ti, y no puedo soportar la idea de verte con otro hombre. Necesito que sepas que estoy profundamente enamorado de ti, que te adoro en cuerpo y alma, que me has hecho sentir cosas que nadie más podría, que mi cuerpo te necesita, te desea como si fuera una orden, una droga, una necesidad, y que no puedo sacarte de mi cabeza, incluso en mis momentos más íntimos. Estoy locamente enamorado de ti, Lizzy —declaró House, sus ojos brillando con una intensidad apasionada mientras buscaba desesperadamente la mirada de Lizzy.

Lizzy se mordió el labio inferior, sintiendo un nudo en la garganta al enfrentarse a las emociones que había estado tratando de ignorar.

—House, yo también... —comenzó Lizzy, pero las palabras se atascaron en su garganta mientras luchaba por encontrar las adecuadas para expresar lo que estaba sintiendo.


En ese momento, sus miradas se encontraron, y en un instante, todo quedó claro entre ellos. Sin decir una palabra más, se abrazaron con fuerza, dejando que el amor que sentían el uno por el otro los envolviera en un cálido resplandor de esperanza y ternura. Lentamente, House acercó su rostro al de Lizzy, sus ojos reflejando una mezcla de pasión y anhelo. Con un suspiro apenas audible, sus labios se encontraron en un beso que sellaba el inicio de una nueva y apasionada historia de amor.

El beso comenzó suavemente, como una delicada caricia entre sus labios, pero pronto se intensificó, alimentado por el deseo y la necesidad que habían estado reprimiendo durante tanto tiempo. Cada beso era una declaración de amor, un susurro silencioso de los sentimientos que habían estado ardiendo en sus corazones.

House sintió cómo el mundo a su alrededor se desvanecía mientras se sumergía en el sabor dulce y adictivo de los labios de Lizzy. Cada roce era una promesa de un futuro juntos, una promesa de que nunca más tendrían que ocultar lo que sentían el uno por el otro. Sus brazos la rodearon con más fuerza, como si temiera que ella pudiera desaparecer si la soltaba.

Lizzy respondió al beso con la misma intensidad, dejando que todas las barreras que había construido alrededor de su corazón se desmoronaran ante el torrente de emociones que la embargaban. Sus manos se aferraron a los hombros de House, como si necesitara anclarlo a ella, como si temiera que este momento de felicidad pudiera desaparecer si lo soltaba.

Entre besos entrecortados, murmuraron palabras de amor y gratitud, expresando lo que habían guardado en lo más profundo de sus corazones durante tanto tiempo. "Te amo", susurró Lizzy entre besos, su voz temblando con la emoción. "Te amo más de lo que puedo expresar con palabras", respondió House, sus labios curvados en una sonrisa contra los suyos.

El tiempo parecía detenerse mientras se perdían el uno en el otro, enredados en un abrazo apasionado que trascendía las palabras y el entendimiento. Finalmente, cuando se separaron, sus ojos se encontraron una vez más, brillando con una felicidad radiante y una profunda conexión que trascendía todo lo demás.

"Esto es solo el comienzo", murmuró House, su voz suave y llena de emoción. "Estoy tan feliz de haberte encontrado". Lizzy asintió con una sonrisa brillante, sabiendo que este era el principio de algo hermoso y duradero entre ellos. Juntos, enfrentarían cualquier desafío que la vida les presentara, porque sabían que mientras estuvieran juntos, podrían superar cualquier obstáculo.

Y así, con el sol brillando a través de la ventana y el latido de sus corazones como música de fondo, se abrazaron una vez más, sabiendo que habían encontrado en el otro algo que solo se encuentra una vez en la vida: un amor verdadero y eterno.

Después de ese intenso y revelador beso, House se apartó ligeramente de Lizzy, su mirada aún llena de pasión y ternura. Sin embargo, una sonrisa juguetona apareció en sus labios, y su tono se volvió más ligero mientras decía: "Bueno, supongo que esto significa que ya no tenemos que fingir más".

Lizzy lo miró con una mezcla de sorpresa y diversión, reconociendo la verdad en sus palabras. "Supongo que no", respondió con una sonrisa, sus ojos brillando con complicidad. "Aunque debo admitir que disfruté un poco el juego de coqueteo".

House rió suavemente, apreciando su respuesta sincera. "Yo también", admitió. "Pero creo que ya es hora de ser un poco más directos".

Lizzy asintió, sabiendo a dónde se dirigía la conversación. "¿Directos en qué sentido?", preguntó, aunque ya tenía una idea de lo que él iba a decir.

House la miró fijamente, sus ojos revelando una determinación que ella nunca antes había visto. "En el sentido de que quiero que seas mi novia", dijo con sinceridad. "No solo en secreto, sino públicamente. Quiero que todos sepan lo mucho que significas para mí".

El corazón de Lizzy dio un vuelco ante sus palabras, sintiendo una oleada de emoción y felicidad recorrer su cuerpo. "Yo también quiero eso", admitió, su voz apenas un susurro cargado de emoción. "Quiero estar contigo, Gregory House".

Con una sonrisa radiante, House tomó su mano y la apretó con suavidad. "Entonces es un trato", dijo, su voz llena de determinación. "Vamos a hacer esto, Lizzy. Juntos".

Y así, con un acuerdo silencioso entre ellos, se abrazaron una vez más, sabiendo que estaban comenzando un nuevo capítulo en sus vidas juntos. Aunque sabían que habría desafíos por delante, estaban dispuestos a enfrentarlos juntos, porque sabían que su amor era más fuerte que cualquier obstáculo que pudiera interponerse en su camino. Juntos, enfrentarían el futuro con valentía y determinación, sabiendo que mientras estuvieran juntos, podrían superar cualquier cosa que la vida les arrojara.

Luego de compartir un momento íntimo y lleno de afecto, Lizzy y House se separaron con sonrisas radiantes en sus rostros. Lizzy rompió el silencio con una suave risa mientras sugería que deberían irse por separado: ella tenía su última clase del día, y House debía atender algunas consultas. Aunque se despedían momentáneamente, ambos llevaban consigo la sensación reconfortante de haber compartido un momento especial juntos.

Con paso ligero y la mente llena de pensamientos sobre el encuentro, Lizzy se dirigió hacia su aula. Cada paso que daba parecía estar imbuido de una ligereza especial, como si estuviera flotando en una nube de felicidad y emoción. Los recuerdos del beso y las confesiones llenaban su mente, haciéndola sonreír de manera involuntaria cada vez que los revivía en su cabeza.

Mientras tanto, House se encaminó hacia su área de consultas con una sonrisa juguetona bailando en sus labios. Aunque su expresión era tan enigmática como siempre, en su interior se sentía una calidez reconfortante que no había experimentado en mucho tiempo. Cada paso parecía llevarlo más cerca de Lizzy, tanto física como emocionalmente, y la idea de tenerla a su lado lo llenaba de un renovado sentido de propósito y alegría.

Mientras caminaban por los pasillos del hospital, los colegas de House, incluido James, notaron el cambio en su actitud. Algunos murmuraban entre ellos, preguntándose qué podría haber causado ese repentino cambio en el ánimo de su jefe, mientras que otros simplemente lo observaban con curiosidad. Sin embargo, ninguno de ellos podía imaginar que la razón detrás de la sonrisa de House estaba directamente relacionada con Lizzy, la hija del jefe y una de las médicas más destacadas del hospital.

"¿Qué te pasa, House?" preguntó James, sorprendido por la aparente alegría de su amigo. "Te ves... diferente hoy".

House respondió con un encogimiento de hombros y una sonrisa enigmática. "Solo un buen día", dijo, manteniendo sus pensamientos sobre Lizzy para sí mismo.

Mientras tanto, Lizzy se deslizaba silenciosamente hacia su clase, con la mente llena de pensamientos sobre House. A pesar de la apariencia tranquila de la sala de conferencias, su corazón aún latía con la emoción de su encuentro con él. Se preguntaba qué depararía el futuro para ellos, pero por el momento, estaba contenta de haber compartido ese momento especial con el hombre que amaba en secreto.

Chase, notando la sonrisa constante en el rostro de Lizzy, no pudo evitar acercarse a ella con curiosidad. "Hey Lizzy, ¿qué te pasa? Te ves muy feliz hoy", preguntó con una mezcla de intriga y amabilidad en su voz.

Lizzy respondió con una risa suave, sin revelar demasiado. "Oh, nada en particular, solo soy yo siendo feliz como siempre", dijo con una sonrisa traviesa, tratando de mantener la calma mientras su corazón aún latía con la emoción de su encuentro con House.

Chase arqueó una ceja con escepticismo, notando la chispa especial en los ojos de Lizzy que no podía pasar desapercibida. "Hmm, estoy seguro de que hay algo más detrás de esa sonrisa, pero si quieres mantenerlo en secreto, lo respetaré", respondió con una sonrisa amigable, aunque todavía curioso por lo que podría estar sucediendo.

Lizzy asintió con una risa suave. "Gracias, Chase. No te preocupes, es solo... asuntos de la vida", dijo en tono misterioso, sin querer revelar demasiado sobre su encuentro con House y la creciente conexión entre ellos.

Mientras tanto, House continuaba con sus consultas, manteniendo su habitual actitud sarcástica y desinteresada. Sin embargo, en su interior, una sensación de alegría y anticipación lo inundaba, alimentada por el recuerdo del momento especial que había compartido con Lizzy. Cada paciente que atendía parecía desvanecerse en segundo plano mientras su mente volvía una y otra vez a la imagen de ella, y la idea de que finalmente podrían explorar su conexión más profundamente lo llenaba de emoción y anticipación.

A medida que avanzaba el día, tanto Lizzy como House luchaban por mantener la calma y la compostura ante sus colegas. Sin embargo, en su interior, el fuego del amor recién descubierto ardía con fuerza, uniendo sus corazones en secreto mientras esperaban pacientemente el momento adecuado para revelar su romance al mundo.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top