Jimin: sí claro Mia, dime, desde que llegué te noto algo rara, ¿qué quieres saber?

Mia: es que Jimin, tú sabes tantas cosas de mí, y yo siento que te conozco tan poco.

Jimin: es que Mia, cuando estoy contigo siento que en el mundo solo existimos tú y yo, y no siento la necesidad de hablar de las cosas de afuera.

Mia: pero es que no son las cosas de afuera Jimin, es tu vida, somos amigos no? Tu mismo lo dijiste..

Jimin: sí es verdad, y los amigos se cuentan las cosas. ¿Aver qué quieres saber?

Mia: no sé.. ¿dónde vives, quiénes son  tus padres, si tienes amigos o no, si tuviste novia antes, a qué te dedicas? ¿Son muchas preguntas no? –digo con una pequeña risita, es que tenía la necesidad de saberlo todo de él-

Jimin: jja no te preocupes, pero vamos por pasos si? Aver, mira yo soy de Busan, pero vine para acá para Seúl por trabajo, mi madre no quería que viniera para acá, pero en fin.. allá en Busan tengo a mis padres y a mi hermano menor, y trabajo en una agencia de música, como parte del staff de una banda famosa.

Mia: ohh que bien, por eso es que tienes tanto trabajo?

Jimin: sii, eso, y en mis ratos libres compongo música. Vivo con unos amigos de la secundaria. Somos 6 en total, y juntos compartimos el amor por la música.

Mia: oh enserio, nunca me los habías mencionado. Quisiera conocerlos, es posible?

Jimin: sii claro, en estos días te los presento.

Mia: y con respecto a tener novia, tuviste alguna antes? –dije algo sonrojada-

Jimin: Ehm, si Mia, justo el día antes que te conocí, había acabado de terminar mi relación con ella, su nombre es Jennie. Pero olvida eso, no quiero hablar más de ello si?

Mia: está bien Jimin, te entiendo.

Jimin: Mia, me tengo que ir, ya es tarde, mañana nos vemos si? –dice mirando la hora en su celular-

Mia: oww, Jimin pero es tardísimo –dice mirando su reloj-

Jimin: oh Mia, no te preocupes, yo vivo cerca.

Mia: ni hablar Jimin, te quedarás aquí en casa, además estaré sola, porque mi abuela fue a visitar a unas tías y no llegará dentro de unos días.

Jimin: Mia, ¿estás segura? No quiero incomodar.

Mia: claro que no jimin, además así me haces compañía.

Jimin: bueno siendo Así.… ¿Qué  haremos entonces?

Mia: uhmm no sé, quieres ver pelis de terror?

Jimin: pero…. Mia, es q-qu-ee yo-o.. nada, nada nada.

Ya había puesto la peli de terror, Jimin en el transcurso de la película dió varios brincos y gritos, y yo solo reía por sus caras graciosas, por lo que me pude dar cuenta, él le tenía pánico a este tipo de películas, por lo que decidí apagar la tele, ya que eran altas horas de la madrugada.

Jimin no quería dormir solo, me suplicó para que durmiera con él, pero yo lo mandé para otra habitación, ya que no sabía si podía ser capaz de controlarme con tanta dulzura junta a mi lado.
Eran las 3 de la madrugada y Jimin aún no lograba conciliar el sueño, cuando estaba a punto de hacerlo, algo tocó su pie y un globo rojo salió de debajo de su cama, justo como en la película.

Jimin: ahhh –se levantó asustado-

Jimin soltó un grito estruendoso y unas sonoras carcajadas provenían debajo de la cama, yo había sido la culpable de aquella broma. Seguía muy entretenida con mi risa, hasta que escuché unos sollozos, y era Jimin que al parecer se había asustado a tal punto de ponerse a llorar, e inmediatamente salí debajo de la cama.

Mia: Ya Jimin, disculpa si? Pero no seas llorón, fue una broma, no fue mi intención que te pusieras así.

Jimin: yah Mia, pero ese tipo de bromas no se hace, en serio me asusté muchísimo -decía tartamudeando, yo pensaba dejarlo así y que se durmiera, pero no pude con la culpa y lo abracé, yo lo único que quería era pasar un momento divertido con él-

Mia: ya, no llores más si?

Jimin: está bien, pero solo con una condición?

Mia: Park, te conozco y sé por donde vas y dejam…

Ese momento fue interrumpido por un dulce beso, beso que esperaba con ansias, pero no así, ya que solo somos amigos.

Mia: Ji-min, ¿qué acabas de hacer? –dije pasando mi dedo por mis labios poco hinchados-

Jimin: lo siento Mia, no fue mi intención, en serio disculpa, si no te gustó lo entenderé, solo hice lo que sentí –dijo algo apenado y a punto de parase de la cama, pero mi mano lo detuvo y esta vez fui yo la que le planté un beso en los labios, dulce tentación-

Este beso fue más intenso que el anterior, pues ya ambos lo deseábamos, y por primera vez estoy feliz, pues porque siento que el sentimiento es mutuo.
Cuando el beso terminó, me iba a dormir a mi cama, pero Jimin me detuvo de el brazo y me volvió a acostar en la cama, yo le estaba dando la espalada, él se aferró a mi cintura y cerró los ojos, no sin antes decirme..

Jimin: Mia, disfruta el momento, es solo hoy y mañana despertaremos como si nada hubiese pasado.

Por un segundo no quería que este momento acabara, pero la triste realidad era que mañana tendría que fingir que nada había sucedido. Iba a ser difícil para mí, pero lo tenía que intentar…