Capítulo 2.

Atsushi llevaba varios días enojado con Dazai ¿Por qué? No lo sabía, solo sabía que estaba molesto. La agencia lo había notado, pero Ranpo a pesar de que sabía todo decidió callar, lo que él sabía no era bueno para nadie.

Dazai había llegado ese día con chazuke, un peluche de tigre pero nada. Absolutamente nada, Atsushi seguía molesto con él. Así que cansado de aquella situación, Dazai fue a ver a los mafiosos. Entro como si nada a la base, anduvo entre los pasillos saludando a media mafia hasta llegar a la oficina de Chuuya – ¡oi Chuuya!

― Da-Dazai – Chuuya cayó de su silla, estaba tomando una siesta.

― Como siempre, no haces nada

― Cállate bastardo – grito mientras limpiaba la saliva de su boca - ¿Qué haces aquí?

― Vengo a ver que le hizo Akutagawa a Atsushi-kun

― ¿el chico tigre sigue molesto?

― Siiiiii

― Oh por dios, eso sí es raro. Creí que era un chico tierno

― ¡Lo es!

― Bien, bien, llamaré a Akutagawa.

El perro mafioso llego minutos después del llamado, se sorprendió de ver a Dazai. - ¿me llamo?

― Akutagawa. ¿Qué le hiciste al chico tigre?

― ¿Jinko? Nada, no lo eh visto

― Sigue molesto desde ese día

― ¿en serio? Pues ¿Qué le hizo?

― No le hice nada. ¿tú que le hiciste?

― ¡No le hice nada!

― Esto está mal, pero – miro a Akutagawa – ve tu a arreglarlo

― ¿yo por qué?

― Porque yo ya hice de todo y nada. Además, es una orden

― Bien. Iré.

Akutagawa dio media vuelta – si lo buscas podrás encontrarlo entre los pasillos del centro, le gusta ir por creppas a la hora de la comida – Akutagawa finalizo su salida. Chuuya lo miro

― Debe alimentarse mejor

― Debería

El mafioso iba molesto por los pasadizos de la mafia, tenía que retrasar todo por el albino, ¿Qué había pasado que todo giraba en torno a aquel chico tigre? Llego al centro donde identificarlo no fue difícil, iba caminando efectivamente con una creppa. Jamás dudaría de los pronósticos de Dazai. Miro como el cinturón del chico se movía como si fuese una cola - ¿es un gato o qué? – Pensó un momento – sí, es un felino. – Lo siguió algunas calles entre callejones hasta que logro adelantarse – Jinko – le llamo desde el callejón.

Atsushi lo miro, se quedó sorprendido y confundido - ¿Akutagawa?

― Ven aquí gato inútil

― N-no me digas gato. – Atsushi se acercó al azabache quien se ocultaba en el callejón

― ¿Qué te ocurre?

― ¿eh?

― Te vez muy contento

― Es-estaba pensando – menciono mirando a otro lado

― Bien, ¿tienes tiempo?

― Debo... Re-regresar a la agencia

― ¿y si te escapas?

― ¿eh?

El mafioso tomo la muñeca del agente apartándolo del lugar, Atsushi se ruborizo al ver al mafioso correr delante suyo, sonrió y lo siguió. Corrieron hasta el final del callejón, Akutagawa llamo a Rashomon y atrajo al albino con él, subieron el edificio a gran velocidad. Llegando a lo alto de la torre más alta de Yokohama.

Podía ver la ciudad entera, la brisa acariciaba su piel suavemente, su cabello se movía con algunos hilos revueltos en su cabello, uso su mano derecha para sostenerlos y lo miro, la silueta oscura de su mayor enemigo frente a él, tranquilo, armonioso. Akutagawa giro ligeramente la cabeza dejando ver su rostro relajado y una tenue sonrisa. Atsushi se ruborizo. – este es mi lugar favorito, es relajante. Vengo seguido últimamente

― ¿po-por qué me has traído?

― Creí que sería bueno para ti

Atsushi se sonrojo aún más, sonrió cálidamente – gra-gracias...

Ambos chicos se sentaron al borde del edificio, disfrutaron de hablar por horas, y después disfrutaron del atardecer, Atsushi sentía que su pecho estallaría, se encontraba alegre. Akutagawa por su lado estaba tranquilo, no podía dejar de ver al albino. Había sido una buena reunión - ¿te llevo a casa? – pregunto el mafioso y el albino una vez más se coloro en tono rojo.

― N-no es necesario...

― Te llevaré, quiero asegurarme que no estas molesto

― ¿molesto?

― Dazai-san llego diciendo

― ¿Da-Dazai-san?

― Si, Dazai-san

― ¿hi-hiciste todo esto por Dazai-san?

― ¿Por qué otra cosa lo haría?

Atsushi se levantó, el mafioso lo miro - ¿A dónde vas? – Pregunto levantándose – te dije que te llevaría a casa

― No iré a casa, déjame solo.

Atsushi uso sus piernas de tigre, bajo por el edificio, el mafioso esta vez no entiendo realmente que ocurría. Jamás espero que lo peor estaría por pasar pronto.

Desde ese día, Atsushi miraba mal a Dazai, pasaba tiempo con Poe, el amigo de Ranpo. Y aun así Ranpo decidió no hablar, la agencia miraba extraño que solamente estuviera enojado con Dazai, no hablaba ni se le acercaba, al contrario. Lo ignoraba

Dazai volvió a infiltrarse en la mafia, necesitaba resolver lo ocurrido, Atsushi llevaba una semana sin dirigirle la palabra. – Entonces... ¿en verdad no te habla?

― ¿Qué paso? – pregunto molesto Dazai

― Dazai-san todo fue bien, Jinko estaba bien. Ofrecí llevarlo a su casa

― ¿y entonces?

― En cuanto mencione a Dazai-san se volvió a molestar

― Akutagawa

― ¿si Dazai-san?

― ¿Qué sientes por Atsushi-kun?

― ¿Qué? ¿perdón?

― Tus sentimientos, vamos no soy tonto

― Yo... mmm... te-tengo un conflicto con ellos. Lo manejaré

― Tu conflicto se llama amor – dijo serio Dazai – y el de Atsushi-kun se llaman celos

― ¿esta celoso?

― Solo hablas de mi

― Lo entiendo, yo lo estuve. Quise acabar con Atsushi en cuanto este cretino se dejó capturar por él – confirmo Chuuya. – ustedes no han hablado de sus sentimientos

― U-un momento, dicen... ¿soy correspondido?

Dazai y Chuuya sonrieron, Akutagawa se ruborizo. Quizá no era tan malo eso.

Después de su gran conversación con los mayores, Dazai decidió quedarse con Chuuya, Akutagawa volvería a casa, quien sabe quizá y buscaría una manera de estar con el albino, caminaba entre los compartimentos del puerto, sus manos iban en sus bolsillos, no podía sacarse al albino de la cabeza, su distracción lo llevo a perder la conciencia después de un golpe en la cabeza.

Akutagawa despertó tiempo después, sentía su cabeza como si fuese a estallar, su vista nublosa, y claro, sus manos atadas sin dejarle moverse, miran mejor y pudo notar que estaba mojado, su abrigo no estaba, pero eso no lo retendría. – Rashomon – desafortunadamente para el mafioso, su habilidad no apareció. Su voz gruesa hizo que un bulto se moviera entre la oscuridad

― Al fin despiertas – dijo una voz soñolienta pero el mafioso la conocía bien

― ¿Jinko? – pregunto mirando al albino acercarse mientras bostezaba

― Akutagawa – le llamo cálido mientras movía el cabello del mafioso - ¿Cómo estás?

― ¿Qué haces? ¿Qué hacemos aquí? ¿el enemigo?

― ¿enemigo? No hay

― Pero

― Yo use eso – menciono señalando una cadena – las esposas son anti habilidad – menciono sonriente – trabaje muy duro para capturarte

― ¿Jinko?

Atsushi tomo las mejillas del mafioso y junto sus frente – ahora no habrá ningún obstáculo, podrás ser siempre mío, Akutagawa

Le mafioso trago saliva, realmente... ¿Qué le pasaba al chico tigre de la agencia? Akutagawa miro de mejor forma a Atsushi, sus ojos estaban en un morado oscuro completamente, no podía usar su habilidad, no sabía dónde estaban, el tierno tigre de la agencia. ¿Realmente lo había secuestrado?

Por otro lado, Chuuya descansaba en el sillón de su oficina mientras Dazai arreglaba sus vendas, su teléfono sonó, extrañado de ello, contesto

[- ¿Gin? ¿Qué ocurre?]

[- Mi hermano no contesta el teléfono, dijo que hoy vendría]

[- En efecto, salió de aquí hace horas. Bien, yo lo busco]

― Akutagawa está desaparecido.

― Eso escuche – Dazai suspiro – espero que no sea lo que creo

― Mandaré a mis hombres a buscarlo

― Está bien, volveré a la zona de departamentos, veré si encuentro alguna respuesta

― ¿Qué dices?

― Pienso que... Atsushi-kun está detrás de esto

― ¿estás loco?

― Espero estarlo.

Dazai se colocó su camisa, tomo su saco – nos vemos, Chuuya

― Nos vemos, bastardo

Dazai camino a los departamentos, se acercó hasta el departamento de los chicos, suspiro profundo, toco y quien le abrió fue nada más que Atsushi – Dazai-san ¿Qué hace aquí? – pregunto el albino

― Ah... - suspiro aliviado – nada Atsushi-kun quería... - Atsushi suspiro mirando de lado - ¿sigues molesto? – pregunto directo

― No estoy molesto. Solo cansado, quiero ir a dormir

― Comprendo. ¿está Izumi-kun?

― Si, - Atsushi miro dentro de la casa – Kyouka-chan, Dazai-san te busca

El albino se apartó de la puerta, se había ido a la cocina, Kyouka se acercó al castaño – Kyouka-chan ¿podemos hablar? Es algo sobre tu katana

― Claro – Kyouka no era tonta, conocía los códigos de la mafia, siguió al castaño fue del departamento y más allá, no olvidaría que Atsushi tenía un oído de tigre - ¿Por qué vamos tan lejos?

― ¿Atsushi-kun estuvo en la casa?

― El ha estado todo el tiempo conmigo

― Bien, iré a dormir. Gracias por seguirme

― Dazai-san

― ¿sí?

― ¿Qué está ocurriendo?

― Nada importante, solo quiero llegar a resolver el problema con Atsushi 

...

Bien he recibido muchos mensajes y dudas sobre este fanfic, y algunas cosas no las puedo decir, sería spoiler. 

Si, está historia muestra un lado de Atsushi que aunque sale en bsd es muy baja. Atsushi realmente se molesta cuando la injusticia llega y se puede ver verdaderamente furioso... Simplemente pensé ¿que pasaría si eso le pasará con sus sentimientos de amor?

Así nació esto

¡Gracias por leer!