𝐋𝐎𝐕𝐄 𝐆𝐑𝐎𝐖𝐒
꒰ ۫₊˚ɞ chapter seventeen .˚ׅ🏹 ຊ ҂
❝ walk with us ❞

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Todo era una maldita masacre, entre caminantes y susurradores, hasta ahora solo había logrado ver caminantes, manteniéndome a una buena distancia. Fruncí mi ceño cuando terminé bañada en una clase de líquido.

Levantando la mirada, visualicé a uno de los nuestros quemarse vivo y entendí el olor de lo que estaba llena.

—¡Es como gasolina!— exclamé, percatándome que el líquido era la gasolina.

—¡Retrocedan, vamos!— indicó Daryl, cuando la malla de madera, comenzó a caerse debido a la cantidad de caminantes.

Obedecí, siguiendo a Aarón de vuelta y cuidando a Lydia con la mirada.

Corrí entre todas las personas cuando miles de flechas con fuego atacaron nuestra única entrada a Hilltop, aunque, de alguna manera logramos escabullirnos entre tanto fuego.

Los gritos y los gemidos de los caminantes era lo que me rodeaba desde donde estaba, disparando flechas, sin importarme si era caminante o susurrador.

Sentí como mi arco era arrebatado, parte de mi mejilla ser cortada con un cuchillo. Miré al susurrador que me atacaba, sacando el cuchillo de mi cinturón, logré ser más rápida y lo clave en la yugular, haciéndolo caer al suelo mientras se sostenía la garganta.

Mis movimientos se vieron interrumpidos cuando visualicé aquel sombrero de sheriff. Judith clavó su pequeña katana en aquel susurrador y su mirada se volvió a terror. Se quedó quieta en su lugar, bastante aterrada ya, corrí hasta ella para quitarle la espada y medio abrazarla.

—Está bien, cariño, está bien— le detuve, ella me miró con miedo en sus ojos.

—Era una persona— susurró bajo y asentí.

—Ya pasó, Judith— tragué en seco, acariciando su hombro y llevándola con Earl, quien llevaba ya a los demás niños.

—Los tengo— aseguró Earl.

—¿Y Alden?— le pregunté y mi miedo creció cuando no contesto —¡Earl!, ¿Dónde está? ¡Estaba contigo!

—No lo sé, le vi bajar pero no se dónde se fue.

—Iré a buscarlo, lleva a los niños al refugio, por favor— le entregue a Judith su katana, entonces me volví a ella —Protegelos, ¿Quieres?

Ella asintió, tomando a Rj de la mano. El grupo se desapareció y los perdí de vista de un momento a otro debido al humo y la cantidad de fuego que había.

Buscando a Alden desesperadamente con la mirada, caminé por todos lados en busca de él, gritando por su nombre cuando la desesperación creció aún más y el miedo aumentó, no podía perderlo, no a él.

Corrí tan rápido como mis piernas me lo permitieron, recuperando el aire, abracé al rubio en cuanto lo vi. Sé que sería algo dramática, pero realmente me había asustado y ahora me encontraba llorando en sus brazos como magdalena.

—Déjame llevarlo— pedí por tercera vez a Alden.

—Estoy bien— aseguró cansado.

—Tienes que descansar— regañe.

—Descuida, estoy bien, además tenemos que seguir— hablo —Earl y el resto ya deben haber llegado.

Refunfuñe volviendo a caminar entre él y Kelly, quien negó con la cabeza al ver la necedad de Alden.

—Hey, tranquilo— miré confundida cuando comenzó a hablarle a Adam con voz extraña —Falta poco, ¡Sí señor, uh, sí señor!

—¿Por qué no intentas hablándole normal?— le pregunto Kelly.

—Oh, le estoy hablando normal, ¿O no?— me miró y asentí con una sonrisa burlona.

—Lo más normal— aseguré, guardándome una carcajada.

—Estás poniendo voz de bebé aterrador— aseguró Kelly —A nadie le gusta escuchar esa voz, ni siquiera a los bebés.

—Quizá pueda calmarlo— hablo Mary, haciéndome detener.

—Te dije que te apartarás— sentenció Alden con voz más seria, llevándose una mala mirada de mi parte.

—Puedo ayudarte con Adam— aseguró la susurradora.

—Ah sí, como no.

—Alden, vamos— pedí nuevamente —Lo conoce.

—Lo conocía— corrigió —Hasta que lo dejó a su suerte, ¿Lo olvidas? Suficiente que la deje venir, no dejaré que toque a este niño, ¡Vete más lejos!

—Solo intenta...-

—¡Dije que te quedes callada!

—¡Alden!— grité y este me miró asustado.

Nos quedamos en un silencio, en el cual le mire a los ojos sin necesitar palabra alguna para entender su regaño.

—Solo prueba acariciándole la nuca muy suave y muy lento, háblale cerca del oído, de forma constante— indicó Mary.

Este obedeció, más los sollozos de Adam no cesaron.

—Déjame intentar— pidió Mary.

Alden me miró en forma de aprobación y yo solo asentí, cuando finalmente obedeció, Adam se quedó tan tranquilo rápidamente al tan solo tener frente a él a su tía.

—Te dije— regañe una vez que comenzaron a caminar.

—Lamentó eso— admitió, tomando mi mano y siguiendo a los demás.

Partí una mitad del pedazo de pan que Kelly me había entregado, para darle la otra mitad a Alden y sonriendo ante la escena frente a mi, Mary sostenía a su sobrino y lo arrullaba, mientras este se mantenía demasiado tranquilo, posando sus ojitos en ella con curiosidad.

—¿Cómo se llamaba?— le preguntó Alden de pronto —Tú hermana, nunca lo dijiste.

—Francis— contestó mirándonos levemente —Se llamaba Francis, y él era todo para ella.

—Y ella era todo para ti, ¿No?

Asintió ante la pregunta de Kelly, sonriendo aún más cuando Adam balbuceó mirándonos a Alden y a mi.

—Si pudiera regresar el tiempo, él debería estar aquí con ella y no conmigo.

Suspiré con pesadez, notando que mi herida en mi mejilla seguía sangrando, rompí un pedazo de tela para empezar a intentar limpiarla, por más poco higiénico que fuera.

—En marcha— indicó Mary, haciéndome mirarle confundida.

—¿Qué pasa?— le pregunté.

Ella no contestó y siguió avanzando —Ya vienen.

Los sollozos de Adam aumentaron junto con los gruñidos de los caminantes rodeándonos.

—¿Cuántas flechas te quedan?— me preguntó Kelly.

Pensé, —Solo tres, no alcanzará.

Acepté el agarre de Alden y tomé su mano para empezar a correr tras Kelly, vigilando a nuestro alrededor cuando ella y Alden intentaban abrir la puerta de una camioneta.

Cuando finalmente lo hizo, Kelly se adentró, Alden me dio el pase a mi primero y por último fue él, volviendo la mirada y esperando a que Mary se adentrará, ella me pasó a Adam en brazos.

Fruncí mi ceño cuando negó y cerró la puerta sin antes darme una última mirada.

Una vez que salimos, había sido demasiado tarde, una Mary en caminante se transportaba a pasos lentos hasta uno de los susurradores.

—Hijo de...— me detuve antes de completar mi frase.

—Pásame una flecha— pidió Alden y obedecí.

En un solo movimiento, la clavó justo en la cabeza del caminante, siendo así su sacrificio.

—¿Estás bien?— me inquirió Alden con preocupación.

Negué levemente, —No puedo creer que lo hiciera.

—¿Hablas de lo que ese tipo de hizo?

Asentí, —En parte, Mary lo hizo por Adam, se sacrificó por él y ahora ella murió.

Miré a Adam, quien dormía tranquilamente en mis brazos, mientras los otros estaban dentro de la cabaña donde nos habíamos reubicado.

Alden pasó su brazo por mis hombros, para abrazarme levemente, deje caer mi cabeza en su pecho con cansancio.

—Deja que te curen esa herida— pidió y asentí.

Me levanté, él tomó levemente mi mejilla para evitar tocar el corte y hacer que se infectara, haciéndome sonreír un poco cuando planto un beso en mi frente.

Ambos nos adentramos hasta la cabaña, llevándonos algunas miradas, me senté en el sillón en lo que Alden traía lo necesario para curar la herida.

—No está infectada— informó, en lo que revisaba la herida.

Solté un quejido cuando comenzó a intentar suturarla, sin soltar al pequeño Adam ni molestar su profundo sueño.

—Espero no deje una gran marca— me quejé.

—Aún así no podría arruinar tu hermoso rostro.

Le sonreí —Daría mas miedo.

Asintió de acuerdo, —Mucho más del que me diste cuando me regañaste en el camino.

—Te lo merecías, fuiste muy duro con ella— admití y asintió de acuerdo.

—Lo fui, pero creo que me arrepiento.

—¿Seguro que vas a a ir?

—Auch— Aarón fingió indignación cuando me acerqué a él y a Alden.

Alden rió, —Voy a estar bien, volveré rápido.

—Sano y salvo, y en una pieza— pedí, apuntándolo.

Aarón rió —Lo voy a cuidar, te lo aseguro.

—¿Mi opinión no cuenta?— inquirió Alden.

—No— ambos contestamos en unisonido.

Él refunfuñó, sonreí al abrazarlo por un buen rato, suspirando en el abrazo el cual podría ser el último.

—Hablando en serio, ten cuidado— pedí sin separarme de él.

—Tu también ten cuidado, cuida de nuestro Adam.

Asentí, limpiando una lagrima de mi rostro y separándome de Alden. Me acerqué para besar su mejilla, haciéndolo sonreír levemente, colocando su mano sobre mi cintura para dejar un largo beso en mis labios.

—Nos vemos en un rato.

Asentí viéndolo salir —En un rato.

━━━━ AUTHOR'S NOTE: buenooo, cada vez más cerca del reencuentro con Maggie y voy a llorar 😭