Cuando sientas que hasta tus apuros se vean opacados por los pensamientos de una caminata más lenta solo por esa persona, es por que caíste en el efecto amor.

-¿estarás bien?- el pelirrojo la dejo en la puerta de su casa.

-si, no te preocupes, cualquier cosa te aviso- mostró una bonita sonrisa para calmar a su amigo.

-bien, pero no te olvides de contarme si llega a pasar algo.

-claro- soltó una risilla y procedió a caminar a la puerta de su casa- hablamos luego.

-nos vemos- y así el chico se fue de aquella calle.

"¿realmente estaré bien?" fue lo que pasaba por su mente. "Aún si solo vendrá por un trabajo... No puedo evitar el sentirme nerviosa, esto, es tan complicado".

[...]

El sonido del timbre resonó por toda la casa.

-¡yo voy!- fue lo que alguien dijo para que luego la puerta se abriera revelando a aquella persona que esperaba- R-ray.

-hola Anna- saludo con ese semblante tan serio de siempre.

-hola... Ah p-pasa- logro decir, pues se había quedado viendo al chico por unos momentos.

Decidieron hacer algo no muy ostentoso, solo era una maqueta, ya que Norman y Emma harían la otra parte del proyecto, esto obviamente idea de Norman.

-aquí traje las cosas que prometí- mostró los materiales en su mochila.

-ah si, yo...- volteo a ver la mesa donde supuestamente estaba la parte que a ella le tocaba de materiales- que raro, yo recuerdo dejarlo aquí...- susurro.

-¿sucede algo?- se acercó a ella.

-¡n-no...! Ehh, bueno, creo que si- jugó con sus manos- yo deje los materiales acá, eso recuerdo, lo había dejado todo listo, pero ya no están.

-que raro... Las cosas no pueden desaparecer así de la nada- pensó un momento- bien, deberíamos buscarlo ¿la última vez que los viste fue en la mesa cierto?

-s-si- respondió.

-tal vez alguien lo habrá agarrado.

-hmm, posiblemente.

La gran búsqueda de los dichosos materiales comenzó, lastima que no los encontrarán, porque perdieron un buen tiempo buscando.

-eso es todo- dijo ella un poco deprimida, pues lo que menos quería era hacer perder el tiempo a Ray.

-no importa- y obviamente el pelinegro vio aquel semblante angelical decaído- ¿podremos conseguir algunos por acá?

-... ¡Oh, si!- su cara recobro su brillo de siempre- cerca hay una librería puedo conseguirlo.

-Bien, te acompañó.

-¿eh?- quedo confundida.

-esos materiales eran algo pesados, necesitarás ayuda- empezó a adelantarse.

-si, claro- tomó esas palabras para auto-convencerse, realmente no quería ilusionarse.

[...]

En el camino todo era silencio, pero realmente no incomodaba, Ray no era de muchas palabras y Anna agradecía internamente eso, ya que no quería mostrar lo muy nerviosa que estaba, mientras tanto con su sola compañía le bastaba para sentirse feliz, tanto así, que no se dio cuenta cuando una embobada pero tierna sonrisa apareció en sus labios.

Pero... Rayos, era tan difícil seguirle el ritmo a Ray, su caminata era más rápida que la de ella ¿o ella era lenta?

"quizás yo soy el problema... Debería intentar mantener su ritmo" claro, aceleró su caminata para alcanzarlo pero volvía a quedarse atrás y así continuamente, fue ahí que se dio cuenta que no importa cuanto lo intente volverá a ser como antes.

Y ella ya se sentía cansada de acelerar a cada rato.

-¿hmm?- mientras pensaba sintió una presencia al lado- R-ray...

-¿qué sucede?- preguntó como si nada.

-N-no, no es nada- tantas dudas se generaba ahora mismo pero.

"¿el realmente cambió su ritmo de paso por mi?" era la pregunta que predominaba en su mente.

Mientras tanto una diminuta sonrisa se formaba en la cara contraria siendo vista sólo por el brillante cielo.

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:00
No se que pensar, supongo está bien, nunca me sentí tan insegura como ahora, tan negativa, esta no soy yooo!! Ay RayAnna me haces dudar hasta de mi misma, pero te amo ❤️\(*-*)/❤️.

Espero este bien queridos lectores, disfruten.