Nunca creí que encontraría una salida

Nunca creí que escucharía los latidos de mi corazón tan fuertes

No puedo creer que haya quedado algo en mi pecho

Ya no más

Pero maldita sea
Tu hiciste que me enamorara otra vez

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Desde que despertó de su fantasía al lado de Valentino y se volvió su mejor estrella, ya no podía sentir nada, más que placer fingido al estar con cualquier otra persona, ya fuera actuando para una de sus mejores películas o solo follando con el primer tipo que se le pusiera enfrente para olvidar toda su vida de mierda.

Pero el pasar tanto tiempo en ese hotel que al principio solo se había quedado por el alquiler gratis, estaba haciendo que pasara más tiempo sobrio que ebrio y a su parecer no era tan malo estar en ese estado aunque tuviera que volver a caer en su adicción a las drogas para asi poder seguir con su grandiosa reputación.

Ser la mayor estrella porno en todo el infierno era genial o al menos lo era en un principio donde todos tenían sueños húmedos con el o se tocaban pensando en sus tetas de pelusa pero esa solo era la apariencia que tenía que dar, más alla de eso, solo se la pasaban intentando drogarlo en todos los putos bares a los que iba, ya ni siquiera se molestaba en negarse ya que era otra forma aparte de las drogas de no pensar en nada más, que en el poco placer que le darían si se comportaba y aceptaba cualquier mierda.

Sabía que de esa forma no llegaría a ninguna parte pero era su trabajo y no podía hacer nada al respecto por mucho que quisiera redimirse y dejar todo lo malo atrás era imposible cuando su alma le pertenecia a otra persona.

Antes solo pensaba en salir del trabajo e ir a emborracharse en algún bar de mala muerte para después que se lo cogieran como si no ubiera un mañana, pero ahora eso había cambiado y ya no tenía eso como motivación para salir temprano o al menos antes del amanecer, ahora solo quería salir para regresar al hotel y así poder ver a su bartender favorito.

Antes solo eran insinuaciones e insultos  pero ahora solo podía pensar en llegar para así poder desahogarse de toda su mierda y esperar el consuelo del felino, era lo que más queria cuando salía de aquel estudio.

Realmente creyó que después de todas las mentiras y engaños por parte del proxeneta, después de enamorarlo y hacer que firmara ese maldito contrato, no sentiría ni creería en nadie más pero ahora el solo pasar tiempo con el felino hacia que se le quisiera salir el corazón.

No podía creer que después de todo lo que avía pasado y en lo que se avía convertido aún tuviera sentimientos o algo parecido. Después de volverse angel dust la estrella porno, solo podía fingir todo lo que sintiera y disfrazarlo en placer e insinuaciones para así demostrar que tenía un poco de control sobre si mismo y hacerle saber a cualquiera que no se importaba una mierda y que lo único que importaba era el placer de los demás.

Eso era lo único que importaba y solo debía servir para eso. Ese era su trabajo, servir y satisfacer a cualquiera sin importar nada. Solo debía enfocarse en eso y lo sabía, sabía que no debía confiar ni enamorarse o involucrarse con alguno de sus clientes más allá de lo sexual y la depravación. Básicamente era una marioneta, un títere y una muñeca sexual que tenía que ser moldeada como quisiera su dueño.

Ni siquiera podía sentir nada cuando estaba grabando o cuando follaba con la polilla, solo fingía ese placer que se mostraba en las camaras pero después de terminar las grabaciones su rostro solo era de aburrimiento e insatisfacción.

Lo único que podia hacer para lograr esas escenas tan eróticas era disociarse e ignorar todo lo que estaba pasando para así poder conseguir un verdadero orgasmo y seguir siendo la mejor estrella.

Después de pasar tiempo con el cantinero tenía los mejores escenarios, listos para su gran actuación. Solo quisiera que fuera real y así no enloquecer al despertar de su gran alucinación, solo quería poder besarlo y que lo tocara como siempre se lo imaginaba cada que grababa, como desearía que los actores que lo cogian fueran husk y nadie mas.

Estaba seguro que cuando estaba con Valentino nunca se avía corrido de esa forma. No podía creer que después de Val en los buenos tiempos, ubiera alguien más que logrará complacerlo como quería. Aunque fuera solo una alucinación mas que tenía, gracias a eso ahora no podia dejar de pensar en como sería si fuera real.

Solo quería poder pensar en husk de esa forma y no más, solo quería que fuera uno más de sus sueños húmedos. Sabía que no podía siquiera pensar en algo más serio que eso, sabía que era imposible que lo mirara de otra forma o al menos eso queria creer pero la realidad era que cuando pensaba en el y en como lo follaria, no era duro ni doloroso como estaba acostumbrado si no que lo peor de todo, es que queria que le hiciera el maldito amor.

Solo pensaba en como lo besaría con amor, solo pensaba en como sería cuidadoso y solo pensaba en que se preocuparía por el en cada embestida por muy lenta que fuera. Y solo quería pensar en el como le diría que lo amaba cuando estuviera a punto de correrse.

Pero al final del día esas solo podían ser fantasías suyas que solo le ayudaban a tener un buen desempeño frente a la cámara. Sabía perfectamente que eso nunca podría pasar.

Y aunque no quisiera admitirlo nunca pensó que se volvería enamorar después de tanta mierda que paso por haberse enamorado de la peor persona en todo el infierno. Pero aquel gato borracho malhumorado se avía ganado su corazón sin que lo supiera.

Ahora, podía ver la sinceridad en su mirada cuando estaban juntos y no solo el veneno en el que había estado cegado por tanto tiempo. Podía ver esos ojos y saber que podia confiar en el y en el momento en el que veía su sonrisa todo el sufrimiento se terminaba.

Tantas noches que pasaba bajo la lluvia lamentándose después de drogarse se avían acabado y ahora solo abia noches de juego o películas en aquel hotel donde compartía risas y miradas con el felino.

Antes, si no moría, era por qué no podia, ni antes ni ahora puede pero de todas formas lo pensaba como si esa fuera la salida a todos y cada uno de los problemas en su vida de mierda, pero ahora husk le avía dado el valor y las esperanzas que necesitó hace mucho tiempo para enfrentarse al proxeneta y las esperanzas para poder ser una mejor persona y poder confiar en la redencion.

Antes del hotel no tenía ninguna motivación y solo pensaba en el dinero y las drogas que compraría con este, pero ahora que estaba en ese lugar, tenía un hogar, amigos que incluso podia llamar familia y una pequeña aspiración para ser mejor.

Antes solo pensaba en acabar con todo y así no tener que sufrir más de los abusos de su jefe de mierda, antes solo era un robot sin sentimientos, aspiraciones, ni motivaciones pero ahora eso avía cambiado.

Ahora no podia creer la forma en la que había cambiado tanto solo por una persona que le inspiro a querer ser mejor y así poder al menos impresionarlo o llamar su atención con su progreso. No quería decepcionar al único que le tenía esperanzas, ahora solo quería tener su aprobación para lo que fuera.

Y aunque supiera de sobra que en el infierno nunca podría encontrar el amor o algo parecido, al parecer eso ya no era tan imposible como creía, solo esperaba no volver a ser decepcionado y engañado. Solo quería poder confiar en husk sin importar nada.

Y sabía que podía hacerlo, ya no le importaba nada, más que el, ya no podía pensar en otra cosa que no fuera el. Y al parecer estaba dispuesto en volver a confiar por muy difícil que fuera lo haría sin dudarlo solo por husk.