Punk Hazard

NARRA HIKARI

Abro los ojos lentamente y los vuelvo a cerrar con dolor cuando los rayos del sol dan de lleno en mi cara.

El dolor de cabeza de la resaca es peor que cualquiera que haya tenido nunca.

Vuelvo a abrir los ojos acostumbrándome a la luz y sintiendo las martilleantes punzadas en la cabeza.

Jamás volveré a beber con Sachi y Penguin, jamás.

Esto no me pasaba cuando Ace y yo robábamos las botellas de Dadan, ¿cuánto habré bebido anoche?

No recuerdo nada.

Entierro la cara en mis manos y aprieto mi frente y mis ojos con fuerza en un intento de calmar el dolor.

Oigo el chirrido de la puerta al abrirse y veo a Bepo con una bandeja en sus manos.

-Buenos días Hikari-chan, creía que estarías dormida- me saluda- El capitán me ha mandado a traerte esto para la resaca.

-Muchas gracias Bepo, realmente anoche me pasé con la bebida- río un poco y me quejo por una fuerte punzada- No recuerdo nada, ¿no hice nada estúpido verdad?

-No lo sé, yo me quedé dormido cuando tú aún no estabas borracha.

-Oh cielos, tengo un mal presentimiento- murmuro cogiendo la taza que me había traído Bepo.

-Si tienes dudas puedes preguntarle al capitán, abrí los ojos unos segundos para ver cómo te traía a tu habitación.

-Mierda, seguro que he hecho algo- golpeo mi cabeza en la mesa totalmente avergonzada, no sé el qué, pero sé que hice algo malo.

-El capitán quiere que estés lista al medio día para partir a Punk Hazard, te dejo que descanses un poco.

Bepo se marcha y me deja con mi taza de remedio para el dolor de cabeza especial de Law, que sabe horrible.

Ya sé por qué me emborraché tan rápido, desde que Ace se fue para ser pirata no he bebido tanto porque a Luffy no le gusta mucho el alcohol y era con Ace con quien hacía concursos para ver quién aguantaba más.

Pero el remedio es realmente efectivo, aunque sepa como si hubieran mezclado vómito y tocino de monstruo marino crudo.

Termino la bebida haciendo una mueca de asco al final y me levanto para tomarme una ducha antes de empezar a ordenar la maleta.

Decido no ponerme el mono de la tripulación y agarro un cojunto cálido, porque según Law vamos a ir a una zona helada, aunque lo que veamos desde aquí sea una zona calurosa con volcanes.

Alguien llama a la puerta y termino de colocarme el jersey para decirle que pase.

Law entra con una ropa totalmente diferente a la que suele usar, con un gorro de igual color pero de diferente forma y una gabardina, y su kikoku en la mano.

-¿Y ese cambio?- porque encima se ha dejado la perilla de unos días y se ve tremendamente guapo.

Se encoje de hombros con una sonrisa y se sienta en mi cama observándome sacar la ropa del armario.

-Te venía a avisar de una persona con la que habitaremos en Punk Hazard- habla.

-Creía que nadie podía entrar en esa isla- frunzo el ceño prestándole atención.

-Esa persona lleva ahí unos años, es un científico loco.

-¿Vegapunk?- pregunto extrañada, la última vez que supe de él estaba trabajando con el gobierno.

-No, Vegapunk no está tan loco como este, Caesar Clown. Es peligroso, y está creando una sustancia llamada SAD para producir Frutas del Diablo Artificiales de tipo zoan, con las que la persona que le está protegiendo está comercializando.

-¿Y quién es esa persona?

Law parece pensar unos segundos, pero finalmente responde.

-Uno de los Shichibukai.

-Law, tienes que contarme tu plan, tengo que saber por qué tenemos que separarnos de los demás, tengo que saber en qué me estoy metiendo- estoy harta de secretismos, si somos nakamas debería confiar en mí.

-Aún estás a tiempo de quedarte, ¿sabes?- le lanzo una mirada fulminante y levanta las manos- Está bien, está bien, te lo explicaré. Vamos allí para destruir SAD y para secuestrar a Caesar, pero primero debemos ganarnos su confianza, por eso estaremos un tiempo allí, y quiero investigar un poco también.

Asiento, aún tengo muchas preguntas, pero no voy a hacerlas.

-¿No vas a preguntar nada más?- pregunta con una sonrisa ladina.

-Sí, solo una cosa más, a parte de darte las gracias por el asqueroso brebaje de esta mañana- suelta una corta risa- Sé que hice algo malo anoche, pero no sé qué es, y Bepo me dijo que me trajiste a mi habitación, ¿no hice ninguna estupidez ni nada parecido no?

-No, claro que no, estabas dormida.

Suelto un suspiro de alivio y Law se marcha de mi habitación para que pueda seguir haciendo la maleta.

*****

Me reuno con el resto en la cubierta, mirando hacia la isla a la cual nos acercamos cada vez más, aumentando la temperatura.

Me quito el jersey quedando en bikini, después cuando estemos en la parte fría me lo pondré.

Mi emoción aumenta, pero a la vez estoy triste por separarme de mis nakamas por tanto tiempo.

Nuestros nakamas también están tristes a nuestro lado.

-Hikari, es la hora- dice Law.

Abrazo a Bepo que me aprieta fuerte en un cálido abrazo y sonrío contra su ropa.

-¡Hikari-chan nosotros también te vamos a extrañar!- gritan Sachi y Penguin abrazándose a mis piernas, y río abrazando a cada uno.

Me despido también de los demás y veo cómo se despiden de Law, que aunque muestre seriedad sé que por dentro también está triste.

Me cuelgo mi espada en la espalda, le doy la mano a Law y cojo mi maleta con la otra.

Lanzo una última sonrisa a los chicos antes de desaparecer junto a Law, aterrizando en el otro lado de la isla, en la mitad de hielo y nieve.

*****

Los subordinados de Caesar no se han tomado muy bien que llegáramos sin previo aviso, pero Caesar los calmó y nos recibió en privado.

No estoy muy cómoda en su presencia, realmente parece que está loco, su risa es muy extraña y la mujer de pelo verde que le acompaña sentada en el escritorio escribiendo me da mala espina.

-¿Qué te trae por aquí, Shichibukai Trafalgar Law?- pregunta con esa voz de pito que me produce escalofríos.

-Necesito unas vacaciones- responde mi capitán sonriendo burlonamente.

-¿Y quieres usar esta isla prohibida para eso?

-También es prohibida para ti.

-Shurororororo, me gustas, Trafalgal Law, te dejaré estar aquí- sonrío mentalmente- A cambio de eso, le darás piernas a mis subordinados. Y preséntame a tu bella acompañante.

-Ella es mi nakama, Hikari.

-Hikari-chan, espero que te sientas cómoda aquí, y lo siento por lo que voy a solicitar ahora- yo sonrío falsamente y asiento, en silencio como me dijo Law que estuviera, por una vez le obedeceré.

Aparta la mirada de mí y se vuelve a centrar en Law.

-¡Soy más fuerte que tú! ¡Soy el jefe de esta isla! Si quieres quedarte aquí, tendré que hacerte más débil- dice Caesar.

-No tengo planeado causar daño, ¿qué quieres que haga?- pregunta Law calmado.

-¡Hagamos esto, Trafalgar Law...! Quiero que guardes el corazón de mi querida secretaria Monet... ¿Está bien, Monet?

Así que se llama Monet, sonrío ante la petición.

-Sí, está bien- responde segura.

-A cambio... ¡debes darme el corazón de tu acompañante! No me preocupa ella, pero si tengo su corazón me será más fácil asegurarme de que no hagas nada extraño, ¡y puedo estar a salvo!

Mi sonrisa flaquea por eso último, ¿cómo es que no le preocupo? ¿Qué les pasa a los hombres con subestimarme tanto?

-No, si quieres quedarte con algún corazón toma el mío, pero no el de ella- replica Law.

-Qué lástima, no me interesa el tuyo.

-Law, no me importa, por favor acepta sus condiciones- le susurro.

-Eso sería ponerte en peligro.

-Oh, pero por supuesto que no, ya he dicho que espero que se sienta cómoda aquí, por supuesto que la dejaré ir a sus anchas por la isla, ¿quieres quedarte en Punk Hazard?- pregunta Caesar.

-Me costó mucho trabajo llegar a una isla que no es detectada por un log. Viendo que es un antiguo centro de investigación del gobierno...

-Entonces solo quiero dos cosas, que me seas útil y el corazón de Hikari-chan.

Suspira resignado cuando le doy un pellizco en el brazo.

-Si podemos ir libremente por la isla y por el centro, entonces estará bien, te seré lo más útil que pueda, no nos haremos preguntas aburridas, por supuesto no le dirás a nadie que estoy aquí, eso incluye a Joker- avisa Law.

¿Quién es Joker?

-Así que lo sabes todo... ¿cómo has podido saber eso?

-¿Tendrías a un amateur aquí que no sabe nada?

-¡Shurororororo! Ya veo, somos del mismo tipo. No puedo confiar en ti, pero no creo que me haga nada mal todo esto, ¿verdad, Monet?

-Del North Blue, El Cirujano de la Muerte, habilidad: Ope Ope No Mi. Así que un doctor- sonríe en su dirección, ¿es cosa mía o está coqueteando con él?- Estas islas tienen muchos prisioneros antiguos que quizá han sido envenenados por el gas. ¿Puedes curarles?

-He dicho que voy a seros de utilidad, solo decidme lo que tengo que hacer.

-Intercambiemos corazones- dice Caesar.

Law se levanta y va hacia Monet, quien no quita la sonrisa coqueta de su cara.

No, definitivamente no me voy a llevar bien con ella.

Law utiliza la técnica que nunca le he visto hacer y en cuestión de milisegundos tiene el corazón de la secretaria en sus manos.

Luego se gira y camina en mi dirección, inseguro.

Le sonrío para relajarlo y extiende su mano.

Siento un vacío en mi pecho, y mi corazón está en manos de Caesar.

-Muy bien, espero que nos llevemos bien Hikari-chan, y que esto no haga que sientas rencor hacia mí- sonríe Caesar.

-Por supuesto- muestro otra sonrisa falsa.

-Monet, llévales a una habitación alejada, supongo que la pareja querrá intimidad.

¿Qué? Voy a abrir la boca para replicar pero recuerdo ante quién estamos y que si queremos completar el plan de Law no debo replicar nada de lo que diga Caesar.

Law y yo seguimos a Monet con nuestras maletas por un largo pasillo.

Algo me dice que estas no van a ser precisamente unas vacaciones placenteras.

*****

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top