Finalmente había caído la noche, eran alrededor de las 10 pm. Con la llegada del final de la guerra la mayoría de los soldados se habían retirado de la base habiendo solo pocos en esta, solo terminaban sus últimos pendientes para por fin regresar a sus casas y con sus familias. Por la ausencia de soldados la base se encontraba casi a oscuras habiendo una que otra luz prendida ya que no era veían necesario tener tanta luz, se podía ver qué casi estaba abandonado el lugar.

Esto era una de las tantas cosas que Tim había descubierto y que le facilitaría el escape, no había mejor noche que esa para que pudiera salir de ahí. Sin pensarlo más esa sería la noche en la que escaparía de aquel lugar.

Se encontraba en su habitación, esperando solo la hora exacta para escapar, estaba en su cama sentando abrazando el casco de su pareja fallecida y el peluche que Steve le había obsequiado, solo esperaba que el reloj marcará las 10:30 pm para empezar su huida, en todos esos días que investigo supo que en esa hora gran parte de los pocos soldados que habían ahí iban a sus habitaciones a descansar.

Pasando el tiempo el reloj por fin marco la hora que tanto esperaba, inmediatamente se levantó de su cama y se dirigió a la puerta, estando apunto de abrirla se detuvo retrocediendo, está acción se debía a qué tenía miedo de ser descubierto y el sabía que si esto pasaba era una muerte segura, pero al final... Todo era por encontrar a su pareja, no era seguro que siguiera vivo pero el aún no perdía las esperanzas. De un momento a otro se fue ese miedo que tanto tenía colocándose el casco de su pareja y llevando aun a la mano el animal de felpa.

Sabía que pasando esa puerta no había marcha atrás pero estaba más que seguro de ir por su capitán y si era atrapado, al menos hizo el intento... Coloco la mano en la manija de la puerta abriéndola, miro a todos lados para asegurarse que no hubiera nadie. Comprobando esto salió de la habitación empezando a caminar por aquel largo y oscuro pasillo.

Para su suerte todo el lugar completamente a oscuras y desolado, todo el camino estuvo así hasta que no tardó mucho en llegar a la puerta que separaba la enfermería de la gran base, podía salir por la entrada o la puerta trasera del hospital pero el comprobó que estás dos puertas del hospital abría gente seguro a todas horas, por lo que su plan era entrar a la base saliendo luego de está por la parte trasera donde había menos vigilancia y saltando la cerca.

Abrió está puerta entrando volviendo a caminar por otro largo pasillo, en esa base eran puros pasillos llenos de puertas, caminaba con sumo cuidado y cada paso lo hacía lento para no ser oído.

Duro caminando un rato por esos pasillos oscuros, si encontró uno que otro soldado pero fue a distancia además que estos no se dieron cuentan de su presencia y fue fácil pasar de largo por ellos, aunque al ver a estos soldados se puso muy nervioso dándole casi un ataque de pánico, aunque fuera fácil pasar por alto a ellos no podía sentir miedo por cualquier mínimo error fuera detectado.

Llegó a un pasillo que ya era de los últimos, al final de este había una puerta que lo llevaría a una habitación que en esta se encontraba la puerta de la salida, pero en estos últimos pasillos se encontraban las oficinas y era seguro que habría actividad aquí.

Estaba tan cerca, podía sentir la libertad casi en sus manos. Pero logro ver a lo lejos una puerta medio abierta con la luz prendida, era la única luz que había en todo ese oscuro pasillo, era obvio que habría gente adentró, tenía que pasar a fuerzas esa oficina para poder seguir su camino y llegar a la salida. Se detuvo un poco estando solo a unos pocos metros de está puerta, ya que estaba teniendo un ataque de pánico y miedo, tenía la libertad tan cerca pero esto podría arruinar todo por lo que había planeado por días.

Continuó con su camino, mientras más se acercaba escuchaba dos voces que provenían de esta oficina, le eran tan familiares... Acercándose cada vez más hasta tal punto que estaba ya justo en la entrada se agachó asomándose para lograr ver quienes eran. En esta oficina se encontraban John y Steve, era su oficina. Al verlos su corazón se aceleró por completo llenándose de un fuerte miedo, se escondió detrás de la puerta medio abierta estando sentando en el suelo tratando de tranquilizarse, afortunadamente no lo habían visto.

John y Steve se encontraban en la oficina, el capitán estaba en su escritorio revisando el papeleo mientras Steve estaba en el sillón que tenía enfrente revisando igual unos papeles, se veían muy concentrados en su trabajo que nisiquiera notaron que Tim se asomo muy ligeramente para verlos.

Tim, temeroso volvio asomarse por el pequeño hueco de la puerta medio abierta, era arriesgado pero tenía que hacerlo para ver en qué momento se descuidaban para poder pasar sin ser visto.

– Estando en el sillón, Steve volteo a ver de reojo a John notando que estaba estresado soltando solo una pequeña risa —.

– La acción de su pareja le llamo la atención volteandolo a ver confuso — Hice algo?.

– Jeje nada cariño, solo que... Creo que necesitas relajarte un poco. — comento esto último teniendo una mirada coqueta y juguetona cruzando la pierna —.

– Honey... Ahora no.

– Oh honey, ahora sí. — Se levantó del sillón acercándose a él estando frente a frente a el agarrandolo de la corbata jalandolo hacia el aún con esa mirada traviesa — Tu sabes que lo necesitas, porque finjes?.

– Steve... Alguien nos puede ver. — dijo con un ligero sonrojo en sus mejillas desviando la mirada estando entre molesto y avergonzando —.

– Entonces algo rápido, te parece?.

Al escuchar estás palabras John miro a su pareja sin ninguna expresión en su rostro estando solo serio, se levantó del escritorio y lo cargo hacia el sillón acostandolo aquí para luego encimarse arriba de este.

– ¿Lo ves? En el fondo lo quieres... Lo deseas~. — menciono Steve con un ligero sonrojo en sus mejillas teniendo una mirada juguetona y traviesa a la vez como si lo estuviera provocando —.

– Solo será algo rápido, aún tengo mucho trabajo por hacer.

– De acuerdo, verá que no lo voy a decepcionar.

No era el mejor momento para espiar alguien, pensó Tim que los veía todo rojo y avergonzando, era un momento super incómodo pero era perfecto para poder pasar sin ser visto. Con mucho cuidado se levantó del suelo caminando con mucho sigilo y cuidado si ser visto, logro pasar por la oficina para luego escuchar un grito de placer de parte de Steve pidiendo más poniéndose todavía más rojo de le vergüenza, dios... Después de esto ya no veía igual a ese chico.

Pero viendo el lado bueno... Estaba más cerca de la salida, no es así?.

Solo siguió caminando hasta entrar a una habitación, estaba llena de cajas y varia chatarra, entre otras cosas, al otro lado se encontraba la puerta de la salida, por fin, la libertad la tenía a solo unos metros. Fue corriendo hacia está de la emoción abriéndola para luego salir de está.

La parte mas difícil había pasado ahora solo le faltaría pasar la gran cerca. Todo lo demás ya no le resultaba tan complicado ya que para el lo difícil era no ser visto por un soldado dento de la base, afuera de está estaba completamente solo, no se veía a nadie más.

Por fin podría volver a ver a su capitán, ahora solo una cerca lo reparaba de la libertad, que era lo peor que podría pasar?. Nada podría arruinarle este momento.

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Bye gente bonita, gracias por haber leído:3 💕
En las siguientes ahora sí se viene lo chido, a torturar personajes, osiosi.