Luzu no habló más, solo abrazó otra vez a Auron al verle así. Le dolía tanto verlo llorar.

-Lo sé. Se que duele...- Susurró a su oído.

-¿Porqué?...Yo... No recuerdo nada.-

-Te ayudaré a recordarlo todo... Solo... No te vuelvas a apartar de mí.-

Auron, quien seguía perdido sobre lo que pasaba, por más que aquel desconocido lo abrazaba, no tenia interés en separarlo.

Por alguna razón, se sentía tan feliz en sus brazos.

Sin embargo no podía mantenerlo aprisionado todo el rato, necesitaba también dejarlo respirar, por lo que Luzu volvió a soltarlo y tomó asiento a su lado, tomando sus manos mientras lo miraba.

-Parece que ya lo sabias de alguna manera pero... Soy Luzu. Realmente no sé como describirme... Pero tengo un cerdo llamado Manolo y alguna vez traté de ser alcalde.-

-Lo siento, Luzu. Se que querías que votara por ti, pero...-

-De verdad pensé que estarías de mi lado.-

-La alcaldía te haría mal, no quería que dejaras de ser tú.-

-Ahórrate las disculpas. Solo eres una zorra traicionera, Auron.-

Un dolor vino a la cabeza de Auron, quien comenzaba a tener recuerdos borrosos, dolía recordar, volver a revivir y no entender.

-¿Estás bien?-Preguntó preocupado Luzu al ver como hacia un gesto de dolor.

-Tú... ¿Quién eres para mi?...-

-Oh, sí. Creo que... No lo había mencionado antes... Soy tu pareja.-

-¡Auron!-

-¿Qué pasa, mi niño?-Preguntó Auron, quien luego de pasar una tarde con Luzu , ya se iba de camino a casa pero se detuvo.

-Yo... quería decirte algo.-

-Anda, dime.-

-Me gustas. De verdad me gustas, demasiado. Yo... Realmente pensé mucho como decírtelo. No puedo callar más que te amo.-

-¿De verdad?-

-Sí. La verdad es que fue hace un tiempo desde que comenzamos a salir. La verdad no sabia si decirte eso de primero...-

-De alguna manera... sentía que podía confiar en ti.-

-Me quedaré aquí contigo todos los días hasta que recuperes la memoria.-

-Gracias.-

Luzu sonrió más tranquilo.

-Oh, cierto, voy a llamar a la doctora, debe saber que ya despertaste, vuelvo en un momento.-

-Bien, parece que sus signos vitales están en perfecto estado, gracias por avisarme, Luzu.-Dijo Akira mientras terminaba de anotar un par de cosas.

-No fue nada.-Respondió Luzu.

-Antes de irme, quería hablar un poco con él... Dime, Auron, ¿Al tratar de recordar, es difícil?-

-Yo... No lo he intentado. Pero, recuerdo un poco al hablar del tema, creo...-

-Entiendo. ¿Qué recuerdas de Luzu?-

-Todo es muy borroso, pero... Recuerdo hablar con el de las votaciones y... un par de cosas más.-

-Bien. Es un buen avance. ¿Y dime... qué hay del viaje en el tiempo? ¿Recuerdas algo en el laboratorio?-

-En el... laboratorio.-

Auron había abierto los ojos, despertando de golpe. El miedo y el terror lo estaban inundando, sus emociones estaban descontroladas.

Trató de levantarse pero no pudo, estaba amarrado en una camilla, con los brazos extendidos.

Miró alrededor y no reconocía nada, pero más que preocuparle eso, comenzó a pensar en Luzu. ¿Dónde estaba? ¿Estaba bien?

-Oh, despertaste.-Dijo Doofenshmirtz.

-¿Dr.Doofenshmirtz? ¿Dónde estoy? ¿Y los demás?-

-Que molesto que eres, no esperé que despertaras tan pronto... Pero no importa.-

Doofenshmirtz agarró un trapo y lo metió a la boca del héroe.

-Yo tú, mordería eso muy bien.-

Luego de eso, agarró una sierra y se acercó devuelta a Auron. El cual, miró con miedo aquella herramienta.

-Solo... dolerá un poco. Pero tranquilo, no morirás... Eso creo. Y no me mires así. Mi plan era que seguirías inconsciente, pero no hay de otra. Solo trata de no gritar, odio el ruido.-

El dolor que vino después era insoportable.

Un dolor fuerte vino a su cabeza, haciendo que terminara agarrándosela, tratando de calmar el dolor. Varios sentimientos desagradables le llenaron.

Tenía miedo de recordar.

-Auron.- Aquella dulce voz que alejaba todos sus males. -Estoy aquí, aquí. Respira...- Le tomó las manos.

Por alguna razón, la simple presencia de Luzu era suficiente para mantenerlo calmado, como si hubiese extrañado tanto tenerlo cerca.

-¿Puede hablar de eso en otro momento? No creo que Auron pueda tolerarlo aún.- Habló Luzu.

-Entiendo... Tiene razón. Entonces... Teniendo en cuenta su situación, puede quedarse hoy, mañana en la mañana se lo puede llevar. Si llega a recordar todo y estar estable, solo venga a verme. Esto de la... Amnesia, suele durar un poco más de tiempo, así que no se asuste.-

-Entiendo.-

-Entonces me retiro.-

Luego de que Akira los dejara solos, hablaron un tiempo más hasta que cayó la noche.

Auron estaba cansado y al final terminó por dormirse pronto.

Luzu se quedó a verle, de verdad amaba verlo tan calmado. Amaba apreciarlo.

De verdad lo había extrañado demasiado, y estaba agradecido con que estuviera en una pieza.

Acarició su cabello con delicadeza. Como había extrañado tanto sentirlo tan cerca y bajo su cuidado.

-Te amo, Auron.- Susurró. -Tomate el tiempo que quieras, pero vuelve a mí.-