Progresando

Un mes después.

«Hogar dulce hogar que lindo es volver a tu casa después de un mes»

Le llega una notificación.

—Hola Laura ¿Cómo te fue en el evento?

— Hola Beth ¡me fue muy bien! y mí jefe me dio un cargo mayor osea el de subjefa.

—¡Qué bueno lau te re felicito!

—Y ¿Cómo te fue en la boda?

—¡Muy bien, fue hermoso! vos ya sabes que no soy de ponerme emotiva con los eventos pero este me hizo llorar jajajaja.

—¿A que no sabes que?

—¿Qué?

—Hoy me voy de fiesta.

—¡Qué bueno!

Alguien toca la puerta.

—¿Quién es?

—Yo,Esteban.

—Ahí voy.

—Beth te dejo porque vino alguien.

—Apuesto que es Esteban.

—Le acertaste después hablamos.

—Dale después hablamos besos.

Laura abre la puerta y recibe un cálido abrazo de Esteban.

—¡Hola! ¿Cómo estás?

—¡¡Bien por suerte!!

—¿Y contame que pasó? ¿Tu jefe que te dijo?

—Al final me dijo que si y me dio el cargo de subjefa

—¿Vos que hiciste en este mes?

—Vi a mis padres  pero les dije que no me iba a ir hasta Nueva York así que no me quedó otra opción y tuve que decirles que vinieran acá, fue un poco insoportable tenerlos en casa pero me gustó estar cerca de ellos.

—Que bueno que hayas podido ver a tus papás me alegro mucho.

—¿Te parece si vamos a mí casa a tomar mates?

—¿Te puedo hacer una pregunta?

—¡Si decime!

—Hoy tengo que ir a comprar porque tengo planeado salir de fiesta y quería saber si me querías acompañar.

—A comprar o de fiesta.

—A comprar y si queres ir de fiesta también.

—Bueno dale.

Luego de una merienda llena de coqueteos e insinuaciones de parte de Laura, ellos se dirigen a una tienda de ropa dónde Laura se encuentra con su amiga Veronica.

—¡Veronica!

—porque gritas Laura me vas a matar.

—Discúlpame te vi tan distraída que no me aguante jajajaja.

—Cómo estás.

—Bien Laura bastante bien.

—Que bueno Vero me alegra mucho que estés bien.

—¿Y qué te trae por acá lau?

—El vestido que está en la vidriera me trae por acá Vero.

—Madre mía Laura ¿Que te vas de fiesta?

—¡Sí para celebrar el ascenso que me dieron!

—¿El bombón que está con vos quien es?

—El es Esteban.

Laura entra al probador.

—Pss.

—Psss.

—¿Me querés decir algo?

—¿Estás saliendo con Laura?

—Me gusta pero no sé cómo decírselo.

—Deciselo de una sin mucha vuelta es simple pero si lo vas a hacer hazlo con sutileza.

—Igual creo que le gustó.

—¿Y qué es lo que te lleva a pensar eso?

—Hoy por la tarde estuvo en mí casa y me tiró onda todo el tiempo.

—¿Cómo me queda?

—Te queda estupendo amiga.

—Bueno ahí me cambió y me pones el vestido en una bolsa.

—Bueno ahí tienes un punto a favor.

—Vos decís.

—Haceme caso y decile todo.

—¿De qué hablan ustedes?

—De nada amiga.

—Bueno Vero nos vamos chau.

—Tía que te vas sin pagar.

—Cierto , tenés razón , toma la plata, cobrate lo del vestido y quédate con el cambio.

—Buena onda tu amiga.

—Si es divertida.

—Bueno vamos a tu casa, te cambias yo me voy a la mía , me cambio y te paso a buscar ¿Te parece?

—Bueno dale.

—Dale, yo te paso a buscar.

Un rato más tarde laura estaba desesperada por qué no se podía hacer ni un delineado de los nervios que tenía

—Beth necesito que me ayudes.

—Ya se no me digas nada, necesitas que te maquille y te peine.

—Si porfa.

—Dale ya voy.

De pronto Bethanya sale del baño y asusta a Laura.

—¡Bethanya! ¿Qué haces acá y cómo entraste?

Bethanya le muestra unas llaves.
Laura queda atónita.

—¿Qué es eso?

—Tus llaves pelotuda.

—¿Cuando las hiciste?

—Esa vez que te agarró un ataque de pánico,no me podías abrir la puerta y tuve que entrar a tu casa por el balcón

—Ah ya me acordé, bueno me ayudas.

—¿Querés un mate?

—Hasta el mate te preparaste yegua.

—Si.

—Haber Laurita ¿Que es lo que querés?

—Haceme un delineado que llame la  pero no mucho , los labios bordo , la sombra de color rojo oscuro y el peinado quiero que sea una
trenza cocida.

—¿Querés que te vista también?

—Jaja que chistosa

Un rato más tarde.

—Listo ya tengo el makeup ahora me voy a cambiar y vuelvo.

—Dale.

—Listo me voy a poner este vestido plateado con unos tacones negros y me llevo este bolso de mano.

—Perfecto Laura estás espléndida.

—Gracias Beth, te adoro.

—Che lau tu galán vino a buscarte.

—Ya me voy Beth.
Te dejo en la heladera unos ravioles de ricota con jamón y queso si querés.

Laura baja las escaleras del edificio y se encuentra con Esteban.

—Hola Laura.

—Hola Esteban.

—Estás…

—¿Estoy que?

—¡Estás muy bonita!

—Todo se lo debo a la chica que está en la ventana.

Esteban mira la ventana y saluda.

Beth le devuelve el saludo.

—Vamos hasta la esquina que nos espera el auto porque me puse a pensar que si bebemos mucho no nos vamos a poder volver así que nos vamos y nos volvemos en un remis.

En el camino a la disco Esteban estuvo muy nervioso porque no sabía cómo confesarle a Laura su amor.

Esteban desciende del auto y le abre la puerta a Laura como todo caballero.

—gracias.

—Hola buenas noches su entrada por favor.

Laura muestra su tarjeta vip.

—Adelante señorita pase por favor, usted se queda en la fila.

—Viene conmigo la tarjeta es para más de una persona.

—Joder tía tienes razón pasa por favor.

—Gracias.

—Amo el ambiente de esta discoteca es la mejor vengo acá hace mucho tiempo.

—No te lo puedo negar, está muy bueno el lugar.

—Voy a la barra ¿Queres un trago?

—Martini.

—Dale.

—Hola, buenas noches.

—Hola buenas noches que va a pedir señorita.

—Dame un martini y un daikiri.

—ya se lo preparo.

—Dale gracias.

—Aquí están sus tragos que los disfrute señorita.

—Gracias.

—Acá está tu martini

—Gracias.

—Posta vos pagas veinte euros al mes por esto.

—Sí porque me gusta esta discoteca.
¿Querés un cigarrillo?

—Si porfavor.

—Voy al baño ya vuelvo.

En la salida del baño una chica se acerca a Laura para pedirle un cigarrillo.

—Hola ¿De casualidad tienes un cigarrillo?

—Hola si ya te doy uno, ¿Tenés encendedor?

—Eso es lo único que no me olvidé.

—Acá tenés.

—¡Gracias!

—Laura qué te parece si bailamos.

—Estás de suerte está canción la amo.

En ese momento estaba sonando perfect de Ed Sheeran.

Laura y Esteban comienzan a bailar sincronizando sus movimientos  como si fueran uno solo.
Era tanta la química entre ellos que Esteban no pudo más y le dio un beso a Laura.

—Discúlpame no tenía que haberlo hecho.

—No pasa nada todo bien.
Aprovechemos que la barra es libre y tomemos un par de tragos más antes de volver.

Mientras tanto en la casa de Laura.

—Que desastre que es la casa de esta mina, menos mal que estoy acá y puedo ordenar un poco.

Un rato más tarde.

Abren la puerta.

—Amiga apestas a alcohol creo que si pongo un fósforo al lado tuyo explotas jajajajajaja

—¿Y vos qué haces en mí casa?

—Vos me dijiste que me quedara.

—Ah ok me voy a acostar.

—Estás borracha.

—Sí y mucho.

—Yo estoy acá cualquier cosa.

«Esta piba esta está más borracha que mí tía en navidad jajajajajajaja»

Bethanya ve a Laura acostada temblando  y la tapa con una manta que había en el placard.