Narra Pit

Baje un poco rápido para poder alcanzar a Pitto. Aunque espero no parecer tonto por no saber nada.

Aunque no creo. Pittoo me ha hablado tanto de esta reunión y de lo que espera que creo que me la se de memoria

Solo espero no decepcionar.

Llegue a la entrada del comedor donde Dark Pit estaba esperándome.

- Ya estoy aquí .- Dije cuando estuve a su lado.

- Que bueno.- dijo Dark pit soltando un suspiro, pobrecito, debe estar nervioso - Intentaremos limar cualquier aspereza con comida. Todo el mundo esta mas feliz y relajado después de comer. Después podremos hablar...

- Si Dark Pit. Lo recuerdo bien.

- No creo que sean malas personas , deberemos poder razonar.- Dijo intentando convencerse a sí mismo.

Los dos nos pusimos nuestros antifaces y entramos rodeados de guardias.

Los del reino de la naturaleza hicieron una reverencia mientras se levantaban y yo me quedé petrificado.

¡La señorita ella era la mujer con la que estuve hace rato!

- Buenas noches su majestad.- Dijeron mientras hacían una reverencia.

-Buenas noches .- Respondimos ambos al mismo tiempo. Aunque yo de manera autómata ya que aun estaba en shock.

¿Que esta haciendo ella aquí? ¿Vino como acompañante? ¿Porque se separo de ellos en el mercado?

Mientras un montón de preguntas sin respuesta surgian en mi cabeza a la velocidad de la luz, Dark Pit seguia hablando con los invitados.

- Les agradezco de antemano el que hayan aceptado mi invitación.

- No hay nada que agradecer .- Dijo la señorita .- Y lamentamos el haber llegado sin avisar, pero queríamos sorprender para saber si no ocurría nada fuera de lo normal.

- Le aseguro mi Lady que no hay problema alguno. En un principio admito que tuvimos ciertas dificultades pero finalmente estamos sobrellevando todo.

- Eso es un gusto .- Dijo ella amablemente.

El señor alto y largo que la seguía se puso de pie y se aclaró la voz antes de hablar.

- Permítame su excelencia presentarle  a Lady Ámbar princesa heredera del reino de la naturaleza.

Ella hizo una reverencia mientras sonreía.

- Y yo soy el general Arlon guardia personal de la princesa.

Si no tuviera que mantener una cara neutral les juro que abría abierta la boca hasta el piso.

Princesa

Ella es una princesa

¡¡UNA PRINCESA!! ¡¡POR AMOR A ZEUS!!

¿Como demonios fue que ella pudo tener una simple y agradable platica conmigo que soy un plebeyo?

¡¿ESTO ES ACASO UNA JODIDA BROMA?!

¡No soy de maldecir ni en mis diálogos, pero esto lo merece!

¡¿Es que, que diablos?! ¡¿Por qué siempre acabo metido en estas cosas?!

- Entonces me presentaré a mi mismo soy el Rey Dark Pit obviamente el rey de Underworld.

- Es un gusto por fin conocerle en persona.

- Tenía entendido que negociaria con la reina.- Mencioné siguiendo nuestro disfraz.

- Le haceguro majestades que al ser la princesa heredera mi palabra pesa tanto como la de la reina.- Dijo ella firmemente.

Es que no me creo esto ...

¡¿Cómo no me di cuenta?! Ahora me siento algo idiota.

- Por favor les ruego que tomen asiento se les servirá la cena en un instante.

Dark Pit trono los dedos y los guardias se hicieron a un lado en la habitación yo por mi parte prosegui a sentarme en mi lugar como lo habíamos planeado.

¡Pero aun así! Siento que en cualquier momento me pondré a gritar como loco y a gritarle a la "princesa" que me de unas muy buenas explicaciones.

Pero no lo haré. ¡Esto es importante y necesito estar muuuy concentrado y atento! Lo haré por Dark Pit y el reino entero.

Ya después pensare en lo otro con mas calma.

Cuando trajeron la comida todos nos sumergimos en una agradable charla amena acerca del reino, los avances industriales, la vegetación etc, etc.

Honestamente ... Yo solo presto atención por qué es mi deber.

La cena parecía todo un exito hasta que me molesto un comentario por parte de el comandante.

- Y entonces su majestad es el único heredero ¿no es así?

- Si actualmente soy el único miembro de la familia real.

- Le entiendo excelencia yo y mi madre somos la única famila real.- Contesto Ámbar con empatía.

- Si pero en mi caso soy el único.- Respondí en vez de Dark Pit.

- Es demasiado joven estoy seguro de que podrá volver su familia más grande pronto.- Respondió el comandante

Mordí mi lengua fuertemente para evitar mal decir o decir algo pequeño.

Se supone que Dark Pit debe encontrar a alguna esposa y tener un heredero para que la linea de reyes continue.

Pero el saber eso no me reconforta, solo hace que mi corazón se apriete de manera dolorosa.

- A futuro.- Dijo Dark Pit con voz fría. Aunque sea con eso se que la idea tampoco es de su agrado.

Eso me hizo suspirar un tanto aliviado, no se que haría si le agradará la idea.

- Por lo que menciona parece que aún no encuentra una prometida.- Siguió el tonto del general.

- Tengo asuntos más importantes que atender en mi reino como para pensar en eso de momento.- Dije interfiriendo lo más tranquilo que pude.

- Le entiendo majestad yo también he tenido muchas cosas que atender como para pensar en matrimonio.- Volvió a responder la princesa con cierto disgusto por la palabra matrimonio.

- Me cuesta creerlo señorita usted es muy hermosa.- Dijo Dark Pit intentando pasar ya del tema y al mismo tiempo ser muy amable.

- La belleza no lo es todo ... ¿No lo cree?.

- Efectivamente pero por eso no nos conviene discutir, es estrés sin sentido.- Dije complementándo.

Pero al mirar a ver a la princesita pude ver qué jugaba con su abanico y miraba a Dark Pit de forma algo particular, y no pude evitar sentirme incómodo.

- Bueno gracias por la comida su excelencia todo a estado delicioso.- Menciono Arlon una vez terminamos el postre.

- Es un placer que fuera de su agrado.

- Deberíamos ir a hablar en el estudio ¿no les parece?

- Si .- dijo la princesa mientras se ponía de pie y al pasar al lado de Dark Pit ví que dejó caer su abanico aproposito.

Dark Pit le miró sin querer recogerlo pero ella le miraba expectante.

Hasta que suspiro y se lo dió.

No entiendo que acaba de ocurrir pero parece que ocurrió algo más que no súpe ver.

Y sea lo que sea no me gusto la mirada que ella le dio una vez tuvo su abanico en sus manos.

Después nos dirigimos todos al estudio en silencio.

Al llegar al estudio cada quien se sentó en unos lujosos sillones (que Pittoo mando a hacer hace unas semanas después de una rabieta) Para poder conversar de lo que era realmente serio en ese momento

-¿Gustan una taza de té? ¿Un café? - ofrecí de manera cordial.

- Té esta bien por favor .- Dijo el guardia y la princesa solo asintió.

Dicho esto las sirvientas corrieron a cumplir mi mandato.

Y a nosotros nos sirvieron un café.

Una vez todos tuvimos nuestra bebida Arlon hablo firmemente.

- Seremos honestos majestad nos cuesta pensar en una alianza para nuestros reinos.

- Es entendible mataron a mi padre y hemos matado a mucha de su gente, pero presisamente es lo que quiero evitar.- Dijo Dark Pit

- Entonces excelencia quiere evitar más pérdidas humanas ¿no es verdad?

- Si.- Conteste yo.

- ¿Y como esperas que te creamos?

- Entiendo sus preocupaciones pero si quisiera una guerra ya la habría comenzado.- Dijo mientras tomaba un sorbo de su cafe pero al mismo tiempo dió una mirada fría e intimidante.

En eso Dark Pit tiene razón, desde que el es rey ya no ha habido mas ataques contra el reino de la naturaleza.

Pero aun así Arlon (creo que ese era el nombre del caballero) nos mira desconfiado, y no lo culpo.

Aunque fue su reina quien mando primero la oferta de paz, no significa que todo su reino iba a olvidar tan facil tantos años de guerra.

- Entiendo... Pero por los rumores que hemos recibido, usted no parece ser muy capaz de controlar a su gente, ¿como podemos estar seguros de que ellos estarán a favor del acuerdo?

- Tenemos basta experiencia militar, sabemos contener una rebelión, además nuestro pueblo está más cansado de esta guerra de lo que podemos aparentar si lo considero propio ellos también lo harán.

- ¿Osea que se refiere a encarcelar a cualquiera que no esté a favor del acuerdo?.- Menciono la princesa con disgustó.

- No mi Lady , cualquiera es libre de tener su propia opinión solo se encarcelaran a los rebeldes que se atrevan a alzarse en armas.- Menciono Dark Pit mientras jugaba con el plato de su taza.

- No suena muy seguro de tener todo el control alteza.

- No puedo tener el control absoluto de todo el mundo, cada cabeza es un mundo si controlará la opinión de cada plebeyo sería tiranía.- Respondí por Dark Pit.

Ellos me miraron anonadados, sabiendo que tenía sentido lo que decía.

- Puede que tenga razón.- Menciono ella como disculpa.

- Además ustedes propusieron el acuerdo en primer lugar ¿no sería lo apropiado que me den un voto de confianza? Después de todo ¿cuando fue la última vez que alguien del reino de la naturaleza tocó este palacio?.- Menciono Dark Pit y al ver su rostro pude ver qué encontró una abertura.

- Hace 900 años masomenos.- Contesto la princesa algo sería.

- Estoy abierto al diálogo, les he abierto mi casa y les he dado mi hospitalidad es decisión suya si deciden no aceptarla.- contesto Dark Pit poniéndolos entre las rejas.

Me sorprendiste la facilidad con la que Dark Pit siempre lograba callar las dudas de la gente sobre el (De preferencia me gusta mas cuando no usa la fuerza)

Se veía tan impresionante. Mi corazón se volvia loco de admiración con solo verlo y escucharlo.

Finalmente Lady Ámbar hablo.

- Tiene rato Majestad, usted nos a dado su hospitalidad en su reino y en su castillo. Supongo que tanta guerra nos dejo una marca algo difícil de borrar.

- No tienen que preocuparse por nada. Yo no soy mi padre, y si finalmente se le puede poner fin a estos disparates, que asi sea.

Ellos dos nos miraban sorprendidos y empezaron a murmurar entre ellos.

- Firmaremos el tratado.- finalmente hablo el general.

Pude ver a Dark Pit sonreir discretamente teniendolos dónde quiere.

- Pero tenemos una condición.- Dijo la princesa cuando lo vio sonrreir.

- ¿Cuál es esa condición mi Lady?.- Conteste con gentileza.

- Aún no confiamos en que sabe mantener el control de su reino, por lo tanto le pedimos hospedaje durante un mes.

¡¿Un mes?! ¡¿Como es eso?!

- Si eso Es lo que necesitan para sentirse seguros entonces no se los negare. Ustedes pueden disfrutar su estadía aquí en mi palacio y en mi reino .- Dijo Dark Pit con voz tranquila.. Aunque podía sentir que eso no era exactamente lo que tenía planeado .

- Gracias Majestad. Ahora si podemos firmar el acuerdo, una vez pasado el mes lo haremos oficial .- Dijo Lady Ámbar para después tomar un sorbo de té.

Me sentía un poco tenso a la idea de que ellos se quedaran ahi. Pero no puedo decir que no los quiero aqui. Se que es por buena causa.

Voltee a ver a Dark Pit y vi como apretaba su taza de café con fuerza.

No sé siente nada contento.

El resto de la charla estuvimos hablando sobre los términos del acuerdo, como que el reino de la naturaleza no puede interferir con los asuntos privados de nuestro reino y viceversa.

También que el acuerdo no puede cancelarse sin una reunión previa.

Y bla bla bla

Hasta que la princesa dió un gran bostezo.

- Majestad me siento fatigada deberíamos dejarlo por hoy.

- Claro que si mi lady. Permitame llamar a alguien para que prepare sus habitaciones .- Dije levantandome.

Esperaba ir solo pero Dark Pit también se levanto conmigo y se dirigio a la salida. Yo lo seguí todo el camino hasta estar a una distancia mas alejada del estudio.

Y finalmente, exploto.

- ¡¡¡Con un demonio!!! .- Gritó molesto.- ¡¡Un mes!! ¡¿Como se supone que los mantenga aqui un Maldito mes!?

- Mi rey tienes que calmarte, se que esto no estaba previsto pero...

- ¡¿Pero que?! Como se supone que logremos mantener todo perfecto para ellos. ¡Si las cosas están tranquilas pero aun no completamente! .- Gritó molesto para después suspirar .- Lo siento. No debí gritarte.

- No no no. Esta bien. Se que esto te dio bastante estrés.

Gimió completamente molesto mientras chocaba su cabeza con mi hombro como si estuviera apunto de llorar.

Acaricie su cabello intentanto reconfortarle.

- Calma mi rey tu puedes hacer esto y más, ya te esforzaste mucho hoy ...buen trabajo.

- Gracias.- Dijo molesto aún asi pero beso mi mejilla con gentileza.- Me volvería loco sin ti.... mañana iré a cazar ¿vienes conmigo?

- ¿Por que quieres salir? ¿No había toque de queda?.- Pregunté sorprendido.

- Estoy estresado y es la única forma que se me ocurre de bajar mi estrés.

- Bueno. Supongo que esta bien. Me encantaria ir contigo .- Dije con una sonrisa

- Gracias... Te extrañe hoy.

- Yo también .- Dije y no pude evitar pensar en que pase el día con ámbar. Era agradable. Pero a mi Dark Pit no lo Cambiaría por nada en el mundo.- Y mucho.

- Mm me alegro oir eso.

- Mmmm ¿Te parece si pasas un rato conmigo antes de dormir? Como una pijamada?

- Eso me encantaría

- Yeiiiii.- Exclamé feliz.

- Bien, entonces déjame ir a planear la habítacion de esos dos y ahora me tendrás para ti.- Dijo mientras besaba mi nariz.

- Te amo mi rey

- Y sabes que yo a ti mi fiel sirviente.

Ambos nos reímos mientras caminábamos juntos a completar la encomienda.

Estaba contento hasta que me acordé de una duda.

- Mi rey

- ¿Si?

- ¿Que fue esa escena del abanico?

Dark Pit se Quedo estático con eso.

- Enmm ¿te lo explico en un rato mejor? .- Dijo el intentando parecer tranquilo pero parecía estar nervioso.

- ¿Porque? ¿Es algo malo?. - Pregunté frunciendo el ceño.

- ... Depende de como lo veas .- Dijo el con una mueca.- Mira. Te explico eso despues ¿si? Tu ve a tu cuarto y yo te alcanzo ¿si?

- De acuerdo .- Dije mirándolo aun de forma rara.

¿No es mas fácil decirlo de una vez?

Suspiré cansado y volví a mi habitación, este día fue muy intenso.

Las cosas que me dijo Lady Palutena aún rondan mi mente.

Se que Dark Pit me quiere eso no lo dudo pero aún así me siento triste de que no piensen en el como un buen rey.

El no es malo y se ganó la confianza de esta gente, deberían valorar más los esfuerzos que hace.

Me coloque mi pijama y me senté en mi cama a leer un poco de un libro que tenía por ahí.

Siempre estoy "lo voy a leer, lo voy a leer" pero nunca lo hago por x razón.

Llevaba un par de páginas cuando tocaron a mi puerta

- ¡Adelante! .- Dije dejando el libro.

Dark Pit entonces entro con su pijama puesta y una almohada.

- Hola mi lindo caballero.

- Hola mi lindo rey. ¿No hubo problemas con las habitaciones?

- No. Afortunadamente no son tan exigentes.

- Eso es bueno me preocupaba eso un poquito la verdad.- Dije mientras cerraba el libro.

- Imagínate yo...¿que leias?

- No estoy seguro...

- Eso es bueno honestamente me preguntaba si sabías leer.- Dijo mientras se subía en mi cama.

- Ja ja Que gracioso deja de burlarte de mi pobreza, ya te dije que me dieron la mejor educación.

- Solo te molestaba un poco....sigo odiando tu cama dura.- Dijo gimiendo contra su almohada.

- Ya te dije que me gusta mi cama así. Cuando toco dormir en tu cuarto no me podía levantar a la mañana siguiente por que no podía dormir y no encontraba acomodo en esas arenas movedizas a las que llamas cama.

- Mi colchon es el mejor. No entenderé nunca porque te pasa eso .- Dijo mientras se estiraba.

Simplemente me reí y recosté mi cabeza en el hombro de Dark Pit.

- Mmmm extrañe abrazarte todo el día .- Dijo Dark Pit abrazándome.- Mirar tus bellos ojos, escuchar tu hermosa voz y ver tu bella sonrisa.

Reí un poco nervioso y halagado por tanta cursilería.

- Eres un romántico mi rey.

-Obviamente que si ¿Cuántas veces te he dicho que te ganaste la lotería? Soy perfecto.

- Aunque te falta humildad.- dije mientras agarraba las mejillas de Dark Pit y las jalaba antes de darle un pequeño golpe.

- Es que es horrible ser humilde no lo necesito.

- Yo soy humilde.

- Eres lo que yo no soy y por eso nos complementamos.

- Si bueno aunque no te haría nada mal otro poquito.

- Lo pensaré mientras tanto disfruto de las caricias de mi caballero.

- Quien diría que hace medio año no soportabas el afecto físico.

- Bueno eres tan empalagoso que me acostumbré

- Mmmm Eso es bueno... Mientras solo sea conmigo claro esta .- Dije dandole un ligero beso en los labios.

- Sólo contigo, a nadie más .- Dijo el mirandome con adoración y amor que hacia que mi corazón se pusiera como loco.

- Supongo que contigo soy aun mas cariñoso de lo que soy normalmente. De un 10% a ti te doy el 1000000% .- Mencioné acurrucandome en su pecho.

-Me siento afortunado

- Deberías

- jeje Si. Y dime. ¿Te divertiste hoy? ¿Como esta Palutena?

- Si me divertí mucho hoy.- Dije mientras suspiraba , no puedo decirle lo de ámbar...almenos no por ahora.- Ella está bien aunque honestamente está preocupada por mi.

Dark Pit apretó sus labios y asintió.

- Lo entiendo no pude cuidarte.

- En realidad mi trabajo es alrevez.

- Si pero sales conmigo mi responsabilidad es cuidarte.

- Bu ...me sobre cuidas.

- Me gusta cuidarte

- Jejeje supongo que es lo mismo para mi. Me gusta también cuidarte.

- Y haces un excelente trabajo .- Dijo tomando mi mano y besando mi palma.

- ¿De verdad? Que bueno porque mi jefe es a veces ultra especial.

- ¿Ah de verdad?

- Si si. Muy caprichoso

- Mmm mira nada mas. Debe de ser difícil para ti.

- Nah. No tanto. Lo amo así como es así que no importa mucho.

- Entonces tu jefe es muy afortunado.

- Sip mi jefe es súper afortunado, por qué son un tesoro.

Dark Pit se rió y me besó tiernamente.

- Sip efectivamente soy afortunado.- Dijo mientras acomodaba su almohada y se recostaba y estiraba como un gato.

- Somos afortunados por amarnos en general.

- Demasiado .- Dijo el y se quedo atrayendome para poder abrazarme y besar de vez en cuando mi mejilla, cabello, cuello o donde se le antojara para ser exactos.

Esta paz era necesaria después de un día tan loco.

- Mmm Y entonces... Me ibas a explicar que fue todo eso de abanico con am... Lady ámbar .- Dije recordándole que el me habla dicho que me explicaría.

Dark Pit me miro unos segundos con una pequeña mueca para después esconder su rostro en mi cuello.

- Agh... Solo recuerda todo lo que dije antes que era todo cierto.

- ¿Eh?

- Solo recuérdalo Pit ...todas esas cosas tiernas no las dije solo por decir.

- Pittoo ¿a qué te refieres? ¿Encerio es muy malo?

- Algo así.

- Déjate de rodeos y por favor dime.- Dije pegándolo más a mi cuerpo.

- Lady ámbar estaba coqueteando conmigo...recoger su abanico quiere decir que acepte su "cortejo"

- ¡¿Que?! ¿En qué momento ?! Si ella solo estaba jugando con su abanico.

- No Pit ese es un tipo de lenguaje no escrito que usan las señoritas nobles.

- ¡¿Que?! Eso es ridículo .- Dije molesto.

Me mintio cuando dijo quien era, viene y pone nervioso y estresado a mi novio. ¡¿Y ahora encima lo intenta seducir?!

¿¡Que le pasa!?

- ¡¿Y porque aceptaste?! Hubieras dejado esa cosa tirada .- Dije sentandome en la cama.

Pittoo que seguia acostado solo suspiro y se froto la cara.

- Yo quería hacerlo. Te lo juro de verdad, Pero no tenía elección

- No es que te estuviera apuntando con un arma ¿o si?

- No pero casi técnicamente me dijo ... Me interesas (dijo mientras simulaba el abanico con su mano) , me casare contigo , si no no firmaré y me enojare.- Dijo terminando golpeando su regazo.

Y eso me hizo recordarlo si ella hizo algo así.

¡¿Cómo se atreve a condicionarlo de esa manera?!

¡No quiero no pienso permitirlo!

- ¡Entonces cancelalo!

- Creeme que intentaré hacerlo pero si ella muestra su interés y la rechazo podría ocasionar otra guerra.

- Eso por qué.

- Su gente lo verían como un insulto como si su princesa no fuera suficiente para mí.

- Esa maldita quiere estar contigo todo el mes.- Dije terminando de juntar las piezas

Es todo. Se acabo.

Si la llegue a ver como una posible amiga, ya no lo es.

¡¡Nadie se mete con mi novio!!

-¿ Y si finges ser desagradable? Así ella no querrá ni intentarlo.

- No lo creo. Seria un arma de doble filo. Se puede vengar de nosotros si pasa eso, o decir que no valemos la pena de una tregua.

- ¡¡Pero eso es tan injusto!! .- Reclamé molesto.

Aristócratas idiotas que solamente hacen guerras por una estúpida riña personal

Es tan injusto odio definitivamente a los nobles, no voy a quejarme de todo lo que les dicen los demás plebeyos  ¡tienen toda la razón!.

Sentí como Dark Pit besaba mi mejilla intentando tranquilizarme.

Lo entiendo y esto eventualmente iba a ocurrir, solo que no estaba preparado para que ocurriera tan pronto.

-Lo lamento no estaba preparado para esto.- Me excuse intentando no pensar demasiado en lo que esto significaba.

- En realidad es mi culpa , sabía que esto iba a pasar y te estoy lastimando.

-Si es tu culpa, pero también es culpa de los demás nobles por seguir estas tradiciones estúpidas.

- Si ya lo se.

-Enséñame

-¿Qué?

-Enséñame ese lenguaje con abanicos, me molestó no entender nada.

- Oh... Bueno... ¿Pero para que?

- ¿Como que para que? Obviamente para saber si ella se te "insinúa" De nuevo .- Dije molesto y cruzando los brazos... Tal vez incluso pueda encontrar una forma de sabotear.

- Ok ok Ya entendí. A ver emmm bueno, como ya sabes el que ella tira el abanico, básicamente esta diciendo que estaba interesada en mi.

- Y tu lo aceptaste recogiéndolo. Si si si eso ya entendí.

- Okey y hay uno donde si ella golpea el abanico en su mano o pierna, significa que esta molesta.

Entonces si saboteo sus intentos y ella golpea su mano con su abanico o su pierna significa que abre tenido éxito.

-Bien bien comprendo .- Dije ya más tranquilo.

- Pit estoy mirando esa sonrisita tuya y se lo que estas planeando.

-Yo no planeo nada mi Rey, ¿de qué se acusa?

- De ser un pequeño saboteador.

- Bueno si te acabaras casando con ella tengo todo el derecho de molestarla por que yo llegue primero.- Dije con un puchero.

-Bueno debo de admitir que lo estas tomando mas tranquilo de lo que yo esperaba.

- Créeme que la idea no me agrada ni un poco. Pero supongo que esto es algo que acepte cuando empezamos a salir. Fue mi decisión y no voy a empezar a quejarme ahora .- Dije firmemente mientras me acercaba a besar su mejilla.

- Osea que voluntariamente te quedas atrapado conmigo.

-Me gustan los clichés de el síndrome de estocolmo.

- Estás loco .- Se río Dark Pit por mis tonterías y yo también.

En definitiva si ella quiere quitármelo entonces le va a costar y si me gana, le haré la vida miserable.

Fácil y rápido

No es por ser cruel, eso no me gusta, pero yo soy una persona igual que ellos y tengo emociones igual que ellos si ellos así que no voy a dejar mis sentimientos de lado solo por políticas reales que invento un noble mientras estaba aburrido.