♣Cuatro locos♣
◆Narra Riumba◆
Me fui despertando poco a poco hasta aclarar mi vista vi que el sol asomaba sus primeros rayos de luz, los pájaros cantaban una melodía tranquila.
Me volte aún lado viendo a Tommy aún durmiendo, sonreí al ver como mantenía una sonrisa mientras sentía como me abrazba aún dormido.
Me levanté con cautela, me baje de la cama sintiendo un inmenso dolor en mi ano y cintura, empecé a caminar con mucha dificultad dirigiéndome al baño al llegar note que habían una bañera y una regadera.
Empecé a llenar la tina poniendo algo de jabón líquido en el agua caliente.
Salí a buscar mi ropa eligiendo algo sencillo una camisa de manga larga con cuello de tortuga de color amarilla pastel. Un pantalón negro algo ajustado.
Me metí nuevamente al baño cerré la llave al ver como se llenaba ya completamente me empecé a meter en el agua caliente sintiendo como se aliviaba el dolor poco a poco, empecé a mojar mi cabello con agua limpia (sin jabón).
Lavaba mi cuerpo con una esponja y talla va mi cabello y lo enjuagaba.
Después de un rato salí y empecé a secar mi cuerpo y cabello.
Me cambie y peine mi cabello, salí y vi a Tommy aún durmiendo me acerqué a el y bese su frente a lo cual el sonrió.
-Te amo cariño~ -susurre en su oído-
Salí de la habitación y fui al cuarto de mi hermana viendo la aún dormida casi en la orilla de la cama. La acomode y bese su frente para después retira me.
Me dirigí a la cocina empezando a sacar varias cosas para hacer el desayuno, tengo pensado algo grande para llenarlos pensaba en que haría unos huevo revueltos con jamón, jugo de naranja, hotcakes con frutos rojos, una ensalada y por ultimo algo de carne.
Empecé a buscar las cosas ya tenia todo menos la carne, los frutos, la lechuga y las naranjas.
Tome dinero de mi mochila y tome una canasta para después salir no sin antes dejar una nota en la mesa de la sala para así salir empecé así caminar en el sendero que apenas era alumbrado por la poca luz de sol.
Camine un buen rato hasta que por fin llegue a la aldea veía la gente caminar como si ya fuese las diez de la mañana, me dirigí a una tienda al entrar fui muy bien recibido.
-Muy buenos días joven,¿En que le puedo servir? -pregunto amablemente el señor -
-Buenos días señor, bueno quisiera algo de carne en forma de bistec -dije amablemente mientras sonreía -
-Claro -dijo y empezó a buscar la carne empezando a meterlo en una bolsa y empezar a pesar la- ¿Otra cosa?
-Si algo de frutos rojos y algunas naranjas -dije mientras metía la carne en mi canasta-
El señor empezó a pesar una cantidad de frutos en una bolsa algo pequeña y las naranjas en una bolsa algo más grande.
-Otra cosa joven? -dijo mientras me entregaba las bolsas-
-ah! Y una lechuga -dije mientras metía las bolsas en mi canasta-
El señor busco una lechuga, después de unos minutos encontró una lechuga muy bonita.
-Tenga la doy la lechuga más bonita y fresca que tengo para un joven tan bello como usted -dijo entregando me la lechuga-
-oh! Gracias -agradecí mientras metía la lechuga en mi canasta- ¿cuanto es?
-son $54 -dijo -
Le entregue el dinero y me devolvió cambio me despedí y salí para irme a mi casa.
Empecé a caminar lentamente ya que tenía tiempo de sobra.
◆Narra la narradora◆
◆El albino caminaba tranquilamente hasta que se topo con dos hombres con la misma edad de Tommy (20 Años).
-Hola lindura~ -dijo el hombre 1-
-Hola? Este se podrían hacer aún lado? ¿por favor? -dijo el albino-
-jejejejej que pasa lindura? ¿Porque tan solo? -pregunto el hombre 2 quien tomó del mentón al pequeño-
-eh? ¿Me podría soltar? -pregunto asustado-
-Jejejejej creo que nos vamos a divertir muchos -dijo el hombre 1-
-N-No! Déjenme! ¡Ayuda! -grito y se resigno al ver como querían besar el cuello del menor-
Los hombres sólo reían mientras el albino suplicaba que lo soltaran hasta que paso algo:
-¡No es de buena educación molestar a alguien mas pequeño que ustedes! - grito una voz femenina-
-Porque sino habrá alguien quien les darán una golpisa de tu tamaño! -grito una voz varonil-
-Ahg! ¿Quienes son ustedes? -dijeron al unísono-
-Nosotros somos cuatro locos hermanos! -grito una voz femenina algo sería-
-de nombres locos! -grito una voz varonil pero algo tierna-
-Mi nombre es Mariana! -grito una castaña de puntas moradas-
-Yo soy Vernando! -grito un peli-morado-
-yo soy Leonora -dijo la castaña -
-y yo soy lucas -dijo un castaño oscuro-
-? -los hombres se quedaron pensando-
El castaño de nombre Vernando se acercó a los hombres mientras da volteretas como un completo lunático para después golpear a los dos hombres con sus pies, dejando a los dos hombres inconscientes.
-Gracias! -grito el albino con una sonrisa-
-De nada! -gritaron al unísono los cuatro hermanos-
-¿como se los puedo pagar? -pregunto amablemente-
-mm~....Que nos des de comer tenemos hambre -dijeron al unísono los cuatro locos-
-Claro!
Dijo el albino para después empezar a caminar siendo seguido por los cuatro locos hermanos.
Al llegar el azabache lo recibió con un abrazo.
-¿A donde fuistes? -pregunto el azabache-
-Fui a comprar algo para desayunar -dijo para después besar al mayor-
-jejejejej~ ¿Nada malo te paso? -pregunto el azabache-
-La verdad si le paso, había dos hombres que quería tomar la virginidad del pobre pequeño -dijo la castaña con un tonto dramático-
-¡¿QUE!? -grito el azabache, enfadado-
-Tommy!, Tranquilo no me paso nada gracias a ellos que me salvaron a tiempo -dijo Riumba mientras tomaba de la cara al azabache para que lo mirara-
-¡¿Cómo quieres que me calme mientras que un maldito te estaba tocando!? -grito el azabache -
-No era uno! ~ eran dos!!!!~ -cantaba desafinada mente el castaño oscuro-
-¿Dos?....¡Ahora vengo tengo que matar a alguien! -dijo apartando al albino con algo de brusquedad-
-Auch! -se quejo el albino al golpearse la cabeza con la orilla de la mesita de centro haciendo que sangrara-....ahh! ..
-Hermanito estas bien!? -grito la hermana mientras veía una abertura en la frente del albino-
-Vernado! Trae algo de agua en un trapo!, Leonora trae hojas silvestres, lucas trae hilo y aguja corran! -grito la castaña-
Los tres hermanos obedecieron a su hermana mayor corriendo por lo que solicito la mayor.
Lo primero que tragueron fue el trapo con agua caliente.
-va a doler un poco ¿Está bien? -dijo mientras veía asentir levemente al albino-
La castaña puso el trapo empezando a limpiar la frente del albino viendo que era una pequeña abertura a lo cual agradeció que no fuera peor.
Después de limpiarla ordenó que volviera a mojarlo y así fue, después un unos minutos llegaron las hojas silvestre y el hilo y aguja.
-Bien, trapo! -ordenó la castaña-
-Trapo -dijo lucas-
-Hojas -ordenó con el trapo en su mano-
-Hoja -dijo vernando entregando la hoja-
La castaña puso la hoja enzima del trapo en volviéndola, ordenó que lo dejarán un rato.
Mariana empezó a cocer la herida del albino con algo de cuidado de no lastimar lo, mientras el albino lloraba no sólo por el dolor inmenso sino que Tommy le había provocado esto.
-El trapo ahora! -grito la castaña cortando el hilo al acabar-
La castaña recibió el trapo para después ponerlo en la herida del albino, ordenó que su hermano vernando lo acostara en el sofá para que pasara una media hora para que parará el sangrado.
Después de un rato la tarde llegó y el azabache recién había llegado con sangre en sus manos, boca y ropa.
-¿Tommy?~ -susurro la albina acercándose-
-Ve a Riumba-...¿Que le paso? -grito el azabache-
-le tapa la boca- lo tirastes con fuerza haciéndolo golpearse con algo filoso perforando una parte de su frente ahora el Está en reposo así que cállate! -ordenó la castaña-
Pasaron las horas y el albino seguía dormido como si estuviera inconsciente por unas buenas horas, Mariana revisaba a Riumba mientras ponía algunas gazas en la parte de la herida.
-mm~....M-Mariana? ....¿Que paso? -decía dormitando mientras seguía acostado-
-Te golpeas tes pero ya estas bien. ...¿Quieres....Ver a Tommy? -pregunto viendo como el albino se levantaba sentándose en el sofa-
-Si....-contestó-
La castaña se levantó y se dirigió hacia la cocina informándole a Tommy que el albino lo quería ver. El azabache se dirigió a la sala donde se encontraba el albino quien lloraba en silencio manteniendo sus ojitos cerrados con fuerza mientras las lágrimas salían como estrellas fugaces, su boca se mantenía entre abierta sólo mostrando sus dientes.
-Amor...-pronunció el azabache sentándose aún lado del albino-
-.....Tommy.....-dijo con la voz como un hilo para después abrazar al azabache-...Tonto, tonto, tonto, tonto...Tonto! -gritaba el albino mientras golpeaba levemente el pecho del lobo-
-lo siento amor, es que me dolía ver que alguien trate de tocarte yo soy el único que puedo tocarte, amarte, saborear te, comerte a besos y besarte~ -pronunció el azabache para así besar al albino-
El albino correspondió el beso con lágrimas en sus ojitos, se separaron del beso.
◆Narra Tommy◆
◆Veía los hermosos ojitos de mi pequeño; esos ojos color morado que por tanto llorar parecía ver la vía láctea en esos ojos alumbrados, sus ojos llenos de lágrimas que disimulaba ser estrellas fugaces que caían en el vacío del espacio.
El se acurruco en mi pecho oyendo mis latidos, yo solo besaba su frente con cariño.
Lo amo con toda mi vida que mataría a cualquiera por el, no importa manchar me mis manos por el, por el me iría al infierno con tal que el éste a salvo.
♣Cuatro locos♣
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