Dieciséis
Fue Zamasu quien sirvió el té,asi noto que la muchacha guardaba algo en su mano y le preguntó que era. Sora puso en la mesa una linda caracola color rosa que Zamasu levantó para ver de cerca ¿Qué hizo? La muchacha no estuvo muy segura de que acción efectuó el dios,pero en un parpadeo aquella conchita marina tenía una cadena. Con un ademán le hizo saber que pretendía.Sora se levantó el cabello para que él, pudiera ponerle al cuello aquel improvisado collar.
-¿Te gusto el océano?-le preguntó el dios Zamasu.
-Sí,mi señor-le respondió recibiendo una caricia en la mejilla de parte de él.
-Puedo llevarte ahí si me lo pides-le dijo Zamasu.
-Gracias-dijo Sora y puso sus ojos en aquella taza de té.
Zamasu la observabo un momento. Estaba algo triste, .
-Supongo que camino al océano tuviste que haber visto la obra de Black-declaro Zamasu tomando por sorpresa a la muchacha-Imagino que estás deprimida por eso...No tienes que estarlo. Te lo hemos dicho en reiteradas ocasiones,somos la justicia que viene a purgar este mundo de la plaga humana. Su sociedad a caído en la de generación total, los humano se aman,si a eso definen como amor,asi mismos nada más. Aman la riqueza,son desleales,no dominan sus impulsos volviéndose voraces, sucumben ante los placeres sucios...Están en el apogeo de la decadencia. Sino los eliminamos ahora,llevarán a este mundo a una devastación absoluta. Este planeta está dotado de una gran belleza,no todos los planetas rebosan de naturaleza como este,Sora.
-Pero es que matar... No está bien-dijo la muchacha en voz muy baja.
-¿Por qué no?-le cuestionó Zamasu-Ustedes se matan todo el tiempo sin motivos.Nosotros le quitamos la vida con un propósito superior. Ha sido la arrogancia de los dioses la que les ha permitido existir todo este tiempo. Los dioses que no admiten,en su soberbia,que su creación a sido un error y en vano se afanaron por intentar guiarlos.
-Pero... Creo que un castigo más apropiado sería dejarnos seguir nuestro camino hacia la auto aniquilación-declaro Sora-Nos hacemos bastante mal a nosotros mismos. Se parte de cosas tan pequeñas como dañar nuestros cuerpos con los vicios que estropean nuestra salud...Oara pasar a los vicios que corrompen el alma.
-Es una buena observación,pero les llevaría mucho tiempo...
-Mi señor...
-Dime Sora.
-Cuando hayan terminado de eliminar a la humanidad...¿Van a eliminarme a mi también?
Esa pregunta tomo por sorpresa a Zamasu.
-Yo...Prefería...
-Tú irás con nosotros a donde vayamos-le respondío Zamasu-No voy a dejarte...Eres nuestra,
eres mía. Recuerda que los dioses somos quienes les otorgamos los dones para su existencia,sus facultades como sus cuerpos y almas son moldeadas de acuerdo a nuestro criterio en base a su medio ambiente,por tanto podemos disponer de ustedes como deseamos y yo,nosotros, deseamos que permanezcas a nuestro lado. Regocijate Sora, eres la favorita de los dioses...
La muchacha escuchó aquello y mientras veía al díos Zamasu beber de su taza,se atrevío a decir:
-Pero nos dieron libre albedrío-la mirada de Zamasu se posó en ella-Se entiende que debemos ser agradecidos se los dones que nos han dado y la vida que nos otorgaron,pero ningún dios nos ha impuesto un modelo de vida estricto que debemos seguir,
claro que existen designios tácitos que los hombres han puesto en palabras,palabras que se han vuelto las leyes de moral que sigue la sociedad o que intenta seguir la sociedad,mas a fin de cuentas tenemos la libertad de acción que...
-¡Ese fue sólo otro error!-exclamó Zamasu interrumpirndola-Los humanos no saben que hacer en libertad,la confunden con el libertinaje y eso ha sido lo que ha ocasionado su deterioro moral, mas en la naturaleza de los mortales es donde radica el problema...
-Entiendo porque dice que los dioses cometieron el error de crearnos,sin embargo, dudo que nos hayan mantenido vivos tanto tiempo si no tuvieran fé en que podíamos obrar mejor y aprender de nuestros errores...
-¡Jamás han aprendido!-exclamó Zamasu y se levantó bruscamente de la silla-Al contrario, estropean y ensucian todo. Corrompen todo hasta lo más básico como es alimentarse o aparearse. Convirtieron esas dos cosas en sucios placeres de los que no conocen la saciedad. Su visión del amor,que de por sí ya era pobre,la mezclaron con el acto de procrear y así terminaron por desvirtuar el concepto que está al alcance sólo de los seres más sublimes como lo soy yo.Ustedes sólo confunden las cosas como los seres ignorantes que son y por generación se han transmitido el conocimiento erróneo de cómo vivir,de como actuar y pensar. ¿Me dices que no debería tomar las vidas de los hombres? Te recuerdo Sora que el ser humano ante los dioses no tiene derechos pues no es como los dioses. La vida es un don que se recibe por la gracia de los dioses y del que los dioses dispone a su antojo. Tu vida como la de todas en este mundo, nos pertenecen. Dispondré de la tuya a mi voluntad y te quiero a mi lado como lo que eres.
-¿Y qué es lo que soy mi señor?
-La pura,la inocente,la noble y la fuerte,la obediente de los dioses-le dijo tomándole de la mano para ponerla de pie y mirarse en esos ojos-La mariposa efimera que vuela sobre la miseria del hombre... La que me recuerda eso que...
Black llegaba en ese momento y Zamasu se interrumpió. Tomo el rostro de la muchacha entre sus manos y le dió una beso para luego perderse al interior de la cabaña. Black presenció aquello con disgusto. Clavo sus ojos negros en la espalda de sus homónimo y luego los apartó para mirar a Sora.
-Bienvenido mi señor Black-le dijo la muchacha.
Black caminó hacia ella y se le planto en frente con una expresión bastante severa.
-¿Desde cuando él se toma esa libertad contigo?-le pregunto.
-¿Li..be... libertad?-repitió la muchacha sin entender.
-Contéstame ¿Desde cuando él se despide de ti de esa forma?-le pregunto tomándola con fuerza por el antebrazo.
-Mi señor Black... Me está lastimando.
Black la soltó de inmediato.No era su intención lastimarla, menos asustarla. La miró un momento así noto la caracola que traía colgada al cuello.
-¿Te gusto el océano?-le preguntó algo más relajado.
-Sí,mi señor. Gracias por llevarme a conocerlo-le dijo sonriente.
-Tienes unos lindos ojos,Sora-comento Black haciéndole una caricia en la mejilla-En especial cuando sonríes...Tu mirada se torna más azul.
-Mi madre me llamó Sora por el color de mis ojos...Sora significa cielo,mi señor-le dijo con un candor infantil.
-Cielo...Te queda bien...
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